Debí haber llorado hasta quedarme dormido. Cuando me desperté, me palpitaba la cabeza, me dolía el estómago, tenía sed y me pica la garganta. Todo parecía una fea resaca. Después de bajar las escaleras a trompicones, encontré a mi tío en la cocina.

-Toma -dijo, poniendo una taza de té en mis manos. Lo tomé agradecido. Tenía exactamente la temperatura adecuada y olía a miel, y tragué la mitad con gratitud.

-¿Mejor?

-Sí - dije con voz áspera.

Mi tío se ocupó de lavar los platos.

-Entonces, ¿Qué hizo? -preguntó en un tono casual.

Al no haber tenido nunca una buena opinión de los alfas, mi tío obviamente asumió que Yoongi me había lastimado.

-Nada.

-Jimin, nunca te había visto tan miserable. Tienes que ser honesto conmigo.

Respiré profundamente unas cuantas veces. No quería hablar de eso, pero tendría que hacerlo.

-Yoongi no hizo nada malo. Fue amable conmigo y me cuidó como prometió.

El tío Yoon-shik golpeó el paño de cocina mojado sobre la encimera y cruzó los brazos sobre el pecho.

-Entonces, ¿por qué volviste a casa sollozando?

Parpadeando, contuve las lágrimas que amenazaban con derramarse de nuevo.

-Estoy enamorado de él y no hay posibilidad de que él sienta lo mismo. Me salí de la situación antes de que pudiera empeorar.

Mi tío carraspeó.

-¿Ninguna posibilidad? -Sacudió la cabeza y volvió a coger la toalla- Entonces es un tonto. Eres demasiado inteligente para enamorarte de un tonto.

Logré esbozar una leve sonrisa.

-Lo superaré. Sólo necesito superar la recuperación. -Me senté en la única silla tapizada. Todavía me dolía el trasero, pero ahora era soportable. La niebla en mi cabeza y la pesadez en mi pecho persistieron, aparentemente empeorando en lugar de mejorar. En un nivel racional, sabía que los síntomas de recuperación eran temporales, pero en este momento me sentía como estar sentado en el fondo de un oscuro abismo sin salida.

-La recuperación no ayuda, no. -Mi tío limpió cuidadosamente un par de platos y los guardó en el armario- Espero que me lo digas, Jimin, si sucediera algo grave. Me lo dirías, ¿no?

Lo había hecho preocuparse. Lamenté que mi tío me hubiera visto en tal estado, pero no tenía otro lugar donde esconderme y llorar. En ningún lugar me sentiría lo suficientemente seguro.

-Me gustaría. Pero realmente no hizo nada malo. Le gusto, pero no lo suficiente.

El último plato fue a la alacena, luego el tío Yoon-shik se echó la toalla al hombro y se volvió hacia mí, escrutándome en silencio. La intensidad de su mirada me hizo retorcerme.

-En unos días volveré a ser yo mismo -dije. Tenía que creerlo- Estoy seguro de que afrontaría esto mucho mejor si no me estuviera recuperando del celo. Pasará. - Excepto que mi voz temblaba patéticamente mientras intentaba convencerme a mí mismo.

Mi tío permaneció en silencio durante un largo rato. Con un profundo suspiro, miró hacia el muelle a través de la pequeña ventana de la cocina.

-No creo que sea así para mí -dijo.

Parpadeé. ¿Lo había oído bien?

De cara a la ventana y de espaldas a mí, mi tío finalmente me dijo lo que había anhelado saber durante años.

-Le dije a Mi-suk que quería vivir juntos, pero él se negó a mudarse aquí. Fue hace años, y tú eras un pequeño niño. Me enojé y me dolió, pensando que él no me amaba tanto como yo lo amaba a él. Que tenía miedo de lo que pensaría la gente o que no quería tratar contigo. Tuve una rabieta y rompimos durante un año entero antes de que él, afortunadamente, me aceptara de regreso. Fui un idiota. Por supuesto, él me amaba incluso cuando no lo merecía. Simplemente no podía dejar la ciudad y abandonar el trabajo de su vida y a todos esos niños en el centro comunitario que dependían de él.

Decirme que no le rompió el corazón. - Bueno, maldita sea. Cuando el tío Yoon-shik decidía sincerarse sobre algo, no se contuvo.

-¿Qué te parece ahora? Está jubilado y vive aquí. ¿Qué te detiene?

Mi tío se volvió hacia mí con expresión inusualmente nerviosa.

-Ahora estoy reuniendo el coraje para pedir perdón como es debido. -Exhaló-. Y rogarle que

finalmente se case conmigo.

Sonreí.

-¿Te casarás con Mi-suk?

-Si él dice que sí.

-¡Eso es maravilloso! -Me levanté de mi silla y casi lo abracé antes de que una pequeña ola de náuseas me impidiera acercarme demasiado.

-Tómatelo con calma, chico.

Me mordí el labio y caminé torpemente de un pie a otro.

-Esa es una noticia asombrosa. Estoy tan feliz por ti.

-Esperaremos para animarnos hasta que haga la pregunta y obtenga una respuesta decente. ¿Bien?

-Bien.

-Este Yoongi. ¿Te dijo que no te quería? -preguntó el tío Yoon-shik, doblando un delantal y guardándolo en un cajón.

Negué con la cabeza.

-¿Estás seguro de que él no siente lo mismo?

¿Por qué me hizo deletrearlo?

-En la ciudad, salía con modelos, tío Yoon-shik.

Mi tío me quemó con su mirada característica.

-¿No eres lo suficientemente bonito para él?

-No. Dice que se siente atraído por mí. Es sólo que... -Me tragué el nudo que tenía en la garganta -Apenas sé lo que está pasando, ¿vale? Me duele todo, mi cerebro es puré de patatas y se supone que él debe protegerme, ¿no? Pero salió con Noodle y luego apareció su ex y Yoongi no estaba allí.-Sollocé.

El tío Yoon-shik me miró, aparentemente confundido.

-Espera un minuto. ¿Quién?

-El ex. Baek Sungjin, -enuncie- El hombre más bello del mundo según tres revistas de estilo de vida diferentes. Él irrumpió allí y comenzó a hablar. Dijo que no tenía oportunidad de mantener la atención de Yoongi por mucho tiempo y que me rompería el corazón porque eso es lo que siempre hace. Fue horrible. No tenía estómago para ello, así que me fui.

El tío Yoon-shik se puso las manos en las caderas y dejó escapar un profundo suspiro.

-Tú te fuiste.

-Sí. -Pensándolo bien, tal vez no debería haberlo hecho. Quizás debería haber esperado a Yoongi y confrontarlo. Tal vez.

-¿Será que este ex dijo esas cosas expresamente para echarte de casa?

Me burlé.

-Por supuesto que lo hizo. No soy estúpido. Eso no significa que no tuviera razón.

Mi tío se apoyó con la cadera contra el mostrador, mirándome solemnemente.

-¿Cómo te trató Yoongi durante el celo, muchacho?

-Él fue increíble. Fue grandioso. -¿Cómo describir mis eróticas vacaciones en el paraíso y mantenerlas clasificadas para menores de edad para no dejarle una cicatriz al hombre que me había criado?- Nunca había sentido algo así. Simplemente encajamos. Era cuidadoso y gentil pero también apasionado. E incluso cuando pasó el celo, él todavía me cuidó y permaneció cerca de mí. Él simplemente era... -Y las lágrimas volvieron a derramarse. Joder .

-¿Cariñoso?

Asintiendo, hice un sollozo indigno y el tío Yoon-shik arrancó un trozo de papel toalla del soporte y me lo entregó. Me sequé los ojos con él y luego me enderecé las gafas.

-Mira, Jimin, la recuperación es algo complicado. Te cansa y te duele, pero también afecta tu cerebro. Todo se siente más pesado y más difícil.

Me limpié la nariz.

-Es horrible. La odio.

-Lo sé. -Extendió la mano como para tocarme pero se echó hacia atrás-. Pero en unos días todo volverá a la normalidad y verás todo esto bajo una luz diferente.

-Lo amo, tío Yoon-shik. No se trata sólo de la recuperación. Realmente lo amo.

-Te creo. -Los inteligentes ojos de mi tío se entrecerraron- ¿Pero por qué estás tan seguro de que él no siente lo mismo?

Sacudí la cabeza con vehemencia. No quería esperar sólo volver a lastimarme.

-No soy un experto en relaciones, -dijo mi tío lentamente- Dios sabe que he estropeado la mía. No conozco a este Yoongi en absoluto. Pero me parece que no estaría esperando afuera, paseando de un lado a otro del muelle durante las últimas dos horas, si no estuviera al menos un poco interesado.

Me enderecé, mi estúpido y necesitado corazón aceleró el ritmo. ¿Yoongi estaba afuera?

-¿Qué?

Mi tío me detuvo con una mano apenas por debajo de mi pecho.

-Espera un segundo. No hemos terminado aquí.

Tragué con ansiedad. Yoongi está aquí. Él vino por mí. Quizás sólo quiera disculparse y asegurarse de que estoy bien. Quiero verlo. ¿Debería?

-Pasó por aquí justo después de que te fuiste a la cama. Le dije que se fuera al infierno.

Puse los ojos en blanco ante la actitud protectora dominante de mi tío.

-¿No podrías dejarme ocuparme de él?

En lugar de responder, me miró fijamente.

-¿Y ha estado afuera durante dos horas?

Mi tío se encogió de hombros.

-Quizás ya sean tres. Es persistente.

-¿Por qué no me lo dijiste? -Lloré.

-Te lo digo ahora, -respondió mi tío- Ahora puedo llamar a Mok para que pase en el coche patrulla de la policía o puedes salir y hablar con el hombre. ¿Qué va a ser?

-Levantó las cejas desafiantemente.

Estaba aterrado. Al mismo tiempo, la idea de no saber era peor que cualquier posible rechazo posterior. Si tan solo hubiera venido a disculparse y despedirse, al menos lo sabría con seguridad y podría empezar a lidiar con ello. Eché los hombros hacia atrás y levanté la barbilla.

-Hablaré con él.

El tío Yoon-shik asintió con aprobación.

-Ese es mi chico.

Con el estómago hecho un nudo, me puse mis zapatillas y salí al paseo marítimo.