(Narra Abel)
-No er-era necesario...
-Y yo sigo diciéndote que si, aparte si la gente es la que te preocupa entonces no tienes porque. Por aquí nadie pasa..- Adam quiso salir a dar un paseo al bosque en cuanto termino de llover. Pero yo no puedo caminar y en este momento me está llevando en la silla de ruedas. Tome las ruedas y las detuve.
-V-vamo-onos..- Adam suspiró y se dio la vuelta hasta quedar enfrente de mi, me tomo de el mentón e hizo que lo mirara.
-No tienes que preocuparte por nada. YO me preocupo de todo. Tú solo tienes que relajarte..- asentí inseguro y seguimos andando. Trataba de concentrarme pero no podía...
___________________________ (Narra Adam)
Una vez llegamos a la casa lo lleve directo hacia la habitación donde lo recosté boca abajo.
-Q-qué haces..
-¿Te acuerdas que te dije que íbamos a repetir un ejercicio hasta que te acostumbrarás?- intentó huir pero lo detuve- Calma..
-Por-porfavor..
-Relájate..- empecé besando sus cabellos para después pasar mis manos acariciando su pelo. Abel intentaba escapar pero poco a poco se rindió hasta quedar totalmente a mi merced. Mis manos empezaron a masajear su espalda mientras que mi chiquito soltaba pequeños ronroneos indicando que estaba a gusto. Cuando terminé Abel estaba durmiendo plácidamente en la cama. Sonreí y me acosté a su lado pero poco después de eso mi celular empezó a sonar. Salí de la habitación y contesté.
-¿Alo?
-Hola, estación de policía. Llamo para confirmar que hemos encontrado al señor León Cardinar. Necesitamos que el joven Abel Ross venga a declarar que el señor es culpable..
-¿Cuándo tendría que ser eso?..
-Lo antes posible.
-Llegaremos en 20 minutos..- sin más la conversación se acabó y yo suspiré. Tomaría poco el trayecto a la estación. El problema era explicárselo a Abel. Entré a la habitación y me maldeci por tener que despertarlo.
-Bebe..chiquito..- lo movía con suavidad para no asustarlo.- Ab—
-¡Desperté!..estoy despierto..e-estoy..
-Bebe..-me senté a su lado y tome sus manos con delicadeza.- ¿recuerdas el día que me contaste de León?..- Abel asintió con timidez.- yo..yo llamé a la estación de policía para reportarlo. Sé que estuvo mal, no te pedí permiso pero estaba preocu—
-Y-yo..¿p-p-p-por-porque m-m-me cu-uen-entas es-es-esto..a-a-aho-ora?
-Me llamaron diciendo que lo encontraron y que tienes que ir a declarar que el es culpable de el maltrato que te produjo..- en vez de ponerse a gritar o asustarse que era la reacción que esperaba me abrazó y comenzó a llorar en mi hombro. Yo lo abracé de vuelta y espere pacientemente a que se calmara.
___________________________
Ya en la estación de policía, Abel y yo esperábamos a que nos llamaran. Derrepente un policía salió y empezó a susurrarle algo a su compañero. Abel se tensó y movió su silla dispuesto a irse de no ser porque lo tenía tomado de la mano.
-¿Qué pasa?..- antes de que Abel respondiera el policía se acercó.
-¿Quien de ustedes dice ser Abel Ross?..- Algo andaba mal. Él levantó la mano tímidamente.- Según los registros no hay nadie de apellido Ross que se llame Abel.¿Me puedes decir quién eres tú?..
-y-y-yo..
-Oficial..-dije mientras le daba un apretón a la mano de Abel- si me deja, yo puedo explicarle toda la situación. Pero por mientras deje a Abel declarar..y luego de eso necesito que le hagan una revision de todos los golpes como prueba de el maltrato que a sufrido en su familia..
-¡NO!- Me giré ante la negativa de mi bebé y me arrodillé hasta su altura.
-No te preocupes. Necesito que declares. Prometo que nada malo va a pasar, lo tengo bajo control pero necesito que seas valiente, declares y dejes que te hagan una revisión junto algunas preguntas..- asintió con lágrimas en los ojos y uno de los oficiales se lo llevó...
(Narra Abel)
Tenía mucho miedo, pero Adam me pidió que sea fuerte y es lo menos que puedo hacer por él. Cuando entramos a una sala, pude ver claramente como León estaba esposado a la mesa. Me miró y me encogí en mi asiento. El oficial me dejo al otro lado de la mesa y se fue. Una vez cerrada la puerta, alguien nos empezó a hablar por alguna parte.
-Hola, soy el oficial Cerro y necesito que el omega Abel Ross, responda algunas preguntas. Empecemos por la más sencilla.¿Usted, Abel Ross, afirma haber sido agredido por el señor León Cardinar?
-S-si
-¿Puede contarnos que le hizo?- León golpeó la mesa y me miro furioso.
-E-el..e-el...el..
-Necesito que se tranquilice..si quiere puede escribirlo en la hoja que tiene al frente..- agarre el lápiz tembloroso y escribí el resto de las preguntas que me hacían. Cuando terminaron, vinieron a buscar la hoja. Y me dejaron con León.
-Quiero que niegues todo lo que escribiste si no quieres terminar muerto..- me dijo golpeando la mesa. Yo me tense y negué rapidamente. El volvió a golpear la mesa y se levanto aún esposado a la mesa. Se me acercó y su fuerza era tan grande que empezó a avanzar arrastrando la mesa.-¡TE DIGO QUE LO HAGAS!- me tiro una patada que mando la silla volando al otro lado de la habitación mientras que yo quedaba tirado en el suelo. Solté un alarido. Un oficial entró y electrocuto a León dejándolo en el suelo mientras que a mí me sacaba de la sala.
-¡Abel!..
-A-adam..- sentí como me tomaba en brazos.
-ya pasó..todo está bien bebé. Nadie nunca más te va a hacer daño..- yo lloraba silenciosamente mientras me aferraba a él. Solo sentí un pequeño dolor en el brazo y luego todo se volvió negro...
___________________________
Desperté desorientado. Al lado tenía un suero.
-Mi chiquito..- Adam se acercó a mí y me acarició la mejilla. Suspiro y se sentó al lado mío.- ¿cómo te sientes?..- asentí.- necesito hacerte algunas preguntas para que podamos hablar con tu familia y ojalá meter a tus padres a la carcel por algún tiempo..-me tomó de las manos y me dejo un suave beso en mis labios. Lo abrace. Derrepente entró un doctor.
-Veo que despertaste.¿Ya respondiste las preguntas?..-negué.- supongo que aún estás débil. Adam Casher, necesito hablar contigo después de que termines lo que se te pidió.- Adam asintió y el doctor salió por la puerta luego de asegurarse que todo estuviera en orden.
-¿Empecemos?..- me preguntó agarrando un cuaderno y un lápiz. Yo asentí y lo abrace con fuerza.-Abel, ellos necesitan que respondas con toda la sinceridad del mundo. Te pregunto de nuevo,¿estás listo?.- yo lo pensé y separe el abrazo mostrándole una sonrisa.
-Si, estoy listo...