La baja luz de las velas dispersas evitaba la penumbra de una habitación fría y solitaria, un joven alfa de cuna noble elevaba suspiros al vacío mientras las perlas oscuras que lleva por ojos leían cada línea manuscrita por su padre, una amenazante guerra estaba tocando las puertas de aquella tierra pacifica y civilizada que un día fue el lugar ideal para construir una familia, la familia que Lee Minho heredero del territorio Sur anhelaba, aunque en su posición sería difícil cumplir su sueño.

Ser el heredero de Busan, territorio sur no era precisamente perfecto y menos cuando su complexión mediana para ser un alfa, su poca presencia y escasa autoridad tampoco ayudaban, no era la imagen del buen líder que su padre sí, lo único que podía presumir de su padre es su cabello negro profundo, pero eso no era relevante en este momento, la guerra que se libraba en el norte sí.

El actual terrateniente de Busan Lee Minhyuk, su padre, detallaba en papel y tinta la critica situación del norte, las manadas rebeldes estaban a muy poco de tomar la frontera de Seúl, el territorio central del reino, si alguien no los detenía en cuestión de meses estaría atacando las fronteras del sur, Minho sabía que la situación era peligrosa cuando la caligrafía de su padre escribió "solo quedan diez de nuestros soldados", el sur había enviado trescientos guerreros experimentados a la batalla, y en dos meses solo quedaban diez.

El amortiguado sonido de nudillos contra la madera alertó a Minho de una visita, suspirando leyó las ultimas líneas de la carta y pronto la guardó entre sus prendas de dormir, caminó a la puerta y abrió cuidadosamente, una sonrisa deslumbrante y blanca le hizo olvidar por completo la prominente amenaza de la guerra.

—Felix, ¿Qué haces aquí? —el joven alfa preguntó.

El delicado cuerpo del omega Felix se estremeció ligeramente ante la voz del alfa y bajó la mirada con cierta timidez, —pensé que no podrías dormir, así que te traje un té. —Levantó sus pálidas manos mostrando la taza de porcelana, una leve corriente de aire le removió en cabello rubio cuando dijo —¿Puedo pasar?

Minho dudó solo un segundo antes de asentir y hacerse a un lado, Felix se apresuró a dejar la taza sobre la mesa junto a la ventana y esperó a que Minho tomara asiento para deslizar sus manos sobre los hombros tensos de su alfa...

—¿Noticias del alfa líder? —Felix preguntó.

Minho suspiró cerrando los ojos y dejándose llevar por el exquisito movimiento de las manos de su omega sobre sus hombros, —la guerra está cada vez más cerca de Seúl. Mi padre dice que en un par de semanas tomarán la frontera y si les da la gana destruirán todo Seúl.

—¿No hay forma de hablar con el líder de los rebeldes? No lo sé, ¿Establecer un acuerdo?

Minho negaba, —es un alfa viejo nacido en las antiguas manadas salvajes, gobierna el norte bajo las viejas leyes, solo acepta hablar con aquel que pueda vencerlo en un enfrentamiento cuerpo a cuerpo... hasta ahora treinta y ocho generales se han enfrentado a él y todos murieron.

—Por la diosa Luna, es un completo salvaje. —El omega deslizó sus manos sobre los brazos de Minho hasta darle un abrazo, —¿Tu padre está bien?

Minho asintió, —lo está, pero no queda casi nada del batallón que enviamos, volverá a Busan en dos días, dijo que tiene algo muy importante que hablar con el consejo.

Felix se alejó para mirar el rostro de su alfa, —¿Crees que ya es el momento? ¿Te nombrara el nuevo alfa líder?

El alfa ladeo la cabeza con una ligera sonrisa incomoda, — no lo sé, tal vez solo viene por más guerreros, están perdiendo la guerra y si los rebeldes llegan hasta Busan estaremos perdidos, volveremos a ser los mismos salvajes de-

Minho no pudo decir más, Felix lo hizo callar con un suave y casto beso. —No digas esas cosas, llamas a la mala suerte, mejor piensa en que el rey Son y tu padre podrán detener a los rebeldes antes de que lleguen hasta aquí.

Minho suspiró, —me gustaría pensar tan positivo como tú, pero si mi padre volverá tan de prisa es porque tiene malas noticias. —Miró a Felix, las sombras de las leves llamas apenas le permitían ver las hermosa marcas de sus mejillas, tomando su rostro entre sus manos, Minho le dio un beso en la frente, —vete ya, si las sirvientas te ven cerca de mi habitación harán un escandalo y este no es el momento de decirle a mi padre sobre nosotros.

Felix tuvo la intención de replicar, pero no lo hizo, obedeció fielmente a su alfa con un asentimiento y se apresuró a salir de la habitación.

***

El regreso del alfa líder de Busan tenía a todos muy nerviosos, la casa de la manada Lee era un completo desorden, los empleados se perdían entre las cosas que debían hacer y los guerreros no tenían ni idea de como formarse para asegurar la llegada del líder, habían estado meses sin la tutela de su alfa líder, meses en los que el joven heredero no había logrado ordenar a su manada, el pueblo del territorio sur dudaba que pudieran ser bien dirigidos si Lee Minho se convertía en el alfa líder.

Las campanas de las puertas principales resonaron advirtiendo la llegada del líder y los sobrevivientes del batallón...

Suspiros tristes y llanto silencioso perturbaban el silencio del pueblo. Siete, solo siete guerreros volvieron de trescientos alfas bien entrenados que se marcharon con la esperanza de ponerle a fin a la cruel guerra que avanzaba en el norte.

El alfa líder Lee Minhyuk bajó de su caballo, soltó los cintos de cuero que sostenían la capa de piel sobre sus hombros, la ofreció a una joven omega y casi corrió hasta su esposa y su hijo, los abrazó tan fuerte que dolía, pero nadie podía juzgarlo, había estado cerca de la muerte tantas veces que necesitaba creer que por fin estaba a salvo. Los guerreros que volvieron junto al líder también corrieron con sus familias a excepción de uno que al desmontar su caballo caminó justo detrás de su líder.

—Hyunjin, que bueno verte de regreso, —dijo Minho dando la mano a su amigo.

El joven guerrero tomó la mano que se le ofrecía y solo le dio un leve apretón, su rostro llevaba grabada la angustia y el terror de la guerra.

—Hyunjin, ven conmigo necesitas un baño de inmediato, —casi ordenó Irene la líder consorte y omega del alfa.

—Gracias mi señora, pero el líder me ha pedido estar presente en la junta del consejo. —Se disculpaba el joven alfa.

Una mirada entre Minho y su padre fue suficiente para que el alfa menor entendiera que debían reunirse de inmediato, el beta de la manada dio la orden para llamar a los alfas de las manadas que conforman el territorio sur, casi todos acudieron a recibir al alfa líder, solo una de ellos estaba presente.

En la sala del consejo a los costados del largo mesón se hallaban los alfas de las manadas, las cortinas de los ventanales de la sala fueron abiertos por sirvientes omega en cuanto el líder Minhyuk llegó a la sala acompañado de su heredero, el joven guerrero Hwang y su beta. Vino fue servido en copas de acero para cada alfa, los sirvientes se despidieron con cortesías, finalmente Minho y Hyunjin tomaron sus lugares al costado izquierdo del líder Minhyuk mientras que el beta de la manada se acomodó al lado derecho.

—La situación es peor de lo que pensábamos, ese viejo lobo tenía bien escondido a un régimen completo, hicieron una jugada estupenda al hacernos creer que estábamos ganando, nos tenían en sus manos... —El líder Minhyuk bebió un gran trago de vino y suspiró, —vamos a perder, los guardias del rey no tienen experiencia en batalla, son todos unos novatos, el mismo rey Son sabe que pronto caeremos todos.

—¿Y qué podemos hacer? —preguntó el alfa de la manada Yang, —¿Resignarnos a ser gobernados por las antiguas leyes? ¿Otra vez en el salvajismo? Es absurdo que perdamos contra ese montón de animales.

—Esa es la principal ventaja, —interrumpió Hwang Hyunjin, inclinó su cabeza demostrando respeto al alfa de la manada Yang y prosiguió, —todos ellos son unos salvajes que están bien entrenados para sobrevivir en el bosque, saben de rastreo, son cautelosos nos atacan como si fueran simples bestias de caza, no dudan al matar, además, tiene hechiceros.

—¡¿Hechiceros?!—la voz alarmada del alfa de la manada Park llamó la atención de todos, —los hechiceros fueron encarcelados y sentenciados hace casi un siglo, se prohibió toda practica de hechicería...

—Al parecer a ellos no les importó el decretó del anterior rey, —explicaba Minhyuk, —Hyunjin dice la verdad, tienen hechiceros, perdí más de ochenta soldados en una noche porque una neblina roja los paralizó mientras dormían. Están haciendo uso de las estrategias más rastreras que conocen y están ganando.

—¿Entonces que podemos hacer? —preguntó Sungjae el beta de la manada.

El líder Minhyuk miró a su hijo, —de camino a Busan me reuní con el líder Bang Jackson de Daegu, sabemos que Daegu es una fortaleza de hierro y piedra, sus altos muros de roca solida serían muy difíciles de penetrar y más teniendo en cuenta que Daegu es un pueblo militar que nunca ha tenido conflicto con las manadas rebeldes. Los rebeldes no van a atacar a Daegu hasta que no tenga asegurado el centro y sur. Tenemos que aliarnos con Daegu antes de que eso pase.

—¿Y cómo lo haremos? Daegu es un pueblo libre, el rey mismo le dio la libertad al líder Bang por su fuerza militar. —Opinaba el alfa de la manada Yoo.

Minhyuk bebió de su copa de nuevo y apretando los puños se levantó de su silla, —el líder Bang ofreció a su hijo menor como enlace... Bang Jisung, es un omega, al parecer el líder Bang ha tenido problemas para conseguir un esposo decente para su hijo y ofreció formar una alianza si... Minho se casa con Jisung.

El joven heredero se levantó de inmediato y sus labios se abrieron dispuestos a protestar, a negarse rotundamente, pero el joven Hwang lo detuvo, le tomó disimuladamente de la muñeca y con un apretón fuerte lo silenció.

—¿No es un poco ambigua su oferta? ¿Solo con un matrimonio se volverá nuestro aliado? Tal vez eso funcione en otros términos, pero estamos en guerra y necesitaremos a sus guerreros, sus armas y sus mejores comandantes, —opinaba el alfa Yang.

Minhyuk asintió, —El líder Bang sabe que tarde o temprano, los rebeldes querrán atacarlos-

—Disculpe usted mi líder, pero Daegu es la fuerza militar más concentrada del reino, los rebeldes tendrán mucho territorio que someter si llegan a dominar el centro y sur, no podrán contra Daegu, ellos son prácticamente inmunes, —dijo el alfa Park.

—Tienen razón, hay una segunda petición, pero eso lo habló el líder Bang directamente con el rey Son, no olvidemos que no solo es nuestra guerra, la única petición para nosotros es el matrimonio, mi heredero con el hijo menor, eso es todo. —Minhyuk miró a su hijo, —ahora si me disculpa debo hablar con mi hijo, hasta el momento no hay más que decir, si tienen peticiones los recibiré más tarde.

Los líderes de las manadas sureñas acataron la petición del alfa líder y se apresuraron a despedirse con los debidos honores.

—Hyunjin, tú quédate, —dijo Minhyuk en cuanto el joven guerrero comenzó a despedirse también. —Minho, sé que prometí no obligarte a casarte, pero esto es más importante que los sentimientos, se trata de la seguridad del pueblo-

—Padre, —Minho interrumpió, —¿Qué voy a decirle a Felix?

Minhyuk parpadeo un par de veces, —¿Qué tiene que ver Felix?

Minho bufó con fastidio, la ira comenzaba a subir por su garganta, —no te hagas el desentendido, sé perfecto que ya sabes que Felix y yo estamos juntos. ¡No voy a casarme!

Minhyuk respiró profundo tratando de obtener control, no era conocido por ser violento o imponer su palabra, —Minho... he sido muy débil contigo, el consejo siempre me dijo que no supe educarte como un líder, tenía miedo de perderte porque eras muy débil de pequeño y tu madre no pudo embarazarse de nuevo, —su tono fue tranquilo, su expresión comprensiva, pero para sus siguientes palabras su tono fue riguroso, su expresión firme y autoritaria, —eres mi único heredero y es tu responsabilidad velar por el futuro de tu gente, pronto serás es alfa líder del territorio sur, y tienes que asegurar el futuro prospero de tu pueblo, aprender a ser un líder.

—Pero esto es injusto, hiciste una promesa, con tu palabra de alfa me aseguraste que nunca me obligarías a casarme-

—¡Minho! —la voz de mando salió del alfa líder como una severa reprimenda, Minho bajo la cabeza ante su padre y guardó silencio, —el tema no está en discusión, es mi ultima orden como tu líder y como tu padre, esto no es por mí, ni por ti, es por toda la gente que confía en nuestra manada para sobrevivir en el futuro, los omegas y alfas que confían ciegamente en su líder, y ese serás tú, es injusto, por supuesto que lo es, también fue injusto que casi trescientos guerreros murieran en batalla y no pudiéramos devolver sus cuerpos a sus familias. Hyunjin te hablará del omega Bang, mañana temprano partiremos a Daegu para arreglar la celebración del compromiso. —Sin decir más, el alfa líder salió del salón.

Minho suspiró sentándose de golpe en su silla, apretó los puños sobre la mesa, quería gritar, quería llorar, quería... solo quería ir con Felix y abrazarlo, consolarse en su delicado calor y besar sus mejillas, fue necio y cobarde, pensó que lo mejor era esperar a ser el líder para proclamar a Felix su omega, si tan solo lo hubiera hecho antes, tal vez ahora no lo obligarían a casarse con un omega que ni siquiera conoce.

—Minho, —el alfa Lee giró a mirar a su amigo, —te decía que Bang Jisung es un omega, pero sorpresivamente también es un experimentado guerrero, estuvo comandando un régimen en la reciente batalla de la isla Jeju, la guardia de Daegu ganó, él será una pieza clave para entrenar y formar a los guerreros del territorio sur-

—No me interesa, —Minho interrumpió, —no quiero casarme con él, no me importa lo que es o lo que hizo.

Hyunjin suspiró, —sé que será difícil lo de Felix, pero tu padre tiene razón, esto va más allá de los sentimientos, no tienes idea de lo que vi en batalla, las manadas rebeldes no tienen piedad, desgarran cuellos como si fueran ramas de árbol, vi a viejos guerreros perder la esperanza cuando los hechiceros esparcían ese humo rojo sangre paralizando a todos.

Minho se negó a mirar a su amigo, no quería ver su expresión de temor, sabe que su responsabilidad con su gente tiene que ser más fuerte que su anhelo por formar una familia con Felix, pero aun así todavía detesta la idea de tener que casarse, lo odia. Se niega con cada centímetro de piel en su cuerpo.

—Tienes que hacer esto, porque si no lo haces estaremos perdidos, las manadas rebeldes acabaran con todo, Minho, tienes que casarte.

***

El papá de mi Minho es Minhyuk de BtoB.