Capítulo 20

Sawyer

Paz, tal vez es mucho anhelar un poco de paz.

— Abre la maldita puerta — escucho los gritos de Hadley

— Ya voy a las carreras, ¿por qué estás aquí? — reniego

— Tenemos que ir ya, van a matar a Dylan — dice alarmada.

— Maldición, ¿qué sucedió?

— Va a pelear con Seth, Kane se lo ordenó y todos sabemos como va a terminar esto.

Subo a mi motocicleta y Had se va en su auto, conduzco con rapidez, sin importar nada, solamente avanzo hasta llegar al lugar. Dejo mi motocicleta a un lado y corro hacia donde esta la multitud de personas.

No están peleando debajo del arco, están en medio de la calle, Seth esta sobre Dylan golpeandolo sin detenerse.

— ¡Seth!

Grito antes de darle un golpe de alejarlo de Dylan, Dan ayuda a Dylan ponerse de pie mientras yo detengo a Seth, él me da un golpe y yo respondo con otro, mi boca sangre al igual que la nariz de Seth, su rostro está completamente destrozado hasta el momento en que los hombres de Kane nos separan.

— Te dije que no volvieras — Kane se acerca y lanza un golpe a mi abdomen dejándome sin aire

— Creí que las carreras me extrañarían.

Esbozo una sonrisa y escupo un poco de sangre, me tienen sujetado de ambos brazos hasta que finalmente me dejan en el suelo.

— Vamos Seth, al parecer no puedes terminar con un simple trabajo.

Seth se pone de pie, su rostro está lleno de sangre y parece como si su mano está lastimanda porque no la mueve, él reniega entre dientes mientras una rubia comienza a curar sus heridas.

— ¡Sawyer! — escucho el grito de Rylee entre la multitud

Corro lejos de todo el caos hasta entrarla junto a Hadley quien está impidiendo su paso aunque ella se encuentra luchando.

— ¿Qué sucede? — dice confundida

— Debemos irnos, ya — tomo su mano y nos dirigimos a la motocicleta

Ella no pregunta nada, solamente obedece a lo que digo, sube a la motocicleta y se coloca el casco, arranco a toda velocidad para poder salir del lugar.

— Sawyer, nos están siguiendo — dice con preocupación

Aceleró cada vez más dejando atrás a todos los autos que estén cerca, salimos hasta una recta en donde esquivo a todos los autos.

— ¡Sawyer! — grita Rylee al ver que un auto se atraviesa en nuestro camino

Era muy tarde para poder frenar, la motocicleta choca contra el auto haciendo que ambos terminemos del otro lado, intento proteger a Rylee, pero no lo logró.

Mi cabeza la duele y la sangre comienza a sangrar, las personas comienzan a acercarse haciendo que los hombres de Kane se vayan huyendo.

— Rye... — digo en un susurro al verla tirada en el suelo

— Sawyer... — dice en un susurro

El dolor se apodera de mi cuerpo haciendo que respirar sea una tarea casi imposible, mi respiración se vuelve nublada hasta que todo es completamente oscuridad.

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Rylee

— Sawyer...

Las lagrimas comienzan a salir de mi rostro al verlo ahí tirado cerrando los ojos, las personas comienzan a acercarse intentando ayudar, pero todas las voces se convierten en un eco en mi cabeza.

Las personas con traje de hospital se acercan a nosotros y nos suben a una camilla haciendo que mi cuerpo duela aún más.

Mis ojos se cierra al momento en entrar a aquella ambulancia haciendo que solo escuche la voz de una enfermera diciendo que todo estará bien.

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— Me alegra ver que estés despierta — dice con una voz dulce — Necesitamos tus datos y los de la persona que iba contigo.

— ¿Qué sucedió con Sawyer? — digo confundida

— Ambos tuvieron un accidente hace dos días, él se encuentra inconsciente y no encontramos ninguna forma de identificarlos.

— Mi nombre es Rylee Lore Faith y él es Sawyer Bluet, pueden llamar a mi casa.

— Por favor no te mueves tu pierna y tu brazo están complemente lastimados al igual que tus costillas.

Asiento y le doy el número, mi cuerpo se siente adolorido y respirar se me dificulta, no puedo moverme y solo puedo pensar en Sawyer.

— Dios santo — Rose entra con lágrimas en los ojos — Vine en cuanto me dijeron, estaba tan preocupada, te busqué por todos lados.

— ¿Dónde está Sawyer?

— Cariño... él...

— ¿Él qué? — digo preocupada por la respuesta

— El golpe en su cabeza fue muy grave y sigue en observación porque no ha despertado, pero todo está bien.

— Lo siento, no quería preocuparte de esta manera.

— No te disculpes Rye, solo espero que estés mejor y los doctores dicen que en unos días podrás salir.

— Necesito ver a Sawyer.

— Cuando puedas levantarte prometo que lo vas a ver.

Yo asiento con lágrimas en los ojos. El tiempo pasa de manera lenta, Rose me cuida todos los días y no me ha dejado sola en ningún momento.

Hannah me ha venido a ver algunas veces, pero se rehúsa a decirme algo, solamente me observa y sus ojos se llenan de lagrimas.

— Buenas noticias, ya puedes irte.

— ¿Ya puedo ir a ver a Sawyer? — digo con emoción

— Así es, solo... él sigue sin reaccionar.

— Lo sé Rose, pero necesito verlo.

Ella asiente y una enfermera me trae una silla de ruedas para poder ir a ver a Sawyer, los pasillos blancos llenos de personas hasta llegar a su habitación, él se encuentra en una cama conectado a varios aparatos, su cabeza está vendada y Hannah se encuentra sentada en un sillón.

— Veo que ya estas mejor — dice cortante

— Sí, solo quiero ver a Sawyer.

— No, por tu culpa esta en este lugar, no quiero que te acerques a él.

— Hannah esto no fue mi culpa.

— ¡Quiero que te vayas Rylee!

— No lo voy a hacer.

Me quedo sentada en una esquina mientras observo a Sawyer, ambas nos quedamos en silencio mientras Rose nos trae café y me esta cuidando.

Todo duele, Sawyer no iba a poder ir a la universidad a tiempo aunque supongo que comprenderán, Hannah poco a poco me está hablando y mis heridas comienzan a sanar, al pasar las semanas la esperanza de que Sawyer despierte se desvanece.

Y el hecho de despedirme de él dolía cada vez más.

— Te amo Sawyer, pero tengo que dejarte ir — digo en un susurro mientras tomo su mano

Me quedo un momento ahí hasta que siento como su mano ejerce fuerza sobre la mía, abre los ojos levemente y esboza una sonrisa.

— Nos vemos Rylee...

Tal vez al final no somos tan indestructibles como pensaba.

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Bueno amigos, llegamos al final de esto, falta el epílogo tranquilos.

Recuerden que pueden leer Profundo e irascible que es la continuación de este libro.

¿Qué les pareció todo?