Félix y HyunJin regresaron a la casa cerca de la 1 de la mañana, algo temprano para ser una noche de bodas según algunos invitados. HyunJin no estaba de humor, bastante desanimado por el incidente con los padres y la revelación sobre el pasado de sus madres. A pesar de su estado de ánimo, aún quiso quedarse en la fiesta para que Félix pudiera disfrutar, pero Félix estaba más preocupado por su bienestar que por disfrutar de la costosa fiesta. Fingió estar agotado y sugirió regresar a casa con un pequeño "bostezo".

HyunJin se dió cuenta de que Félix no estaba tan cansado como decía, pero agradeció profundamente su consideración, aunque en silencio, sabía que Félix negaría cualquier evidencia de la mentira con tal de regresar a casa si lo cuestionaba. Durante el viaje en taxi de regreso a la casa, Félix abrazó a HyunJin suavemente de los hombros y acarició su cabello y brazos para consolarlo en silencio. 

Al llegar a la casa, Félix llevó a HyunJin directo a su cuarto. Ambos estaban cansados, nadie hablaba del bajón de energía que llegaba después de toda la euforia de la boda, pero Félix podía sentir ese bajón muy bien.

— Intenta dormir— sugirió mientras se volteaba para salir de la habitación pero HyunJin lo detuvo sujetándolo de la muñeca, y en silencio, le pidió que se quedara, estaba implícito en su mirada, Félix no necesitaba que se lo pidiera.

En silencio, Félix regresó sobre sus pasos y esperó a que HyunJin lo soltara y se moviera un poco para hacerle un espacio. Félix se sentó lentamente en el colchón, casi esperando que en cualquier momento HyunJin cambiáse de opinión, pero al no suceder, se recuesta.

Por un momento, ambos permanecieron en silencio, mirando el techo en la oscuridad. Un par de centímetros los separaba, pero no se fijaron en eso.

— Félix...— el rubio tararea para hacerle saber que lo oía— Sobre lo de nuestras madres...— Félix permanece en silencio, atento— No sabía... Es decir, sé que mi madre cometió una falta, de ahí que hayamos contraído la deuda, pero no sabía que por eso— Félix espera que continue pero ante el silencio voltea a verlo.

— Si, te creo. Yo tampoco sabía nada— afirma y HyunJin lo mira— Cuando le preguntaba a mamá por qué estabamos en esta situación ella siempre me decía que hubo una falta al contrato original que ella tenía con tu madre, pero nunca me decía cuál fue la falta— suspira y estira una mano para acariciar el mechón corto de HyunJin que descansaba en la almohada.

HyunJin baja la mirada, pensativo, y sin pensarlo mucho se acerca un poco a Félix, apoyando su frente contra el hombro de Félix. Félix no duda ni un segundo en removerse un poco para deslizar el brazo debajo de la cabeza de HyunJin, quien poco a poco se fue acomodando hasta apoyar su cabeza en el pecho de Félix.

El silencio cae sobre los dos de forma automática. HyunJin permanece tan quieto como una piedra, intentando no moverse, incluso hasta de no respirar. Jamás creyó que estaría con Félix de esa manera, desde que era niño se había estado haciendo la idea de que sería él quien tuviera a su prometido en su pecho y no al revés. Aún así, se sentía tan bien, tan cómodo y tan... correcto.

Da un leve sobresalto cuando la mano de Félix se apoya sobre su cabeza, pero el omega rubio no la retira. Ambos mantienen el silencio y Félix finalmente mueve su mano, acariciando suavemente el cabello oscuro de su esposo, de HyunJin.

Pasaron la noche acostados juntos, con Félix acariciando el pelo de HyunJin para ayudarlo a conciliar el sueño y HyunJin con la cabeza apoyada en el pecho de su esposo. Fue su segunda noche de esa forma, y de alguna manera, Félix sintió la misma angustia que aquella primera vez que ambos estuvieron en esa situación, cuando HyunJin estaba mal por la reacción alérgica. Y ahora, estaban así por culpa de sus madres...

¿Cuándo podrían acostarse a dormir juntos de esa manera sin ser agobiados por cualquier tipo de malestar? Félix quería que ese día llegáse pronto.

Al día siguiente, HyunJin bajó a desayunar después de encontrar su lado de la cama vacío. Aunque se sentía un poco mejor que la noche anterior, aún albergaba un sentimiento de amargura. Miró el reloj y notó que eran las 10 de la mañana; Félix lo había dejado dormir. Sonrió para sí mismo, conmovido por la dulzura del omega rubio, y se encaminó hacia la cocina. Al entrar, vio a Félix yendo y viniendo con un teléfono en la mano. La preocupación se reflejó en el rostro de Félix cuando notó la presencia de HyunJin.

— Buenos días —saludó HyunJin con una sonrisa forzada, intentando no dejar que su amargura se reflejara demasiado. Félix le devolvió la sonrisa, pero HyunJin notó una tensión en su expresión.

— Buenos días, Jinnie— el corazón de HyunJin se sacude levemente ante el apodo— ¿Cómo te sientes hoy? —preguntó Félix, dejando el teléfono a un lado.

— Mejor, supongo —respondió HyunJin encogiéndose de hombros—. Gracias por dejarme dormir. ¿Qué estás haciendo con el teléfono?— Félix suspiró antes de responder.

— Estoy tratando de contactar a JiSung. Quiero aclarar las cosas con él y asegurarme de que esté bien informado sobre lo que pasó anoche. No quiero malentendidos entre nosotros —HyunJin asintió, apreciando el esfuerzo de Félix por resolver las cosas. Se acercó y le dio un suave beso en la mejilla, motivado totalmente por el impulso de sus emociones.

— Gracias por preocuparte. Estoy seguro de que todo se resolverá.— Félix le sonrió con gratitud, agradecido por el apoyo de HyunJin y puso a calentar el café para el mayor mientras encendía la hornalla de la cocina para preparar unos huevos.

— Ah, más temprano llamé para buscar un sexólogo aquí en la ciudad. Quiero asegurarme de que estemos bien informados y preparados para cualquier cosa relacionada con el cachorro— menciona sin dejar la concentración en la comida.

HyunJin miró fijamente su espalda, sintiendo una leve angustia al pensar que Félix estaba tan concentrado en ese asunto tan pronto después de la complicada noche anterior. Sin embargo, se guardó la angustia para después y preguntó:

— ¿Y qué encontraste?

Félix suspiró y respondió:

— No hay sexólogos en la ciudad. Si realmente queremos consultar a uno, tendríamos que viajar a Busan todos los días— HyunJin negó con la cabeza ante la idea de viajar todos los días a Busan.

— No creo que sea práctico ir a Busan cada vez que necesitemos consultar a un especialista. Además, eso podría afectar nuestra rutina y trabajo aquí— Félix reflexionó por un momento y luego recordó algo.

— Oye, ¿qué tal si hablamos con JiSung? Él tiene experiencia y podría darnos algunos consejos. Ya sabes, sobre lo del cachorro y esas cosas— HyunJin frunció el ceño, pensativo.

— No sé, Félix. ¿Realmente crees que JiSung querrá hablar de eso?—Félix sonrió con picardía.

— Bueno, recuerdo que JiSung ha estado con omegas antes, así que podría tener algunas ideas o consejos. Además, es nuestro amigo, creo que podremos contar con él— HyunJin asintió lentamente, considerando la sugerencia. Sentía que JiSung era más confidente de Félix que suyo, pero le gustaba que el rubio intentara unificar sus vidas en todo aspecto.

— Está bien, podríamos preguntarle. Pero intentemos ser discretos al respecto— sugiere— Recuerda que no sabe que yo soy... Otro omega— Félix duda un momento.

— Creo en realidad que deberíamos decirle— HyunJin casi palidece por completo mientras Félix le entrega el desayuno, y al ver su expresión se apresura a calmarlo— JiSung es discreto, lo juro. También es muy comprensivo, sé que entendera— afirma, y aunque HyunJin duda bastante finalmente asiente con la cabeza— Gracias, Jinnie. Verás que todo mejorará— le da un beso en la frente rápido antes de tomar su celular de la mesa y correr a la sala de estar para llamar a su amigo.

HyunJin, con la cabeza llena de pensamientos ansiosos, decidió buscar distracción y se dirigió a la entrada para recoger el periódico. Al abrir la puerta, se encontró con la sorpresa de ver a MinHo estacionándose frente a la casa. El alfa parecía estar en un estado que sugería una noche de excesos.

— Hola, HyunJin. ¿Cómo va todo? — MinHo saludó mientras entraba, sosteniendo su cabeza con una mano y ajustando los lentes de sol con la otra.

— ¿Qué pasó contigo? ¿Tuviste problemas en el trabajo? — preguntó HyunJin, notando la aparente incomodidad de MinHo, se suponía que a esa hora MinHo estaba recargado de trabajo acumulado.

— Una discusión estúpida con el jefe, nada importante. Pero eso no importa ahora. ¿Puedo quedarme aquí un rato? Necesito desconectar un poco — comentó MinHo, visiblemente cansado. HyunJin asintió, con una ceja alzada.

— Claro, pasa. ¿Quieres tomar algo para aliviar la resaca?

— Oh, sí, por favor. Un poco de agua sería genial— suspira, sentandose tan lento y cuidadoso en el sillón de la sala que parecía un anciano con problemas de cadera.

Mientras HyunJin iba a la cocina a buscar agua, se preguntaba si tener a MinHo allí sería una buena distracción para sus propias preocupaciones, dudando mayormente que eso sea posible. Sin embargo, estaba decidido a ser un buen anfitrión y apoyar a su amigo en lo que necesitara. HyunJin, ocupado con el vaso de agua en la cocina, escuchó gritos repentinos provenientes de la sala y por poco deja caer el vaso. Se sobresaltó, preocupado por lo que podría haber sucedido, y apresuró el paso de vuelta. Al llegar, se encontró con Félix golpeando a MinHo con un cojín del sillón.

— ¡No puedo creer que no te hayas anunciado, casi me muero del susto! — regañaba Félix mientras MinHo, en su dramatismo característico, se protegía con los brazos y rogaba por piedad debido a la resaca.

— Lo siento, amigo. No pensé que pondrías en marcha una guerra por no anunciar mi llegada. Mi cabeza está a punto de explotar, ¿no puedes ser más compasivo? — se quejó MinHo, con una expresión de dolor exagerado.

— ¡La próxima vez avisa! — insistía Félix, aunque su tono sugería que la reprimenda era más un juego que una queja real. HyunJin, divertido por la escena, se unió a ellos.

— ¡Parecen un par de niños! — exclamó, entregando el vaso de agua a MinHo.

— Dios, que fastidio de alfa— resopla Félix, tirándole el cojín en la cara a MinHo, quien al tener las manos ocupadas sosteniendo el vaso de agua recibe el objeto en la cara— Bueno...— suspira y se voltea a ver a HyunJin con las manos en la cadera— JiSung dice que tiene un tiempo libre ahora y que si estamos libres nosotros puede venir ahora, así que si, le dije que viniera— avisa, sin notar la mirada atenta de MinHo sobre él.

— ¿Viene mi "cachecito de ardilla"? Me quedo— afirma con una sonrisa altiva, recargándose contra el respaldar del sofá y cruzando una pierna sobre la otra. HyunJin pone los ojos en blanco y Félix aguanta la risa.

— Estoy seguro de que le "fascinará" verte la cara desde tan temprano— murmura sarcástico HyunJin, ganándose una mirada fastidiada de parte de su amigo, aún así no perdió su sonrisa.

— ¿Y bien, chicos? ¿Cómo fue la noche de bodas? Se fueron temprano, así que deben haber estado ansiosos por tenerla, ¿no?

HyunJin, sintiéndose incómodo, y más que avergonzado porque la idea ni siquiera había pasado por su cabeza dada la situación de anoche, ante la pregunta indiscreta de MinHo, le soltó una patada rápida y efectiva en la pierna, haciendo que el vaso de agua que sostenía se sacudiera y se derramara sobre su ropa.

— ¡Ay! — exclamó MinHo, mirando hacia abajo con desagrado mientras trataba de secar la mancha húmeda en su pantalón.

Félix, observando la situación con diversión, murmuró en tono sarcástico: — Bueno, parece que ahora tengo que secar el sillón también. Gracias, HyunJin— el omega azabache se abstiene de golpear su frente.

MinHo, todavía tratando de secar el agua de su ropa, solo pudo reírse ante la situación, aunque un poco irritado por el agua derramada. Félix se fue a la cocina para buscar un trapo con el cual poder secar el sillón mientras HyunJin buscaba la forma más breve y simple de explicar lo que pasó anoche. MinHo pareció bastante incómodo, tanto como lo estuvo HyunJin en ese momento, aunque al final le dijo que retirarse fue lo mejor que pudieron haber hecho, dado que ChangBin inició una especie de competencia con el primo alfa de Félix: JungKook, sobre fuerza y terminó en un desastre.

JiSung llegó con una sonrisa radiante minutos luego, saludando a Félix con un abrazo efusivo y un gesto a HyunJin, expresando lo increíble que había sido la fiesta anoche. Sin embargo, al ver a MinHo, su entusiasmo se desvaneció y lanzó un bufido de molestia, a lo que MinHo ríe por lo bajo.

— Sí, la fiesta fue genial, pero habría sido mucho mejor si cierta persona no me hubiera estado persiguiendo todo el tiempo —mencionó, sin esconder su desagrado hacia MinHo, quien hizo caso omiso y le ofreció a JiSung sentarse a su lado con una sonrisa coqueta— ¿Contigo? No, gracias —respondió con frialdad, mirando con disgusto la mancha de humedad en el pantalón de MinHo.

Ante la mirada de JiSung, MinHo entró en pánico y trató de explicar rápidamente que fue agua que HyunJin había tirado, pero JiSung parecía poco interesado en las explicaciones y optó por sentarse en un sillón individual frente a MinHo, dejándolo con una expresión de nerviosismo mientras esperaba a que Félix y HyunJin se unieran a la conversación.

JiSung comenzó la conversación con una actitud calmada pero directa, recordando que fue Félix quien lo llamó para hablar sobre las relaciones entre omegas. Félix asintió con confianza, mostrándose más cómodo con la situación, mientras que HyunJin, a quien JiSung conocía como un alfa, se sintió visiblemente nervioso bajo la mirada inquisitiva del amigo de su esposo.

Para HyunJin, la presencia de JiSung generaba una sensación incómoda. Temía que JiSung pudiera malinterpretar la situación y pensar que sus dudas sobre las relaciones entre omegas surgían porque él deseaba que Félix estuviera con otro omega. Esta idea le resultaba vergonzosa, aunque cierta en parte, pero no de la manera en que JiSung probablemente estaría imaginando.

— Bien ¿Por dónde quieren comenzar?— pregunta el omega de cabello color canela y HyunJin alza una ceja.

— ¿No preguntarás por qué queremos saber de esto?— cuestiona desconcertado.

— ¿Quieres responder?— responde JiSung con una ceja alzada.

— No— responde casi al instante, asustado de tener que abordar el tema de su relación homocasta con Félix.

— Bien, en ese caso sigamos como hasta ahora— se encoge de hombros y mira a Félix de nuevo— ¿Preguntas?— insiste.

— ¿Es verdad que no necesitamos usar condones?— cuestiona el rubio y JiSung asiente con la cabeza.

— O sea, si pero no. "No los necesitan" para evitar embarazos si las relaciones son entre omegas masculinos, "si las necesitan" si un omega es masculino y el otro femenino. Continuando con el "si los necesitan" en ambos géneros es por cuestiones de enfermedades— explica moviendo una mano de un lado a otro con indiferencia.

— Y, digamos, si aplicamos una mordida, ¿hay algo diferente que debamos tener en cuenta?— cuestiona HyunJin tras pasar su lengua disimuladamente bajo las prótesis de sus colmillos.

— Sí, eso es importante. En el caso de las mordidas hechas por omegas, deben ser un poco más cerca del hombro. La piel de los omegas es más gruesa en esa zona, y es menos probable que los colmillos omega la rompan— explica y MinHo frunce el entrecejo con rareza.

— Hablas como si no fuera una opción hacer una marca pura ¿Qué tiene de malo si quisieran hacer la marca en la unión del cuello como lo haría un alfa?— cuestiona.

— Como los omegas no están "hechos" para marcarse entre sí su anatomía es diferente, ya sabes: colmillos cortos y de punta redonda, no tenemos la posibilidad de utilizar garras retráctiles dado que nosotros solo tenemos uñas, y carecemos de saliva regenerativa— enumera con los dedos y luego hace un gesto que debía significar "etc"— Entonces, es esencial tener cuidado, ya que los omegas al no tener la saliva selladora que los alfas tienen para cerrar las mordidas hay un mayor riesgo de infección si no se toman las precauciones adecuadas, y créanme, curar una mordida omega y cuidarla es un verdadero dolor de trasero— suspira con frustración.

— ¿Alguna otra cosa que debamos saber...?— cuestiona Félix.

— Pues debo decirte que para encontrar el "punto" justo en realidad debes moverte un poco más a l—

— ¡Gracias, eso es todo!— interrumpe el rubio avergonzado. Sabía cuan gráfico podía ser su amigo cuando se hablaba de sexo.

— Yo si quiero saber— sonríe MinHo y JiSung le da una mirada de fastidio.

— MinHo— masculla HyunJin, intentando que se comporte. MinHo se encoge de hombros pero no hace otro intento de molestar a JiSung.

— Aunque dije estar bien con quedar en la incertidumbre sobre el "por qué" quieren saber esto, creo que en realidad sería más sano que me expliquen el motivo— HyunJin se tensa ligeramente en su lugar, pero mueve ligeramente el cuello para que se relajen un poco los musculos adoloridos de su cuello.

— ¿De qué hablas?— pregunta y Félix se remueve un poco a su lado, sin emitir sonido.

— Si por algún motivo Félix quiere estar con otro omega, o ambos quieren practicar la poligamia quisiera saberlo para poder aconsejarlos mejor. Hay una diferencia notable entre que un omega esté con otro a solas y  que un omega se relacione con otro omega con su alfa presente. Las hormonas reaccionan diferente, es por eso— explica JiSung con cierta preocupación.

Félix y HyunJin cruzan miradas en silencio, debatiéndose sobre hablar o permanecer en lamentira. Félix quería decir la verdad, HyunJin aún se sentía inseguro. MinHo tose falsamente y cuando la pareja lo mira este les hace un gesto con la cabeza hacia JiSung, indicando que sean honestos.

JiSung parecía honesto y bueno, una buena persona y, claramente un excelente amigo, confesarle la mentira no sería riesgoso realmente. JiSung jamás haría algo que pusiera en una mala situación a Félix, HyunJin pondría las manos al fuego para proteger esa postura.

— En realidad, yo soy un omega— confiesa luego de unos segundos de silencio. JiSung alza ambas cejas, esperando algo más lógico que eso— Es complicado de explicar, tal vez en otra ocasión Félix pueda explicártelo más detalladamente, pero por ahora solo lo dejaré en que nuestro matrimonio es el resultado de una deuda sin cobrar de nuestras madres— resume.

— Pero...— JiSung los señala con vacilación— Es decir, sabía que Félix tenía un compromiso desde que era pequeño, pero no sabía por qué— mira fijo a Félix y este se encoge de hombros, demostrando que él tampoco sabía mucho del trasfondo de la dichosa "deuda" antes de casarse— ¿Y no se suponía que se casara con un alfa?— HyunJin se cubre la cara con frustación.

— Es complicado— suspira HyunJin— Para saldar la deuda mis padres me hicieron pasar toda la vida como un alfa, y se esperaba que sostuviera la mentira hasta después de... bueno, durante todo mi matrimonio— deja caer sus manos y siente un golpe en el brazo que lo sobresalta.

— Pero yo lo descubrí en la primera cita y ahora estamos manteniendo la mentira juntos— termina Félix, bajando el puño con una sonrisa tranquila.

JiSung se quedó en silencio por un momento, procesando la información. Luego, giró su mirada hacia Félix, con una expresión de sorpresa y preocupación.

— ¿Félix, realmente estás bien con todo esto? —preguntó JiSung, su tono era serio y genuinamente preocupado—. ¿Por qué siguen juntos después de todo esto?

Félix tomó un respiro profundo y compartió una mirada con HyunJin antes de responder.

— JiSung, al principio todo fue un desastre. Era una farsa para salvar la situación de la familia de HyunJin —comenzó Félix, su voz serena pero decidida—. Pero con el tiempo, me di cuenta de que lo que siento por HyunJin es real. Hemos pasado por mucho, y ahora quiero estar con él. No es solo por la deuda; realmente quiero que funcione.

HyunJin asintió, apoyando las palabras de Félix.

— Sé que todo comenzó de una manera equivocada —añadió HyunJin, con sinceridad en sus ojos—. Pero ahora, lo que sentimos es genuino. Estoy comprometido a hacer feliz a Félix y a construir una vida juntos, no solo por obligación, sino porque realmente lo quiero.

JiSung los observó por un momento, evaluando la sinceridad en sus palabras. Finalmente, su expresión se suavizó y asintió lentamente.

— Entiendo. Si ambos están seguros de sus sentimientos, entonces tienen mi apoyo —dijo JiSung, con una sonrisa leve—. Pero asegúrense de ser siempre honestos el uno con el otro. La confianza es lo más importante en una relación.

Félix y HyunJin asintieron, Félix con una sonrisa radiante y HyunJin soltando un suspiro aliviado, agradecidos por el apoyo de JiSung. MinHo, que había estado escuchando atentamente toda la conversación, frunció el ceño y se inclinó hacia adelante.

— Esperen, esperen —dijo, mirando primero a Félix y luego a HyunJin—. ¿Y el tema del embarazo? ¿Cómo piensan manejar eso?— cuestiona de repente, ganándose una mirada frustrada de JiSung.

— Planeamos acudir a un banco de esperma —explicó Félix—. Usaríamos un donante y, una vez nacido el niño, contaminaríamos la sangre del bebé con la de HyunJin para cubrir el factor extra en las pruebas sanguíneas. Eso garantizaría que todo pareciera normal y que el niño sea reconocido oficialmente como hijo biológico de Hyun— JinMinHo parpadeó sorprendido, asimilando la información.

— Es... ingenioso —admitió, aunque su expresión mostraba una mezcla de asombro y preocupación—. Pero, ¿no es demasiado arriesgado? ¿Qué pasa si alguien descubre la verdad?

— Lo sabemos, MinHo. Es un riesgo —dijo—. Pero es el único camino que hemos encontrado para salir de esta situación y para asegurar nuestro futuro juntos. Sabemos que no es ideal, pero haremos todo lo posible para proteger nuestra familia— JiSung asintió, aún procesando todo, pero mostrando apoyo en su mirada.

— Haré lo que pueda para ayudarles —dijo JiSung, mirando a Félix y HyunJin con determinación—. Y recuerden, siempre pueden contar conmigo— MinHo se relajó un poco y esbozó una sonrisa de apoyo.

— Bueno, chicos, parece que tienen un plan sólido —dijo—. Sólo asegúrense de cuidarse mutuamente. Y Félix, si necesitas ayuda con lo del banco de esperma o cualquier otra cosa, sabes que estoy aquí— Félix sonrió agradecido y asintió.

— Gracias, MinHo. Apreciamos mucho tu apoyo —JiSung, con el ceño fruncido, se rascó la barbilla mientras consideraba lo que acababa de escuchar.

— Pero, ¿cómo afectará esta mentira al niño cuando crezca? —preguntó, mirando a Félix y luego a HyunJin—. Eventualmente, se dará cuenta de que algo no cuadra — JiSung, aún preocupado, miró a Félix y HyunJin con seriedad.— ¿Cómo afectaría esa mentira al niño cuando creciera? —preguntó, dirigiéndose especialmente a Félix.Félix bajó la cabeza, sin haber considerado ese aspecto antes.

— No lo había pensado... —admitió en voz baja. HyunJin, viendo la preocupación de su esposo, intervino con una voz firme pero tranquila.

— Tarde o temprano tendremos que decírselo —dijo—. Pero tal vez deberíamos alejarnos un poco de los padres de Félix para que el niño no les diga nada por error. Félix levantó la mirada, aturdido y molesto.

— ¡No quiero cortar lazos con mis padres! —exclamó frustrado. HyunJin lo miró con comprensión y una calma que Félix no podía compartir en ese momento.

— No estoy diciendo que cortemos lazos por completo —explicó HyunJin—. Sólo alejarnos un poco, por las dudas, hasta que el niño entienda completamente la situación.

Félix seguía pareciendo disconforme, su rostro marcado por la lucha interna entre el deseo de proteger a su futuro hijo y la necesidad de mantener su vínculo con sus padres.HyunJin se bajó del sillón y se arrodilló frente a él, tomando su mano con suavidad.

— Prometo que lo solucionaremos para que tú y el cachorro estén bien —dijo HyunJin, mirándolo a los ojos—. Pero por el momento, es la única idea que tengo. Por favor, confía en mí.

Félix lo miró, viendo la sinceridad y preocupación en los ojos de HyunJin. Respiró hondo, tratando de calmarse, y finalmente asintió, aunque con cierta reticencia.

— Está bien... —murmuró—. Pero sólo un poco, y sólo hasta que estemos seguros —HyunJin sonrió con alivio y se levantó, abrazando a Félix con fuerza.

— Gracias, Félix. Prometo que encontraremos la manera de que todo salga bien.

JiSung, observando la escena, sintió una mezcla de admiración y tristeza. Sabía que sus amigos enfrentaban un camino difícil, pero también veía el amor y la determinación que compartían.

— Haré todo lo que pueda para ayudarles —dijo finalmente JiSung, su voz llena de convicción—. No están solos en esto.

— ¡Y yo!— exclama MinHo con una sonrisa. JiSung pone los ojos en blanco y mira a otro lado.

— Gracias, chicos. De verdad— sonríe HyunJin, volteando hacia JiSung luego— Y JiSung, gracias por entender— el omega lo mira fijo un momento, tardando un poco en asentir con la cabeza y formar una sonrisa.

— De nada— responde. JiSung se levantó de su asiento y se estiró un poco antes de mirar su reloj.

— Bueno, chicos, debo irme. Quedé con JeonGin para pasear por el centro —anunció, sacudiendo la tensión de la conversación con una sonrisa—. Cuídense, ¿vale?— MinHo se levantó rápidamente, acomodándose el abrigo.

— Espera, JiSung, te acompaño. Puedo cuidar de ustedes dos, no quiero que vayan solos—JiSung lo miró con una mezcla de resignación y fastidio.

— No, gracias, MinHo. Podemos manejarnos solos —respondió, intentando sonar firme— MinHo, sin embargo, siguió insistiendo mientras se dirigían hacia la puerta.

— Vamos, JiSung, no tiene que ser tan difícil. Solo quiero asegurarme de que estén bien —dijo con una sonrisa coqueta, pero JiSung no cedió.

— De verdad, no es necesario, MinHo. Hasta luego, Félix, HyunJin —se despidió JiSung, saliendo por la puerta mientras MinHo seguía intentando persuadirlo.

Finalmente, quedaron solos. Un incómodo silencio se instaló en la sala, roto solo por el suave suspiro de Félix. Él se giró hacia HyunJin, con una expresión seria y reflexiva.

— Realmente estoy empezando a ver las dificultades de este matrimonio —murmuró—. Pero voy a esforzarme por cooperar— HyunJin sintió un peso en su pecho al escuchar las palabras de Félix. Se acercó a él, tomando sus manos entre las suyas.

— Félix, lo siento mucho por la deuda de mis abuelos —dijo sinceramente—. Prometo que buscaré una manera de que puedas sostener tu vida como tal, sin que esta carga te pese tanto— Félix le apretó las manos en señal de comprensión y apoyo.

— No es tu culpa, HyunJin. Estamos en esto juntos. Solo... solo espero que podamos encontrar una solución que funcione para ambos.

HyunJin asintió, sintiendo una renovada determinación de enfrentar los desafíos junto a Félix. Aunque sabían que el camino por delante no sería fácil, en ese momento, el compromiso mutuo les dio una sensación de esperanza y fortaleza para seguir adelante.