✧ • Inconveniente • ✧
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Anime/manga: SERVAMP -サーヴァンプ-
(Sāvanpu).
Creador: Strike Tanaka.
Pareja: Sleepy Ash [Kuro] x Mahiru Shirota.
Advertencia: Lemmon /hard
Dedicado a : Nannuna_6
Nota: Lo que una tiene que hacer para que te pasen un trabajo práctico... Quien lo diría.
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Ah, que problemático.
¿Cómo habían llegado a esa situación? . Era extraño y... caliente.
El reconocido alfa Sleepy Ash caminaba a la máxima velocidad que su pereza le permitía, este había escapado de clases. Ahora vagaba por los pasillos de la escuela buscando a su amigo castaño, Mahiru Shirota, quien le prometió acompañarlo a tomar algo en la hora de matemáticas ; depués de todo, a nadie le agradaba la materia ni mucho menos la profesora.
Lo vió al doblar en uno de los pasillos, justo como habían acordado. El Omega le regaló un adorable sonrisa levantando levemente su mochila hacia delante y balanceandose como niño pequeño. El mayor dió una sutil sonrisa pasando junto a él dándole el indicio de que lo siga y que se apresure ; el trayecto que debían recorrer para salir de la escuela era largo, ellos estaban en un tercer piso.
Comenzaron a trotar al oir el golpeteo del tacón de una mujer resonar por la desolada escuela, eso significaba una cosa, o la profesora se había dado cuenta de que no estaban presentes y envió a alguien a buscarlos o peor aún, la directora estaba rondando la institución. Las escuelas allí eran realmente complicadas, dado que había mucha vigilancia en un intento de evitar cualquier tipo de "incidente" en horario escolar.
Llegaron al patio de educación física agitados, al parecer, la mujer en ningún momento se había percatado de su pequeña huída o la perdieron en camino. Se miraron dándose un sonrisa cómplice e intentando regular su respiración dispuestos a ir hacia la puerta que se encontraba junto al canasto con pelotas dentro, esta era la que los llevaría directamente a una escalera para poder bajar al segundo piso.
Ash extendió su mano hacia la puerta con pereza, pero rápidamente tuvo que alejarse de esta al escuchar un estornudo del otro lado acompañado del característico golpeteo de tacón que antes había escuchado.
— Kuu-chan, aquí —. Le susurró el castaño haciéndole señas para que se meta en el pequeño cuarto utilizado para guardar las cosas de educación física junto a él. El mayor entró en aquel estrecho lugar en el impulso que cerraba de forma apresurada la puerta del cuarto sin hacer mucho ruido.
El lugar era demaciado estrecho, por lo cual quedaron con una cercanía considerable. Algo que tardaron en notar debido a que su concentración estaba sumamente centrada en la posibilidad de ser descubiertos. Para cuando la mujer se alejó lo suficiente, sus cuerpos estaban unidos y coincidiendo perfectamente , algo de lo que se percataron luego de dar un suspiro y mirar hacia delante.
Las mejillas de ambos adquirieron un suave carmín al rozar sus narices accidentalmente. Se removieron un poco intentando obtener más espacio para ellos, pero lo único que lograron fué quedar más juntos y rozar sus "partes sensibles" al moverse tanto. Ambos quedaron estáticos y el Omega posó sus manos en los hombros de Ash , separándolo un poco de su cuerpo.
— N-No te muevas —. Susurró apoyando su cabeza en el hombro derecho del Alfa empezando jadear. El peliceleste acotó aquella orden mirándolo extrañado, Mahiru normalmente le hubiera dado un fuerte golpe en la cabeza totalmente sonrojado llamándolo "idiota" pero, en vez de esto, estaba quieto y en silencio recargado sobre su pecho. Entendió la situación al escuchar un pequeño gemido salir de los labios de Shirota y que un olor a escencia de vainilla inundara sus fosas nasales ; había entrado en celo.
— Mahiru —. Le llamó intentando no perder el control por el aroma que emanaba en menor. El mencionado alzó la vista , sus mejillas estaban sonrosadas y sus ojitos aguados ; no podía evitar frotarse contra el mayor y gemir al sentir el tacto, le parecía tan vergonzoso que le daban ganas de llorar. Ash lo miró intentando no hacer ninguna mueca, tenía presente la obvia incomidad del contrario y no quería empeorarlo haciendo gestos.
Se estaba volviendo demaciado problemático, las feromonas del Omega comenzaban a aumentar en gran cantidad con el paso del tiempo y eso sumado a la cercanía junto con los frotes estaban volviéndolo loco ; aunque los sentimientos hacia el castaño también jugaban en contra. Debía hacer algo rápido, aquél aroma podría llamar la atención de algún alfa que rondara cerca, y si eso llegaba a ocurrir, todo sería un caos total. Intentó ignorar el agarre en sus hombros queriendo llamar su atención desviando la mirada.
— K-Kuu-chan —. Gimió de manera tímida tirando de su ropa hacia abajo en un intento de que el peliceleste lo mirara. El alfa no pudo contener el instinto de acorralarlo contra la pared, haciéndole lanzar un sonoro gemido. Conectaron sus miradas unos segundos jadeando y deseándole mutuamente ; luego de esto, ambos unieron sus labios en un beso cargado de pasión y pizcas de sentimientos ocultos.
— Tus feromonas son problemáticas —. Mustió el alfa comenzando a frotarse contra el chico e intentado cubrir con su aroma al Omega , para así evitar la atención que comenzaba a generarse a una distancia prudente de ellos ; detectaba a los otros alfas buscando a su Omega, y eso le molestaba rotundamente.
— Kuu-chan, ayúdame porfavor —. Le rogó uniendo sus bocas nuevamente tras abrazarlo por los hombros. El mayor profundizó aquel acto rodeando con sus brazos la cintura contraria y tomándolo de la nuca. El beso iba a un ritmo medio, sin parecer desesperados pero tampoco era lento como para perder la escencia de la situación ; mantenían aquel acto con deseo y, de manera compartida, amor.
Subió la pierna del adolescente presionando su cuerpo contra la pared para luego levantarlo sin separar sus labios. Las manos de Kuro recorrían despreocupadamente el cuerpo de Shirota, y este apretaba con sus piernas el torso del alfa exitado.
— ¿Hay alguien aquí? —. El par se sobresaltó al oir una tercera voz en el gimnasio. Detuvieron sus acciones unos segundos en lo que, probablemente, uno de sus compañeros recorría el lugar para cerciorarse de que se encuentre vacío. Para este punto, Mahiru estaba rodeado de las feromonas de alfa de Ash, por lo cual su celo no sería un problema en ese aspecto; pero si en el sentido que necesitaba a su acompañante ahora. Aquél deseo no se hizo de esperar, Shirota nuevamente estaba besando al peliceleste y jugando con el cinturón del mismo tirándolo hacia delante e intentado sacarlo.
La drelanila motivaba sus cuerpos haciendo que se entremezclan. Con este detalle en cuenta, Kuro se encontraba mordiendo el cuello del castaño dejando marcas y saboreando como si de un dulce se tratase su suave piel. El Omega se aferrada a él dándole más facilidad para recorrer su cuerpo, mientras este gemía su nombre y tiraba de sus cabellos sutilmente. El peliceleste ya tenía una erección molestándolo y clamando atención, la cual chocaba contra el trasero del menor haciéndole lanzar más gemidos.
— Estás húmedo —. Pronunció sobre su oído tras meter sus manos en el pantalón de Shirota, introduciendo dos dedos en su interior con la ayuda del lubricante natural. El más bajo se estremeció por completo encorvando su espalda al sentir los dedos del contrario ; los gemidos se hacían más difíciles de contener, y los besos resultaban insuficientes. Las quejas del castaño cada vez eran más sonoras, volviendo a llamar la atención del individuo que aún permanecía allí.
— Kuu-chan h-hazlo —. Pidió mientras lamía su cuello y abrazaba con fuerza sus hombros reclamando toda la atención del alfa. Kuro dirigió la mirada al Omega nuevamente tras cerciorarse que, quien sea que esté allí afuera, se haya retirado del gimnasio . Le besó otra vez deslizando su cuerpo por la pared hasta dejarlo frente a él y así poder voltearlo .
— ¿Estás listo? —. Preguntó bajando de manera lenta los pantalones junto a la ropa interior del contrario. Mahiru puso ambas manos en la pared mirando hacia atrás y asintiendo levemente con las mejillas completamente sonrojadas. Ash posicionó la punta de su pene frente a la entrada del castaño suspirando pesamente y acomodándose sobre la espalda del más bajo.
— Mgh —. El alfa ya se encontraba en su interior comenzando a moverse lentamente mientras cubría su boca con su mano derecha. Se detuvo unos momentos jadeando y tomó con su mano izquierda la cintura del Omega, ayudándose a entrar más fácilmente. Mahiru encorvó su espalda metiendo aún más el miembro de Kuro en un vaivén con sus caderas.
Lo único que se escuchaba en aquél cuarto era el choque de sus pieles que se hacían más frecuentes con el paso de los segundos. Los gemidos del Omega se perdían en la mano del peliceleste y el mayor lanzaba gruñidos o gemidos roncos cada que aumentaba la velocidad llegando más profundo. Shirota sostenía con sus antebrazos recargados en la pared, las embestidas proporcionadas a su cuerpo hacían que vaya inevitablemente al ritmo de estas, haciéndole temblar.
— ¡Kuro! —. Gimió con fuerza en un pequeño grito cuando el mayor tocó su punto dulce. Este sonrió satisfecho centrando toda sus fuerzas en golpear ese punto, haciéndole ver las nubes al Omega. Comenzó a masturbar el miembro del más bajo al mismo tiempo que aumentaba la velocidad de manera feroz. La piernas del castaño comenzaron a temblar y le costaba mantenerse pie, algo que fué notado por Ash, quien lo abrazó de la cintura evitando que caiga.
— Mahiru, ¿puedo? —. Jadeó en su oído al borde del orgasmo. El ojimiel buscó los labios contrarios afirmando repetidas veces ; compartieron un último beso sintiendo corrientes eléctricas en todo su cuerpo. Kuro mordió fuertemente el cuello de Mahiru marcándolo como su Omega y dejando salir su semen en el interior de Shirota y este en su mano.
— Te amo —. Susurró completamente exhausto dejándose arropar en los brazos del mayor. Él sonrió con ternura depositando un suave beso en los labios de su, ahora, pareja. Intentando regular su respiración en lo que el nudo se formaba.
Ese había sido un agradable inconveniente. Será interesante ver la reacción de ambos al recordar que no usaron protección .
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