La hora esperada llegó, el último partido, la gran final. Aquí se jugaría todo, si el Raimon perdía, adiós fútbol. Si el Raimon ganaba, fútbol salvado. Muchos jugadores, en total, quince jugadores habían quedado hospitalizados después del partido contra Inferno. El Raimon se encargaría de ganar por ellos, por aquellos que estaban en el hospital.

El Inferno, por su parte, estaban muy nerviosos, era el enfrentamiento final. Aquí se decidiría todo, no podían fallar. Los más nerviosos eran Seth y Minita. Minita estaba algo más calmada ya que sabía toda la verdad, en cambio, Seth no podía con los nervios.

-Oye Emma...

-Dime Minita.

-¿Estás relacionada biológicamente con El Señor?

Esta pregunta sorprendió a Emma. De echo, la puso de los nervios.

-Sí...- Se limitó a decir, se notaba muy nerviosa.- Él es mi tío...

-Gracias por responder. Y lamento la pérdida de tu padre.

Luego, Minita se despidió y fue camina al campo. Emma supuso que el Señor, o mejor, Javier le habría contado la verdad. Pero no entendía por qué lo había hecho. En ese momento Cata la sacó de sus pensamientos cogiéndola del brazo.

-¿Te... Encuentras bien?- Preguntó.- Parece que estés en el Limbo.

-Sí...- Dijo no muy convencida.- Ya es la hora.- Dijo para soltarse de su agarre y salir al campo.

El partido empezó. El Inferno usaban un juego muy duro, pero apresar de ello, el partido estaba muy igualado. En el minuto 30 Emma, Minita y Seth unieron sus fuerzas en una jugada para marcar gol. El partido continuó de la misma manera. Ningún equipo lograba marcar. Aunque el Inferno estaba más enfocado en hacer entradas duras que en marcar.

Finalmente llegó el descanso. Cata se me acercó a Emma a preguntar que le pasaba, pues no estaba jugando como siempre. Esta solo dijo que estaba algo mareada. El entrenador la fulminó con la mirada. Cata pidió que ella y Emma se quedarán en el banquillo. Si Emma estaba mareada no podría jugar, y ella se quedaba por si pasaba algo. El entrenador terminó cediendo. En su lugar salieron José y Juanpo.

La segunda parte continúo sin muchos cambios. Finalmente el Raimon fue capaz de empatar el partido. Emma se sobresaltó pidiendo salir al campo. El entrenador lo consintió y fue cambiada por Juanpo. El partido seguía muy igualado no parecía que algún equipo fuera a perder. En una gran jugada por parte de El Gorras terminó en portería, pero... Emma estaba en su límite y se desmayó. La sacaron fuera del campo. Solo quedaban 10 minutos de partido para que terminara. Cómo si se tratase de un milagro lograron marcar en el minuto 90. Pasaban a los penaltis.

Fueron cinco penaltis, el Raimon marcó cuatro, el Inferno tres. Minita y Seth fallaron en los penaltis debido a que no estaban seguros de seguir con esto. Dándole la victoria al Raimon.

Se les entregó la copa al equipo ganador. Emma se encontraba en enfermería. Resultaba ser que se había desmayado debido a toda la presión, el estrés y el cansancio que llevaba. Le dieron el alta al día siguiente. Emma se disculpó con su equipo por haber perdido, a nadie del equipo le importó haber perdido.

Pero, Emma sabía que tenía un gran problema con su tio...