La "buena amiga" Soo-Min
—Jungkook, solo te estaba pidiendo que diluyeras los aromas que no te gustan utilizando tus feromonas... Ah, pero si querías convertirme en un perro en celo, debe ser por UNA razón. —Su voz era ronca y terriblemente pesada. Tenía una ferocidad que nunca antes había experimentado o escuchado venir de él. De repente, incluso sus hombros se encogieron.
—Sabes que esto es tu responsabilidad. —Taehyung dejó escapar una frase que pareció ser difícil de pronunciar en ese momento. Su frente estaba llena de arrugas y sus cejas le estaban haciendo parecer como si fuera un hombre extremadamente peligroso. Luego, en el momento en que se tambaleó, hundió la cara en su cuello y dijo que olía muy bien.
—Oye, ¡Vete a la mierda! —Jungkook se aferró a él, incapaz de ocultar lo avergonzado que estaba por el escalofrío que le acababa de llegar e incluso descubrió que era difícil alejarse de sus brazos. Además de todo, porque lo seguía agarrando violentamente del cabello y de su cintura.
Cada vez que ponía su nariz en su cuello y respiraba profundamente, cada vez que frotaba el interior de su muslo con su pene rígido y cada vez que hablaba con él para decirle lo mucho que le gustaba, sus ojos comenzaban a ponerse terriblemente borrosos.
Una sensación de hormigueo surgió desde el interior mismo de su piel y entonces, lo mordió y la textura de sus dientes clavándose contra él fue bastante aterradora.
Sus piernas temblaron ante esa sensación que nunca antes había tenido. Fue difícil ponerse de pie correctamente e incluso sintió que iba a colapsar en cualquier momento. Entonces, Taehyung lo agarró suavemente al ver que se tambaleaba y lo sujetó como si fuera un muñequito.
—No... No te vayas. —Habló, pero luego hundió los dientes en su cuello y mordió su delicada piel de nuevo. Luego hizo lo mismo que al inicio, pero en un tono muchísimo más enojado que la primera vez —Me vuelves loco tan fácilmente que, no puedo. ¡No puedo controlarme cuando estoy contigo! Maldita sea, no me gusta ser así. —Sin levantar la cabeza, su voz se elevó hasta llegarle a las orejas.
Era como si hablara solo y como si él estuviera flotando muy lejos de allí. Jungkook puso los ojos en blanco. ¿Fue porque estaba demasiado emocionado, o fue porque lo empujó al borde de volverse loco? Hablaba como una persona completamente diferente. ¿Era solo por hablar? Lo mismo pasaba con su comportamiento rudo que ni siquiera mostraba un poco de modales. No importaba lo loco que estuviera, por lo general era muy educado.
Ahora que lo veía, podía decir que esta era una doble personalidad extraña que él mismo había desatado.
—Espe... —Estaba tan sorprendido que ni siquiera podía gritar. Todo lo que lograba hacer, era respirar levemente mientras Taehyung lo sostenía entre sus manos. Lo hubiera escuchado o no, ni siquiera respondió o hizo algún sonido. Simplemente levantó los dientes y lo mordió violentamente de nuevo y no solo hizo eso, incluso chupó y chupó hasta hacerlo sentir como si su piel se estuviera desgarrando bajo su boca.
—¡Umm...! —Un extraño gemido escapó de su garganta. Sus genitales se frotaron violentamente entre los apretados muslos de Taehyung y sus manos sujetaron con tanta fuerza su espalda que parecía que deseaba fundirlo con su propia piel.
La cabeza de Jungkook se inclinó en su dirección tanto como pudo y, olvidando que Taehyung era quien lo sostenía, inconscientemente extendió la mano y lo sujetó como si quisiera darle un beso en el cabello...
Ese fue el momento en que todo se echó a perder...
Había un olor levemente irritante en la punta de su nariz. El aroma a perfume de mujer y el olor a alcohol. Cuando la esencia que había olvidado hasta hace un momento le llegó hasta el estómago, su mente medio oscura y medio adormecida brilló.
—El olor... Lo odio. —Jungkook gimió, con los dientes bien apretados, y le dio una palmada en el hombro que todavía estaba sosteniendo. —¡Vete —Cuando gritó con fuerza, Taehyung finalmente recobró el sentido. Levantó la cabeza, que estaba enterrada en su cuello y le mostró unas pupilas oscuras que estaban brillando muy peligrosamente. Era evidente que ese era un signo de disgusto por intentar interrumpirlo.
—Si haces que alguien se excité, tienes que asumir la responsabilidad.
—Si quieres que te arranque las pelotas, entonces sigue. —Ante las duras palabras de Jungkook, Taehyung exhaló.
¿Pero había dicho solo arrancar sus bolas? Incluso podía sacarle los ojos utilizando los dedos. Aquellos que intentaron meterse con él sin su permiso ni siquiera recibieron una advertencia antes.
—¿Por qué pareces tan ansioso? ¿Tu amiga con la que duermes y tú no tuvieron tiempo suficiente para follar?
"..."
—Solo me estoy portando bien esta vez, por lo que te debía en el pasado. Si no fuera por ti, hubiera estado perdido en el yate, lo admito... Ahora he pagado mi deuda así que ya no me toques.
Sin moverse, la mano de Taehyung, que lo tenía de la cintura, hizo un chasquido y se alejó lentamente hasta colgar a su lado. Luego retrocedió. Los ojos de una bestia no habían cambiado, pero la razón suficiente para saber cuándo retirarse parecía haber regresado.
—Me cuidaré por mi mismo, y estaré bien tanto si me das de comer como si no, así que no es necesario que te preocupes por mí.
Jungkook dio un paso lejos de Taehyung, quien solo lo estaba mirando sin decir una palabra. Luego, sin dudarlo, se dio la vuelta y se dirigió de inmediato a la cocina.
—No olvides encender el aire acondicionado. Si hay un Alfa entre los guardaespaldas de tu grupo, podría ser bastante peligroso para ti.
Dado que vertió una gran cantidad de feromonas en el cuarto, existía un riesgo suficientemente alto de que se filtrara por las paredes y si los guardaespaldas Alfa comenzaban a notar la feromona, habría más que un solo alboroto en la mansión. Odiaba incluso pensar en eso así que fue en ese momento en que se prometió a si mismo que tomaría unos cuchillos de la cocina y los tendría en su pantalón, por si acaso.
—... Lo haré. —Una respuesta tardía llegó desde atrás y de repente, escucharlo le dio sed.
Sin darse cuenta, tragó saliva por una garganta que se estaba sintiendo terriblemente seca y aun así, su sed pareció no poder apagarse nunca. Más bien, fue vertiginoso. Como si una corriente eléctrica hubiera corrido por su columna hasta hacerle sentir una reacción inesperada.
Confundido, Jungkook apretó los puños. Se obligó a moverse rápidamente para no mirar atrás y sin embargo, la sed repentina y desconocida persistía como si ardiera por todo su cuerpo.
—¡Oh, maldita sea!
Jungkook se volvió a dormir a última hora de la mañana y solo se despertó al final de la tarde, no se cepilló los dientes y empezó a maldecir todo el tiempo. Su reflejo en el espejo era terrible. Exactamente, en el lugar de su cuello, había un gran hematoma, como si lo hubieran mordido con fuerza, pero no era azul sino muy violeta.
Abrió los ojos de una forma exagerada e inclinó la cabeza hacia adelante ante el terrible color. Era así desde el cuello hasta los hombros, incluso pensó que tal vez lo habían golpeado mientras dormía. Miró los moretones con asombro y luego dejó de respirar al recordar lo que había sucedido la mañana anterior. Fue porque Taehyung, que estaba cubierto con sus feromonas, se apresuró a tomarlo como si fuera un animal.
—¡Ay, Dios mío! —Se miró fijamente en el espejo, con la espuma blanca de la pasta de dientes todavía en su boca. Pero cuando miró de nuevo, no solo había moretones, sino también marcas de dientes. El área cercana a su cuello estaba desgarrada, probablemente porque estaba tratando de masticar y por supuesto, un dolor punzante lo siguió cuando pasó las yemas de sus dedos sobre la piel hinchada.
—Este loco...
¡Debería haber hecho estallar sus bolas sin decirle que iba a hacer estallar sus bolas! Cerró el empaque de la pasta de dientes, enjuagó lo que estaba en su boca y lo escupió de inmediato en el lavabo y después de enjuagarse la cara, salió rápidamente de allí. Cerrando la puerta de una patada y avanzando por el pasillo como si corriera.
Bajó al primer piso y miró a su alrededor. El lugar estaba silencioso, pero no estaba vacío. Alguien se encontraba sentado en el sofá de la sala de estar.
Soo-Min.
—Jungkook, ¿Estás despierto? —Cuando dejó de caminar, claramente avergonzado, Soo-Min, que estaba leyendo, lo saludó.
—Sí.
Era difícil ignorarla y pasar de largo, así que se acercó a ella torpemente. Había bajado hasta aquí, diciéndose a si mismo que en cuanto viera a Taehyung lo enfrentaría por ser tan cabron... Pero inesperadamente se encontró con Soo-Min primero.
—Taehyung dijo que has estado ocupado los últimos días componiendo algo de música. Dijo que no te despertara.
Su excusa fue un asco, pero Jungkook no dijo nada.
—Creo que se preocupa mucho por ti. —Desafortunadamente, Soo-Min también hablaba tonterías. —Es la primera vez que lo veo pensar en alguien así.
Escuchar que se preocupaba mucho por él le hizo sentir incómodo. Solo había logrado adivinar sus acciones hasta ahora, pero era un hecho que su personalidad era muy cambiante.
—No es así.
Soo-Min sonrió suavemente.
—No sé. De hecho, me sorprendió saber que tenías una habitación en el segundo piso. Taehyung nunca deja que los forasteros entren al segundo piso. Ha pasado un tiempo desde que me conoce, pero no he subido allí ni una vez. Siempre me deja en la habitación de invitados en el primero.
No se veía particularmente triste, pero de alguna manera sintió que lo estaba.
—Ya.
En el segundo piso estaba su estudio personal. La mayoría de las empresas y laboratorios estaban llenos de equipos incomparablemente caros y de última generación. Además, había muchos programas desconocidos que estaba desarrollando personalmente. Así que entendía eso de que no dejara que aparecieran extraños. Sin embargo, podría decirse que todo esto era debido a las circunstancias especiales que había entre los dos y a que casi lo había forzado a ayudarlo. Porque para hacer lo que quería, tenías que entender su trabajo y aprender lo que él deseaba.
Sin embargo, a los ojos de Soo-Min, que no tenía forma de saber lo que estaba pasando, la situación en la que vivía un mero pianista en el segundo piso, donde no se permitía entrar a los forasteros, debió parecerle extraña.
—Creo que le gustas a Taehyung. —Soo-Min, que estaba todavía sentada en el sofá, lo dijo mirándolo a los ojos. Pero incluso si ella estaba equivocada, parecía estar firme en sus convicciones y honestamente eso estaba a punto de volverlo loco.
—Es un malentendido. —Sonrió y negó con la cabeza. —En realidad...
—Oh Dios, Jungkook. ¿Qué te pasó en el cuello?
Su cuello que había quedado oculta por su camisa, pareció quedar bien expuesta debido a su último movimiento. Soo-Min se levantó de su asiento y se acercó a él. —¿Estás herido? ¿Cómo te lastimaste tanto? ¿Aplicaste algún medicamento? ¿No se supone que deberías ir al hospital? —Sorprendida por los severos hematomas y cortes en su piel, extendió su mano.
Pero a pesar de que Jungkook evitó su toque, no pudo detener la mirada que estaba absolutamente fija en él. Miró hacia arriba y luego volvió a levantar la cabeza para encontrarse con la mirada de ella.
—Tienes marcas de dientes... Quizá ¿Fue Taehyung?
Una ligera vergüenza se apoderó de su rostro, como si se hubiera encontrado con algo inesperado, se cubrió el cuello con la mano y aguantó el dolor de su toque. En primer lugar, debería haberlo cubierto con una gasa antes de bajar, pero el problema fue que corrió imprudentemente pensando en encarar a Taehyung.
—Parece que te masticó... Auch ¿Estás bien? La saliva humana tiene muchas bacterias. Si dejas la mordida así como está, podría ser un desastre. Asegúrate de tomar un medicamento y aplicar un antibiótico también y si no te sientes bien, ve al hospital de inmediato.
Contrario a lo esperado, comenzó a hablar tranquilamente mientras examinaba la herida a la distancia. ¿Qué debía decirle? ¿Sí? ¿Gracias?
Soo-Min sonrió mientras él pensaba en eso. —Por lo general es una persona muy amable, debió ser por el alcohol. Mira la manera en que te dejó.
—Por lo general ¿Eh?
Si Taehyung solía ser amable, ¿Cuándo no lo era? ¿Se refería a los momentos en los que estaba tan emocionado como para perder la razón? ¿Ya lo había hecho con ella también o qué pasaba entonces con la muy maldita? Jungkook miró con resentimiento a Soo-Min, que conocía al Taehyung que "no era amable".
Cuando notó la mirada, ella se encogió de hombros.
—¿Dije algo extraño? En realidad, no sabía que Taehyung era así en la cama. ¿Debo decir que parece muy feroz ahora? Esto es completamente diferente de su apariencia contundente pero suave de costumbre. Nunca me hizo daño, entonces... ¿Qué pasó contigo?
De repente, la conversación se volvió fría. Era incómodo ver los malentendidos que Soo-Min estaba haciendo crecer alrededor de los dos, era como una bola de nieve que solo iba en picada.
—¡Oh, Dios mío! —Se tapó la boca con la mano. —No me digas ¿No durmieron juntos?
Jungkook se quedó sin habla por un momento. Su pregunta muy directa era vergonzosa, pero fue debido a la confusión que fue difícil dar una respuesta exacta a eso. Obviamente, tenía experiencia usándolo como consolador, pero era difícil decir que alguna vez tuvieron relaciones sexuales normales. Para ser precisos, solo tomó prestado su pene, no fue sexo. Por supuesto, no tenía idea de cómo se veía en la cama.
—Lo siento si te ofendí. Es solo que... La atmósfera entre ustedes dos era extraña, y pues, al ver que incluso dejó una marca de dientes en tu cuello, pensé que era seguro que habían tenido sexo. —Soo-Min se disculpó de inmediato, pero aún era difícil de creer.
Como era de esperarse, Jungkook inclinó la cabeza.
—Entonces, ¿Cuál es la relación entre ustedes dos? No importa cómo se mire, no pareces un pianista que simplemente fue invitado a actuar para él. Taehyung y tú deben estar confundidos con sus sentimientos porque simplemente dicen que no están en una relación cuando es obvio que lo desean un montón.
Claramente, era muy parecida a Taehyung en su lado descaradamente directo. Él nunca podría hacer una pregunta así.
—Eso es lo que me da curiosidad. Dices que no lo quieres así que ¿Estarías de acuerdo con su relación con otras personas? ¿Estarías bien si alguien más se estuviera mezclando con él?
No había nada que decir al respecto. Podía hacer esto y aquello porque en primer lugar ni siquiera eran nada. Pero era un problema que lo que pensaba se revelara incluso en la oscuridad.
—... Dios. Mira, Taehyung y yo nunca fuimos novios. Lo conocí por su hermano mayor, ahora fallecido, y él era un compañero de trabajo mío así que de una u otra manera comenzamos a coincidir. Como resultado, nos empezamos a frecuentar con la premisa de que no tendríamos una relación en primer lugar porque no había lugar para eso.
"..."
—De hecho, ambos pensamos que era molesto buscar a alguien más cada vez que... "Teníamos ganas". Así que nos encontrábamos casualmente cada vez que los necesitábamos, pero era solo eso, "sexo casual".
Jungkook la miró fijamente mientras ella respondía muy a la ligera. De hecho, era verdad que se trataba de una persona que se parecía a Taehyung en muchos aspectos así que obviamente comenzó a suponer que los dos se llevaban tan bien como para poder hacer eso. De repente recordó la frase: "amigos con beneficio." Taehyung lo dijo. No era un amante, sino un amigo con quién podía hablar casualmente y hasta acostarse.
Mientras murmuraba esto involuntariamente, Soo-Min estuvo de acuerdo con la expresión "amigos con beneficios."
—No salimos, solo nos veíamos cuando era necesario. Ni siquiera había una razón para juzgar si la otra persona encontraba una pareja o no. Es más divertido y no, nunca necesitamos ponerle una etiqueta a nuestra relación.
—Soo-Min agregó esto de inmediato. Pareció querer trazar una línea precisa en su relación con Taehyung.
—Ah, sí. Pues bueno. Muchas felicidades. —Jungkook no tenía la energía ni el interés de compartir estas historias inútiles.
A decir verdad, no los envidiaba ni estaba enojado ni le interesaba que fueran amigos que se veían solo para coger.
En lugar de sentir envidia, estaba pensando que realmente era mucho mejor jugar con el consolador que estaba en su casa, como antes. Para empezar, ni siquiera estaba interesado en él y bueno, estaba bien que él pensara que era mejor tener una pareja sexual que tener una sesión de una noche con él.
Sí, estaba perfecto.
Una palabrota volvió a surgir del interior de su garganta. No conocía sus pensamientos internos tanto como lo pensaba y pareció volverse peor cuando alguien le hablaba mierdas que ni le interesaban. Fue entonces cuando Jungkook, que había vuelto a sentirse disgustado, se tragó la grosería marca Dios que subió hasta la parte superior de su garganta.
—Taehyung es muy fuerte.
—A diferencia de antes, Soo-Min dejó escapar un suave suspiro y murmuró algo como esto. Quería salir de la conversación tan incomoda, pero al parecer lo atraparon otra vez.
—Desde el principio, supe que él no sentía nada por mí. Lo entendía, pero a medida que pasaba el tiempo... Me volví un poco codiciosa. Yo tenía muchas ganas de avanzar un poco más en la relación. De que, me mirara diferente...
"..."
—Pero nunca lo hizo, así que tuve que rendirme.
La expresión de su rostro mientras sonreía torpemente y jugaba con sus manos, era amarga. Ahora parecía estar mostrando sus verdaderos sentimientos así que Jungkook no supo qué decirle.
—Como sabía que nadie estaba cerca excepto yo, hubo momentos en los que me pregunté si me aceptaría si esperaba muy pacientemente. Pero parece que nunca fue una persona interesada en las mujeres.
"..."
—Fue un tanto en vano pero nunca fuí de las que se rendían. Aunque, incluso después de que me di cuenta de la situación, mi mente realmente no funcionó como yo esperaba. Fue difícil para mí el no seguir a mi corazón. — Su voz estaba llena de pesar.
Al parecer, aunque estaba fresca por fuera, estaba muy triste por dentro. Era extrañamente incómodo enfrentarse a ella después de eso. Además, no importaba cuánto lo pensara, no podía entender por qué ella le estaba contando esta historia justamente a él.
¿Por la manera en la que se despidieron cuando se conocieron la primera vez? ¿Era porque seguía pensando que tenía una relación especial con Taehyung? Si ese era el caso, entonces le gustaría abstenerse aún más de escucharla.
—... No sé por qué me dices estas cosas, la verdad. —Al final, dejó salir su enojo.
Soo-Min lo miró fijamente por un momento y luego se rió a carcajadas. —Es verdad ¿Por qué te cuento esta historia aún cuando es la primera vez que hablamos? —Negó con la cabeza y agregó —Es que pensé que estabas celoso.
—... ¿Yo?
—Porque... Me llevo bien con Taehyung y eso...
—¡¡Para nada!! —Soo-Min agitó la mano cuando Jungkook lo negó. Su actitud gritaba que mentía.
—Hablé contigo porque no quiero malentendidos. Por eso lo estoy mencionando así que, por favor escuchame. —Detuvo obstinadamente a Jungkook cuando pareció estar a punto de huir y continuó.
—Admito que sentí algo por Taehyung por un tiempo. Pero eso fue hace mucho... Ahora lo he dejado. Han pasado meses desde que nos vimos por última vez porque hemos estado ocupados en nuestros propios asuntos. Vine aquí por trabajo, pero si no hubiera sido por eso, no lo habría ni llamado.
—¿Realmente ya ha pasado un tiempo desde que lo viste? ¿Ayer ustedes dos, no...?
Ah. No quiso decir eso.
Sin que lo supiera, unas palabras tan estúpidas como esas surgieron de la nada. ¿Por qué fue eso? Se dio cuenta de su error y frunció el ceño.
Entonces los ojos de Soo-Min se agrandaron.
—Oh, ¿Pensaste que nosotros...? ¡Para nada! Salimos tarde, pero fue porque nos emborrachamos un poco. No, honestamente ya no tengo ese tipo de deseo por él. Quería beber y ya. Pero aunque Taehyung no es así, se puso muy extraño. —Soo-Min explicó esto con una extraña sonrisa en los labios. Jungkook solo la miró con desesperación.
Pensó que debería decir algo, pero no pudo despegar la boca y ahora, ¡Estaba explicando que no pasó nada entre los dos incluso cuando apestaban al otro! ¿Entendió correctamente o lo estaba jodiendo?
Curiosamente, su explicación apenas y se entendió a pesar de que estaban parados frente a frente y de que hablaban el mismo idioma. Sin mencionar que estaba oliendo el mismo perfume que Taehyung tenía, EN ELLA. Por supuesto que eso parecía más sospechoso que cualquier otra cosa ¿Pero realmente había dicho que nada había pasado entre los dos? Incluso parecía muy seductora cuando estaba a su lado ¿Y estaba diciendo que se negó a eso? De ninguna manera.
Por supuesto, le surgieron un montón de dudas que fueron hasta más intensas que al principio y al darse cuenta de eso, Soo-Min enfatizó repetidamente que no había pasado nada.
—Oye, es la verdad. No pasó nada... Me estuvo tratando como a una mujer menos atractiva que una piedra. Me duele la autoestima.
—Pero, el olor...
De repente, un pensamiento que había estado flotando en su cabeza se filtró como un diálogo externo hacia sus labios. Soo-Min se rió, igual a si hubiera escuchado algo muy gracioso.
—Después de eso, estaba tan borracho que no podía caminar derecho. No bebimos en la casa, sino en un bar que está a algunas calles de aquí. Lo metí en el auto, pero tuve que sujetarlo todo el tiempo porque su cabeza no dejaba de golpear el cristal y aunque yo no estaba tan mal, tuvimos un montón de problemas para entrar por la puerta.
"..."
—Seguramente lo viste "bien", pero estaba súper borracho. Después de un tiempo empecé a sentirme mal también, oh ¡Pero desperté completamente con el sonido del piano! Tocas muy bien. Mmm, lamento haber hecho una solicitud tan grosera en ese momento. Creo que cuando me alcohólizo tengo problemas para decir cosas educadas. —Soo-Min se disculpó una y otra vez.
De hecho, todo lo que había pasado esa vez fue una serie de sorpresas. Desde irse a tomar imprudentemente, llegar y comenzar a actuar como un estupido. Si sabía que estaba borracho. Pero no pensó que estuviera TAN borracho. Se veía perfectamente bien... Si no lo hacía caminar.
—Después de eso, mi memoria es confusa. Ni siquiera sé cómo entré en la habitación, me desmayé tan pronto como toqué la cama y me desperté cuando ya había salido el sol.
—Soo-Min debes tener cuidado siempre que bebas. Es peligroso.
—¿Estás... Enojado?
—¿Por qué lo estaría? —Jungkook simplemente negó con la cabeza ante su pregunta. Era engorroso explicarlo todo.
—De todos modos, no pasó nada. Así que no te preocupes.
—¿A quién le importa? —Una vez más, respondió con una expresión muy sincera. Entonces Soo-Min se encogió de hombros como si se estuviera dando por vencida esta vez. Pero incluso su apariencia era similar a la de Taehyung así que, por lógica, Jungkook frunció el ceño otra vez y se apartó.
—Vamos. No tengo otra razón para estar aquí. Vine a ver al "adicto al trabajo" porque me preocupaba que se estuviera tomando unas vacaciones después de todo lo que pasó. Quiero decir, temía que estuviera haciendo algo malo...
Realmente era una mujer que conocía bien a Taehyung. ¿Cómo supo que estaba haciendo algo malo para empezar? Sintió ganas de decir una excusa o hablar de cualquier otra cosa para dar por terminado el tema. Pero al contrario de lo que pensaba, no pudo abrir la boca.
—... ¿Jungkook sabes algo? ¿Taehyung realmente se quedó en casa escuchando el piano? Es que, es extraño. Yo diría que no es así en absoluto y creo que el dolor es algo que no puede quitarse rápidamente. De hecho, después de la muerte de su hermano, se ha vuelto un poco más raro.
Y fue más o menos cuando Soo-Min dijo eso, que la puerta de la entrada crujió.
—Me gusta descansar mientras escucho el piano.
Una voz pesada vino detrás de él así que, sin darse cuenta, sus hombros comenzaron a ponerse terriblemente rígidos. No hizo nada malo, pero extrañamente se sintió culpable ¿Era por mal interpretarlo e insultarlo? ¿Quién sabe? Pero fue un sentimiento hasta gracioso.
—Mientras trabajaba nunca me tomé vacaciones... Así que es cierto que parece raro que me esté tomando el tiempo para descansar ahora. Pero incluso después de haber venido hasta aquí para molestar, ¿Te das el lujo de llevar a cabo una investigación de mis antecedentes? ¿O qué es lo que estás haciendo? ¿Una entrevista de tu escuela?
—Taehyung preguntó esto fríamente mientras entraba a la sala de estar.
Sin embargo, Soo-Min solo saludó al hombre con una bonita sonrisa. Era como si no pudiera sentir el escalofrío de aire frío que se arremolinaba alrededor de él.
—¿Sabes? Parece que te estás volviendo buena en decir tonterías a mis invitados.
—¿Qué estás diciendo? ¿Crees que mis palabras pueden molestar a tu "invitado"? Más bien, fuiste tú quien mordió al pobre Jungkook y lo lastimó. Eso es demasiado, hasta para ti.
—Soo-Min lo regañó con fuerza, pero no podía decirse que hubiera borrado su expresión anterior. Al parecer fue muy natural para ella cambiar de tema y dirigir la conversación al momento exacto en que le hizo una gran herida en el cuello.
Jungkook se dio cuenta de lo que estaba tratando de hacer así que rápidamente levantó la mano y se frotó el cuello. No se sintió bien que pusieran toda su atención en él de un momento para otro.
Ante la reprimenda de Soo-Min, Taehyung se volvió y lo miró. Luego, con un gran paso, se apresuró hacia él. —Aparta tus manos. Déjame ver. —En su voz no había señal alguna de vergüenza o arrepentimiento.
Todo lo que hizo, fue con una actitud franca, como si estuviera haciendo una solicitud bastante casual y eso hizo más difícil que pudiera quitarse las manos de encima. Fue porque sintió como si hubiera perdido esta vez. Fue porque observarlo, lo hacía sentir extraño y emocionado pero a él pareció darle lo mismo. Es decir, no era gran cosa para ese tipo y su orgullo se lastimó al pensar que realmente solo lo había mordido por el calor del momento, después de todo, Taehyung no era un Alfa.
En lugar de quitar los dedos que cubrían su cuello, lo miró y la obstinada reacción del hombre hizo que Taehyung pareciera enojarse todavía más.
En un instante, sus muñecas quedaron atrapadas con sus dedos y, al momento siguiente, sus manos se levantaron en el aire con una facilidad que hasta dio miedo.
—¡Oye!
—Te dije que me dejaras ver.
El calor se apoderó de su rostro. Hizo un gesto para sacar la mano de Taehyung e incluso comenzó a retorcerse, pero él agarró descaradamente su muñeca y miró la parte expuesta de su cuello con muchísima atención. Pero su expresión, mientras observaba las cicatrices, los moretones rojos, negros y esas marcas de dientes, seguía siendo indiferente.
—Sería mejor ponerte un poco de medicamento.
—Murmuró en voz baja.
—Por supuesto que debes hacer eso ¿Cómo puedes morder a alguien así? ¿Eres una bestia? Si es posible, llévalo al hospital. ¡O llama a su médico de inmediato!
—Soo-Min volvió a criticar a Taehyung desde un lado.
Jungkook, que había olvidado por completo el hecho de que ella estaba todavía allí, tomó conciencia y endureció su expresión... Pero Taehyung ni siquiera apartó la mirada de la suya. Era como si no hubiese escuchado sus palabras porque ni siquiera le respondió. Solo le dijo que lo siguiera, después se dio la vuelta y lo llevó con él.
Luchó por no seguirlo, pero no tenía talento para resistir el poder de esa enorme mano. Era como una res conducida al matadero por un verdugo que se lo llevaba a rastras. El chasquido de la lengua de Soo-Min se escuchó débilmente desde atrás, pero eso fue todo.
—¿Adónde vamos?
Jungkook fue llevado nuevamente al segundo piso pero Taehyung no abrió la boca en todo el tiempo en que estuvieron caminando por allí. Luego entró en la habitación que le había dado y lo sentó en el colchón, se acercó a la cómoda, abrió el cajón y sacó una pequeña caja de medicinas que estaba detrás de unos calcetines.
—Guardo los medicamentos en ese cajón, así que puedes tomarlos siempre que los necesites. Haré todo lo posible para evitar que esto crezca.
Ya que descubrió que lo había traído al cuarto para decirle dónde estaba el botiquín, de repente sintió una extraña sensación de decepción. Dejó escapar un largo suspiro y se limpió las esquinas de los ojos con la palma de su mano. Luego, bajó la cabeza y desvió la mirada una vez más.
Taehyung abrió la caja de medicinas y apretó un botecito de desinflamatorio en un hisopo de algodón.
—Lo haré yo, así que sal.
—Su voz se arrastraba debido a la falta de energía. Ni siquiera tenía la paciencia suficiente como para soportarlo o las ganas de enojarse con él. Aún así, cuando extendió su mano temblorosa para recibir el hisopo empapado en medicina, Taehyung lo apartó.
—Inclinate un poco.
—… Dije que lo haré yo.
—¿Qué? ¿Con esas manos de anciano con parkinson?
—Oye, idiota. ¿Si ubicas que lo estoy pasando mal y es por tu culpa?
—Entonces deja que yo lo haga. Gira tu cabeza.
De verdad estaba cansado de discutir. Con el deseo de hacer que todo se acabara pronto, volvió dócilmente la cabeza hasta revelar una bonita y delgada nuca bajo la brillante luz del sol. También era prominente esa gran herida que conducía a su brazo. Las cejas de Taehyung, que examinaban cuidadosamente esas marcas que parecían las mordidas de un animal, se retorcieron y se elevaron. Fue un cambio que Jungkook, que estaba volviendo la cabeza en la dirección opuesta, no pudo notar.
"..."
Que un hombre con un físico majestuoso sostuviera un pequeño hisopo de algodón y aplicara suavemente la medicina, era una locura. Incluso estando frente a su cuerpo, no podía imaginarlo.
Jungkook giró levemente la cabeza para espiar lo que hacía, estaba aplicando la medicina meticulosamente con una expresión bastante seria. Después de eso, colocó una gasa encima y luego, una venda, parecía un tratamiento para un paciente gravemente herido aunque simplemente estaba hinchado por haber sido mordido y chupado. Se quitaría, así que lo que estaba haciendo era exagerado.
Por supuesto, se olvidó de que había sido él quien salió corriendo a buscarlo para empezar.
—Dime si te sientes incómodo o si tienes fiebre. Puede que tengas que ir al hospital.
—Parece que me mordió un perro. —Jungkook volvió la cabeza ante lo ridículo que se había escuchado. Sin embargo, al momento siguiente, el rostro de Taehyung llenó completamente su visión porque, como un idiota, se había olvidado que estaba cerca para examinar y vendar sus heridas y para su mala fortuna, tenía ese rostro hermoso a tan solo centímetros de él.
—Sí. Realmente fue un perro... —Nuevamente se sorprendió con su tono de voz. Era difícil saber si se estaba burlando de si mismo o no, porque era demasiado casual frente a él.
La mirada de Taehyung todavía estaba fija en su cuello así que podría mirarlo un poco más tranquilamente: Cejas oscuras y ojos profundos, pestañas largas, nariz y barbilla afilada, labios abultados en forma de corazón y una línea de mandíbula realmente hermosa.
—No es justo. —Las palabras inconscientes de Jungkook se dispersaron en silencio. Entonces Taehyung levantó los ojos y lo miró.
—Es injusto ¿Qué quieres decir? —Preguntó, pero Jungkook no podía permitirse el lujo de responder: "Es injusto que seas inteligente, rico e incluso guapo". "Es injusto que yo sienta esto por tí..."
—Solo…
—¿Solo qué?
—Soo-Mim me contó sobre ayer así que ¿Por qué no dijiste que estaba equivocado? Cuando te reclamé. —Taehyung, que lo miraba en silencio, levantó la comisura de la boca hasta dibujar una sonrisa.
—¿Por qué te importa tanto si me acosté con ella anoche o no?
Jungkook se sorprendió por la pregunta que le hizo.
No era que le importara ¿O sí? Entonces, ¿Estaba enojado? Tan pronto como dijo que no se había acostado con ella, incluso pidió que se lo confirmara.
¿Por qué?
Era extraño, incluso él lo sabía. En el momento en que fue consciente de eso, un sonrojo terrible le subió a la cara hasta hacer que incluso los lóbulos de sus orejas quedaran muy rojos. Levantó la mano y se tapó la boca. Realmente no tenía nada que decir. Parecía estar reaccionando exageradamente a todas las tonterías que hacía o decía.
—¿Es eso posible? Yo nunca... —Habló en voz alta para ocultar su vergüenza, pero el tono de su voz era tan borroso que hasta pensó que estaba enfermo. Frunció los labios, como si ahora pudiera estar un poco más consciente de todos sus sentimientos internos.
—Sí, no importa. Por eso hago lo que quiero hacer sin preocuparme por lo que vayas a decirme. —La voz de Taehyung se volvió aún más baja. Su mirada se posó una vez más en el cuello de Jungkook y ahora, comenzó a acariciarlo lentamente con la punta de sus dedos hasta hacer que se le pusiera la piel de gallina. Incluso si estaba envuelto en gasa. —... Pero todavía no sé por qué hice esto ¿Por qué reacciono así cuando estoy contigo? —Sus palabras, como en un pequeño susurro, no estaban destinadas a ser dirigidas a Jungkook. Era como si se estuviera haciendo la pregunta a si mismo.
Jungkook se frotó la comisura de la boca con la palma de la mano, y lo miró de nuevo. "¿Qué dijiste?" Quería preguntarle, pero en el momento en que vio sus ojos oscuros, se quedó sin palabras. Una luz peligrosa brilló sobre sus pupilas oscuras, que se habían hundido. Anoche, el reflejo en sus ojos le hizo pensar que era una persona completamente diferente.
—Jungkook...
—Taehyung...
En el momento en que su nombre se deslizó de la punta de su lengua, Taehyung levantó la mano que había estado vagando por el cuello de Jungkook. Luego, inmediatamente se paró así que hizo que el borde de la cama temblara levemente. —Lo voy a decir aunque sé que ya lo sabes, pero es mejor que no hables demasiado con Soo-Min.
El cambio de tema fue tan repentino como levantarse de repente. Incluso el tono que parecía advertirle sobre ella hizo que se avergonzara un poco.
—¿Qué?
—A veces, cuando hablamos, salen a la luz cosas que no deberíamos decir.
Su voz se deslizó silenciosamente por la habitación así que Jungkook reflexionó en silencio sobre sus palabras y se frotó la frente como si tuviera muchísimos problemas con él.
—¿Quieres decir que no confías en mí?
—No, confío mucho en ti. Sería más exacto decir que no confío en ella.
El movimiento de la mano, que frotaba su frente, se detuvo de repente. Ni siquiera podía parpadear. Aunque eran simplemente una pareja sexual, se conocían desde hacía mucho tiempo. Además, Soo-Min incluso había dicho abiertamente que estaba enamorada de él ¿Pero no confíaba en ella? Fue bastante sorprendente.
—¿Por qué?
—Era la exsecretaria de mi hermano, pero ahora es la secretaría de mi enemigo. Es más, él la había querido durante mucho tiempo. Ha pasado casi un año desde que ese bastardo tenaz hizo todo lo posible para quedarse con ella y no puedo saber qué pasó entre los dos mientras tanto.
En lugar de responder, Jungkook se limitó a mirarlo en silencio. Las relaciones humanas eran más complejas de lo que pensaba y por supuesto, lo era mucho más porque él mismo, tenía relaciones mucho más pobres que las de la gente común.
—Si me pregunta por ti, es porque seguramente quiere información sobre tus proyectos ¿Es eso lo que quieres decir?
—Exactamente. No sé que tan sincera sea conmigo o lo que quiera hacer entre los dos. Mira, le ofrecí quedarse como secretaria del nuevo presidente para que buscara su información, pero, de hecho... Yo no la he sentido muy... honesta, solo le gusta hacerse la "buena amiga".
—¿Sospechas que es una agente doble?
—No tengo pruebas... Pero tampoco tengo dudas.
Jungkook dejó escapar un largo suspiro. Tal vez fue por esa razón que tuvo una actitud triunfal al decir que tenía algo que decirle a Taehyung y Jungkook no tenía la intención de involucrarse en algo tan complicado como esto.
—Mira, odio relaciones tan complicadas. ¡Ni siquiera coincide con mi temperamento! Así que, si va a ser así, ni siquiera pienses en incluirme. Solamente voy a ayudarte en lo que quieres y se acabó. —Cansado de eso, Jungkook se paró a un paso de distancia y lo miró fijamente. Por un breve momento, sus miradas se encontraron una vez más.
No tenía sentido, era solo un gesto casual... Pero pareció difícil despegarse el uno del otro. Era una sensación incómoda y extraña.
—... No comiste ¿Verdad? Haré... Un desayuno y un almuerzo especial para las personas que se despiertan tarde. —Fue Taehyung quien habló primero. No solo eso, sino que tomó medidas para salir de la habitación por completo como si de pronto estuviera ansioso por desaparecer.
Jungkook que lo había estado mirando a lo lejos, negó. —No tengo hambre.
—No, créeme, es mejor que comas bien porque tengo mucho que hacer en la tarde. —Taehyung habló sobre su horario con una voz tranquila y un tono bajo que no pareció diferente de lo habitual. Era simplemente, un hombre aburrido que actuaba como si nada hubiera pasado. Igual a si no recordara nada de la batalla que habían tenido ayer.
—Está bien, puedo aceptar que me pagues con comida.
—Jungkook también fingió no enterarse de la pelea y dijo esto con mucha arrogancia mientras le daba la espalda de nuevo. Taehyung asintió con la cabeza como si lo supiera, luego se giró y salió de la habitación primero. La figura que llenaba sus ojos desapareció en un instante y una quietud silenciosa flotó sobre la habitación que estaba deshabitada.
Había algo... Solo algo que era un poquito...
Los sentimientos incómodos y vergonzosos surgieron por un momento, luego desaparecieron y terminó con él rascando su mejilla. Luego, solo bajó la mano y se acarició el cuello. La gasa que le había colocado cuidadosamente fue tocada por sus dedos una y otra vez. No hacía falta decir que la sensación de sus manos, frotando lentamente sobre la gasa, aún persistía con muchísima claridad. Fue una sensación de cosquilleo con un extraño calor.
Jungkook movió su mano siguiendo el sutil hormigueo, e inmediatamente dejó salir un suspiro poderoso que flotó en el aire.
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