—Mirando cómo te ves, más pareces un playboy que un tipo con doctorado en Ingeniería. ¿Eres un desarrollador de programas? Pues muéstrame.   

—De acuerdo, pero más tarde.

—¿Por qué más tarde?

—Vamos a trabajar juntos, en mi casa.

—¿Estás loco o qué? ¿Por qué tengo que seguirte a un lugar que ni siquiera conozco? —Jungkook hizo un ruido extraño y se tocó la frente.

Le palpitaba la cabeza a causa de las secuelas que había tenido debido al accidente automovilístico y también le dolía muchísimo todo el cuerpo.

Ahora era muy difícil para él incluso mover un dedo así que, como si lo supiera, Taehyung dejó escapar un largo suspiro y también se quejó. —Yo también estoy ansioso. Porque tengo que confiar en ti y revelarte todo lo que hago incluso conociendo que eres un verdadero dolor en el trasero.

—¿Pues qué estás haciendo?

De alguna manera, no tuvo un buen presentimiento. Incluso si las cosas ya estaban torcidas, podía decir con completa honestidad que se sentía como si las cosas estuvieran viajando hacia un rumbo peligroso ¿O es que sentía que era peligroso que estuviera involucrado con un nerd que parecía un modelo? Bueno, eso si lo que decía de ser doctor e ingeniero era cierto.

—¿Por qué estabas en el crucero de hace tres años?

—Porque era una fiesta en la que funcionarios de la industria militar y de defensa se reunieron para compartir planes de acción.

—... ¿No era una fiesta benéfica?

—Esa era una excusa. Pero en ese momento ni siquiera sabía que eras miembro de la familia Jeon.

—Oficiales militares...

Se vio obligado a asistir debido a las órdenes de su abuelo pero, ¿Eso significaba que siempre fue el propósito compartir planes de acción? Si ese era el caso, entonces Yoongi debió haber conocido la verdad. ¿Ese bastardo retrasado lo engañó de nuevo? Habían pasado tres años pero, cuando se enteró de la verdad sobre la fiesta benéfica de ese día, apretó los puños y se mordió la boca. Cuando regresara, definitivamente golpearía a Yoongi hasta el punto en que sus hijos no lo reconocerían por un mes.

—Te diré la explicación exacta en cuanto me digas que vas a aceptar el trabajo. Hasta entonces, todo lo que necesitas entender es que soy un investigador de un programa relacionado precisamente con asuntos militares. La prueba está en que estuve en la fiesta.

—Se suponía que las personas formalmente invitadas vestían disfraces. Pero tú no lo hacías. ¿Cómo voy a creer que eras un invitado? —Cuando Jungkook preguntó esto, Taehyung se rió.

—Tu memoria no es mala. Si puedes recordar la ropa que estaba utilizando hace tres años ¿No significa que estás muy interesado en mí?

—Te falla la cabeza ¿Verdad? —Jungkook se mostró indiferente a su ridícula pregunta. Taehyung levantó las comisuras de los labios y sin embargo, pronto borró su expresión inicial y comenzó a hablar en voz más bajita.

—A decir verdad, me vi obligado a ir. Sentí que no había lugar para mí en ese lugar así que me negué a disfrazarme. No estaba de humor para encajar en un juego tan infantil como ese.

—¿Por qué te forzaron?

—Incluso si estoy relacionado con la industria militar, la mayoría de la gente a bordo eran empresarios. No me pareció un lugar para que asistiera un investigador como yo y bueno, ya ves. Terminé subiendo al crucero por órdenes del director ejecutivo de mi plantel.

La voz de Taehyung se había endurecido sin darse cuenta y por alguna razón, su expresión también se volvió increíblemente más oscura y pensando que era algo que no debería estar viendo, Jungkook movió la cabeza para otra dirección.

No pareció que estuviera mintiendo. No sabía por qué, pero estaba completamente seguro de que este tipo no era de los que se movía imprudentemente. Aún así, su perfil académico era muy difícil de tomar en serio. Si lo que decía era cierto, quería decir que había estado viviendo toda su vida estudiando y haciendo pruebas con... Esa cara y ese cuerpo tan... DELICIOSO. No, no importaba cómo lo pensara, no tenía sentido. Las mujeres no podrían haberlo dejado en paz.

—Dame tu computadora. Te buscaré. Puedo averiguar rápidamente si lo que dices es cierto o no. —Jungkook, que lo había estado contemplando durante mucho tiempo, pidió esto abruptamente. Ya que no lo creía, pensaba que debía buscarlo y comprobarlo por cuenta propia.

—Lo siento, no tengo una computadora en este momento. —Pero su respuesta no fue la esperada.

Jungkook frunció el ceño
—¿Por qué alguien con un doctorado en ingeniería o...? Mejor aún ¿Por qué un pirata informático no tiene una computadora cerca?

—Ya te lo dije. Porque esta no es mi residencia. Es solo una casa alquilada temporalmente para traerte aquí. Entonces, si lo deseas, puedes buscar si...

—¿Si voy contigo? —Cuando  Jungkook hizo esta pregunta, el hombre asintió tranquilamente con la cabeza.

—Hay instalaciones allí bastante bien equipadas, por lo que puedes encontrar la información que tanto deseas sin mayor problema.

—Oye, ¿Por qué tendría que ir? ¡Solo déjame!

—He ocupado mucho esfuerzo en secuestrarte. Si te dejo ir, será mi pérdida.

El hombre utilizó ahora la palabra "secuestro" bastante abiertamente y sin dudarlo. Jungkook chasqueó la lengua ante su comportamiento.

—Entonces, ¿Por qué no me llevaste allá desde el principio?

—Está un poco lejos. No sabía en qué condición estabas después del accidente y no quería llevarte hasta allí sin verificarlo antes.

—¡Aaaww ternurita! ¿Estabas preocupado por mí? —Las cejas de Jungkook se movieron hacia arriba.

—No, solo que aquí tengo medicamentos.

¡Al diablo con esto! Era un tipo con el que definitivamente no podía hablar. La ira surgió entonces desde su interior y también las ganas de golpearlo. Era muy raro encontrar a alguien tan difícil de molestar con sus palabras sarcásticas. También le ardía en la sangre que siempre estuviera tan tranquilo por la vida sin siquiera pestañear o sudar o algo ¿Quizá lo secuestró para cabrearlo? ¿¡Era su pasatiempo!? Jungkook levantó la mano y se tocó la cabeza. Necesitaba desesperadamente calmar su mente.

—Entonces, llévame a tu casa ya ¿Quieres?

—Tengo la intención de tratarte con el mayor respeto posible, siempre y cuando hagas lo mismo conmigo.

—Ajá, sí. Muy bonito y todo ¿Y si me niego?

—Ojalá no lo hagas.

Al sonido de su voz endurecida, la sangre fluyó por todo su cuerpo. Se sintió como si sus ojos estuvieran dando vueltas y la energía se le fue hasta llegar a sus pies. De cualquier manera, esto no era para nada algo como una broma. Después de todo, se sintió peligroso desde que lo chocó con un camión.

El hombre parecía muy terco y tenaz, como si no le hubiera dejado algún lugar por el que pudiera escapar. Claro, era mentira. Si deseaba, podía salir de su agarre sin que se diera cuenta, pero...

Jungkook, que se había estado mordiendo los labios, volvió a levantar los ojos y lo miró. —Digamos que no eres un estafador. Pero, doctor Kim. ¿Cómo estás tan seguro de que puedo hacer trucos en la computadora que tú no puedes?

—Taehyung.

—... ¿Qué?

—Soy simplemente Taehyung para tí. En público puedes llamarme doctor Kim pero, no tienes que hacer eso ahora por muy halagador que sea.

—¡Dios, dame paciencia si me das más fuerzas te lo mando! —Jungkook presionó las yemas de los dedos contra una sien que ya tenía en llamas y luego exhaló un largo suspiro.
—De acuerdo, Taehyung. ¿Crees que puedo hacer lo que tú no puedes? ¿Por qué?

Cuando se lo preguntó, Taehyung inclinó la cabeza.

—Para ser precisos, no es algo que no pueda hacer. Es algo con lo que no debería meterme.

—¿Algo peligroso?

—Creo que es algo que me están ocultando. —Taehyung se levantó y dio un paso más hacia adelante.
Jungkook, que lo miró medio tendido en la cama, tragó saliva sin darse cuenta y casi comenzó a temblar.

Fue porque se sintió increíblemente intimidante que un hombre con un físico tan majestuoso se le acercara de la nada. Con solo estar de pie, frente a frente, incluso se sintió como si estuviera siendo aplastado por él.

—Lo que tienes que hackear está dentro de nuestra empresa. No puedo tocarlo yo mismo sin dejar huellas. Van a saber que estuve allí.

—... Yo no...

—Ya tienes un historial de hackeo al FBI y a la CIA. Dado que puedes piratear agencias gubernamentales estadounidenses, no te será tan difícil piratear el sistema de una empresa militar. ¿No es así?

Jungkook se quedó sin habla por un momento. Había entrado en los sitios de inteligencia del FBI y de la CIA hace un año porque su primo Yoongi, quien siempre estuvo loco, trató de descubrir si Jimin tenía una identidad oculta, quien ahora era su esposo. Fue un truco que se llevó a cabo a pesar de que sabía bien que si lo atrapaban, moriría o iría a presión. Pero ¿Cómo lo sabía este tipo? ¿Había algo que no supiera sobre él? Quizá incluso conocía cuántos consoladores había en su habitación.

—¿Por qué diablos estás en esa empresa? ¿Qué piensas que están...?

—Quiero que veas un programa que yo mismo desarrollé. —Esa fue una respuesta aún más vaga. Si fuera un programa que él mismo había desarrollado, habría sido el resultado de mucho trabajo y él tendría que entrar y salir como si nada.

—Pero ya no es mío. Ese es el problema. —Taehyung murmuró esto lentamente y se inclinó contra él. Jungkook sintió que dejó de respirar... Debido a la distancia tan pequeña que tenían, cada palabra que pronunció se sentía claramente contra su piel. Era como sentir un suave vaporcito. Fue una sensación extraña porque nunca se había quedado sin palabras en ningún momento y ahora hasta le era extrañamente difícil producir un sonido. La sed pareció elevarse dentro de su garganta, igual a si su lengua se hubiese entumecido.

—¿Qué...? —Las dudas flotaron sobre las pupilas de Jungkook.

Taehyung, que estaba observando todos y cada uno de los cambios mínimos en su expresión, levantó los labios y susurró como en un secreto. —Me están robando. Están utilizándome. Están haciendo algo contra mi.
—Una voz pesada, seca pero inquietante, se transmitió hasta él como si se hubiera pegado a su oído.
—¡Ayúdame!

Al día siguiente, Jungkook abrió los ojos y comenzó a buscar su teléfono celular. Estaba sobre la mesa de noche así que no entendía cuáles eran las intenciones de Taehyung al secuestrarlo pero no dejarlo sin comunicación ¿Estaba en un lugar donde no podían encontrarlo aunque pidiera ayuda? ¿La señal no era buena? Sin embargo, irónicamente, el teléfono funcionaba maravillosamente bien.

Después de algunos pitidos, una voz que decía "¿Hola?" llegó a través del receptor. Estaba tranquilo, sonaba como de costumbre así que, de alguna manera, incluso su propio tono se suavizó.

—Jimin, soy yo. Llamé porque seguramente estabas preocupado por mí.

Quizá era porque nunca había llamado a alguien para hablarle sobre un problema, pero Jungkook había comenzado a sentir un montón de náuseas.

Una voz un poco más alta siguió inmediatamente por el receptor: —¿Jungkook? Dios mío ¿Qué sucedió? ¿Estás bien? ¿Estás herido? ¡Me preocupé demasiado por ti! Yoongi y yo estábamos asustados de que hubieras sido secuestrado.

—No, estoy bien. Realmente no es nada, no tienes que preocuparte.

Ni siquiera podía ver a Jimin, pero, sin saberlo, agitó la mano como cuando decía "No te vuelvas loco por nada, hombre." y luego se echó a reír. Aun así, no sabía que Jimin, que siempre estaba tan tranquilo y calmado por la casa, revelaría tantas emociones intensas solamente por él. Habló tan rápido que incluso se preguntó si era el mismo.

¿Yoongi estaría celoso de él por eso?

Cuando pensó en su primo gruñendo, con los ojos pequeñitos por llorar y preguntándose todo el tiempo por qué había sido tan idiota como para estar preocupado por él, la sensación de estar incómodamente instalado comenzó a mejorar. Jungkook apoyó su espalda contra la cabecera de la cama y sonrió.

Entonces escuchó a Jimin suspirar. —¿Qué pasó? El coche se partió por la mitad y el chófer quedó inconsciente y terriblemente herido. No estabas allí, fuí en persona y era como si te hubieras evaporado de la tierra. Al final concluimos que el secuestro era evidente y buscamos toda la noche desde ayer. —La voz de Jimin, explicando la situación, se volvió más calmada.

Aunque era evidente que había una pizca de cansancio instalado dentro de él. Pareció estar muy preocupado, moviéndose durante toda la noche incluso aunque no había pasado mucho tiempo desde que tuvo a su bebé.

Medio arrepentido y medio agradecido, sonrió.
—Lamento mucho haberte preocupado. De hecho, también me asusté cuando desperté en un lugar desconocido... Sin embargo, no creo que exista nada por lo que debemos alarmamos. Simplemente me dijeron que utilizaron ese método porque querían confiarme una solicitud personal.

—¿Quién te lo dijo? —La voz de Jimin parecía no poder calmarse y Jungkook, que estaba tratando de explicar la situación lo más a la ligera posible, se tragó todo su aliento. Su espalda estaba rígida y llena de sudor. Si tuviera que elegir a la persona más aterradora del mundo, definitivamente diría que era Jimin. Solía ser tranquilo y dócil, pero era muy consciente de que su verdadera naturaleza no era así en absoluto. Entonces, solo imaginando su enojo, incluso si no era una ira que estuviera concentrada en él, era hasta inevitable que se le erizara el cabello.

—Ah... Pues es... ¡Es alguien a quien conocía! Es alguien a quien... A quien conozco desde hace mucho tiempo y con quien fue difícil seguir en contacto. Sí. Dijo que lo sentía, de rodillas y todo. Fue muy conmovedor y yo lo perdone.

Por supuesto, el descarado secuestrador, nunca dijo que lo lamentaba o se arrodilló para él. Pero no tuvo más remedio que mentir porque tenía que calmar a Jimin.

—Eso sigue siendo un secuestro.

No funcionó. Jungkook se sintió avergonzado y volvió a agitar la mano.

—No, no, quizá fue un secuestro al principio pero... Pero ahora ya no.  Puedo irme cuando quiera pero, por ahora, solo quiero escuchar todo lo que tenga que decir.

—... ¿De verdad?

—¡Seguro! ¿Por qué mentiría? Si hubiera sido secuestrado y detenido, habría llamado a la policía de inmediato o habría pedido que me rescataran ¿No es así? Mira, hasta tengo mi celular. No te preocupes.

Sudaba profusamente por el nerviosismo. Nunca, NUNCA había estado nervioso con su primo Yoongi, con su abuelo o con sus padres, pero en el momento en que Jimin hablaba, sus hombros se ponían rígidos y terriblemente doloridos.

Era porque sabía que si decía una palabra incorrecta, iría sin importar lo que sucediera o lo que tuviera que hacer para lograrlo. Para ser precisos, era un hecho que Taehyung no sobreviviría al momento en que Jimin se dispusiera a atacarlo... Y definitivamente no deseaba que le pasara algo malo a él.

....

No, ¿Qué? ¿Por qué estaba tan nervioso por el tipo? ¿Tenía miedo de que el hombre que lo había estado molestando se muriera? ¿Estaba más preocupado de que Jimin matara al culpable que de lo que Taehyung podría hacer con él? Era una idea absurda.
Jungkook negó con la cabeza, tratando de borrar el sentimiento áspero que no podía entender y en ese momento, la tranquila voz de  Jimin lo despertó.
—Jungkook, si estás siendo amenazado y no puedes hablar, dame otra señal. Estoy listo para ir a rescatarte en cualquier momento. Ahora mismo.

—¡No! ¡Realmente no! No vengas.

La voz de Jimin era terriblemente pesada. Jungkook se sobresaltó y agitó su mano en el aire como un loco.

Imaginar que irrumpiera en el edificio y atacara a Taehyung... Era terrible. Increíblemente doloroso. Pero ¿¡¡¡Por qué!!!? ¿Por qué seguía preocupándose por ese hombre?

—Escúchame, estoy bien. Tal vez me lleve algo de tiempo terminar y volver así que por eso te llamé. No te preocupes y...  Dile eso también al loco de Yoongi. Regresaré pronto. Es una promesa.

—No es una mentira, ¿Verdad?

—Jaja, entiendo que vivir con Yoongi te hiciera dudar de todo pero, no es una mentira. Ah, y asegúrate de mantenerlo en secreto para el abuelo también. Debido a que está lo suficientemente viejito pues... Ya sabes, ya tuvo muchas preocupaciones innecesarias para toda su vida. Pobrecito. Lo terminaré pronto y volveré sin que lo note.

Jungkook, que había perdido energía por un instante debido a la extrañamente tensa llamada telefónica, se encogió de hombros por última vez. Jimin dejó escapar un largo suspiro mientras pensaba en lo que estaba pasando... Y en lo que tenía que hacer.

—Entonces llámame todos los días. Si el único propósito de ese hombre es que lo ayudes, entonces seguramente serás capaz de hacer al menos eso.

—Bueno, déjame preguntar y... Y lo intentaré.

—No olvides que Ji-Woon e Im-Sol te están esperando ¿Bueno?

—¡Oh por...! ¡No me hagas eso! Pensar en ellos hace que me den ganas de volver.

Al final, Jungkook sonrió ante las amables palabras de Jimin. Era una persona muy agradable. Con razón era lo más querido de su primo. —Gracias por preocuparte por mí.

—Eres de la familia. Es natural.

—Sí... Terminaré pronto. Asegúrate de saludar a Ji-Woon y decirle que lo extraño muchísimo y que lo amo también.

Jimin, que todavía estaba preocupado por su ubicación, se despidió con un "Vuelve pronto".  Y aunque no podía verlo, Jungkook asintió.

Cuando colgó el teléfono, descubrió que ya no tenía ni un poquito de energía. Incluso la mano que había estado sosteniendo el teléfono todo este tiempo, se cayó como si no le perteneciera a su cuerpo en primer lugar. Ni siquiera estaba seguro de si esto era lo mejor o... Si realmente había perdido la cabeza ¿No hubiera sido más razonable pedir ayuda y matar a un hombre que era tan arrogante y egoísta con él? Un suspiro escapó de sus labios.

—¿Era tu novio?

Un sonido contundente y grave se escuchó cuando apoyó la espalda contra la pared y miró fijamente por la ventana. Al volver la cabeza, un hombre con un físico magnífico y un rostro hermoso apareció de nuevo frente a él.

Jungkook frunció el ceño y negó con la cabeza. —De ninguna manera.

Entonces Taehyung entró lentamente en la habitación y lo miró. —No te creo, tu voz era tan dulce que solo pensé que era dedicada a tu novio.

Era difícil saber si era sarcástico o estaba genuinamente preocupado por la existencia de un novio en su vida. Jungkook sonrió.

—Claro... Y tú me conoces tan bien como para saber como hago mi voz para mi novio. —Dijo, arrojando el celular sobre la mesa.

—Al menos sé que no eres tan amable con nadie... Tampoco les dices que los amas. —La voz de Taehyung era suave. Jungkook se rió.

—¿Cuántas personas en el mundo pueden darse el lujo de ser amables con cualquiera?

—No alguien que apunta con un arma a una persona que esta descansando plácidamente y le ordena sacar su verga para poderlo violar. Por supuesto, los Omegas que le disparan a los Alfas que actúan como idiotas también son extremadamente raros.

—Ese momento debió haberte asombrado mucho. Siempre lo mencionas.

—Eso es correcto. Además, lo digo para que recuerdes que será difícil que conozcas a alguien como yo que te siga la corriente con el sexo.

—Aun así, no deberías juzgarme como quieras. Por lo general, soy una persona racional y también soy una persona amable con los que quiero.

De hecho, solo Jimin y sus sobrinos Ji-Woon e Im-Sol eran los únicos con los que mostraba ese comportamiento tan afectuoso. Sin embargo, podía ser amable con los demás si se lo propusiera... Y Taehyung era la bendita prueba de eso.

—Vale... No haré eso en el futuro.

Taehyung asintió lentamente. Era una respuesta tan amable que incluso comenzó a sentirse incómodo.

—Entonces, ¿Cuándo planeas terminar el trabajo? ¿Cuándo me llevarás a tu casa? No tengo mucho tiempo así que tienes que cooperar para que todo salga bien. Sigo sin creer en todo lo que dices, pero te voy a escuchar por ahora.

Jungkook rápidamente cambió de tema. La atmósfera que habían construido a su alrededor era tan desconocida como simplemente repugnante. Además, ahora mismo, en lugar de continuar con el tema sobre si mismo necesitaba saber qué quería el hombre.

—¿Desayunas conmigo? Para... Hablar.

Pero en lugar de responder a la pregunta, Taehyung le hizo una invitación increíblemente absurda. Jungkook miró hacia la ventana como lo había hecho antes de que él entrara. El gran cristal mostraba todo un paisaje, así de grande era.

La luz del sol era... Muy brillante.

—Es muy temprano... Me cuesta hacer cosas funcionales a esta hora.

—Ya veo.

—¿No puedes traer el desayuno aquí?

No era un mal día en absoluto... A excepción de que todo se estaba volviendo cada vez más problemático debido al dolor en su cuerpo. De hecho, este era uno de los malos hábitos de Jungkook. Para decirlo sin rodeos, se podría decir que era terriblemente perezoso. Ya que era molesto para él comer o bajar al comedor, hubo momentos en los que solo se sentaba frente a la computadora, muriéndose de hambre con tal de no mover uno solo de sus dedos. También era lo mismo con su ropa. Aunque había nacido en una "cuna de oro", siempre llevaba pantalones cortos, pantuflas y una camiseta raída que ya se estaba despintando de tantas puestas.

—Lávate el cabello ahora mismo antes de que los insectos salgan de tu cabeza. ¡Cochino! —sin Yoongi diciendo esto, sujetándolo por el cuello y arrastrándolo al baño, la suciedad de Jungkook hubiera sido inimaginable.

Afortunadamente, en estos últimos días y con la voluntad de no querer traspasarse los piojos de Ji-Woon, se duchaba todos los días y se obligaba a levantarse e ir al comedor a desayunar con Jimin... Pero su naturaleza perezosa no se había ido a ningún lado. Siempre era lo mismo. Ni siquiera pensaba seriamente sobre levantarse y salir de la cama y ahora, después de todo, ni Ji-Woon ni Im-Sol estaban allí de todos modos así que ¿Qué podía perder en realidad?

—Si no lo traigo ¿Qué vas a hacer? ¿Te piensas morir de hambre?

Jungkook, que ahora se había acostado de espaldas, cerró los ojos. Podía sentir la luz brillante incluso pese a sus párpados cerrados. Bostezó: —Ajá.

—No has comido nada desde ayer.

Entonces, Taehyung se acercó a sus espaldas y chasqueó la lengua como si pensara que su comportamiento era completamente ridículo.

—Um, ¿En serio?

—Desde que te traje ayer por la mañana, solo duermes. Te despertaste tarde, hablaste conmigo y luego te volviste a dormir. Te has estado muriendo de hambre durante todo un día desde el último almuerzo. ¿Estás diciendo que ni siquiera quieres comer?

¿Por qué estaba enojado este tipo? ¿Qué le importaba si comía o no? ¿Por qué este hombre se molestaba por él? ¿También pasaba hambre?

—Mira, he pasado hambre durante más días que estos y no me he muerto. Y ahora, ¡Me duele el cuerpo gracias a ti así que no tengo apetito! ¡Me es difícil hasta levantar mis deditos!

—Tan pronto como te traje ayer, verifiqué que todo estuviera bien en tu cuerpo. Me aseguré de que no hubiera heridas graves o huesos rotos. Los hematomas te harán sufrir durante unos días, es verdad... Pero no hasta el punto en que no puedas moverte. No seas mimado.

—¡Lo dices porque no fuiste tú quien tuvo un maldito accidente automovilístico! ¡Estoy realmente enfermo en este momento! Mejor ya ni me traigas nada. No lo voy a comer.

Jungkook no tenía intención alguna de levantarse ahora mismo, sin importar lo que dijera o no sobre él. Un largo suspiro se desvaneció sobre su cabeza.

—Puedo ver la razón por la que eres un costal de huesos.

—¿Quién dice que solo soy huesos?  Desde niño he estado en un peso normal y muy saludableeeeee ¡Hey! ¡¿Qué estás haciendo?!

Antes de que las palabras pudieran terminar, el cuerpo de Jungkook comenzó a flotar en el aire. Taehyung, que sostenía al hombre entre sus brazos con tanta facilidad como si hubiera levantado una muñeca de papel, comenzó a salir de la habitación con una expresión bastante extraña en su rostro.

—¡Oye! ¡¿Qué estás haciendo?! ¿¡Qué haces!? ¡Duele! ¡Duele te digo! ¡Pendejo ¿Estás sordo o qué?! —La cara de Jungkook se puso roja de vergüenza. Intentó luchar con sus extremidades pero debido a tantas magulladuras, no había forma alguna de que pudiera derrotar a un hombre con un físico tan sólido.

—Aunque eres un Omega, eres bastante delgado para ser un hombre. Incluso pensé que tu primo te estaba matando de hambre o algo así... Ahora veo que no estás comiendo porque eres un flojonazo.

—¡Me duele de verdad!

No fue una mentira, era muy doloroso y no podía moverse ni un centímetro. Su cabeza había comenzado a latir con fuerza y luego imaginó... Que posiblemente era cierto que no tenía energía porque no había comido en primer lugar.

—Soy un paciente. ¿Sabes? Soy la víctima de un accidente de tráfico ¡Debo ser llevado al hospital para ser examinado y hospitalizado! ¡Tengo derecho a un doctor!

—Como dijiste, eres un paciente, ¿No crees que uno debería comer mejor? —Preguntó Taehyung, sin reparar demasiado en el jadeante Jungkook. El sonido de sus pasos caminando por el pasillo resonó en sus oídos.

—Mientras estés conmigo, no puedo dejar que te desmayes por allí como si fueras un cadáver así que espero que te comas todo lo que te daré. Oh, y hazlo rápido. Nos vamos a mudar después de la cena.

—¿Vamos a mudarnos ya?

—Dijiste que no tienes tiempo que perder ¿No? Pues estamos igual.

—Esto es realmente una locura. ¡Yo no quiero hacer eso!

Hace un rato, le había dicho a Jimin que cooperaría porque quería aliviar sus preocupaciones. Sin embargo, no era como si quisiera hacer lo que este hombre le ordenaba tan fácilmente. Aunque tenía mucha curiosidad, todavía no podía creer lo que estaba diciendo sobre él. La "solicitud" que le hizo fue muy vaga también por lo que no podía simplemente decidirse o contestar.

¡Necesitaba algo de tiempo para pensar en la situación! Aunque evidentemente Taehyung no tenía planes de darle tiempo para hacerlo. ¡Estaba hablando como si no hubiera una razón para rechazar su solicitud en primer lugar! Ciertamente, era un ser humano desvergonzado.

—¿Quieres café, leche o té?
—Preguntó Taehyung, ignorando olímpicamente al enérgico Jungkook. Ya había puesto al hombre frente a la mesa y le había incluso pasado una servilleta para que se limpiara la boca.

Jungkook, que estaba sentado y sin zapatos, lo miró y luego dejó escapar un largo suspiro. —Café.

Sintió que había perdido contra él por alguna razón.

Cuando estuvo listo, le sirvió una tortilla de huevo con verduras. También un café aromático que acababa de preparar. Jungkook miró la comida por un momento. Mientras tanto, Taehyung tomó un plato y se sentó frente a él.

—¿Hiciste esto tú mismo?

—¿Por qué?

Jungkook lo miró como si fuera natural preguntar, luego negó con la cabeza y solo sostuvo el tenedor en la mano. —Solo creo que es sorprendente. Pareces del tipo que no puede cocinar en absoluto.

—Es un prejuicio otra vez y creo que es un mal hábito juzgar a una persona por su apariencia.

Desde anoche, lo había estado regañando por criticarlo solo por su apariencia exterior. Jungkook hizo un puchero mientras cortaba la tortilla.

—Ya. Lo siento. Eres la primera persona que conozco que sabe cocinar así que, estoy sorprendido.

Jimin, el esposo de su primo, era una joya maravillosa en todo el sentido de la palabra... Excepto que su comida eran puras barras de granola. Yoongi, su padre y su madre siempre habían estado ocupados con sus propios asuntos así que realmente fue la primera vez que alguien, que no fuera un cocinero o un ama de llaves, preparara la comida para él.

—No lo hago a menudo. A veces solo cocino cuando necesito enfriar mi cabeza.

—Para hacerlo solo a veces, sabe bien. —Jungkook murmuró esto con la tortilla llenando toda su boca. Por decirlo de otro modo, estaba realmente delicioso. Tanto que se preguntó si este hombre lo había comprado en secreto en algún lugar y estaba mintiendo para ganarse su confianza.

Jungkook inclinó la cabeza. Acababa de darse cuenta de que había sospechado de Taehyung desde la primera vez que lo había visto junto a él... Y era porque tenía un talento increíble para todo. Era realmente difícil de aceptar.

—Es bueno si te gusta. —Taehyung respondió con indiferencia y siguió comiendo. Jungkook lo miró por un minuto más: Sus modales también eran increíblemente impecables. No abrió mucho la boca, ni masticó en voz alta, ni rompió su postura erguida o mantuvo los brazos sobre la mesa. ¡Los platos ni siquiera traqueteaban! Cuanto más miraba, más elegante era.

—A mi abuelo le encantarías.

Jungkook, que estaba mirando a Taehyung, todavía con un tenedor en la mano, apretó la barbilla y soltó sus pensamientos de una manera completamente sincera.

Taehyung , que masticaba la comida en silencio, levantó los ojos. Sus pupilas eran de color castaño oscuro, como su cabello... Y lo estaban mirando con mucha claridad. El interior de su pecho tembló extrañamente debido a esto.

—¿El gran Señor Jeon?

—Ajá. Mi abuelo es muy estricto en cuanto a los modales .

—Eso está muy bien.

En el momento en que recordó a su abuelo,  enderezó la espalda por completo y bebió su café sin sorber, como si su vocecita molesta resonara en sus oídos. Fue el resultado de haber recibido una educación estricta desde una edad temprana.

—Pero... ¿Tienes salsa de tomate o salsa tabasco? O cualquier salsa picante que tengas. Cualquiera está bien para mí.

La tortilla se estaba enfriando hasta quedar a una temperatura adecuada para comer, pero pensó que era muy aburrido. Taehyung, que había dejado de moverse por lo que estaba escuchando, lo miró y negó con la cabeza.

—Desafortunadamente y como de seguro ya notaste, esto no es un restaurante y, te estuviste muriendo de hambre durante más de un día además. Las salsas irritantes en ayunas no son buenas para tu organismo. Por eso te hice una tortilla que fuera fácil de digerir.

"..."

—Significa que te calles y comas.

Los ojos de Jungkook se agrandaron. —Quien te viera diría que eres un verdadero cocinero... O tal vez mi médico de cabecera.

—¿Naciste en una casa rica y de todos modos el chef familiar no se ocupó de decirte lo importante que era alimentarte bien?

—Como lo que quiero cuando quiero. Entonces, doctor, por favor dale tus consejos nutricionales a alguien más. —Jungkook le lanzó un tenedor y maldijo el hecho de estar comiendo con alguien tan parecido a su abuelo.  Entonces, cuando dijo una grosería más, un trozo del huevo que estaba masticando salió disparado y aterrizó justo en la cara de Taehyung. Las pupilas del hombre se endurecieron.

—Ah... ¿Ups?

—Cuanto más te miro, más creo que tu estilo de vida es un desastre. Es difícil para ti comer y es difícil moverte. No has comido en más de un día y estás buscando estimulantes como café, ketchup y salsa picante. Esto debe parar.

—¿Qué te pasa bastardo? ¿No te estabas quejando hace un momento de que tenía bajo peso? ¡¡Y ahora no me dejas comer nada!!

—Mira, al menos mientras estés conmigo deberás de comer todo lo que te hago. Sin salsa de tomate ni salsa picante y, en el momento adecuado. Despierta temprano, come moderadamente y haz ejercicio. Sí, definitivamente tienes que ejercitarte. Si vives una vida tan miserable como esta, morirás joven.

Confundido por eso, Jungkook parpadeó y luego lo miró con los ojos muy abiertos. —Viva mal o no, muera o no, ¿Qué te importa a ti?

—Ya te lo dije, me importa porque estás conmigo.

—¿Y...? ¿Quieres criarme como un perrito de la calle al que recogiste?

—Ni siquiera había pensado en eso, pero no es una mala idea. ¿Y sabes por qué? Porque resulta que soy un excelente entrenador de perros.

Jungkook agarró el tenedor con todas sus fuerzas. Le temblaban las manos y los brazos porque quería aventarlo justo en esa hermosa cara suya. Sin embargo, Taehyung solo masticaba la tortilla, con una postura erguida y como si nada hubiera pasado en realidad. De repente, incluso le hizo perder toda su energía.

Se sintió como si hubieran estado peleando demasiado desde la mañana por un asunto estúpido y, pensando que tal vez todo se resolvería después de comer, Jungkook cortó la tortilla de huevo y se la metió completamente en la boca. Aunque quería discutir, la verdad era que su comida sabía increíblemente bien. No había salsa, pero el ligero sabor que se sentía en realidad no era nada malo y no sabía si eso debería hacerlo sentir más molesto o tranquilizarlo.

—Lo que sea que diga, al final da lo mismo. Digo, igual planeas hacerme trabajar. —Jungkook masticó y tragó su tortilla una y otra vez.

Había comido casi todo su desayuno, así que tenía que terminar de hablar sobre el trabajo antes de que se sintiera todavía más incómodo y no pudiera excusarse con el movimiento de su tenedor. —Sabes quien soy, y de todos modos no tuviste miedo en secuestrarme.

Aunque esta no era una situación agradable para él, era cierto que tenía muchísima curiosidad y en primer lugar, quería ver si todo lo que decía sobre si mismo era cierto o solamente se trataba de un señuelo para mantenerlo enganchado. Tenía curiosidad sobre lo que estaba haciendo antes de dar con él, quería saber qué programa estaba pirateando, que quería que rompiera y cuál era la historia detrás de todo el problema.

—Te traje porque no tengo tiempo que perder. Era lo único que podía hacer. —Esta vez, Taehyung respondió todavía más obstinadamente que al inicio.

Era una actitud recta que no había cambiado en absoluto en comparación con la noche anterior.
La lengua de Jungkook se crispó ante esa mirada y esa maldita expresión que mostraba una fuerte voluntad de tenerlo trabajando para él de alguna manera.

—Entonces, hagamos un contrato. Como dijiste al principio.

Taehyung arqueó una ceja ante las palabras tan repentinas de Jungkook. Sin embargo, antes de que pudiera responder, este habló de nuevo. —Tienes que saber esto, la palabra contrato no es apropiada para nosotros. Después de todo, me secuestráste a la fuerza y me encarceláste para que no tuviera más remedio que seguirte la corriente. Entonces, por supuesto, lo que te cobraré va a ser muy caro.

—Te daré cualquier cantidad de dinero que me pidas. —Taehyung se encogió de hombros, como si en realidad no importara.

Jungkook sonrió, volviendo a agarrar el tenedor para cortar su tortilla en trozos. —Vamos, mi tarifa por hora es muy cara. Además, como dije, es un trabajo peligroso así que voy a pedir una compensación por riesgos. Por supuesto, también voy a reclamar una indemnización por daños emocionales causados por el secuestro y el encarcelamiento y... Quiero también que pagues por el costo de reparación del automóvil que chocaste. Me dijeron que el conductor está en el hospital así que, debes pagar por todo su tratamiento. —Jungkook se metió la tortilla en la boca y comenzó a bajar los dedos por cada cosa que le estaba cobrando. Sus ojos, brillantes como los de un gato, estaban fijos en el hombre que estaba sentado frente a él.

—Haré lo que tú quieras.

Sin embargo, el tipo que continuaba comiendo simplemente se encogió de hombros una vez más. Luego, tomó un sorbo de su café y comenzó a leer las letras detrás del bote de azúcar. Incluso sosteniendo una taza o actuando como un tonto, podía decir que era un hombre bastante perfecto. ¿Por qué estaba sintiendo que el personaje principal de una película clásica acababa de saltar de la pantalla a su mesa? Es decir, era un sujeto guapo, con elegancia y porte. Jungkook lo estaba contemplando con tanto cuidado que inmediatamente negó con la cabeza.

—No ¿Qué te pasa? ¿Tienes mucho dinero? ¿Es eso? ¿Cómo me dices que me vas a dar lo que quiera? ¿Sabes cuanto pagarás? ¡Podría ser una cantidad astronómica! Ajá, ya entiendo el truco ¿Me estás diciendo que sí para olvidarlo después de que haga el trabajo?

—No... Como dijiste, te secuestré y te encarcelé en esta casa e hice que ni siquiera pudieras volver a tu hogar hasta que termines de ayudarme. Es lo justo.

Sus bromas no eran divertidas si no reaccionaba a ellas. Jungkook solo lo miró en silencio y luego revolvió su cabello para adelante porque estaba completamente avergonzado.

—Creo que he visto demasiadas películas...

—¿Qué película?

—Pues, ya sabes. Esas de mafiosos.

—Odio las películas.

—Lo mencioné porque pensé que ibas a matarme después del trabajo. Tal vez.

—¿Lo dices en serio? Yo no te mataría incluso si no cooperaras conmigo. Eso no es lo que soy.

Este tipo realmente era muy extraño ¿Cómo fue que pudo secuestrarlo siendo así? Cuando estaba a punto de morderse la lengua, Taehyung dejó escapar un largo suspiro y le mostró un rostro que se estaba oscureciendo otra vez. Incluso estaba sintiendo que era alguien con quien no podía comunicarse en absoluto... Tan similares el uno con el otro.

—Eres raro.

—No. Es solo que siempre pago un precio justo por el trabajo. Además, no soy una bestia o un animal. Si hubieras revisado correctamente tu correo electrónico o tus mensajes de texto, estaríamos haciendo negocios como caballeros.

—Naaa. Si no me hubieras "secuestrado y encarcelado", no habría estado sentado cara a cara contigo como lo hago ahora, me gusta el peligro. —Jungkook respondió, masticando nerviosamente la suave tortilla de huevo. Los ojos que decían que era ridículo eran tan intensos que incluso podía sentirlo en su corazón.

—Entonces fue la decisión perfecta. —Jungkook frunció el ceño ante las indiferentes palabras que le siguieron. —Ya sabes, porque conseguí que la persona que quería accediera a hacer lo que necesitaba. Fue un buen plan en términos de resultados.

—... ¿Qué pasa si estropeo las cosas? —Preguntó Jungkook, forzando a sus labios a bajar como si estuviera muy enojado. En su estado actual, pensó seriamente que podría arruinar el trabajo o hacer alguna estupidez que de verdad podría llevarlo a la muerte.

Entonces Taehyung dejó de tomar café y lo miró —No vas a hacerlo.

—¿Por qué estás tan seguro?

—Porque no puedes dejar que la carrera de la que estás tan orgulloso se rompa por algo como esto. Lo harás perfectamente, a la altura de tu reputación.

Cuando esa voz grave flotó a través de la mesa, su mente se puso en blanco y se sintió como si lo hubieran golpeado en la cabeza. Nunca se había quedado sin palabras delante de alguien, pero ahora no sabía qué decir.

Era extraño. Finalmente, empujó el plato de tortilla medio vacío hacia adelante. ¿Fue porque comió lo suficiente como para hacer desaparecer su hambre, o fue por sus palabras inesperadas que ahora ya no quería continuar? El apetito desapareció...

Siguió con la mirada la espalda del hombre que estaba retirando su plato. Abrió la boca impulsivamente y habló.
—Está bien. Digamos que me llevaste hasta aquí pensando en lo buena que era mi reputación o debido a nuestra relación pasada. Todavía quiero una compensación pero, no... Ya lo sabes pero, realmente no necesito tu dinero.

Taehyung volvió la cabeza mientras dejaba el plato en el fregadero. —¿Entonces?

—Págame con algo más divertido que el dinero.

—... Tienes que ser más específico. —Taehyung inclinó la cabeza como si estuviera interesado. Le había pedido que hablara más así que Jungkook sonrió.

—Vamos, es sencillo. Tú... Debes encontrar algo interesante y, dármelo como recompensa por ser un niño bueno. —Al contrario de su expresión seductora, su voz estaba llena de pura picardía.

—Umm... Ese "pago interesante" suena como una recompensa única.

—Por supuesto que lo es. Como dije, soy caro. Solo busco lo mejor. —Jungkook se tomó el café de una vez y dejó la taza sobre la mesa con la suficiente fuerza como para hacer el sonido de una explosión.
—Entonces, doctor... —Mientras se sentaba, cruzó los brazos e inclinó la cabeza en su dirección una vez más. —Incluso si descubriré más adelante dónde trabajas y qué programas has creado, debes informarme hasta cierto punto.

"..."

—¿Por qué quieres que destruya el programa que desarrollaste?

De hecho, supuso que sería difícil de explicar. Parecía ser peligroso, molesto y no querer hacerlo de inmediato. Sin embargo, siguió sintiendo tanta curiosidad que deseó saberlo todo. Entonces, solo tenía que escuchar primero y sacar sus propias conclusiones. Por supuesto, el hombre tendría que darle una historia lo suficientemente inteligente e interesante para asegurarse de que se aferrara a él y continuara ayudando.

Mientras meditaba, escuchó el sonido del "Ki-ik" de la silla cuando se empujó hacia atrás. Era Taehyung , levantándose de su asiento y arrastrando el mueble hasta raspar el suelo con él.
Jungkook se frotó ligeramente las manos y las entrelazó sin darse cuenta. Fue porque estaba nervioso por su mirada tan profunda e incontrolablemente fija en él. Era extraño, incluso. Sus ojos parecieron estar enfriando las yemas de sus dedos hasta el extremo en que se encogió de hombros para volverse más pequeño.

—Creo que tendré que traer más café para continuar con la historia —Su voz era tranquila y grave... Pero aún así, Jungkook tuvo un mal presentimiento.