Qué valiente es el hombre cuando reúne la valentía necesaria y decide zambullirse en la piscina, sin darse cuenta de que podría golpearse la cabeza contra el suelo de ésta.

Pobre Noah si solo se hubiese acercado a hablar como una persona civilizada, pero no en su rol de macho alfa prepotente, decidió gritar y sujetarme, pobre puto infeliz, perdón no tengo nada en contra de las decisiones sexuales de nadie, pero no te metas en mi camino y mucho menos vengas a gritarme.

El último que jugo su suerte gritándome, está enterrado en el fondo de mi antiguo departamento y jamás lo descubrieron, ya lo dije, Obsesiva sí, Estúpida no.

El dinero suple todo y tapa todo, por eso dicen que el dinero es la felicidad, por parte es así, si no no hubiese podido estar cerca de Hoseok.

— Pero quien carajos te crees que eres, pedazo de puto, en tu vida vengas a acusarme sin fundamentos Noah, perdiste conmigo sábelo.— lo increpe casi empujándolo.

Estaba hecha un demonio y lo fui acorralando contra el ventanal, toda la valentía que tuvo se le borró de la cara.

— Querés saber que pretendo, estás seguro?, solo te digo, no te metas en mi camino porque la vas a pasar muy mal Noah.— Escupía fuego de los ojos.

— Me estás asustando Lessy me puedo caer — dijo temblando.

— Oh ahora donde está el valiente putito que me enfrentó, que feo sería que la familia Jung se entere de tus elecciones sexuales y le caiga a tus primos toda tu porquería, porque acá en Seúl aún no se ve bien visto — reí ante su desesperación.

— No serias capaz — me fulminó él.

— No tientes tu suerte — le dije mientras lo empuje y pude ver en su rostro el miedo, no había imagen más excitante que el miedo en el rostro de las personas, lo tomé del brazo y lo deje que recuperara el aliento.

— No te metas conmigo jamás Noah, si no la querés pasar mal en serio, no te conviene tenerme de enemiga.— lo sentencie.

—Déjame ir Lessy— podía sentir el miedo en el aire.

— Vaya su real majestad, pero ya estás más que advertido maricon — me acerqué a darle un beso en la mejilla y abrirle la puerta del departamento.

Las semanas trascurrían lo más normal posible, Mejiwoo me había llevado nuevamente a su departamento a trabajar, me hablaba de su hermano, yo mentalmente ya lo sabía todo.

Llevaba días espiando a Hobi en su departamento, desde que se levantaba hasta que llegaba de su trabajo, amaba verlo con su pelo revuelto y su torso desnudo en las mañanas, perdido con la mirada en el horizonte con su café helado americano.

Las veces que llegaba el resto de los miembros, y las borracheras que se daban, era un sueño orgásmico de cualquier mujer, pero mi objetivo era claro y era Jung Hoseok, los demás no me interesaban.

Después de unos días planeando todo vi que había vuelto de una práctica en la empresa, estaba agotado y se tiró en el sofá.

Vi como poco a poco se iba desnudando y parecía que sabía que lo estaba viendo, porque mis ojos recorrían todo su hermoso cuerpo torneado y su aura Angelical que me excitaba aún más.

Sin pensarlo más tomé unas cosas del departamento y fui en su búsqueda.
Con un hoddie oscuro y un cubrebocas llegué hasta el palier del edificio y logré ingresar con la clave que había obtenido de hackear sus cuentas.

Llegué al piso e hice lo mismo y para mi suerte todo estaba apagado, solo la luz de la noche y el paisaje de Seúl me daban el paisaje más hermoso que había conseguido.

Jung Hoseok desnudo sobre el sofá dormido para mí.
Relamí mis labios y le susurré:

“Porque tuviste que aparecer en mi vida y llenarme de ilusiones”.

No me di cuenta cuando él se removió y antes de que abriera por completo sus ojos, saque del bolsillo el pañuelo embebido de cloroformo y me abalance sobre él, tenía fuerza, pero al tomarlo desprevenido solo forcejeo muy poco para luego caer bajo los efectos del químico.

Lo levanté del sofá y lo llevé a su habitación, había llevado unas esposas y lo amarre a la cama, además de atar sus piernas y esperé que despertará.

En este momento me sentía la peor persona que existe en el planeta tierra, pero quién me iba a quitar lo bailado, con la poca dignidad que me quedaba, estaba decidida a hacer algo y esto era violaria a Jung Hoseok.

Antes de que despertará me perdí en sus ojos dormidos, eran preciosos, como dos diamantes esperando a ser descubiertos, su cabello oscuro e inclusive su piel, me instaba a probar su dulce sabor.

Sin dudas era un perfecto dios griego que necesitaba que su diosa lo hiciera estremecer de pasión.

Poco a poco comenzó a abrir sus ojos y me aventure a colocarle el antifaz, aún quería que no sepa que era yo su verdugo. Su cuerpo se tensó y no fue inevitable sentir remordimiento por él en ese instante.

Sin exponerme del todo, tomé mi celular y le acerqué a su oído unas grabaciones moduladas que había preparado:

“Te sacaré la mordaza de la boca, si me prometes que no vas a gritar, pero si intentas hacer algo estúpido realmente lo vas a lamentar, ok?”

Vi como él asintió con su cabeza, lentamente le saque la mordaza de sus hermosos labios.

“¿Quién eres y qué Querés?” — “No me hagas daño, puedo darte una suma de dinero importante para que vivas tranquila el resto de tu vida”— su respiración era agitada.

Sonreí ante su tierno pedido y le acerqué el celular nuevamente:

“No te preocupes, si cooperas prometo largarme lo antes posible”

Vi como trago con dificultad y me dijo:

“¿Pero que es lo que quieres?”.

Sin responderle me postré encima de él.

“¿Pero que estás haciendo eres una sasaeng?”.

Mi feminidad quedó justo encima de su enorme miembro y pude sentir el roce del bóxer de él en mi entrada, me estremecí y graciosamente él hizo lo mismo.

Tome mi celular y se lo acerque al oído:

“Solo quiero una noche y me voy”.

“Perdóname, pero soy una persona comprometida, no puedo y no quiero”.

“Sé que estás comprometido con Irene, pero realmente no me interesa hoseok”.— Tape su boca y ya no lo deje decir más.

“Esta noche vas a ser mío colaborando o no”— me dije para mí misma.

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Estamos llegando a los dos últimos capítulos de esta loca historia, gracias por darme su apoyo se las quiere mucho

jingi86 💜🌛