—¿Pero mira a quién tenemos aquí? —menciona con notable sarcasmo la chica que se aproxima.

Shadow gruñe mientras reniega al ver a la chica delante de él. No puede seguir tomando su café en total soledad porque Rouge comienza con sus reclamos y despechos.

—A mi buen amigo Shadow —Rouge le sonríe con malicia mientras se sienta frente a él.

—No estoy de humor para tus bromas —le dice el erizo pasando la mano sobre su frente.

Ella menea levemente sus alas.

—Querido, pero si no estoy aquí para bromear —ella enmarca una sonrisa más grande—. Te he echado de menos en estos días, creí que como soy tu mejor amiga me llamarías para preguntar si estaría bien —pronuncia ofendida por la actitud de su amigo.

—No he tenido tiempo, no después de todo el alboroto que hizo Zokar —se excusa sin importarle sus reclamos.

Rouge lanza una leve risa.

—Si, precisamente de eso quería hablarte. Al parecer también hizo un envío especial para el comandante —dice ella colocando sus brazos sobre la mesa.

—¿Qué podría ser? ¿Más armas? —pregunta el erizo consternado.

—No, más bien es alguien. Y el comandante quiere que la tratemos bien.

—¿Sabes de quién se trata?

Rouge lanza un quejido, su sonrisa se borra de golpe al verse descubierta.

—Por primera vez, no tengo información sobre esa persona —dice avergonzada.

Shadow permanece en silencio, analizando lo que acaba de escuchar. En su mente se forman muchas incógnitas sobre ese envío y principalmente si eso lo podría perjudicar.

—Bien, tenemos que ser cautelosos. Ya conoces a Zokar, no te fíes de sus artimañas —expresa poniéndose de pie.

Rouge lo imita.

—Lo sé corazón, eres el único en el que confió y sabe el color de mi ropa interior —dice ella sin vergüenza.

Shadow niega porque irónicamente conoce como la palma de su mano a la mujer, han compartido tanto tiempo que ya sus insinuaciones no le causan ni malestar. Rouge era una chica tan desvergonzada en el sentido que con Shadow podía hablar de temas muy íntimos y hasta bromear de ello.

Dejan de lado la cafetería en donde se encontraban y ambos caminaron al mismo paso en dirección a la reunión a la que fueron citados. Llegan a un amplio cuartel en donde la mayoría de generales se encuentran esperando.

Cuando ambos entran al recinto, todos los presentes permanecen en silencio. Shadow y Rouge toman asiento en una amplia mesa mientras esperan a que su jefe. Rouge se inclina a un costado de Shadow mientras le susurra algunas cosas

—Tu esposo es bellísimo, hasta siento envidia de él.

Shadow la observa enmarcando una ceja. Sobre su rostro se puede ver una ligera pizca de orgullo, sonríe mientras desvía la mirada a su alrededor.

—Eres afortunado al tener a alguien como Sonic —Rouge se ríe al ver a su amigo—. Siempre quise verte feliz, y me alegra que hayas encontrado a alguien que lo haga.

Shadow la mira con incertidumbre.

—Eres mi amigo Shadow, y siempre voy a querer lo mejor para ti —menciona con sinceridad.

—Sonic es mi tesoro Rouge —le responde—. Y gracias por tus buenos deseos —le agradece mientras cierra los ojos.

Rouge se sonroja levemente, Shadow no es tan expresivo con ella, pero en ese momento se sintió realmente importante; iba a seguir hablando, pero todos se incorporan debido a que su general había llegado. El señor entra acompañado de una chica de color rosa con lentes.

—Buenas noches, tenientes, tomen su lugar —dice sentándose. La chica se limita a estar al lado del general—. Como sabrán, el señor Zokar está dispuesto a trabajar en el problema de los lobos y como muestra de ello, nos ha enviado a su mejor científico —con su mano señala a la chica—. Les presento a la señorita, Roselyn Rosse. A partir de hoy estará trabajando de la mano con nuestros agentes y especialistas.

—Un gusto —se limita a responder la chica.

Rouge la mira un poco extrañada. Ella es una erizo normal, usa lentes, tiene las púas largas sujetadas con una liga, no está tan desarrollada y parece que no duerme bien debido a las ojeras debajo de sus ojos.

—No es como si fuera la gran cosa —susurra.

—Rouge —la reprende Shadow.

Ella se encoge de hombros y se ríe.

El cazador la observa y también siente algo raro en ella, una vibra muy pesada y cuando eso pasa, sabe con certeza que debe tener más cuidado. La eriza se sienta al lado del comandante.

—Y ahora vamos a hablar sobre nuestro plan —el comandante cambia de tema—. Nuestra prioridad es y será siempre hacer prevalecer el orden de los mundos. Desde que se fundó esta organización nos hemos dedicado a mantener a raya tanto a los curiosos de las criaturas mitológicas y a las mismas criaturas. Sin embargo, durante los últimos años, los licántropos se han desatado a tal punto de volverse en un problema constante...

Rouge observa de reojo a la chica y por momentos se percata que la nueva chica observa al cazador.

—Y con respeto a lo que ocurrió en la pasada reunión, decidimos tratar de arreglar las cosas con los licántropos y que sea nuestro cazador él que guíe nuestros pasos en esta misión, por lo que pido a Shadow que manifieste su plan.

Shadow se incorpora sin demora.

—Los lycans buscan obtener algo más. Como mediador entre los dos mundos mi plan es ir directamente hasta ellos para llegar a un acuerdo y que de este modo se detengan. Por eso pido a los cadetes obedecer a toda orden que se les dicte, porque con esa estirpe nada puede tomarse a la ligera.

—Bien, me parece que el cazador sea quien encabece este plan. Mis tropas estarán en su total dominio Shadow y espero obtener buenos resultados.

Los demás invitados comienza a hablar sobre el plan y Shadow, solo sostiene un rostro serio y forzado. Por su mente no puede dejar de pensar en el bienestar de Sonic.

Su licántropo.

Pasaban las horas, y era relativamente tarde. Shadow y Rouge quedaron de último en el cuartel terminando de ajustar los detalles y recursos que usarían.

—Así que Zokar envío un presente, al menos pudo buscar una chica más linda —Rouge lucía decepcionada jugaba a dar vueltas en una silla de rodos.

Shadow apuntaba algunas cosas en una hoja y la dejaría allí para que en la mañana dieran las instrucciones.

—No te dejes engañar, por algo la envío. Y lo peor es que no tenemos ninguna idea —dice dejando de lado lo que hace.

Rouge se detiene y le mira coqueta.

—Déjalo en mis manos —le pide ella—. Soy experta desmantelando secretos y personas.

Shadow alza una ceja, no es que la chica sea fanfarrona, pero tiene razón en ello. Por eso se ha sabido mantener en secreto al menos algunas cosas.

—Bien, solo no digas cosas toscas... no queremos levantar sospechas contra Zokar.

Ella se ríe, él sabe que Rouge no se va a limitar en ello, pero más vale prevenirla. Mientras ambos platican, la puerta se abre y muestra a la chica que se une.

—Disculpen, buenas noches, creo que ya nos hemos visto anteriormente —dice ella acercándose.

Rouge se incorpora de la silla y se coloca frente a ella.

—Roselyn Rosse —dice coqueta— nunca te había visto antes y menos escuchado tu nombre.

La chica la mira seria.

—No soy de este lugar, vengo del otro lado del mundo... —le responde un poco cohibida—. ¿Señorita...?

—Rouge, Rouge The Bat para servirte en lo que gustes —le responde con amabilidad.

—Un placer señorita Rouge, usted ya sabe mi nombre —inclina la cabeza con respeto, sus ojos se dirigen al chico que se encuentra a unos pasos detrás de Rouge. El cazador la observa mientras se mantiene firme—. Usted debe ser... —ella pasa de Rouge y se acerca hasta Shadow para presentarse.

—Shadow —se presenta con simplicidad.

Rosy se queda quieta, siente un aura pesada proveniente del cazador.

—E-Es un placer conocer al último cazador de la historia, hablan mucho sobre usted y sus grandes hazañas. Déjeme decirle que soy una admiradora muy grande de su estirpe; eran grandes científicos, hicieron muchos avances en la medicina —dice nerviosa mientras baja la mirada.

—Gracias aunque supongo que ahora eso no es tan relevante —responde Shadow.

Rouge se acerca nuevamente a la chica.

—¿Rosy podrías decirnos qué es exactamente lo que haces? —le pregunta ella poniendo sus manos encima de los hombros de la mencionada.

—S-Soy una científica buena... estoy desarrollando un dardo en especial para calmar a cualquier criatura mágica que quiera atravesar la barrera mágica y que se pueda devolver al mundo mágico sin hacerle mayor daño —les explica.

Shadow la mira consternado e intrigado. De los pocos seres mortales que ha conocido solo existe uno que fue capaz de recrear en exactitud la fórmula de los cazadores para lograr eso.

—¿Es posible eso? ¿Cómo lo descubriste? —le pregunta Shadow muy sorprendido.

Rosy se sonroja.

—S-Sí, encontré una fórmula universal que puede dormir a las criaturas —se excusa—. Aun está en desarrollo mi teoría, pero al menos ahora encontré lo que detiene a los lycans.

Shadow y Rouge intercambian miradas cómplices.

—Eso es muy útil, podría ayudarnos —se mete Rouge.

Rosy eleva la mirada y sonríe.

—El señor Zokar me envío con la tarea de proteger al último cazador. Sé que su trabajo no es fácil, pero déjeme ayudarlo a que sea menos tedioso —le pide con ternura.

Shadow no puede confiar en ella, ahora menos.

—Gracias, pero no necesito ayuda, me gustaría que te limités a hacer solo lo que te piden —la corta directamente.

Rouge roda los ojos, y pensar que Shadow le pidió que no fuera tosca y él lo es.

—C-Claro señor Shadow, lo que usted diga. No quiero ser un obstáculo —dice ella claramente apenada.

Rouge ve como las palabras de Shadow han herido a la chica.

—Lamento tener que interrumpir nuestra reunión, pero Shadow y yo tenemos que irnos, hay unos detalles que debemos ajustar.

—Claro, no les quito más tiempo.

Shadow camina sin despedirse de la chica y sale del cuartel.

—Adiós Rosy, después hablaremos de chicos y de nuestros períodos, espero que se sincronicen —se despide Rouge mientras sigue al cazador.

Shadow solamente niega, su amiga Rouge, sabe como romper las barreras de la incomodidad. Ambos caminan en silencio y cuando están lo suficientemente lejos de cualquiera que los pudiese escuchar, Rouge suelta un pesado suspiro.

—¿También lo notaste? —le pregunta.

—Si, esa chica parece que será un problema —le responde Shadow.

—Menos mal, tú y yo sabemos todos nuestros secretos. Así que podemos encubrirnos —dice ella adelantándose.

Shadow permanece en silencio mientras sus pasos bajan de velocidad, obviamente eso era mentira. Pero allí el detalle, eso Rouge no lo sabía y no tendría que saberlo.

—Así es —finaliza sin mayor detalle.

[…]

Cuando Shadow era requerido para hacer misiones dormía en el cuartel. Había un apartado en donde ambos agentes descansaban, y tenía el tamaño de una modesta casa pequeña.

Rouge se encontraba recostada sobre el sillón de la sala de estar mientras leía algunas revistas y Shadow en otro sillón. Desde que llegó se sentó a pensar en lo que había sucedido; delante de él se encontraba esa arma que Zokar le obsequió.

—¿Sabes de algún componente en específico? —le pregunta a la chica.

Rouge deja de lado su revista, de entre sus pechos saca un pedazo de papel y se lo entrega al cazador.

—Parece que Rosy tiene razón. Solo tiene la capacidad para dormir a un lobo —le responde mostrándole los datos que investigó de esa arma.

Shadow lee lo apuntado, y se siente inquieto.

—Me parece curioso que alguien como ella pudiera descifrar esa fórmula. A mis antepasados les tomo años, incluso siglos perfeccionar algo como eso —arremete cansado.

—Puede que sea dotada. Ya sabes como tu padre —Rouge se acomoda en el sillón.

—Si Ivo es realmente una máquina de conocimiento, fue el único que pudo replicar mi fórmula.

Rouge suelta un suspiro mientras deja de lado las revistas. Se acerca un poco, no puede evitar sentirse nerviosa.

—Eres un cazador. Solo por esta ocasión me puedes decir que crees qué pueda ocurrir —le pregunta ella.

Shadow ignora el arma y se enfoca en su amiga. Es obvio que Rouge nunca se ha enfrentado a un problema de tal magnitud y su incertidumbre es mayor.

—El ambiente es desalentador. Por años he tratado de descifrar el propósito de los licántropos y no he podido. Desde tiempos remotos no existía una raza que se alzaba a excepción de los vampiros, pero con ellos se llegó a un acuerdo temporal —Shadow se incorpora mientras guarda el arma y se aleja unos pasos de ella—. Pienso que los lycans tienen algo más y esta guerra solo podría terminar con la muerte del alfa que los guía.

—Así que planeas acabar con él. Pero, ¿Qué va a pasar si eso no los detiene?

Shadow se mantiene sereno.

—La misión de un cazador es hacer prevalecer el orden de los mundos. Si una raza no se detiene, el único modo de asegurar el propósito es liquidándola, tal y como ellos lo hicieron con los vampiros.

Rouge se incorpora de golpe.

—N-No puedo creer que tengas corazón para erradicar a una raza completa —exclama sin poder creerlo.

Shadow se vuelve a ella.

—Por el bien de todos. Espero no tener que llegar hasta ese punto.

Ella se encoge de hombros.

—¿Ya pensaste lo que dirás mañana? —cambia su charla.

—No del todo, aún estoy pensando. No son estirpes muy racionales.

Y ambos quedan en silencio.

—Si te soy sincera, tengo miedo de lo que pueda ocurrir —retoma ella abrazándose a sí misma.

—Sea cual sea la situación, quiero que permanezcas lejos —le pide.

—Oh querido no te preocupes por mí —se apresura a responder, pero Shadow la mira sin expresión.

—Conozco al alfa, de hecho si conoces mi historia sabrás que fue él quien atacó a toda mi aldea y acabó con los cazadores —le dice dándole la espalda.

Rouge siente un escalofrío sobre su cuerpo, se aproxima al cazador y le toma del brazo.

—S-Shadow, si de verdad crees que esto va a acabar mal, es mejor evitarlo —le pide consternada.

—No puedo Rouge si lo hago, van a dar la orden de liquidar a todos los lobos que aparezcan. No todos son como Infinite. Es por ellos que estoy tratando de buscar la forma de detenerlo.

—Lo entiendo...

Shadow se aleja de su amiga mientras busca algo en su traje, luego se dirige a la puerta y sin verla le habla.

—Debes descansar, mañana será un día agotador. Estaré cerca —dice por último.

—Claro querido, dejaré sin seguro para ti.

Shadow sale de ese lugar mientras saca unos cigarros para fumar y se aleja de ella. Rouge se deja caer al suelo, puede sentir que Shadow carga con una enorme preocupación, pero, no puede discernir de qué se trata.

—Sé que escondes algo... pero no sé que es —susurra sola—. Shadow...

[…]

GUN poseía una amplia extensión de terrenos los cuales eran usados como campos de entrenamiento y en ocasiones como medio de desestrés para el cazador. Fumaba en ese lugar mientras su mente navegaba por las miles de situaciones que podrían ocurrir y su difícil tarea al ser cazador.

Shadow era alguien inminentemente sin elección. Desde pequeño fue visto como alguien distinto y raro; se ganó miles de apodos por ello y la repulsión de muchos. Con tan solo cinco años quedó huérfano y con el quizás peor trauma de su vida, ya que vio como toda su raza fue exterminada por los lobos. De no ser por su madre que le escondió entre miles de flores, también abría muerto. Su trauma siempre se repetía cuando inevitablemente asesinaba, las palabras de su madre eran como una canción que se reproducía cada que veía sangre.

Escapó de morir hasta llegar a un orfanato en donde se mantuvo distante de todos los niños. No era alguien expresivo ni mucho menos hablador. Era más pequeño a comparación de los otros niños y estos siempre quisieron hacerlo de menos. Debido a su represión de emociones desarrolló un comportamiento agresivo llegando a lastimar a los niños cuando se defendía y provocando que casi lo lleven a un manicomio debido a su comportamiento. De no ser por su padre adoptivo, quizás hubiera muerto.

Su celular comienza a vibrar mientras en la pantalla se muestra un nombre.

"Ivo Robotnik".

El científico más respetado de su época que se entregó en cuerpo y alma a la ciencia y desarrollo grandes avances tecnológicos para su nación y trabajó de la mano con GUN. Aquel mortal que corrió a salvarlo cuando se enteró de lo que a toda su estirpe le había pasado. Justamente el día que le llevarían al manicomio se enteró de la existencia de Shadow. Ivo llegó al orfanato pidiendo que le entregasen al niño porque quería hacerlo su hijo.

No fue tan difícil, después de todo querían deshacerse de Shadow.

Internamente, le agradecía por sacarlo de ese infierno y darle un hogar. Lo recuerda tan claro, el primer día que llegó a la casa del doctor. Tuvo una habitación, tuvo ropa, tuvo lo mejor; Ivo podría ser un ser eminentemente solitario y por elección propia, ya que nunca buscó pareja y cuando decidió adoptarlo fue algo que conmociono a todos sus conocidos.

El primer día que llegó, fue claro con Shadow...

Un carro aparcó a las afueras de una casa a la lejanía de la ciudad, era un apartado que quedaba por lo menos a una hora y media de camino. De este descendieron dos seres, un hombre y un niño.

El hombro avanzó hasta la puerta, la cual abrió y dejó así para que el niño también le acompañase. El niño caminaba con temor, era la primera vez que llegaba a una cada de ese tipo, cerro la puerta tras de sí y siguió al hombre mientras observaba a su alrededor.

—A partir de ahora, vas a vivir conmigo —le menciona el hombre—. Vas a prepararte, vas a estudiar y quiero buenos resultados —le pide mientras le invita a la cocina.

El pequeño permanece quieto mientras observa como el hombre sirve un vaso de agua y se lo entrega.

—Yo... está bien señor —le responde.

—Sé que no fue una buena manera de comenzar —le toma de la mano y lo guía hasta su estudio en donde sienta al niño en la silla y él sobre su escritorio—. Soy Ivo Robotnik, el científico más importante de la organización que va a financiar tu vida, el mayor representante de libros de ficción y filántropo del país —bromea con la última frase mientras se ríe. Shadow le mira y sonríe levemente—. Ahora te toca a ti.

—Mi nombre es Shadow y yo... y-yo soy un cazador —dice tímido.

—Es un avance. Bien Shadow, ahora yo soy tu padre adoptivo. Cualquier cosa que necesites o tengas duda puedes acudir a mí. Sabía que eras un cazador, lo noté desde la primera vez. No merecías estar en ese lugar tan deprimente.

—Pero toda mi familia fue... por eso llegué allí —le dice volviendo a su actitud triste.

El doctor sabe que los recuerdos de Shadow podrían afectarle más adelante, por ello debe enfocarse en tratar de alejar esos malos momentos de su mente.

—Escucha Shadow, no te enfoques en el dolor. Estás aquí conmigo, te daré todo lo que necesites, solo debes ser bueno —el doctor acaricia la cabeza del erizo— ahora soy tu familia y tú eres mi familia.

El pequeño erizo no puede soportar el dolor de sus recuerdos, llora en silencio mientras con sus manos se limpia las lágrimas.

—El camino que debes recorrer es duro pequeño, pero no estás solo, estoy aquí y mientras viva no dejaré que sufras —le dice con amor y ternura—. ¿Qué te parece si vamos y elegimos una habitación para ti? Mañana iremos a comprar todos los juguetes que quieras y decoraciones que te gusten —le promete.

Desde ese día Shadow siempre tendría un lugar al que correr cuando todo estuviera mal.

[…]

S

hadow eleva la vista y sonríe levemente al ver el nombre de su padre en la pantalla.

—Doctor —contesta.

—Mi querido cazador —escucha la voz de su padre—. Me he enterado sobre tu misión ¿No crees que es un poco arriesgado?

—No tengo más elección. No puedo permitir que se levante el fuego.

Escucha un crujido al otro lado de la línea.

—Es complicado, de hecho me causa un malestar el no encontrar una respuesta clara a la situación —el doctor se encuentra ordenando algunos libros desde su hogar, hace poco que regresó y está poniendo las cosas de su trabajo en orden.

—No eres el único —le dice Shadow.

El doctor se detiene mientras suspira.

—Hijo escucha, de levantarse esa orden te prometo que me llevaré lejos nuestro secreto, no voy a permitir que nada le suceda —le promete—. Dije que siempre haría todo lo que fuera por ti.

Shadow cierra los ojos.

—Eso me hace sentir tranquilo, no soportaría saber que... —se detiene, pero el doctor se adelanta.

—Estaremos bien, siempre lo hemos estado. Yo solo pasaba para darte ánimos y quitar un poco el peso de tus hombros.

Shadow no es tan demostrativo con su propio padre, de hecho, le cuesta demasiado pedirle favores o agradecerle, pero Sonic ha corregido tan solo un poco eso e internamente se lo agradecerá siempre.

—Gracias... —menciona como susurro el erizo.

—No hay de qué. Te deseo lo mejor. La bendición de un cazador es la mejor que puede existir y recuerda que tu propia familia se la otorgó a toda su descendencia.

—Entiendo eso y aunque no los recuerde, siento que ellos me acompañan. Te veo dentro de poco, pronto llegará la temporada —le dice por último antes de cortar.

—Claro, también llevo la cuenta y sé lo que debo hacer. Hasta pronto —se despide cortando la llamada.

Shadow observa la luna que poco a poco comienza a mostrarse más completa.

—¿La temporada más difícil coincidirá con la guerra? —se pregunta a sí mismo.

Holis~
Espero que les haya gustado el capítulo de hoy.

Y también traigo un pequeño regalo que me hicieron ♡ ∘°

¿A qué es hermoso?

Gracias _Morita_azul_
Por este detalle hermoso ♡ ∘°
¡Te amo muchooooo!