🅞🅒🅗🅞
Se veía en el espejo, no le gustaba lo que esa noche sucedería, para él no era una celebración el suceso que lo arrastró a hacer determinadas acciones.
—Sabes que podría decirles que no estoy bien y cancelar esto —se queja mientras ve como alguien detrás se mueve de un lado a otro.
—No creo que eso sea un movimiento prudente —le contesta— recuerda que eres el miembro más importante de la organización, si comienzas a faltar o negarte en hacer cosas ellos van a sospechar que algo esta pasando.
El erizo azabache suelta un suspiro mientras niega.
—Pero no tengo nada que celebrar Sonic...
Siente como las manos de su esposo se enroscan en su cuello, un ligero sonido de tela que se desliza le recuerda lo que Sonic estaba buscando.
—Lo sé Shadow y quisiera poder hacer cualquier cosa para quitar el peso de tus hombros... —menciona cabizbajo. Sus manos comienzan a formar una corbata que la acomoda en su amado.
—En ocasiones... odio tener esta maldición —susurra Shadow tomando las manos de Sonic—. Ojalá hubiera sido alguien normal, quizás así nada de esto estaría pasando.
—No te pongas triste, sé que nuestra situación es complicada pero... —Sonic se acurruca en el pecho de su amado—. ¿Podemos fingir que todo es normal y que nada nos preocupa? —le pide elevando la mirada.
Shadow suspira mientras se pierde en esa mirada.
—Lo único bueno de todo esto, es que estas a mi lado y que esta noche me acompañaras en mi aburrida reunión —le dice dándole un pequeño beso en la frente— odio tener que ver a todos esos millonarios que se encargan de mantener a GUN.
Sonic aspira un poco más fuerte, adora el aroma de Shadow. Para su delicada nariz su aroma se asemeja a las ciruelas recién cortadas. Tratando de embriagarse más en ese aroma que le hace sentir un sinfín de sensaciones, rodea el cuello de su esposo para hundir su nariz en el hueco de su cabeza; Sonic se deleita en el aroma que le domina. Ama a su esposo, desde la primera vez que lo vio.
—¿Sonic? —Shadow al contrario siente como un escalofrío escala desde la punta de sus pies hasta chocar con su cerebro. Un pequeño suspiro es arrancado de sus labios cuando Sonic deposita algunos castos besos en esa zona y se aleja viéndolo.
—L-Lo siento pero tu aroma me... —sus labios fueron silenciados por los de su esposo, rodeó su cintura mientras profundizaba aquel apasionado beso. Sonic acarició por encima del traje el pecho, y comenzaba a sentirse emocionado.
Lamentablemente Shadow se alejó de su boca cuando su amado estaba listo para el siguiente paso.
—¿La temporada esta cerca? —susurra Shadow a escasos centímetros de sus labios.
—No llevo la cuenta exacta pero según recuerdo en dos meses o menos tendremos ese problema... —dice Sonic retomando la compostura, cuando de nuevo es apresado por los brazos de su esposo.
—Sabes que mandaría al demonio la reunión, preferiría tener algo más íntimo y personal contigo —susurra contra la orejita del azulado— pero no puedo estropear lo que tanto trabajo te tomó arreglar —por último le da un beso a esa orejita y se retira.
—Me alegra que lo reconozcas —dice Sonic con un sonrojo.
—Mi cita será más tarde contigo, así que trata de guardar energías de esa aburrida reunión —le dice Shadow mientras sale de su habitación.
Sonic solo suspira, mientras sonríe. Su vida si que dio un giro de 360° cuando conoció al cazador.
—¿Quién diría que detrás de ese caparazón aparentemente de roca, podría amar tanto a alguien como yo? —susurra negando con diversión. Su mirada se dirige al espejo en donde se veía su esposo—. Vamos Sonic, debes estar a la altura del cazador —se dice a si mismo.
Se aleja para ir directo a una mesita en donde hay una caja, la abre y se encuentra con una aguja y un líquido dorado.
—Lo siento Blue pero, tienes que dormir unas horas —habla solo mientras prepara la inyección— odio hacerte esto —dice insertándose la aguja en el brazo.
En un hermoso salón al estilo griego se congregaron los tan misteriosos y poderosos líderes de muchas organizaciones. En un banquete del cual participarían varios invitados; con trajes exageramente caros, lujosas joyas, y con demás chucherías en las que derrochaban dinero.
La mirada esmeralda del erizo azul brillaba encantada y con asombro al estar sumergido en ese lugar de ensueño, sólo en libros pudo ver ese tipo de infraestructuras, se sintió con demasiada suerte al estar allí. Shadow por su lado se mostraba irritado, cuántas veces visitó esos lugares y en su opinión le parecían aburridos. Volteó para hablarle a su adorado esposo pero se mantuvo en silencio, Sonic admiraba todo ese lugar.
—¡No puedo creer que tengan acceso a todo esto! —dice el azul viéndole—. ¡Es increíble!
—Es aburrido —le responde Shadow.
Sonic hace un mohín divertido, ambos se encontraban en la entrada mientras se detuvieron a admirar las estructuras.
—Terminemos esto pronto que no quiero llegar tarde a mi otra reunión —le susurra a Sonic tomando su mano y guiándolo por todo el lugar.
Él conocía como la palma de su mano ese recinto por lo que sabía en que lugar estaría su división. En cambio Sonic cada paso que daba era para encontrarse con algo totalmente nuevo; no podía evitar sentirse emocionado.
La mirada de muchos curiosos no tardaron en posicionarse sobre aquellos dos erizos que arribaban a la reunión. Algunos murmullos y susurros comenzaron a verse en algunos de los invitados; palabras que Sonic podía escuchar con toda claridad a pesar de que para ellos se emitían en un tono sumamente bajo.
Halagaban al erizo bi color en cuanto su porte y su traje, desde que Sonic conoció a Shadow supo que era un personaje que no podía pasar desapercibido. Era el tipo de chico malo que a muchos encantaba, su carácter era único y grotesco, algo que le daba un encanto sin igual. Incluso él se sorprendía de estar casado con alguien como él pero, si algo era cierto es que él sería el único al que el cazador amaría. Pero al contrario de él, recibió criticas por ir tomado de la mano de Shadow.
"¿Ese será el esposo de Shadow?"
"¿Qué le vio?"
"Es alguien tan común y corriente."
"Un cazador como él no merece esa ofensa."
"Un simplón, común y corriente erizo."
Sonic se muestra un poco nervioso, ahora recordaba que esa era su primera aparición pública con Shadow. Desde su boda ambos habían acordado no mostrar señales de su matrimonio, seguirían su vida normal hasta que tuvieran que declarar su situación. Pero en ese momento, algunas ideas tristes pasearon sobre su mente: ¿Acaso no se veía bien con Shadow?
"Por favor, es obvio que solo por su posición esta con él".
"Pobre Shadow, de todas las oportunidades que tuvo, eligió la menos atractiva."
Un ligero apretón en su mano le hizo salir de sus pensamientos pesimistas.
—No les prestes atención —la voz de su esposo resonó más fuerte en comparación a las otras que escuchaba a pesar de que solo fue un susurro.
Sonic sintió como ese apretón le hizo sentir seguro y esas palabras recordar el porqué estaba con Shadow. Sonrió tan aliviado mientras su mano se aferró a la del cazador. Solo ellos sabían porque terminaron juntos, solo ellos podían conocer sus más íntimos secretos y solo ellos, sabían que era lo que encantaba uno del otro.
Nadie debía opinar.
Shadow era saludado alrededor de ese amplio salón mientras se limitaba a solo asentir o elevar la mano. Dirigió a Sonic hasta una parte alejada de todos esos seres que se atrevían a cuestionar a su amado. Se acercaron a uno de los meseros que atendía a los invitados.
—"Dark Moon and Blue Sky" —le dijo Shadow como su clave personal.
El mesero hizo una reverencia.
—Por aquí señor —le indicó el lugar que designaron para el agente.
En una amplia mesa decorada con orquídeas, Shadow invitó a sentarse a Sonic mientras le pedía algo de beber al mesero. Su esposo seguía observado todo a su alrededor, era tan refinado y perfecto.
—¡¿Todas tus reuniones son así?! —le pregunta tomando una orquídea para olfatearla.
—En parte, eso las hace aún más aburridas —le responde cerrando los ojos.
Sonic sigue viendo a su alrededor, las miradas los acosan y le hacen sentir inseguro. Su esposo nota eso, toma su mano y besa sus nudillos. Sonic desvía la mirada con pena.
—¿L-Los escuchaste verdad? —le pregunta con nervios.
—Si, y son unos idiotas. No necesito la aprobación de nadie para estar contigo y si no les parece pues que se jodan —le asegura.
Sonic soltó una risa al escuchar su expresión.
—Eso fue tierno viniendo de ti —vio como Shadow desviaba la mirada con algo de pena— y también tu silencio.
—¡Pero mira a quien tenemos aquí! ¡A mi buen amigo Shadow!
El nombrado mascullo algunos insultos inaudibles mientras veía a la nueva acompañante. Voltea la vista al frente mientras gruñe.
—¿Qué se supone que haces aquí? Dijiste que estarías al lado de tus admiradores más personales —le recrimina.
—Yo también me alegro mucho de verte, y gracias por el halago mi vestido si fue un regalo de uno de mis enamorados —le contesta con sarcasmo.
Shadow solo cierra los ojos.
—Rouge en serio no estoy de ánimos para tus bromas.
—Pasaba a saludarte cazador. Vi cuando llegaste pero algunos de esos riquillos no me soltaban. Se emocionan al ver un pequeño escote y un par de pechos —le cuenta tocando sus pechos levemente.
Sonic observó a la chica, estaba muy bien desarrollada. Llevaba un vestido de color azul oscuro ajustado a su silueta, con un escote que terminaba hasta su ombligo. Ahora entendía a lo que se refería con el pequeño escote, la mujer hablaba con su esposo y éste apenas y le contestaba. Sintió un aroma muy parecido al laurel que provenía de la mujer.
Rouge observó un poco a su costado, y vio a un erizo de color azul que la miraba con sorpresa.
—Un momento... ¡¿Tú eres Sonic?! —señaló al chico—. ¡¿El esposo de Shadow?!
Sonic se sintió cohibido, con mucha timidez asintió. Una ligera brisa recorrió su rostro y vio que la chica se sentó justo a su lado.
—¡Shadow no dijiste que tu esposo era todo un pan de Dios! —dijo admirando al erizo azul.
El azabache solo renegó.
—Mi nombre es Rouge, soy compañera de trabajo de tu parlanchín esposo —se presentó alzando su mano—. Es un gusto conocerte. Shadow me ha hablado mucho de ti.
—Un gusto señorita Rouge, usted ya sabe mi nombre.
—Rouge, dime Rouge cariño. No necesitas ser tan formal conmigo —le pide encantada.
—De acuerdo, Rouge.
El mesero dejó una botella de champaña con algunas copas mientras Shadow sirvió en tres copas.
—¿Me puedes contar un poco de ti? —le pide ella a Sonic mientras sorbe un poco de su bebida.
—Soy veterinario, me gradúe hace dos años. Actualmente trabajo en una asociación ayudando a conservar especies en peligro de extinción —le cuenta Sonic bebiendo—. Puedo hablar en tres idiomas, italiano, inglés y francés.
La chica le ve impactada.
—¿Cuántos años tienes?
Sonic se perturba un poco ante es pregunta.
—Veintiséis...
Rouge casi se va de espaldas al escuchar su edad.
—¡Es más joven que tú! —señala a Shadow de manera acusadora—. ¡Cuando dije que necesitabas pareja no me refería a alguien más joven!
Shadow solo le gruñe.
—No creo que ocho años sea una gran diferencia —se ríe Sonic avergonzado.
—Lo siento Sonic, solo me sorprende tu edad. Eres tan joven para tener todos esos logros.
El azul iba a contestar pero la voz de su esposo le hizo guardar silencio.
—Sonic fue un estudiante aventajado, en cuatro años y medio logro acabar una carrera de seis a siete años; aprendió idiomas durante las vacaciones y no solo eso, sus prácticas las hizo con nada más ni menos que el Dr. Ivo Robotnick —resumió Shadow tomando de la mano a su esposo— mi padre.
—Por el caos... —emana Rouge aun sumergida en la sorpresa.
—Estos idiotas no saben que la joya más hermosa que tengo, es Sonic y aun así se atreven a desprestigiarlo sin antes conocerlo —menciona viendo con mala cara a los que ven ocasionalmente a su esposo.
El azulado se mostró apenado ante ese comentario pero, no pudo evitar sonreír de ternura.
—No cabe duda que eliges casos excepcionales y únicos cazador. Querido Sonic déjame decirte que yo no solo porto belleza sino que también porto inteligencia, también soy aventajada en otras disciplinas... pues tu querido esposo no deseaba tener ninguna compañía en su monótona vida, hasta que mis dotes lo convencieron —le sonríe.
—Rouge es una experta detectar en joyas y en localizar objetos de suma importancia. Seduce para obtener información, es capaz de convencer a multitudes y también habla en lenguas antiguas, fue aventajada y tiene muchos estudios en psicología —termina de decir Shadow.
—¡Vaya, eso es increíble! —exclama Sonic asombrado.
La chica deja de lado su copa mientras se acomoda.
—Si pero, ahora pasemos a un tema un poco más picante y exquisito —menciona ella arreglando su escote—. ¿Qué tan salvaje es Shadow en la cama? —suelta de golpe sin vergüenza.
Sonic comenzó a toser debido a la pregunta tan incómoda que le hizo la mujer.
—Rouge eso fue de muy mal gusto —le recrimina su compañero mientras ayuda a calmarse a Sonic.
La chica comenzó a reírse sin vergüenza.
—Lo siento pero necesitaba liberar esa duda. Mi Sonic te ofrezco una disculpa por esto.
El azulado sólo le sonrió con pena. Tomo un par de servilletas mientras se limpiaba. Rouge se disculpó mientras veía que un hombre la llamaba y ésta no tuvo más remedio que irse.
—Ella es muy exagerada, lamento que te haya preguntado eso —se disculpa su esposo.
Pero a Sonic le ha agradado, a pesar de su expresión tan deliberada.
—Me parece entretenida y muy bonita... ¿Por qué no la elegiste como tu esposa si es realmente hermosa y es una chica? —le pregunta con una intención oculta que solo ellos dos conocen.
—La apariencia física no me importa, no vi en ella lo que tú me das. Conoces mi posición con ese tema Sonic. Aprecio a Rouge y la estimo únicamente como amiga —le aclara.
Sonic se limita a cerrar los ojos.
[…]
Después de unas horas muy aburridas para Shadow e interesantes para Sonic. La reunión comenzó, pasaron informes sobre los últimos ataques y sobre la captura que Shadow hizo.
—Señores la situación se ha agravado; lo que más tememos esta llegando a su fin. Una inevitable guerra entre dos mundos completamente distintos podría disputarse sino detenemos a los licántropos —dice uno.
Shadow escuchaba atento cada palabra mientras toma la mano de su amado.
—¡Opino que cada licántropo que sea detenido también sea ejecutado para detener su estúpido plan! —exclama otro.
—Yo pienso que debemos liquidar a la especie completa.
—Y yo opino que debemos ir y poner las cosas en orden.
—Esto va por mal camino —susurra Sonic apretando más la mano de su esposo.
Un ligero tronido de cristal se escuchó entre toda la discusión. Un hombre de avanzada edad se encontraba bebiendo de su copa, se levantó de su lugar mientras todos les prestaban atención.
—Señores por favor mantengamos la calma. Es obvio que la situación se esta volviendo en un caos pero no debemos olvidar el trato que hicieron los antepasados —voltea a ver a Shadow—. ¿No es así cazador?
Shadow se mantiene quieto. En su rostro se aprecia la incertidumbre, no logra reconocer a ese hombre. No lo vio en ninguna otra reunión.
—Los cazadores eran los únicos que podían mantener a raya a esas bestias, fuera de las fronteras. Es una verdadera tragedia lo que le ocurrió a la mayoría de ellos, hasta dejarnos al único sobreviviente. ¿No es así Shadow?
El azabache se sentía ofendido, era muy bien sabido que el tema de su descendencia era un mal sabor de boca en él. Gruñe mientras ve retadoramente al hombre. Rouge se acerca hasta su compañero, coloca su mano sobre el hombro de Shadow.
—Aun así, el único cazador tiene una ardua tarea. Aniquilar a todos los seres que traspasen las fronteras —retoma la charla—. Los licántropos no se van a detener con palabras, tenemos que enseñarles a reconocer su posición. Y me temo que esas bestias no entienden el concepto de la diplomacia.
—Shadow... —Sonic le habla en voz baja—. ¿Quién es él?
—Su nombre es Zokar y es... alguien muy poderoso. Tiene a su disposición un fuerte conglomerado de armas, muy peligrosas de hecho... él fue quien descubrió como se podía dormir a un lobo pero sus costos son ridículamente caros para tener ese equipamiento —le contesta Rouge mientras sonríe con amargura—; busca que su organización sea la única que controle las fronteras, en otras palabras quiere erradicar a GUN bajo una falsa unión estratégica.
—¿Lo has investigado? —le pregunta Sonic escuchando.
—Es necesario conocer el terreno Sonic, más cuando este lugar tiene a los más altos cargos y mandatarios de la nación; es un perfecto platillo para los licántropos. Claro si decidieran atacar.
Sonic se mantiene serio, por el bien de todos espera que esos lobos no ataquen.
—Mi propuesta es la siguiente: equipar a todas las fuerzas y dar la orden de liquidar a los licántropos que aparezcan.
—¡No podemos permitir eso, por años hemos mantenido oculto los secretos mitológicos de la sociedad! —le grita una mujer—. ¡Si hacemos eso crearemos caos y pánico entre los habitantes, y más si se enteran que esas cosas son reales!
—¿Cuántas vidas más van a sacrificar por mantenerlos ocultos? —pregunta haciendo que todos guarden silencio—. ¿Es necesario que les recuerde que los licántropos acabaron con las dos únicas razas que podían dominarlos? Porque según veo, están olvidando lo más importante; esas bestias no tienen nada que los detenga.
—Dejar fuego libre tampoco nos asegura que se detendrán; debemos hablar con el alfa; llegar a un acuerdo.
Rouge suspiró exasperada odiaba con toda el alma esas reuniones.
—Todos hemos dado nuestra opinión pero aun no hemos escuchado a quien de verdad debe ser el guía —sus ojos se dirigen hasta el azabache—. Cazador, tienes toda la potestad de decidir el rumbo de una estirpe, dinos qué harás en esta situación.
Shadow se incorpora de la mesa mientras ve sin expresión al hombre.
—Esta claro que atacar solo provocará una guerra, más muerte, destrucción, inocentes sacrificados en vano; por alguna razón los licántropos están atacando y no los hemos escuchado. Si queremos detener esto, debemos hablar con el alfa.
Sonic le sonríe a su esposo y Rouge le aplaude. Y eso provoca que una mueca de desagrado se dibuje en el hombre.
—Un cazador que proclama la paz antes que la guerra; su descendía estaría ofendida ante esto. En especial cuando uno de tus antepasados fue el mejor cazador que ha visto el mundo mágico —recalca con lamentaciones falsas—. ¡Salve a ese cazador que murió a manos de los vampiros! Pero estamos en otra época y considerando su posición —Zokar se acerca hasta Shadow y saca una caja de color negro de su ropaje; la pone frente a Shadow—. Permítame darle un obsequio al único cazador vivo en los tiempos modernos.
Shadow lo ve con sorpresa.
—No acepto regalos —dice limitándose a verla pero de nuevo es acercada hasta sus manos.
—Adelante cazador, abre la caja —le pide—. Esta es mi petición para una alianza revolucionaria. Sólo busco crear paz en los mundos, quiero trabajar con el mejor.
Shadow se niega a recibir aquello, y murmullos se escuchan en el salón.
—Agente Shadow por favor —le pide el jefe de Shadow acercándose.
Shadow baja la mirada, sus manos toman la caja y comienza a abrirla.
—Debemos brindarle todo el equipamiento necesario para asegurar la vida de este extraordinario ser, por lo que me he tomado la molestia de brindarle el primer arma capaz de liquidar a un hombre lobo sin necesidad de recurrir a sus métodos ortodoxos. ¡Y si, conozco una manera de asesinar a esas bestias!
Shadow sostiene el arma negra con detalles morados; su rostro se muestra abrumado. Sus ojos se dirigen a los de su esposo y denota preocupación.
—Propongo que se arme un operativo para entablar una charla de paz contra esas bestias; si el operativo falla aun estaré en la disposición de negociar con todos ustedes. Mientras dejaré este presente como una muestra de la paz que tendríamos de accionar a favor de ellas.
El hombre se rie mientras sale de la reunión. Shadow mira el arma con un vórtice de sentimientos encontrados. Significaba que alguien más logro encontrar el método para liquidar a una raza. Sonic al verlo sumido en esa arma se incorpora para cerciorarse que este bien.
—Shadow —siente el ligero toque de su esposo. Sonic toma un costado de su rostro y hace que lo vea—. Mírame estoy aquí contigo —le dice muy asustado.
El azabache ve esos ojos esmeralda con miedo, deja el arma en la mesa mientras se sienta.
—¿Puedes llevarte esto Rouge? —le pide a su amiga entregándole el arma.
—Claro querido ¿Pero qué tienes?
—Shadow padece de ataques de pánico —le explica Sonic mientras abraza a su esposo— cuando se enfrenta a situaciones tensas o cargadas de mucho estrés, hace que su cuerpo libere ese mecanismo.
El azabache esconde su rostro en el pecho de su esposo.
—¿Agente Shadow todo bien?
—Necesito descansar, aun no logro recuperarme de la batalla anterior —pide alejándose de Sonic y con el rostro serio.
Y es que después de esa noche, Shadow no podría volver a dormir tranquilo.
[…]
Después de esa reunión en donde Shadow no esperaba recibir más noticias, llegaron a casa.
—¿Quieres que te prepare una bebida caliente? —le pregunta Sonic abrazándole.
Shadow rodea a su esposo y le apresa entre sus brazos.
—Conozco al alfa de esa manada... —dice preocupado—. Y digamos que no es alguien con quien se pueda hablar fácilmente.
—¿Qué crees que ocurra? —le cuestiona Sonic correspondiendo.
—Si acceden a equipar a los guardias con esas armas, todo estará perdido —se aleja de Sonic y le toma del rostro, acaricia las mejillas de su esposo mientras no puede evitar verse preocupado—. Sonic yo no podría imaginar que tú...
Las manos de su esposo le sujetan con suavidad de las mejillas. Deposita un suave beso sobre sus labios mientras lo tranquiliza.
—Escucha, has hecho algo imposible y quizás muy loco. Me salvaste de la muerte, te casaste conmigo, incluso te has preparado en todo lo relativo a un lobo... estoy seguro que mientras tú me logres dominar nada saldrá mal.
—Eres lo único que puede mantenerme cuerdo, el único refugio al que puedo correr, perderte podría volverme loco...
—Estamos juntos en esto, ya no estas solo. Yo comparto tu carga. Vamos a encontrar la solución, juntos —le asegura.
Y es que el secreto del cazador también corría peligro.
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