Seis meses después...

Jimin estaba parado frente al espejo mientras veía su atuendo.

Una enorme sonrisa se formó en su rostro, se veía y se sentía tan hermoso. Y cómo no estarlo si era uno de los mejores días de su vida, en unas horas sería su tan esperada y soñada boda.

Por fin, luego de esperar por meses, al fin Jungkook y él volverían a casarse, pero con la diferencia de que esta boda iba a ser como se supone debió ser desde el principio.

Frente a un cura oficial, junto a su familia y amigos, en el lugar perfecto.

Si, Jimin se sentía el omega más afortunado del mundo.

En estos meses las cosas habían cambiado mucho, para bien. Su vida luego del nacimiento de Jia había dado un giro de 180 grados.

Para empezar, luego de salir del hospital, Jungkook y él se fueron a vivir juntos nuevamente, el alfa le había pedido a su mejor amigo que buscara una casa para ellos, lo bastante grande y con un enorme jardín.

Min lo hizo y junto a Taehyung, Hoseok, Namjoon y Jin, se organizaron para mudar todas las cosas de Jimin a su nuevo hogar, así cuándo dieron de alta al omega y a la bebé, Jungkook los llevó directo a su nuevo hogar.

Fueron recibidos por toda la familia Park, quiénes se habían encargado de llegar y ayudar en los arreglos de la nueva casa, prepararon comida y pusieron globos y carteles para darles la bienvenida.

Todo fue perfecto.

Incluso el señor Park estuvo presente, aún estaba molesto por saber que su hijo había decidido regresar con ese alfa, pero luego de que Jimin hablara con él y le expresara sus sentimientos nuevamente, accedió a darle una nueva oportunidad a Jungkook.

No había sido fácil, Seojoon era un viejo alfa rabo verde que creía que siempre tenía la razón, pero cuando conoció a su nieta quedó completamente enamorado de ella que dejó de lado su indignación, parecía una persona completamente diferente. Estaba encantado con su nietecita y ahora no se quejaba de nada.

Las cosas iban muy bien a decir verdad, Jungkook se volvió socio de Yoongi y la empresa M&J Constructora poco a poco fue abriéndose paso en el mundo de las construcciones. De hecho uno de sus más importantes trabajos fue la construcción del nuevo club de Jongsuk.

A pesar de todo lo ocurrido en el último proyecto de Lee, los alfas no pudieron negarse a aceptar un negocio así de grande e importante, además entendían que el alfa se había dejado engañar por aquella arpía despechada.

Y definitivamente no se habían equivocado al aceptar ese proyecto, pues gracias a él varias ofertas de trabajo llegaron a sus manos. Así que sí, definitivamente las cosas en la constructora estaban yendo muy bien.

En cuanto a Jimin, por fin pudo terminar su libro, después se años de trabajo y esfuerzo, el omega por fin veía realizado otro de sus más grandes sueños. Tenía a su lado al alfa que amaba, q su pequeña bebé y ahora su libro estaba en manos de una editorial, la cuál estaba encantada con su trabajo. Además de que sus fotografías junto a las de Taehyung estaban siendo exhibidas en una de las galerías más grandes de Los Ángeles.

Su relación había crecido en todo sentido, habían cambiado mucho en estos meses, salían a citas y hablaban siempre sobre sus deseos y sueños, comenzaron a conocer cosas de la vida del otro que desconocían por completo sobre su pasado, sobre sus miedos, ahora la confianza y la honestidad eran sus mejores amigos, se habían conectado de muchas maneras y aunque a veces tenían diferencias siempre hablaban y buscaban una solución juntos.

Todo en su vida estaba en órden ahora.

Jimin era el omega más feliz del mundo.

- ¿Estás listo?- un omega peliazul entró en la habitación donde el rubío se estaba terminando de arreglar.

- Si!! ¿Cómo me veo?- Jimin giró sobre su eje para que su mejor amigo lo observara bien.

- Genial...- el peliazul suspiró y se sentó en el sillón mientras hacía muecas de incomodidad.

- Tu cara dice otra cosa....- Jimin bufó.

- Lo siento!! Mis gestos no son por ti, es por esta panza!! Joder!! Quiero morir!!

Jimin comenzó a reír mientras se sentaba a lado de su soulmate y dejaba caricias en su pancita.

Taehyung tenía alrededor de siete meses de embarazo y estaba esperando gemelos.

- ¿Estás muy cansado? Puedes ir a casa si no te sientes a gusto...

- ¿En serio?- los ojos de Tae brillaron de emoción.

- No!! Eres mi damo de honor y tienes que estar a mi lado...

El peliazul bufó.

- Cásate rápido entonces!!! Tú no sabes lo que es tener a dos pequeñas bestias en tu interior que no dejan de patear cómo si fueran ninjas....

- Son tus cachorros, ¿Qué esperabas? ¿Qué fueran unos angelitos?

- Si!! Cómo yo!!

- Tú eres el demonio en persona...

- Cállate Jimin!!

Los omegas comenzaron a reir mientras seguían molestándose, minutos después la señora Park entró cargando a su nietecita que sonreía feliz al tener entre sus bracitos su tan adorado peluche de conejo.

Jimin se levantó y tomó entre sus brazos a su cachorro para llenarla de besos y abrazarla con todo el amor que le tenía.

Todo estaba listo, sólo quedaba esperar que llegara el momento de la boda.

💕💼📷💕

Casarse cerca del Gran Cañón, tal vez no formaba parte de la lista de las bodas más soñadas.

Pero para Park Jimin y Jeon Jungkook, su boda en ese lugar, era la mejor boda de todas.

Junto a ellos estaban las personas más importantes de sus vidas, su cachorrita, su familia y sus amigos. No necesitaban a nadie más, nada era más importante para ellos que su felicidad en aquel acantilado.

- Jungkookie, desde el momento en que te conocí, supe que eras la persona con la que quería pasar el resto de mi vida. Eres mi amigo, mi amante, mi alma gemela... Eres mi todo... Prometo amarte y cuidarte siempre, en las buenas y en las malas. Prometo ser tu mayor apoyo y tu mejor compañero de viaje. Te amo más que a nada en el mundo...

- Min, recuerdo el día que nos conocimos, como si fuera ayer. Estábamos en aquel bar, y yo no podía dejar de mirarte. Eras el omega más hermoso que había visto en mi vida. Cuándo empezamos a hablar, descubrí que eras también el chico más inteligente y divertido que había conocido. Me enamoré de ti de inmediato, y sé que este amor durará toda la vida. Prometo amarte y cuidarte, y prometo que siempre protegeré a nuestra familia...

Luego de aquellos votos de amor, un beso de amor verdadero, el día continúo con una pequeña fiesta en dónde todos disfrutaron a lo grande de esa boda tan especial.

Y cuándo llegó la noche, Jimin y Jungkook dejaron a su bebé al cuidado de los Park para poder pasar su noche de bodas como era debido.

Jimin ronroneó cómo si de un gatito se tratara al ser besado por el cuello con tanta pasión Jungkook se estaba tomando el tiempo para desvestirlo, admirando y besando cada parte del cuerpo de su amado.

Cuándo estuvo completamente desnudo, Jimin cambió lugares, le quitó toda la ropa a su alfa y entonces con sus manitas tomó el miembro de su esposo, lo lamió desde la base hasta la punta sin perder el contacto visual con Jungkook quién tenía la respiración acelerada.

- Te amo...

- Mierda cachorro... También te amo...

Jimin metió toda la longitud de su alfa hasta el fondo de su garganta. Jungkook gimió ronco, tomó el cabello de su omega sin delicadeza Y comenzó con un vaivén lento, marcando el ritmo, subía y bajaba la cabeza de au pequeño disfrutando de aquella imagen.

- ¡Joder!

Jimin tenía los ojos llorosos, las mejillas ruborizadas mientras se sostenía de los muslos gruesos de su alfa. Luego de varios minutos en los que Jungkook folló la boca de su omega a su gusto, decidió que era momento de avanzar.

- Date la vuelta amor y acomódate en la cama...

El omega así lo hizo y entonces Jungkook se encargó de preparar a su esposo con determinación, primero con su lengua y luego con tres de sus dedos. No tardó mucho tiempo ya que Jimin estaba lubricando demasiado.

- Entra ya alfa!!

- Abre bien esas piernas para mí cachorro...

Jimin gimió en respuesta, se incorporó y entonces se acostó boca arriba en la cama haciendo exactamente lo que su esposo pidió.

Jungkook entonces se acomodó sobre él, inclinándose para besarlo, lo amaba tanto, deseaba estar con él por el resto de su vida, quería que esta noche nunca terminara, se incorporó minutos después y con sus grandes manos acarició el torso de su omega hasta detenerse justo en sus pezones, los cuáles besó y mordió hasta cansarse.

Luego de unos minutos, Jungkook tomó su miembro y lo guío a la entrada de su omega aún sin despegar su boca de sus pezones, necesitaba volver a sentír esa placer de enterrarse en su omega, hace mucho no tenían intimidad, así que no perdió más tiempo y entró de una sola estocada.

El rubio se arqueó de forma tan gloriosa al ser llenado tan de repente. Y ese fue el inicio, el alfa no perdió el tiempo y comenzó con las embestidas, no estaba siendo para nada gentil, tomó al omega del cuello apretando un poco pues sabía que le gustaba, después se acercó a su rostro sólo para devorarle la boca con desesperación.

Estaban tan sumidos en el placer y el deseo que envolvía sus cuerpos que nada más impotaba en ese momento.

- ¡Kook! ¡Joder!

- ¡Me fascinas Min!

El alfa se detuvo minutos después y ordenó.

- Ponte a cuatro...

Jimin no perdió tiempo, se acomodó en aquella posición, colocando un par de almohadas bajo su vientre, paró bien su culo moviéndolo de un lado a otro en espera de que su alfa volviera a tomarlo.

Jungkook lo tomó firmemente de la cadera y entró en él, rápidamente retomó el ritmo de sus embestidas, rápidas y profundas, lo tomó del cuello y lo instó a levantarse, con la espalda pegada a su pecho, siguió embistiéndolo sin piedad, Jimin giró el rostro y tomó con fuerza el cabello de su alfa para acercar sus rostros y así fundirse en un beso demandante.

Después el pelinegro se separó de su lado, se acostó en la cama y le hizo señas para que lo montara, Jimin no perdió el tiempo, se acomodó a horcajadas de su esposo y comenzó a dar saltos rápidos, estaba ansioso, necesitaba correrse ya y así lo hizo, tiras se semen cayeron en el torso de Jungkook.

El alfa lo jaló y entonces mordió su cuello, renovando su marca, terminando así segundos después dentro de él, anudándolo.

- Te extrañaba amor...- el omega se recostó sobre su esposo.

- Yo también te necesitaba tanto...

Jimin comenzó a reír mientras asentía con la cabeza.

- Jia no nos deja divertirnos...

- Amo que quiera estar siempre a nuestro lado, pero también es necesario que tengamos nuestro momento especial...

Jimin comenzó a reir y asistió tratando de no moverse mucho, cuándo el nudo bajó y luego de limpiarse el uno al otro, el omega se acomodó de lado junto su esposo, quién lo abrazó de forma protectora mientras dejaba besos en su cabello.

- Te amo Jeon Jimin...- el rubio sonrió, tomó la mano de su alfa y dejó un besito en ella.

- También te amo mucho Jeon Jungkook...

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Gracias por amar y apoyar esta historia 🧡🧡

Jia en la boda de sus papis

Los papis 🤭💕