Clark:

Clark ha pasado gran parte de su vida preguntándose quiénes lo abandonaron y por qué lo hicieron.
De vez en cuando solía tener este sueño, de una noche fría, una calle abandonada, donde solía ver un rostro desvanecerse en la niebla. El rostro que no pudo reconocer, solía perseguirlo todas las noches y no podía dejar de pensar en ello todo el día, hubieron ocasiones donde presentaba momentos de psicosis, los cuales más de las veces lo llevaron a intentos de suicidios, todos fallidos; incluso pasó muchos años internado en un hospital psiquiátrico, luego de haber estado en un albergue.

Cada vez que alguien le preguntaba por su familia, Clark tendía a bajar la mirada y responder de manera difusa, anestesiando la realidad, oscureciéndola cada vez más.

El viento comenzaba a azotar la noche de navidad en Detroit, Honey se encontraba en una esquina a punto de subirse a un taxi cuando escuchó un grito:

¡Te odio¡ ¡No necesito a nadie! ¡Odio esta puta vida! (entre sollozos) - Honey consternada sigilosamente se asomó por un muro para ver qué era lo que estaba sucediendo.

Clark yacía en el piso gritando al viento y con una botella de vidrio en mano.

Honey se asoma por detrás, dando pasos silenciosos, intentando entablar una conversación.

- Ho.. ¿Hola?
- No necesito de nadie, déjame sólo (responde Clark con voz dominante)
- ¿Hay algo que pueda hacer por ti?
- ¡QUE NO! ¡ LÁRGATE¡ - Responde mirando al suelo.

Honey consternada da media vuelta y camina de regreso donde se encontraba, hasta que algo la detiene.

- Espera, quizá necesite de tu ayuda - Dice balbuceando - No tengo donde pasar la noche.

Ella regresa sigilosamente y lo mira estupefacta. 

Clark levanta la mirada y ve a una chica que está sola parada detrás de él.

Ella es muy hermosa, lleva un vestido largo con diseño de rosas blancas por todos lados y sostiene una canasta de golosinas navideñas en la mano.

Por un momento, Clark se pierde en sus hermosos ojos, queda encantado con su lindo rostro... su sedoso cabello se balanceaba en dirección de la brisa ...

Clark se pone de pie, pero no puede caminar porque está bajo la influencia del alcohol ...

Honey rápidamente se apresura a ayudarlo; pone su mano en su hombro, envuelve su brazo alrededor de su cintura y le dice que se apoye sobre ella.

Caminan cerca de la carretera y ella le ayuda a subir al carro.

Esa noche ni bien llegaron a casa, Clark cayó dormido sobre el sofá y no despertó hasta el día siguiente.