Me llevé otra cuchara de helado a la boca mientras veía a la mujer del tiempo hablar y hablar. Estaba aburrida. Y sola. Sasha se había marchado a no sé qué país por inspiración para su nuevo libro y Jungkook estaba trabajando. La única compañía que me quedaban eran las mascotas de la casa pero mi mascota extrañamente hoy no se encontraba a mi alrededor.

Me dolía la cabeza, pero no me podía dormir y tenía náuseas – Esos eran unos de los síntomas de las pastillas antidepresivas que tomaba – Pero igual manera no veía ningún resultado. Según Jungkook, esté medicamento tomaría algunas semanas en surtir efecto, y esos síntomas no serían graves ya que el mismo supervisaba que comenzará de dosis bajas y subiendo de poco en poco.

Pero mi estómago estaba un poco extraño estos días y lo único que comía con gusto era el helado de chocolate. Igualmente no lo tomé como si fuese grave, de todas formas podría tratarse por la falta de alimentos sólidos en mi estómago o por ningún alimento.

Cuando la última cucharada de helado se agotó, hice un puchero antes de caminar a la nevera y sacar más ¿Cómo Jungkook leía mis pensamientos? No lo sabía, y de igual forma una nota estaba incrustada a la nevera:

«“Basta, saltamontes. Come un poco de fruta y deja el helado.

Cuando regresé y vea que comiste de más, tendrás graves con secuencias”»

Jungkook.

- Es adivino.

Gruñí para dejar la nota en el mismo lugar. Abrí el refrigerador para tomar un poco de Melón y comenzarlo a comer mientras partía a al sofá.
Sin embargo, fui intercedida por mi mascota.

La canina venía entrando por el orificio de la puerta principal que estaba hecho para ella.
Laika ladró cuando me vio, meneó su cola y tomó una cosa del suelo antes de gatear hacía mí.

Mientras se acercaba, logré distinguir que el objeto en su hocico se trataba de un sobre blanco ¿Qué era eso?
Fruncí el ceño cuando justamente lo dejó a mis piernas y luego se hecho sobre sus patas traseras. Parecía mentira como era tan inteligente y tan entrenada.
Aunque ese "entrenamiento" era porque yo misma la había enseñado a traerme de vuelta un juguete cuando se lo lanzaba.

Tomé el sobre en mis manos e le acaricie la cabeza como un "gracias".
Cuándo lo abrí vi que no tenía remitente ¿Será otra vez mi hermano? Sí era así, definitivamente se estaba pasando con su sobreprotección y yo me iba a enfadar.
El contenido del sobre contenía únicamente una fotografía que parecía vieja. O puede que sea simplemente el color blanco y negro lo que le daba ese toque junto a la tonalidad amarillenta que parecía el descolorante causante de los años. Sin embargo, el olor fue quien la delató. Olía a recién impresa e nueva.

La foto mostraba un osito de felpa que tenía sus manos en forma de ruego y una bandera blanca detrás.
Yo no tenía que ser tan inteligente para darme cuenta que la foto quería transmitirme una disculpa con tal panorámica ¿Quién se disculpa con una fotografía?

- Yeonjun... – Mi voz salió apagada.

Por supuesto ¿Quién más podría ser? Él mismo me había hablado sobre su dotes de fotógrafo ¿Quería qué lo disculpara? Bueno, esa era definitivamente su forma de pedirme disculpas. Aunque yo no sabía en estos momentos, ni si había algo que disculpar ¿Realmente tenía que disculparse por algo?

Yo ni le había permitido hablar en ese entonces, ni explicarse.
Y, es porque en esos momentos todos nos segamos del engaño y el miedo ¿Tenía yo realmente el derecho de comportarme como lo hice?

Quizás fue únicamente las esperanzas rotas lo que me hicieron actuar así. Pero definitivamente no podía ver a Yeonjun ahora.
El simple hecho de ver algo nuevo me aterraba, Yeonjun era algo más fuerte que algo nuevo ¿Y sí me diera algún ataque de pánico al verlo?
No, eso es un rotundo no. No quiero verle en estos momentos.

Yo solo quiero seguir viviendo igual que hasta ahora. Y si para eso tenía que esforzarme en mi propia supervivencia, lo haría.

La muerte no estaba en mis planes.

De ahí la razón de tener miedo a morir mediante un ataque de pánico.
  

♡♡♡

¿Qué era de una vida sin colores?
Como buena artista que soy, sé de sobra que los colores son vitalmente importantes ¿Pero, y en la vida? También es importante pero prefiero verlo desde otro punto. El punto de que he perdido las ganas de vivir y de igual manera tengo miedo a morir.

- ¿Cómo está la princesa de la casa?

Solté una risilla amarga con tal forma de referirse a mí.
Si una princesa llegara a tener mi deprimente aspecto, pueden estar seguros que la sacrificarían por no merecer la sangre real.

- ¿Cómo está tu día? – Inquirió sentándose a mi lado en la cama.

- Igual que ayer – Respondí alzando los hombros.

- ¿Quieres hablar de algo? – Volvió a inquirir con tacto.

- Solo de cómo fue tú día en la escuela.

Jeongin sonrió dolorosamente antes de acostarse de espaldas en mi cama. Restregó su rostro y vi sus ojos aguarse.

El rostro del peliazul estaba casi que completamente curado del encuentro de golpes que tuvo con Yeonjun. Aún me parecía mentira como un chico tan pacifista como él llegara a resolver sus problemas con los puños.

- Todo es una mierda sin ti – Renegué con la cabeza a su respuesta. Cómo todo va a ser una mierda sin mí si yo soy la mismísima mierda – Mi puesto en el destacamento es demasiado sin ti. Tenías razón, no puedo con ello.

- Te lo dije.

Jeongin tomó unos segundos en silencio como si pensara en que era lo próximo que iba a soltar.

- Por cierto, voy a hacer lo que me dijiste y le confesaré mis sentimientos a Ellie.

- ¡Finalmente! – Escandalice.

- ¿Crees qué me quiera cómo yo a ella? – Inquirió mientras cubría su rostro sonrojado con las manos.

- ¡Eres estúpido! – Le reproché la misma pregunta de siempre – ¡Claro que lo hará! ¿¡Quién no se enamoraría del gran Yang Jeongin!?

- Sí... Sí soy un estúpido.

Me decidí en dejar el tema a un lado.

- ¿Cuándo viene Jungwonie?

Mi mejor amigo se sentó de flash en la cama, llevó una mano a su pecho y abrió la boca con ofensa.

- Yo estoy aquí, contigo, pero tú solo prefieres a mi hermano... – Lloriqueo – Wou, Khaly, eso ha sido directo al corazón – Dramatizó un dolor inhumano en el lugar de su órgano palpitante – Ya siento la traición y la decepción, hermano.

Rodeé los ojos.
Miré el bulto de libros de clases que tendría que copiar para no quedarme atrás en las materias e hice una mueca de hastío.

- ¿Por qué prefieres a mi hermano?

- Porque el cuida todo el tiempo de mí – Contesté con un alzamiento de hombros.

- ¡Yo también lo hago! – Berrinchó.

- Síp, pero no como él.

Y no mentía, Jungwon se pasaba el día entero cuidando de cómo yo estuviera pasando el día, animándome y soltando chistes tan ridículos que daban gracia la forma en que no eran graciosos. Irónico ¿no?

Al menos tenía a mis tres chicos favoritos cuidando de mí....
Sin embargo, a partir de este día, Yeonjun también me comenzó a cuidar desde la distancia...
   

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Primero que nada ¡Feliz año nuevo!... Para el que lo tenga.
Siento mucho no haber actualizado antes, se me había acabado los megas y no pude publicar. Pero aquí estoy de vuelta 🤗 y espero que su nuevo año sea bueno y próspero para todos nosotros.