La sirvienta miro a Momoka confundida al escuchar su pregunta, y ella igualmente la vio con curiosidad.

—¿Acaso en la noche Naoya aviso que rechazo el compromiso?.—Cierto, eso se le olvidó preguntar, en qué momento Naoya notificó que no haría el compromiso con ella. —Bueno mi mamá dijo que según hoy avisaría pero supongo que al último aviso ayer.

—Señorita. —La voz de la sirvienta le llama la atención, se escuchaba bastante seria, Momoka miro su expresión.

Los ojos grises de Momoka se ampliaron al entender. —¿El aceptó?.—Ella dijo con un tono que dejaba notar su preocupación.

La sirvienta asintió a su pregunta. —Así es... De hecho ya está esperando junto con sus padres y él líder del clan Zenin, por eso me apure en arreglarla señorita.

Momoka se quedó en completo silencio intentaba procesar lo que sucedió, no puede creer que le haya pasado. —Ah... Pero los otros pretendientes. —Intento decir ella.

—Bueno su madre dijo que se ocuparía de eso... Ella tampoco está muy feliz, pero su padre fue el que pidió aceptar la propuesta del clan Zenin. —Explico la sirvienta. —Por favor ya vayamos no hay que hacerlos esperar.

Se sintió como una eternidad llegar hasta el gran salón... Sentía su corazón latir rápido, sus manos sudaban sin parar.
Intentaba sonreír pero fruncía el ceño cuando los vio a todos reunidos, se quedó mirándolos hasta que recibió un pequeño empujón por parte de la sirvienta lo que la hizo reaccionar.

—Ah... Muy buenos días. —Momoka hizo una reverencia ante Naobito y Naoya, el viejo sonreía pero Naoya se mantenía algo serio.

—Vaya así que tú serás mi nuera, una muchacha educada como me dijiste. —Naobito le dijo a Naoya y saludo a Momoka con una sonrisa, la cuál se sorprendió ante él comentario del hombre ¿Naoya hablo bien de ella a pesar del desastre que hizo?.

—Naoya fue amable hablando así de mí, pero fui una torpe en toda mi cita, no supe cómo llevar el flujo de nada aún así agradezco sus palabras. —Sabe Momoka que esto es una apuesta arriesgada al hablar así, puede sentir la mirada de enojo de su padre hacia ella. 

—¡Ja humildad!... Has criado una buena chica Mikan. —Naobito se dirigió a su padre, él cuál sonrió nerviosa. —Espero le puedas dar algo de esa humildad...—Señalo a Naoya, el cual solo chasqueo la lengua molesto ante los comentarios de su padre.

—No te preocupes por mi padre, ya eres muy mayor como para pensar en esas cosas. —Naoya le respondió con una sonrisa, burlándose de la edad de su padre, Naobito tan solo lo vio de mala gana.

—Ni que estuviera senil... Este chico, bueno en fin, ahora te toca a ti lidiar con ese genio que se carga mi hijo no te preocupes es un amargado pero es buen muchacho. —Dijo entre risas Naobito, dándole una suave palmada en el hombro a Momoka, la cuál solo se limitaba a sonreír, no sabía que hacer para hacerlos cambiar de opinión.

Le gustaría actuar como esas protagonistas que se niegan rotundamente a su matrimonio, que alzan la voz y hasta se quitan el apellido con tal de no seguir bajo las reglas de su padre.

Pero... No es tan fácil como parece.

Para ese punto de la historia la protagonista ya cuenta con algún apoyo, o las repercusiones no suelen ser tan fuertes y Momoka no sabe lo que pasaría si hace un escándalo y se niega, después de todo el clan Zenin y Mikan tuvieron una disputa fuerte en el pasado... No puede actuar así, no sabe que clase de escenario se pueda crear, Naobito sabe que es un líder relajado y tal vez ya no sea como sus antecesores pero el problema es Naoya y algunos miembros de su clan.

—Yo... —Los labios de Momoka se abrieron por su cuenta. —Aun realmente no estoy segura de casarme con Naoya. —Sus ojos dejaban ver su desesperación al decirlo en voz alta, está completamente segura que escucharían todos, vio de reojo a sus padres, su madre está asustada y sorprendida, su padre igual sorprendido pero enojado, ahora vio hacia Naobito, el cual solo se veía sorprendido pero sus facciones se ven relajadas.

—Vaya... ¿Es por los desastres que hubieron en el pasado acaso con nuestros clanes?.—Naoya dice de repente, parecía él mas calmado de todos a pesar de ser el rechazado.

—¿Ah?.—Momoka no esperaba esa reacción de él, pero sabe que Naoya es bueno fingiendo.

—Sabes en parte fue por eso que decidí casarme contigo. —Naoya dice con una sonrisa.

—¿Ah sí?.—El mayor Zenin dice pensativo.

—Claro que mejor que dejar el pasado atrás que con un matrimonio e hijos de por medio, después de todo si nos convertimos en familia todo será más ameno. —Naoya se explicó, caminando hacia Momoka, ella sabe que él está escondiendo algo que finge, no puede simplemente hablar en serio.

—¿Realmente se casaría conmigo?... Digo tampoco quiero que se vea obligado. —Momoka contesta, sabiendo que esto cada vez aumenta la ira de su padre.

—Para nada estoy obligado, estoy emocionado de casarme contigo... Y feliz de hacer una tregua definitiva en nuestros clanes, ¿No lo cree así padre?  —Naoya se dirige a Naobito.

—Bueno.... La verdad es que viendolo de esa manera estaría más que bien.—El viejo contesta. 

Momoka cierra los ojos un momento, después de todo negarse es imposible, ya está en una encrucijada, rechazar a Naoya es como rechazar una propuesta de paz, ya ni siquiera importa si vive en la calle si le quitan el apellido, dejara un desastre atrás, seguro puede haber una disputa nueva, no le queda de otra que aceptar.

—Así que no temas señorita Momoka, acepta mi propuesta. —Dijo Naoya con una voz oscura, cargada de maliciosas intenciones que disfraza con una sonrisa amable mientras extiende la mano hacia ella, actuando como un buen caballero.

Momoka suspiro pesadamente, ya estaba entre la espada y la pared no podía rechazarlo... Así que sin opciones sostuvo la mano de Naoya al fin, sintiendo como este la sostiene fuertemente, la sonrisa del Zenin se ensancha más cuando al fin tiene lo que quiere.

Después de todo espero tanto por este preciso momento, la razón de porque nunca busco antes una esposa era para esperar a que Momoka fuera ofrecida a él... Sabía que tenía todas las de ganar al saber que algunos clanes cambiaron sus tradiciones en cuanto a los matrimonios arreglados, él había ganado al apostar por este momento.

Y Momoka tan solo miraba con sospecha a Naoya, después de todo una vez casada tendría que estar con él Zenin... Ahora ya sabía él porque había regresado.

Después de todo las mujeres de la familia Mikan tiene el "don" de tener hijos con buenos rituales malditos, todos los varones nacen con uno sin excepción... Excluyendo a las mujeres que aunque nacen como hechiceras no logran jamás explotar ese potencial.

Realmente se sentía como una moneda de cambio, su vientre era la inversión que deseaba Naoya Zenin.  

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Holis, espero les guste es algo corto pero chanchan! Ahora ya viene lo bueno (?)