nueve.
29 de abril del 2017
Querida Galatea:
Estoy completamente convencida de que puedes conseguir todo lo que te propongas. Recuérdalo: eres imparable.
Descubrí que me llevaste a la seguridad cuando apenas podías alzar la cabeza y sentías la necesidad de agacharla de nuevo. Eso es admirable. Me amaste cuando creí que me odiabas con más intensidad y acariciaste mis bordes filosos. Me trajiste, de cierta manera, a la vida; mientras estábamos muriendo por dentro. Lamento haber sido tan egoísta. Sé que tengo que mejorar muchos aspectos míos y te aseguro que no me rendiré hasta conseguirlo. Si me ves con ganas de bajar los brazos, recuérdame que a pesar de estar quedándome sin aliento sí voy a poder aguantar. Porque, al igual que tú, yo también puedo ser imparable.
Intentaré que no me derribes nunca más. Al mismo tiempo, que no derribes a otras personas. No es bonito que alguien te empuje, ya sea de forma consciente o sin querer. Sabes que puedes contar conmigo para juntas decirles a los recuerdos tristes “no vengas por mí hoy, me siento bien”.
Te aseguro que, si no sueltas mi mano cuando nos perdamos, podremos regresar a nuestro hogar. Él nos esperará ahí y nos abrirá sus puertas enseñándonos la luz que hay dentro. Sí, te lo prometo.
Y por favor, no me tengas miedo. Ya no te haré más daño. Sé lo tanto que duele. Voy a cuidarte siempre que pueda. Sí, te lo prometo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro