Kim TaeHyung

Mi cabeza duele, mis pensamientos son una mezcla de muchas cosas, desesperado llevo mis manos a mi cabeza, no tengo una solución, no tengo una manera de ayudar a DaHye, no puede ser posible que la historia se repita. Después de dos años tengo miedo de nuevo, todo es una mierda. No dejo de caminar de un lado a otro dándole vueltas a la situación, MinHo aisló a DaHye, nadie quiere estar cerca de ella, creo que soy el único, YoonGi no ayudó en nada en esa reunión, no dijo nada, parecía que estuvo de acuerdo con todo lo que se dijo, quería rehusarme a que la aislaran, quería empujar a los que cargaron a DaHye mientras su fiebre la tenía bajo su poder, pero no podía armar un espectáculo.

GaRin no puede saber que su madre está infectada.

La puerta de la habitación se abre, mis ojos solo distinguen a Min YoonGi, voy directo a él tomándolo de su suéter.

  - ¿Por qué demonios no te opusiste? ¿Por qué no dijiste nada?

  - Tae, cálmate-JungKook hace que lo suelte-No podemos hacer nada y lo sabes.

  - No puedo quedarme de brazos cruzados.

  - No lo harás-YoonGi luce muy tranquilo-Tengo un plan pero necesito que te comportes y confíes en mí.

Bufo por la ironía de esas palabras. ¿No se supone que es él quien no confía en mí?

  - Eso no me sirve.

  - ¿Enserio la dejarán en ese cuarto sin agua ni comida?-Jimin niega con la cabeza.

  - No estoy de acuerdo con MinHo-Hoseok se opone-Me parece...inhumano.

Me siento en la cama llevando mis manos a mi cabeza, paso mis dedos por mi cabello respirando profundo.

  - No debí dejarla ir a ese lago.

  - Incluso si hubieras ido ella acabaría igual-todos miran a YoonGi-Sabes lo importante que es GaRin para su madre, ella daría su vida sin pensarlo.

Y lo sé, soy consciente de ello. No puede ser posible que nadie tenga unos minutos de paz, en una de las sillas de la mesa está sentado JungKook, los recuerdos de anoche vienen a mi mente, había olvidado lo que era entregarse de esa manera.

  - Voy a verla-me levanto dispuesto a ir a la puerta.

  - No irás-YoonGi me detiene.

  - Cuando GaRin estuvo en esa situación no te importó nada-acuso-No me quedaré de brazos cruzados.

  - ¿Ahora entiendes como me sentía?

  - Así que esta es tu manera de vengarte.

  - Tómalo como quieras pero no irás a verla.

Hay algo que no encaja, la actitud de YoonGi es extraña, ¿Qué estoy pasando por alto? ¿Está vengándose u oculta algo? Unos toques a la puerta se escuchan interrumpiendo, GaRin aparece abrazando una almohada y con su pijama puesta.

  - Lo siento-se disculpa-¿Puedo dormir aquí hoy?

  - Pensé que dormirías con tus tíos-YoonGi se acerca a ella.

  - No me siento cómoda con ellos. ¿Puedo dormir con usted, ahjussi?

GaRin cree que su madre fue cambiada de habitación para poder mejorar, sabe que ese perro la mordió pero desconoce que está infectada, YoonGi dice que ella sabe que era un zombie, supongo que se aferra a la idea de que su madre está bien.

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Dormir es algo imposible, he estado dando vueltas en la cama esperando que todos estén profundamente dormidos. Desde mi cama puedo ver a GaRin durmiendo con YoonGi, la niña está acurrucada en su espalda, BamBam en la otra cama está más que dormido, el chico había entrado a la habitación cuando DaHye y yo dormíamos luego de burlar el seguro de la puerta con un pinza de cabello, no sé como lo hizo pero él mismo me lo contó.

Él ni siquiera recordaba a DaHye en mi cama. En resumen, no recuerda nada.

Me incorporo en la cama colocándome mis zapatos, ato los cordones levantándome, salgo del cuarto luego de tomar la linterna en mi mesa de noche, su luz me permite moverme por el pasillo sin dificultad, todo está en silencio, maldigo cada vez que una de las maderas del suelo cruje bajo mis pies. Bajo las escaleras dirigiéndome a la cocina, reviso el refrigerador y luego los estantes, tomo algunas frutas junto a dos botellas de agua para DaHye.

Al guardarlo en una bolsa regreso a las escaleras, una vez en la puerta de la chica me encuentro con el seguro de la puerta, la habitación está alejada de los demás, asomo mi cabeza en la ventana, en segundos encuentro una solución, camino por el tejado con cuidado de no resbalar, es algo complicado por la nieve que se amontona, por unos segundos dudo de lo que hago, cuando Yiren murió me arrepentí de no haber hecho nada, de haber provocado su muerte, no haré lo mismo de nuevo. La ventana del cuarto está cerrada, quito el seguro logrando abrirla, entro por ella encontrando el cuarto a oscuras, sólo la lámpara está encendida.

La cama está vacía pero las sábanas revueltas.

  - ¿DaHye?-dejo la bolsa en la cama, apunto hacia el baño donde la encuentro inconsciente en el suelo-DaHye-me apresuro en llegar a su cuerpo, la cargo en mis brazos regresándola a la cama, está ardiendo en fiebre, sus mejillas están rojas, su respiración es pesada.

En el baño tomo una toalla mojándola en el lavabo, regreso a ella colocándola en su frente, DaHye se queja un poco entreabriendo apenas sus ojos.

  - ¿Tae?-su voz es baja pero alcanzo a escucharla, algunos mechones pelirrojos se pegan a su frente o cuello-No puedes estar aquí...

  - Tranquila-sus ojos siguen normales.

  - GaRin...

  - Está durmiendo con YoonGi, está bien-acaricio su cabello. Mi miedo a perderla aparece, ¿Por qué ahora? Hace mucho no sentía este nudo en la garganta-No te preocupes.

  - No debías venir.

  - Claro que sí-sonrío un poco. Sigo sin encontrar una manera de ayudarla, ¿Por qué ella y por qué ahora?-Traje algo de fruta y agua.

  - Tengo sed.

Apenas lo dice saco de la bolsa una botella de agua, sostengo su cabeza ayudándola a beber, DaHye recuesta su cabeza en la almohada de nuevo, la cubro con las sábanas dejando la botella en la mesa de noche, cambio la toalla en el baño mojándola de nuevo, la coloco en su frente sentándome a su lado con cuidado, DaHye me mira todo el tiempo, acaricio su mejilla cuando ella toma mi mano.

  - Hablaré con MinHo mañana.

  - Sabes que no hay cura-dice en voz baja-No pierdas tu tiempo.

  - No pueden encerrarte aquí.

  - Soy un peligro para todos, Tae.

  - No lo eres.

  - No sigas mintiéndote-hace una mueca de dolor.

  - ¿Tu pierna está molestándote?

Asiente, quito la sábana de una de sus piernas, subo un poco su pantalón, al menos lo suficiente para notar que la venda está pintada de rojo, en el baño no hay un botiquín de primeros auxilios pero en la peinadora hay un estuche pequeño de coser. No tengo nada para limpiar la herida pero tampoco puedo dejar su venda así.

DaHye se mantiene en silencio cuando corto su venda con cuidado, la tijera que uso es pequeña pero hace su trabajo. La mordida que tiene luce muy mal, alrededor se está tornando morada, hay sangre y probablemente atrape una infección. Nadie más la ayudará a excepción de mí.

DaHye extiende su brazo a la mesa de noche bebiendo de la botella, cambio la venda y mis manos tiemblan un poco, la vida es realmente injusta. Una vez acabo acomodo sus sábanas, me recuesto a su lado e intenta alejarme.

  - Vete.

  - Me iré cuando duermas.

Sonríe un poco recostándose en mi pecho, acaricio su cabello con ondas escuchando su respiración calmada, en segundos había quedado dormida. ¿Acaso tengo tanta mala suerte en la vida para perder todo lo que amo? GaRin es una niña, es muy pronto para que pierda a su madre, nada de esto debió pasar.

La peor parte es que no tengo una solución.