Durante su tiempo inconsciente, July no entendía quá había pasado, simplemente sabía que algo había diferente en ella. Estaba en un cuarto, sentada en una cama pero no hacía ningún movimiento, era como si no estuviera en sus 5 sentidos.

Se sentía cansada y mareada, sabía que no debía de estar ahí pero no estaba moviéndose. Ubicó la puerta con su mirada y en cuanto trató de levantarse sus rodillas se doblaron haciéndola caer. El golpe no le dolió, ni siquiera lo sintió, ahora se iba arrastrando hacia la puerta pero antes de llegar llegaron dos personas de traje amarillo.

Una de ellas la tomó por los brazos y la levantó para llevarla a la cama, en cuanto estuvo acostada la otra le inyectó algo en el brazo haciendo que su estado empeorara, ahora solo podía ver sombras y sus movimientos eran casi nulos.

—Pronto estarás de nuevo con nosotros, ahora descansa. —Dijo una de las personas mientras volvían a cerrar la puerta con seguro.

Del otro lado del edificio una junta se veía en su clímax.

—¿Cuándo estará lista? —Preguntó M.O.D.O.K. mientras golpeaba la mesa ansioso y desesperado.

—Hasta ahorita, las reacciones que ha tenido han sido gratificantes, ya que ni siquiera esperábamos que estuviera viva. No sabemos cuándo dará la reacción final pero con los sedantes que le estamos administrando estamos retrasando el proceso.

—¡Entonces dejen de ponerle esos sedantes!

—Si lo hacemos, en cuanto el proceso termine no podremos controlarla.

—Es ahí donde ustedes se equivocan. —M.O.D.O.K acercó una cajita de metal y en cuanto la abrió varias cabezas se inclinaron hacia el frente para observar su interior. —Les presento nuestro control remoto. Solo debemos conectarlo a su sistema nervioso y listo. Estoy seguro de que ustedes serán capaces de colocarlo. Ahora, después de que lo implanten, no más sedantes.

El tiempo pasaba y July estaba cada día más conciente, más activa pero había momentos en donde ella perdía el conocimiento. Sabía que debía de escapar como lo había hecho antes pero está vez no parecía ser tan fácil. De momento tenía lucidez, pero no era capaz de escapar, y al siguiente perdía el control de su cuerpo.

Un día de ellos ella no volvió a tener control.

***

Estaba sentada en la cama con la espalda totalmente recta viendo hacia la pared. No sabía si habían pasado semanas o meses, no tenía noción del tiempo, no sabía si era de día o de noche. Estaba completamente ajena al mundo exterior.

La puerta se volvió a abrir haciendo que su superior entrara.

—Firmes. —July se puso de pie y obedeció la orden. —El jefe quiere verte. Sígueme.

July seguía a la persona que anterior había ido por ella hasta que logró ver a una máquina con cara de humano, una parte de ella recordaba haberlo visto antes pero podía recordar exactamente dónde.

—Agente. —Esa máquina comenzó a hablar. —Agradecemos su apoyo y como recompensa, le otorgaremos su primera misión. —La máquina le aventó un expediente a July mientras ella lo tomaba en sus manos. —Su primer objetivo. Y recuerde, no intente nada que pueda molestarnos porque si lo hace habrá consecuencias.

July entendía a qué se refería.

No sabía que habían hecho con ella pero sabía que tenían control sobre todo lo que hacía, tal vez no al 100% pero si en su mayoría, era como si dos personas completamente diferentes vivieran en su cabeza. Y la segunda, trataba de liquidar a la primera. Nunca había sentido esto. Siempre había sido consciente de lo que hacía, a pesar de sus malas decisiones.

Con el expediente en la mano, salió de ahí para realizar la misión.

Tenía que infiltrarse a la base de datos del gobierno Alemán para buscar el expediente de dos ex–cabezas de HYDRA a las cuales necesitaban contactar.

Al salir de las instalaciones, se encontró con un helicóptero disponible para su uso. Necesitaba llegar a Alemania lo más rápido posible. Al llegar se bajó, y comenzó su tarea.

Era un edificio de gobierno, resguardado por los guardias de siempre, no parecía tener una mayor seguridad. July sabía de esa misión lo mismo que sabía de lo que había le ocurrido. O sea, absolutamente nada.

Observó el perímetro mientras se mantenía a la sombra de uno de los arbustos decorativos que le daban al lugar un aspecto menos sombrío y mientras desfundaba su arma recordaba el plan que acababa de recibir en su cabeza.

Era como si alguien más estuviera dentro de su cuerpo luchando por el control total sobre él, y como si quisiera que Julia Dunn se quedará tras ella pero por más que en su subconsciente su verdadero ser luchara por obtener el control, simplemente no podía. Alguien más había ganado así que no le quedó nada más que hacer que aceptar el hecho y dejarse llevar.

Corrió hacia la entrada donde con un solo puñetazo rompió la puerta, una puerta de tres metros hecha de acero inoxidable, sin ningun rasguño, entró de la manera más fácil y rápida que pudo mientras dispara a las cámaras disponibles en ese edificio.

Una alarma silenciosa se había activado mientras ella corría hacia el almacén por su objetivo. Absolutamente todos los guardias que ella había encontrado habían sido derrotados por un simple golpe. Todo lo que estaba pasando parecía ser extraordinario pero ella no estaba cuestionando el porqué, no lo necesitaba.

Después de conseguir lo que buscaba salió por el mismo lugar por donde entró encontrándose rodeada de agentes apuntándole a ella. July sólo sonrió mientras buscaba la manera de salir ilesa de ahí, desafortunadamente, ellos no sabían lo que venía.

***

Un año había transcurrido y el nombre de AIM ya no era una burla. Mientras los vengadores se habían dedicado a desmantelar HYDRA, AIM aprovechó para colocarse como la nueva organización al mando, ahora las cosas se harían como ellos quisieran con la ayuda del nuevo integrante a su equipo. Las historias acerca de la nueva agente de AIM volaban pero nadie sabía su nombre o su historia. Lo único que el público sabía es que había sido alterada con el suero del super soldado, pero ni siquiera ellos sabían cómo AIM había logrado tal hazaña.

Hasta que un día todo salió mal.

—Agente, su misión. Reconocimiento y extracción. —July asintió mientras tomaba un nuevo expediente en el mismo folder amarillo de siempre.

Fue a prepararse con las herramientas necesarias, sin preguntas, sin comentarios para después dirigirse a su nueva misión.

El helicóptero la había dejado arriba de uno de los edificios de la ciudad de Mónaco, y mientras ella y el grupo de agentes se dirigía a su destino ya programado se dieron cuenta de que habían sido emboscados y que la misión a la que asistirían solo era una trampa para atrapar a la nueva agente de AIM.

July al darse cuenta del plan comenzó a correr, los agentes que iban con ella solo eran daño colateral, ella tenía instrucciones directas que nada podía pasarle a ella. La adrenalina corría por su cuerpo pero aún así no sentía nada, solo sabía que debía correr.

Realmente no sabía bien lo que estaba haciendo, simplemente se metía a casas, edificios, saltaba por las ventanas y techos en busca de un escape pero el hecho de que no solo en tierra la estuvieran buscando dificultaba las cosas.

Agachó su cabeza al escuchar disparos desde el cielo, pero varios de ellos dieron en su cuerpo dificultando su escape. Por fin saltó del techo creyendo que llegaría al otro lado pero resulto que sus cálculos fueron completamente inútiles ya que terminó en el suelo. Sabía que algo bueno debía de haber en Mónaco, y eso era que sus casas y edificios no eran tan altos como otros.

Al levantarse se dispuso a seguir corriendo ya que a pesar de haber sido perforada por las balas el dolor no aparecía en su cuerpo pero al salir a la avenida principal supo que había sido derrotada.

—Coloque las manos sobre su cabeza y caiga de rodillas al piso. —Una voz en el helicóptero se ayudaba por un megáfono.

July no había nada de lo que le habían indicado así que sin más preámbulo una descarga eléctrica fue a dar directo a su cuello haciendo que lo que fuera que tuviera control sobre ella se desvaneciera.

Malo para ella ya que ahora estaría consciente para afrontar las consecuencias de haber causado tanto mal en el mundo.