https://youtu.be/suh5QUdsiKI

[Torneo Parabellum: Sala Médica].

—Por los abuelos Yahweh y Khaos. No sé por qué tengo de repente un muy mal presentimiento.

Comentaba Helios sintiendo un escalofrío terrible en la espalda, tras haber escuchado la revelación de Thor.

Helios, y el resto de dioses griegos en la sala médica, veían y escuchaban la actual batalla de dioses por medio de un espejo rectangular en la pared que ofrecía una vista excelente de la Arena de Duelo. Ares quería ver la pelea para observar la lucha del rival de Karttikeya, por curiosidad de saber cómo era el hombre que una vez fue el Dios de la Guerra, y ahora estaba en camino de ser el Dios de la Luz.

—Debo reconocer que Skanda tiene un increíble arsenal de técnicas. Y la que uso para derribar a Thor, es hasta el momento una de mis favoritas —dijo Ares con un profundo respeto, y luego se mostró disgustado al fijar su vista en el dios nórdico—. Lástima que le tocó un oponente tan miserable y deshonroso.

—¿De qué hablas, sobrino? Creí que te agradaría mucho Thor, por su particular filosofía parecida a la tuya —dijo Hades un poco sorprendido, igual que los demás dioses griegos.

—Respeto su aceptación y gusto por la violencia. Sin embargo, me desagrada su pobre gusto por la fuerza —decía Ares con notable molestia—. Yo por lo menos aprendí diferentes estilos de lucha, tanto armado como desarmado, porque siento fascinación y respeto por la inmensa variedad de estilos de pelea, tanto para la guerra como para la autodefensa. En cambio Thor, aunque ama la batalla y encuentra placer en matar, no pelea en base a algún estilo de lucha específico, ni siquiera alguno de su propia tierra. Tampoco respeta realmente las Artes Marciales. Él es solo violencia pura, sin verdadera dignidad o respeto por la lucha y el arte de la guerra.

—¡En eso te doy la razón niño fortachón!

Comento, con un humor de lo más divertido, un hombre joven de origen nórdico acostado en una camilla cercana a los dioses griegos. Como cualquier nórdico tenía la piel clara, pero de un tono mucho más pálido de lo normal, luciendo casi de un tono grisáceo claro. Su cabello era de un color gris opaco, y era tan largo que llegaba hasta sus hombros. Ojos de un siniestro color rojo, dientes filosos y uñas como garras. Estaba cubierto por una sábana, pero hasta donde podía verse su cuerpo era alto y delgado con un notable desarrollo muscular.

Era el exiliado Jotun de la Tribu Jotnar de Hielo; el hijo de Farbauti y Laufey de la Casa Wulf; era el Bufón de la Corte de Odín, y Dios Nórdico Æsir del Desorden, la Felicidad y la Libertad, Loki.

Y a ambos lados de su cama se encontraba un par de mujeres sentadas en una silla.

La primera tenía los rasgos típicos de los inmortales nórdicos Æsir, tal como un cuerpo tonificado y la piel clara de un tono pálido. Pero su cabello, ondulado como una melena y adornado con una pequeña trenza a cada lado de su rostro, era de color bermellón como el de los Vanir. Sus ojos eran de un color azul oscuro. Tenía tatuajes azules nórdicos en el brazo izquierdo, y llevaba una armadura ligera de color negro con el estilo intimidante que caracteriza a los inmortales Æsir.

Era la primera esposa de Loki, y por lo tanto madre de los gemelos Guerreros Guardianes Narfi y Nari; era la maestra de Lady Sif después de su ascenso a Asgard; era la anterior Valquiria de la Fuerza y el Poder antes conocida como Thrud, y ahora conocida Sigyn.

La segunda mujer era más alta que Loki por un par de centímetros, también era nórdica y tenía la piel clara mucho más pálida que la otra mujer, llegado a lucir blanca. Además su cabello era de un color blanco como la nieve, le llegaba hasta la cintura y lo tenía en parte suelto y una parte sujetada con una pequeña trenza atrás de la cabeza. Tenía los ojos de un color azul celeste, y llevaba un elegante vestido negro con dibujos de lobos blancos en la falda, y algunas piezas de armadura ligera de color plateado.

Era la segunda esposa de Loki, y por lo tanto madre del Rey de los Gigantes Fenrir Hróðvitnir, de la Emperadora del Océano del Norte Jörmungandr y de la Reina Infernal y Diosa Nórdica de la Muerte Hela; era la Sacerdotisa de la Luna del Clan Wulf de la Tribu Jotnar de Hielo, Angrboða

—El problema con mi sobrino "thormentoso" es que siempre ha dependido de sus puños y su martillo. Así que, a diferencia de sus otros hermanos, su estilo es simple y primitivo —decía Loki entre risas divertidas—. Como él mismo lo dio a entender, es bastante bueno provocando violencia pura y disfruta haciéndolo. Pero por desgracia para él, su oponente no se queda atrás.

—Tienes razón querido —dijo Sigyn esbozando una sonrisa divertida.

—Creo que también lo entiendo —dijo Angrboða tocándose el labio inferior con un dedo índice—. Basado en las peleas que he visto de Karttikeya, he notado que él es superior a Skanda en técnica y velocidad. Pero Skanda supera a Karttikeya en violencia y fuerza.

—Es una excelente forma de decirlo —dijo Loki—. Por eso Thor tiene suerte de que Skanda esté tan aferrado a ese código de honor, característico de los Protectores del Devaloka. Porque si tuviese la mentalidad que tenía en sus inicios, no hubiera dudado en matar a Thor cuando hizo el Choque de Estrellas.

—Pero la verdad no entiendo lo que intenta hacer el desgraciado traidor —decía Angrboða frunciendo el ceño, bajando el brazo y con odio puro al referirse dios nórdico—. Él no es un fortachón idiota. Es analítico y sabe aprovechar sus capacidades al máximo para ganar. Es una completa idiotez de su parte incitar a Skanda a sacar ese lado aterrador.

—Concuerdo. Es una tontería que ni siquiera yo comprendo —decía Hades también confundido—. Los guerreros hinduistas tienen la particularidad de cruzar la "línea" y convertirse en poderosos monstruos, cuando sus emociones desatan lo mejor o peor de ellos durante una pelea intensa. Molestar a uno del pueblo Asura, es como intentar agarrarle la cola a un tigre hambriento. No por nada su Panteón, aun estando dividido, es una de las superpotencias del Consejo de los Elohim, junto con los Panteones Israelita, Inca y Chino.

—¡Je! Lo dices por clara experiencia. Y yo también te lo puedo respaldar —decía Loki, teniendo los brazos debajo de su nuca, y recordando el Príncipe Asura que lo envió directo a la sala médica de un golpe—. Sin embargo, les puedo decir que mi querido sobrino revoltoso en realidad tiene un plan; uno simple, pero muy efectivo dada a la situación Y ese plan incluye el segundo Pranayama de Skanda.

—Su segundo Pranayama, ¿eh? Entonces creo que empiezo a entenderlo: intenta enfadar a Skanda, para que active ese poder de Prana —prosiguió Helios mirando al suelo y haciendo gestos con las manos, como si estuviera juntando piezas imaginarias.

—¡Ding, ding, ding! ¡Acertaste compañero! —dijo Loki feliz y señalando a Helios con una mano y chasqueando los dedos, para luego volver a ponerse el brazo bajo la nuca—. Es un poder de uso limitado, porque gasta mucha más energía que su primer Pranayama. Así que solo puede usarlo una vez en cada combate, porque al desactivarlo termina tan cansado que debe tomar una laaaarga siestecita. Queda tan cansado que apenas puede seguirle el ritmo a su sexy Reina de Hielo en la cama.

—Thor debió haberse dado cuenta de que Skanda ha comenzado a ahorrar fuerzas con esas armas de Prana —explicaba Sigyn—. Así que está intentando enfadarlo para que libere todo su poder de una vez. Y para eso, Skanda tiene que usar su segundo Pranayama. Sin embargo, en mi opinión, es un plan muy arriesgado.

—Muy, muy, muy arriesgado —agregó Loki frunciendo el ceño—. El segundo Pranayama de Skanda, a cambio de un desgaste tremendo, otorga un poder tan bestial y desquiciado como el Meng Amok de Rudra y el Pranayama de San Gabriel.

https://youtu.be/yvkUIyM4ABo

—Si eso es verdad, entonces Thor está loco —dijo Hades preocupándose con la última comparación. Su cuerpo comenzó a temblar al llegarle imágenes de su pelea contra el mencionado arcángel. Pero Perséfone sostuvo la mano derecha de Hades, y con esto logró tranquilizarlo.

Muy pocos sabían que Hades desarrollo un trauma después de su combate con San Gabriel; Perséfone estuvo presente ese día, y aun le costaba creer que alguien con un corazón tan puro como el arcángel mensajero tuviese un poder tan aterrador como ese.

Un poder que solo sirve para matar dioses. Sin duda él hacía honor al significado de su nombre, "Fuerza de Dios". También explicaría por qué Lucifer se esforzó tanto, en vano, por tratar de convencerlo de estar de su lado. Si San Gabriel hubiese elegido estar del lado de Lucifer, tal vez la historia hubiera sido distinta. Tal vez si él hubiese abrazado el camino del guerrero y cruzado la "línea", todo habría sido distinto.

En momentos así Hades, Perséfone y muchos otros dioses que conocían bastante bien a San Gabriel, daban gracias de que él no tuviese la mentalidad fría y paranoica de su hermano San Miguel.

—No te alteres "Hadesito". Mi sobrino fortachón listillo también tiene algo preparado para resistirlo —agregó Loki casi entre risas—. Es cierto que se inspiró en los Astras de otros dioses relacionados con los rayos para crear sus armas de Kenoplasma. Pero desarrolló sus propios ataques. Y uno de esos ataques viene del segundo atributo que él obtuvo.

—¿Segundo atributo? —preguntó Selene todavía con una expresión indiferente—. ¿Cuál es? ¿Borrachera? ¿Glotonería? ¿Violencia? ¿Lujuria?

—¡Ja, ja! ¡Ninguno de esos, aunque no me sorprendería que también los consiguiera! ¡Je, je, je! —decía Loki entre risas—. Su segundo atributo es la fuerza. También es el Dios Nórdico de la Fuerza y la Lucha Libre. Su versión del hechizo Berserker refleja eso, y también lo refleja una de sus armas de Kenoplasma.

—Pero antes tiene que enojar a Skanda lo suficiente como para que libere todo su poder de una vez. Y para eso, está sacando a relucir la muerte de sus primeros estudiantes, revelando su participación en tal evento —dijo Ares teniendo una idea casi general de lo que piensa hacer Thor.

—En realidad él está exagerando un poco su participación en aquellos trágicos eventos, pero sí —decía Loki adoptando una mirada más seria, aunque seguía sonriendo—. Cuando Odín se enteró de que había guerreros de Muay Boran viviendo en nuestras tierras de Midgard, envió a Thor a buscarlos y exterminarlos para evitar que se expandiera la devoción hacia dioses extranjeros.

—Estoy al tanto de eso. ¿Qué no fue ese dios japonés super vanidoso e hijo de puta el que los mato? —pregunto Helios un poco confundido.

—En realidad sí —dijo Sigyn—. Lo que sucedió fue que durante el viaje Thor conoció a Takemikazuchi, quien a su vez estaba buscando a Skanda. Cuando sus caminos se cruzaron, Thor lo desafío a un duelo de fuerza para conocer mejor al dios japonés, y también descubrir qué hacía él en esa parte de Midgard. Obviamente Thor ganó, aunque con relativa dificultad. Y entonces ese dios japonés hijo de puta le explico que estaba buscando a Skanda para matarlo. Luego el muy bastardo de Thor tuvo una idea sádica.

—Ese desgraciado traidor pensó que sería muy divertido hacer que Takemikazuchi y Skanda se mataran entre sí —decía Angrboða con molestia de solo pensar en ese día y referirse a Thor—. Así que le contó a Takemikazuchi sobre los estudiantes que tenía Skanda en un pueblo humano de los Vanir. Le dijo que si iba a esa aldea y los mataba, podría hacer que Skanda apareciera. Ya podrán imaginarse lo que sucedió después.

—Sí, puedo imaginarlo a la perfección —dijo Ares tocándose la barbilla de forma pensativa, imaginándose la muerte grotesca y despiadada del dios japonés.

—Madre mía, madre mía, ¡madre mía! Esto no apunta a nada bueno para Thor —repetía Helios tocándose la nuca y cambiando a una expresión temerosa—. Conozco bien lo fuerte que puede ser el vínculo entre un maestro y un estudiante en las Artes Marciales de las tierras de Asia. Y es comparable al vínculo que hay entre verdaderos padres e hijos.

—Yo también soy conocedor de eso —decía Ares—. Incluso el término chino Shifu, que suelen emplear para referirse a un maestro de Artes Marciales en China, también puede traducirse como "padre". Incluso los estudiantes más jóvenes tienen la costumbre de referirse al más antiguo de ellos como "Hermano Mayor".

—Es lógico. Los estudiantes son quienes heredan la voluntad y el legado del maestro, junto con sus enseñanzas —dijo Loki con un suspiro de lastima—. Por eso, que lastimes al estudiante de un maestro de Artes Marciales, es como si lastimaras a uno de sus hijos. Y esos chicos de aquel pueblo Vanir, fueron los primeros discípulos que tuvo Skanda, y los que le ayudaron a perdonarse así mismo por las muertes que causó al servicio de su tío rencoroso.

—Ahora yo también empiezo a tener un muy mal presentimiento... —dijo Hades, tragando saliva al final, cada vez más preocupado con todo lo que decían Helios, Ares y Loki respecto al tema.

https://youtu.be/mSenytFVorc

[Arena de Duelo].

De repente se produjo un silencio tenso en el ambiente, debido a un mal presentimiento que tuvo a la mayoría del público mezclado con la aterradora aura hostil que comenzaba a emerger desde la arena. Thor también sintió esa hostilidad; de repente se sintió como si estuviera atrapado en una jaula con un animal salvaje. Y aun así continuó hablando.

Le había explicado a Skanda lo mismo que dijo Loki: le reveló que el malvado dios japonés Takemikazuchi atacó esa aldea y mató a los discípulos de Skanda, porque fue el mismo Thor quien le habló de ellos. Claro que, como dijo Loki, Thor lo exagero un poco diciendo que hasta aconsejo a Takemikazuchi sobre cómo matarlos, para hacer el escenario bastante "épico" para su lucha contra Skanda.

En la habitación del Equipo Buda, Odín entendió lo que planeaba Thor. Y lo considero un buen plan; le parecía un excelente plan aprovechar la furia y descontrol del oponente, para que luchara con todo y sin control alguno en el ahorro de fuerzas. Era una estrategia que Indra y muchos otros dioses Devas usaban a la hora de enfrentarse a los dioses Asuras.

—Para ser sincero, esperaba más de ese dios japonés —dijo Thor con una exagerada expresión de decepción, tras terminar de contar su participación en la cadena de eventos que llevaron a esa tragedia—. Logró competir conmigo en fuerza, pese a venir del Panteón más débil y pobre de todos. Y verlo matar a esos peleadores del Dharma, me lleno de muchas expectativas. No espere que tú lo masacraras de esa forma tan maravillosa y creativa. Una verdadera lastima.

—Maldito... —susurro Skanda, teniendo los ojos muy abiertos y la pupila encogida, mientras estaba rígido de pies a cabeza y apretando los dientes con clara rabia. 

Entonces, mientras Skanda seguía en ese estado de Shock, la maza de Thor comenzó a disolverse en un líquido metálico negro parecido al mercurio, dejando el martillo Mjölnir libre de nuevo. Sin embargo, cuando el Kenoplasma líquido cayó al suelo empezó a separarse en dos charcos en ambos lados de Thor.

—¡Vopn Þruma: Járngreipr Zeus! (¡Arma de Trueno: Guantes de Hierro de Zeus!) —recito Thor arrojando su Astra al cielo, mientras levantaba ambos brazos a la altura del pecho.

Entonces el Kenoplasma líquido se disparó hacia las muñecas de Thor, formando una especie de brazaletes unidos a sus guantes de hierro por medio de líneas en cada uno de los dedos y una placa en el dorso de la mano. Luego esos brazaletes de Kenoplasma tomaron forma redondeada, como si fueran algún tipo de pesas para las muñecas. Solo que en este caso eran "pesas" con luces de neón de color violeta, y el mismo símbolo "Þ" grabado en el dorso de ambas manos, dándole a los brazaletes una apariencia cibernética y siniestra.

Una vez creado sus nuevas armas de Kenoplasma, Thor extendió el brazo derecho y atrapo la empuñadura corta de su Mjölnir sin siquiera mirarlo. Luego Thor se perforo el centro del pecho con los dedos de la mano izquierda. Sus brazaletes emitieron descargas eléctricas de color purpura, las cuales pasaron de su mano izquierda al pecho de él, y siguieron con el resto de su cuerpo, para entonces dar inicio a otra transformación.

Su cuerpo empezó a emitir un vapor tan caliente que incluso carbonizo el suelo bajo sus pies. Sus ojos azules y marcas brillaron con mayor intensidad, mientras descargas eléctricas azules se mezclaban con las violetas de sus muñecas y el centro de su pecho. En sus luminiscentes ojos se materializo un punto de luz morada fantasmal a modo de pupila.

Su piel pálida gano una ligera coloración blanco purpura, y toda la grasa restante de su cuerpo fue consumida de inmediato. Ahora su cuerpo era obeso, pero por la cantidad de masa muscular que tenía; tenía casi tanta masa muscular como Ganesha, quien podría ser un campeón mundial de fisiculturismo.

—Vaya, vaya, vaya. Recurre a sus fuentes alternas de energía, y ahora pasa a usar su forma como Dios Nórdico de la Fuerza —decía Freyr con una sonrisa sarcástica—. Se ve que aprendió de su derrota a manos de San Gabriel.

—Sí. Y también aprendió de la última forma de Zeus para llenar sus músculos con magia de rayo y Kenoplasma líquido —dijo Gerðr con una expresión estoica—. Gracias a que es un maestro del Vacío, el Kenoplasma no lo daña ni provoca algún fallo en su organismo. En lugar de eso, multiplica sus capacidades físicas tal como lo hace el Prana.

—Básicamente hace lo mismo que Hela y el hermano menor de San Gabriel —agregó Skadi frunciendo el ceño—. El bastardo también aprendió de su derrota a manos de Hela, cuando llego a mi tierra natal y participó en los desafíos del jarl Skrymir.

—Me acuerdo de ese concurso hilarante. ¡Je, je, je! —dijo Freyr divertido—. En uno de esos desafíos, el padre de Skanda fue convocado por Skrymir y se disfrazó de un gigante Jotun de fuego llamado Logi, para participar en un concurso de comida contra Loki, y Agni le ganó sin problemas. El siguiente concurso fue una carrera, en la que participó Nezha disfrazado del Jotun Hugi contra el discípulo de Thor, Þjálfi, y obviamente ganó Nezha.

—Después de los desafíos de bebida y levantamiento de pesas, Thor participó en un último desafío: una lucha libre contra Hela, quien estaba disfrazada de una gigante Jotun llamada Elli. Y Thor perdió de nuevo —prosiguió Gerðr sonriendo con burla—. Le doy crédito a Skrymir por planificar tan excelente plan y magia de ilusión. Sin embargo, después de que Thor descubrió que esa anciana era la mismísima esposa de San Azrael, se interesó más en el Kenoplasma, y aprendió a cómo aprovecharlo con su estilo tan simple y violento.

—Aunque, al igual que sucede con las técnicas de Prana que potencian el cuerpo, usar el Kenoplasma de esa forma hace que consuma más rápido su vigor. Y por ende, también hace que consuma más rápido la grasa sobrante de su cuerpo —dijo Skadi, notando un paralelismo entre el segundo poder de su marido y ese truco de Kenoplasma.

https://youtu.be/woWt-QPUVxY

Mientras tanto, luego de completar su transformación, Thor saco los dedos de su pecho y la herida que se infringió a sí mismo sano tan rápido que ni siquiera tuvo tiempo de sangrar. Levantó el martillo, apuntando al cielo. Y entonces descendió el martillo al suelo en un golpe que estremeció la arena, provocó un retumbar aterrador, e invoco desde las nubes tormentosas relámpagos violetas que impactaron sobre el dios hindú.

Los impactos de aquellos rayos lograron hacer reaccionar a Skanda, aunque no le causaban tanto daño como para cubrirse o esquivarlos. Sin embargo solo levanto ambos brazos para cubrirse de un ataque cuerpo a cuerpo de Thor. El dios nórdico avanzó hacia él, mientras algunos rayos se concentraban en su brazalete de Kenoplasma izquierdo. Su puño izquierdo desprendió una luz fantasmal violeta, y luego una pequeña explosión de Kenoplasma y electricidad al golpear a Skanda.

La fuerza del golpe envió al dios hindú hacia atrás, con los antebrazos entumecidos y los brazales abollados. Skanda entendió que esa nueva arma de Kenoplasma concentraba dicha energía en los puños de Thor, y al parecer usaba los relámpagos mágicos para causar un daño adicional. Así que, en medio del retroceso, se detuvo al sujetarse de un pilar con la mano derecha. Después partió el pilar desde abajo con una patada y, con la misma mano, dejo caer el pilar contra Thor, mientras éste atacaba con el martillo.

El pilar explotó cual granada, dejando tras de sí una cortina de humo que le impidió a Thor ver a su oponente. De modo que, cuando volvió a atacar con el puño izquierdo envuelto en Kenoplasma, acabó golpeando el aire y su barbilla quedo vulnerable a un perfecto uppercut, que despejo la cortina de humo con una onda de viento y le volvió a destrozar la mandíbula inferior.

Una vez más su mandíbula destrozada se regenero casi al instante en que fue pulverizada cual cristal. Y mientras llovía su propia sangre sobre él y su oponente, arrojó el martillo hacia atrás y, con una orden mental, lo hizo volar para rodearle la espalda hacia la izquierda y sorprender a Skanda. 

A pesar de que el dios hindú se protegió la cara con el puño derecho, el Astra era tan poderoso por sí mismo que le destrozó la mano y con el impacto le lastimó la cara. Acto seguido Thor atrapó el martillo con la mano derecha, y de inmediato golpeó el otro lado del rostro de Skanda, logrando agrietarle la mandíbula y romperle algunos dientes.

"Tal parece que el dato extra sobre la muerte de sus queridos estudiantes fue un duro golpe psicológico para él. Quizás no necesite obligarlo a liberar su máximo poder", pensaba Thor con una expresión molesta, dándose cuenta de que la concentración de Skanda disminuyó bastante. Pero además, el dios nórdico también estaba afectado por las palabras anteriores de Skanda; ahora sí que empezaba a sentir ganas de matar al dios hindú.

Sin embargo, antes de volver a golpearle la cabeza con el martillo, Thor quedó paralizado de pies a cabeza al percibir una repentina sed de sangre, que solo podría comparar con la de un animal enfadado. En este instante, aunque todo pasaba en apenas un segundo, él notó que los ojos de Skanda resplandecían de un intenso color rojo flameante, a pesar de haber perdido la consciencia por este breve momento a causa del segundo golpe a la cabeza.

Entonces Thor se apartó unos quince metros hacia atrás, con una expresión de sorpresa pura.

"Ese segundo golpe en su cabeza lo había hecho perder el conocimiento... Y aun así sus ojos seguían teniendo más vida que antes, e incluso tuve la sensación de que si no me alejaba, me habría dejado inconsciente con algún golpe", pensaba Thor desconcertado.

https://youtu.be/WP7u3EF3Mns

—Miserable... —decía Skanda tras haber recuperado la consciencia, y tomó una breve pausa para escupir sangre y bajar los brazos, antes de seguir hablando con su mirada baja y sombría—. Robar, esclavizar, asesinar, violar. ¿Por qué a ustedes les parece tan divertido? ¿Cómo ustedes y sus fanáticos pueden idolatrar actos tan deshonorables, cobardes y perversos como esos? ¿Qué significa realmente para ti el valor de una vida? ¿Qué son para ti el honor, el legado y los sueños de otros? ¿Cómo puedes siquiera ignorarlos?

"¿Qué mierda está pasando? De repente se puso a decir un montón sermones ridículos, y cada palabra me hace sentir como un pequeño niño siendo reprendido y amenazado por un gigante. Es casi el mismo tipo de intimidación que impone Rudra cada vez que habla", pensaba Thor, confundido y sorprendido, notando un aura hostil e intimidante en Skanda, que se parecía mucho a la que suele transmitir Rudra cuando se ponía serio. Y también se parecía mucho a la que transmitió San Gabriel por unos momentos cuando al fin se puso serio. 

Además comenzó a tener la sensación de que algo grande se avecinaba.

—No sé de qué mierda estás hablando. Y ni siquiera me importa —dijo Thor volviendo a tener un semblante serio y molesto—. Todo lo que me importan son la fama, el placer y mi satisfacción de aplastar todo lo que me molesta. Todo lo demás me importa una mierda.

Luego de escuchar esas palabras, Skanda quedó en un profundo silencio; se sumergió en un remolino de sus propias memorias.

Recordó su amarga vida al servicio del ejército del Devaloka y de su tío Indra, actuando como un arma contra los Asuras y los Rakshasas.

Recordó las décadas siguiendo las enseñanzas de Rudra junto con San Gabriel, Zhu Rong y Nezha, igual que una pequeña familia de inadaptados que encontraron un lugar donde estar en paz.

Y recordó el momento en que se convirtió en hermano adoptivo de cinco niños huérfanos, cuyos padres murieron durante una de las invasiones de los colonizadores fanáticos de Zeus y Odín.

Niños que crecieron siendo ignorados y rechazados por los demás. Jóvenes humanos que pudieron haber elegido una vida de violencia y muerte, si jamás hubieran conocido a Skanda, quien con algunos sparring y lecciones de boxeo les enseño a ser fuertes, les mostró una meta a la que aspirar y les dio un ejemplo de rectitud en una tierra dominada por hombres y mujeres malvados.

Entonces la mente de Skanda regreso a ese día, en que por fin se convirtió en un maestro y se preparó para regresar a su hogar a enfrentar su pasado. Ese día en especial, en el que se despidió de su maestro que le enseñó a hallar la redención, abrazar el amor que encontró con Skadi y luchar por un nuevo propósito...

—Escuche que ese arcángel surrealista, San Gabriel, consiguió su primer estudiante; un joven llamado Sansón, con un inmenso potencial sin refinar. San Gabriel decidió compartir lo que aprendió de mí, como una forma de expandir mi legado, ayudar a otros y... agradecerme por mis enseñanzas... Conociéndote, sé que también quieres hacer lo mismo. Y diga lo que diga, no podré convencerte de renunciar a esas ideas dramáticas... Así que, todo lo que puedo decirte ahora, es que te cuides, te alimentes bien y nunca dejes de entrenar. No dejes de pelear por lo que crees correcto. Y esperare ansioso por ver a tus primeros estudiantes convertidos en grandes maestros como tú...

El dolor, la impotencia y la furia por haber perdido a sus primeros estudiantes, haberles fallado como maestro al no poder salvarlos, haberle fallado a Rudra en devolverle la gratitud por sus enseñanzas, haber fracasado como marido al no proteger a la familia de Skadi, y ahora haber escuchado las palabras sádicas de Thor, se acumularon dentro de Skanda hasta que explotaron cual volcán en erupción.

https://youtu.be/GqVw3etrmVA

La liberación de la suma de esas emociones multiplicadas por todos los factores antes mencionados, fue el detonante para la activación de su segundo Pranayama, Asuragni: Amok [Fuego del Asura: Furia Asesina].

—Si esa es tu respuesta, entonces ya está decidido: si mis palabras no sirven para hacerte comprender el auténtico valor de una vida, entonces usare mis puños para que te arrepientas de no haberte preocupado jamás por una.

Decía Skanda, mientras su cuerpo también comenzaba a emanar un vapor tan intenso, que el suelo bajo sus pies fue carbonizado, y pronto se convirtió en un torbellino de fuego que ascendió más allá de los cielos, e iluminó todo con una luz comparable a la del sol.

"Uh, oh", fue lo que pensaron Freyr, Loki, Helios, Zhu Rong, Eleggua, Hermes y varios otros inmortales más, que conocían lo suficiente a Skanda para saber lo que estaba por ocurrir. Y tuvieron razón.

La piel de Skanda comenzó a tornarse de un color rojizo metálico, mientras sus tatuajes adoptaban un color dorado con delineado negro y se expandían un poco más. Su cabello creció unos centímetros de longitud, y adquirió un color que iba de dorado a naranja y rojo, de modo que parecía una melena de llamas que le llegaba hasta por debajo de los hombros. 

También comenzó a ganar un poco más de definición y masa muscular, de forma que gano otros otros diez centímetros de estatura, y su ropa tuvo que ajustarse a su nueva complexión. Por último sus ojos ganaron un brillo dorado, mientras su iris y pupila se convertían en un punto luminiscente rojo flameante.

Para los inmortales nórdicos fue como ver algo parecido a un Jotun de Fuego. Sin embargo, para los demás inmortales, fue como ver la personificación de un Dios del Sol. Y en el caso de los inmortales hinduistas, el regreso del Dios de la Libertad y la Luz del Sol.

Era la forma de Skanda como el nuevo dios Savitr.