Mis ojos me pesaban y mi pulso se sentía a penas, ya casi no respiraba y obviamente no podía hablar.

-Tengo... Mucha sed, Dashi...-alcancé a susurrar mientras tenía los ojos cerrados.

Escuchaba sus sollozos y sus palabras "no puede ser" "soy un idiota" "mate a quien más amo en este mundo"

Cuando sentí que ya era la hora de "irme" levanté mi mano para que Tadashi la tomara, él entendió y pude decir con dificultad.

-Te amo, Dashi... Gracias por estar conmigo ...

Tadashi rompió a llorar y gritó:

-Nooo!

De pronto sentí que un líquido cayó en mis labios, en cuanto cayeron las primeras gotas mi sed se hizo más intensa y bebí y bebí. Después de unos segundos me di cuenta que Tadashi había puesto en mis labios, su muñeca con una cortada, me estaba dando de beber su sangre.

Bebí con avidez y sentí mucho placer de pronto Tadashi pudo quitar su muñeca de mi boca y comencé a respirar agitadamente, mi corazón latía con tal fuerza que parecía que se iba a salir de mi pecho y me hacia daño, de pronto sentí que mis caninos se alargaban y por último sentí como mi corazón dejo de latir pero aún seguía consiente y con vida.

La habitación se veía mejor y alcance a ver a Tadashi con claridad, él tenía mal aspecto, estaba muy pálido y parecía que había llorado sangre. Yo estaba muy confundido.

-Perdóname, Hiro... Casi te pierdo y ahora te he condenado a la vida eterna, a esta maldición que también me hicieron a la fuerza.

Yo no comprendí lo que pasaba, estaba muy confundido, me levanté de la cama y me mire al espejo. Me veía diferente, mi piel era blanca casi transparente pero irónicamente mis mejillas estaban sonrosadas, debía ser por la sangre de Tadashi. Mis ojos que siempre eran halagados eran más bellos... Yo en sí era más bello, eso era lo que también tenía Tadashi de diferente... Era mas atractivo.

Después mire el reloj, eran las 3 am , trate de razonar las cosas y por fin me decidí acercarme a Tadashi, bese sus lágrimas y después tome un pañuelo y se las sequé.

-Tranquilo, Dashi, todo estará bien, estamos juntos- le dije con una sonrisa.

-No lo entiendes, Hiro, ahora soy un monstruo, un asesino! Debo matar para vivir y debo estar despierto en las noches, jamás dormiremos como antes, te he convertido en alguien como yo. Viviremos eternamente ...

-Eso es bueno...

La verdad no sabía que estaba pasando, sólo sabía que iba a estar con Dashi para siempre, me acerque y lo bese en los labios, mi lengua se introdujo en su boca y siguió el beso.

-Vámonos, Hiro...

-Y tía Cass?-pregunte sinceramente preocupado.

-Después pensáremos en algo -dijo él me tomo en brazos y salió por la ventana de un salto.

No lo podía creer, parecía que estaba soñando. Eso sería lo más lógico. Por fin llegamos a la parte marginada de la ciudad y entramos en una casa que se estaba cayendo a pedazos. La verdad no me importo, estando con Tadashi nada malo me pasaría, él es mi angel guardián y mi hermano ... También mi amante.

-Dashi... Quiero que me cuentes que esta pasando, pero dime la verdad... En qué me has convertido ...

Tadashi me miro un segundo con una gran tristeza hasta que pudo decir:

-Somos seres de la noche...Dormiremos de día ... Jamás volverás a decir : "buenas noches, Dashi"

Lo mire con atención ... En verdad era bellísimo, no importaba sí ahora éramos demonios o ángeles lo único que me importaba era que sea como sea el destino nos había dado una nueva oportunidad para estar juntos.