Han vuelto
-¡Chicos, vengan, rápido!- gritaba Chuck a tiempo que las puertas del laberinto se abrian.
Todos en el laberinto estaban espectantes ante los que podia ocurrir cuando estas llegaran a su tope. Newt y yo nos acercabamos no muy convencidos. Cuando las puertas dejaron de moverse todos miraron al suelo, decepcionados.
-Te lo dije, Chuck- dijo Newt con la vista en el laberinto- No volveran-.
Newt y todos los que estaban alli se fueron alejando de las puertas lentamente para comenzar uno de los que seria los dias de trabajo mas duros. Yo me quede con Chuck, parecia que iba a empezar a llorar en cualquier momento. Me agache a su altura y lo abrace. Él se apoyo en mi. No mucho despues Chuck se aparto bruscamente de mi y se quedo mirando el laberinto. Al ver su reaccion yo tambien me gire. Thomas y Minho cargaban con Alby hasta la entrada del Claro. Rapidamente fui a ayudarles y juntos los llevamos a la enfermeria.
Los mediqueros se encontraban revisando a Thomas y a Minho mientras que cuidaban de Alby. Chuck, Newt y yo esperábamos fuera la conclusión de los mediqueros. Chuck estaba delante mio y yo le abrazaba con mi brazo mientras que Newt sujetaba mi otra mano con delicadeza. Apoye mi cabeza en el hombro de Newt. Estaba muy preocupada por los tres. Justo en ese momento salio Jeff, uno de los mediqueros. Newt se acerco y hablo con él durante unos minutos. Cuando volvio nos dijo a Chuck y a mi que nos fuéramos a hacer nuestras tareas diarias y que ya nos iría informando de lo que fuera ocurriendo. Acompañe a Chuck hasta la Hacienda para que algún clariano le dijera lo que tenia que hacer y me fui hacia la huerta. Allí estaban todos trabajando como de costumbre. Pasaron las horas y Newt no venia. Yo seguía recogiendo las frutas que habían madurado. Después de un descanso para comer a todos nos reunieron en la Hacienda para hablar sobre Thomas y lo ocurrido en el laberinto.
Fue una reunión fuera de los normal. Normalmente solo reunían a los guardianes de cada oficio, pero esta vez nos habían reunido a todos los clarianos. Gritos, discusiones y demás cosas se oían entre el barullo que se organizaba en la Sala de Reuniones. Yo estaba harta de la situación, iba a salir de aquel lugar cuando de repente Gally hizo callar a todos.
-Este maldito pingajo, ha salido al laberinto y ha vuelto tras una noche, como si nada- dijo furioso- Yo digo que deberíamos desterrarle del Claro-.
-¿Y quien te garantiza que no va a volver?- dijo alguien de los presentes.
Algunos clarianos pensaban lo mismo y empezaron a hablar de nuevo entre ellos.
-Minho,- dijo Gally haciendo que todos se callaran de nuevo- como guardián de los corredores, ¿qué crees que deberíamos hacer?-.
-Este pingajo de aquí se quedo a salvar a Alby mientras yo corria para salvar mi fuco trasero- comenzó a decir Minho- No se si es valiente o idiota. Lo que si se es que necesitamos mas como él-.
Toda la sala estallo en murmullos de nuevo cuando Minho dijo una ultima cosa.
-Yo digo que lo hagamos corredor-
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