Seokmin no podía dejar de mirar el teléfono frente a él, Jihoon le había dicho que no tenía porque contarle a sus padres tan pronto, pero si dejaba pasar más el tiempo terminaría por no decirles hasta tener a frijol en sus brazos. Lo único que le quedaba era llamar a casa y decírselos por teléfono porque no tenía el valor suficiente para regresar y decírselos de frente. Por suerte Joshua también tenía que lidiar con ello porque Seokmin no iba a hacerlo solo.

—¿Qué les decimos?— Le preguntó con el teléfono en la mano.

—Que vas a tener un hijo con tu novio.— Respondió Joshua como si fuera lo más simple.

Seokmin le dio un pequeño golpe con el codo y regresó su mirada al teléfono. No era la mejor forma de dar una noticia así pero no tenía muchas opciones. Sus padres iban a estar un poco molestos con él... Muy molestos con él, en especial porque Seokmin no tenía la valentía para ir a casa y hablarles de frente, y también porque ellos ni siquiera sabían que Seokmin tenía un novio.

—¿ya les dijiste a los tuyos?

—No, pero por ahora no es importante que ellos sepan, llevo años sin verlos y no saben casi nada de mi vida. Dará lo mismo si se los digo ahora que cuando el bebé nazca.

Hizo un puchero. Joshua no dependía de sus padres y no vivía con ellos por lo que para Seokmin tenía sentido, o algo así, no estaba seguro porque su cabeza aun estaba en lo que pensarían sus propios padres. Ya no podían pedirle a Seokmin que regresara a casa y obligarlo a cualquier cosa, Seokmin ya era mayor de edad, pero aun tenía miedo. Ellos estarían decepcionados porque aun no terminaba sus estudios. Y porque ni siquiera sabían de Joshua.

—Van a molestarse mucho.

—No importa si lo hacen.— Joshua se encogió en hombros. —¿Qué harán al respecto? Eres un adulto, y aun si te quitan el apoyo económico yo me encargaré de ti.

—No dirás eso cuando tengas que pagar el hospital.

—No me preocupa el dinero. Se manejarlo.

Volvió a hacer un puchero y suspiró negándose a marcar, casi quería lanzar el teléfono al otro lado de la habitación y no decirle nunca a sus padres, o darle esa tarea a Jihoon aunque no fuera su problema. Lo peor era que no quería quejarse porque él había tomado la decisión de tener a frijolito, de haber decidido lo contrario nadie tendría que enterarse y no tendría que pasar por esto. Aun así no iba a cambiar de opinión.

Bien, comenzó a marcar el numero y dejó que sonara en silencio. Joshua tomó su mano. Su madre respondió.

—Hola mamá.— Saludó tímidamente.

—¿Seokmin? ¿Qué pasó?— Y ella descifró que no llamaba solo para saludar. Seokmin respiró profundo. —¿te metiste en algún problema?

—No, es que...— Se lamió los labios incomodo.

—Seokmin, dilo ya.

—Voy a tener un bebé.— Balbuceó lo suficientemente fuerte para no tener que repetirlo.

Hubo silencio.

—Seokmin, no bromees...— Se quedó callado y su madre suspiró. —Tengo que hablarlo con tu padre.

Y ella colgó.

Su puchero aun estaba allí cuando apartó el teléfono de su rostro. Y Joshua lo abrazó. Sabía que su madre estaba muy molesta con él y que probablemente llamaría despues de que su padre se enterara.

Al menos ya le había dicho.