Parte 3|Capítulo VI
❇❇❇
Me han explicado que las ilusiones tienen dos fases principales:
✴La primera fase se da cuando: una persona te hace muy feliz, te imaginas una y mil espléndidas posibilidades de estar para siempre a su lado y no te importa el mundo a tu alrededor.
✴La segunda sucede al instante en que: esa persona te rompe el corazón en millones de pequeños trozos, regresas al mundo en el que solías vivir y todo se vuelve gris.
En esta última fase: terminas peor que antes.
Tienen razón. Lamentablemente, yo ya experimenté ambas fases.
Extraño mucho al Steve de antes, él que me hacía sonreír con un solo mensaje, quien me hacía suspirar con sus tiernos besos de emoji.
Mis amigos y mi hermana me advirtieron desde el principio que él no es para mí, que merezco a alguien mejor en mi vida, que él me podía lastimar. No obstante, hice caso omiso a sus hipótesis formuladas. Y en lugar de eso, me enamoré de él como jamás me había enamorado en mi corta vida.
Quizás es porque nunca me había enamorado antes de que él llegara a mi vida. Creí que las personas exageraban al decir que se sufre demasiado por un amor. Me equivoqué.
Todavía no he logrado comprender como es que yo era la mujer de sus sueños y me dejó ir, ni siquiera se molesto en decirme que no lo volvería a hacer, sino que aceptó la situación sin ningún problema. Él no era el chico de mis sueños; pero se convirtió en uno de mis sueños por cumplir.
Y ahora, él se ha convertido en mi sueño frustrado.
Daría lo que fuera por viajar en el tiempo y congelar ese hermoso momento en que sólo eramos él y yo al otro lado del teléfono, susurrando oraciones de amor eterno que evidentemente se desprendían con una vehemente sinceridad de nuestros labios, (que lastimosamente, nunca se juntaron).
Es triste y complejo cuando te enamoras con tanta intensidad y no puedes estar junto a esa persona.
Duele cuando intentas eliminar ese tornado de sentimientos y no puedes, ya que ese amor es más fuerte de lo que creías.
¡Menuda distancia!
*
En el amor no se sabe cuando te romperán el corazón, cuando caerás en un abismo de desilusión, cuánto durará lo que sientes o cuándo serás capaz de aceptar que esa persona no era para ti.
Siempre me he preguntado ¿a qué lugar se transporta el amor después que no es correspondido?
Tal vez ese amor no se va, sólo queda almacenado en el olvido, o quizás existe un pequeño espacio en nuestras mentes para guardarlo y dejarlo en off. Independientemente de cual sea la magnitud de ese sentimiento. No lo se.
Pero de algo si estoy segura, que de amor nadie muere. Bueno, eso me han dicho.
Estúpidas e inútiles ilusiones, jamás pensé que me pasaría algo así. Nunca creí en las famosas mariposas en el estómago, ni mucho menos en el amor a distancia.
Ahora me doy cuenta que estaba totalmente errada. Esto es tan inverosímil.
❇
Estoy tumbada en mi cama con mi mirada perdida entre el techo y las paredes cubiertas de un color salmón suave y discreto, absorta en mis tristes y lóbregos pensamientos. La obscuridad que inunda mi habitación, ha creado un efecto de invisibilidad en mí.
Él era el único que me hacía sentir visible y presente con todo lo que me decía. Pero como las personas suelen decir "nada es para siempre". Todos los días lo único que hago es pensar en Steve, enamorarme más de él a cada segundo de mi vida.
Nuestras conversaciones han ido mejorando un poco, a veces le escribo yo, a veces él. Sin embargo, presiento que no debo seguir comunicándome con él. No se porqué.
—Rose, ¿hablaste con Steve? —inquiere Ashley, sacándome de mis pensamientos, 5 días después de que hablamos en el autobús, cuando me propuso cuestionarlo sobre la respectiva conversación que tuvieron dos meses atrás.
—Hola, amiga —respondo breves segundos después—, si —le informé y todos los recuerdos se posaron en mi mente y ni siquiera pude notar que Steve ya inundaba mis pensamientos, de nuevo—. ¿Quieres leer lo que hablamos?
—Eh, si claro princesa —acepta provocando que regrese a la realidad—, si así lo deseas.
Ojalá y existiera una aplicación para archivar los sentimientos y el amor. Sería de mucha ayuda en estos instantes, más bien la solución para mi desilusión.
En diversas ocasiones, he llegado a creer que Steve es un hechicero, brujo o mago que se llevó cautivo a mi corazón y le ha lanzado un poderoso hechizo para que no deje de pensar en él. Es como si él estuviera atornillado a mi mente y adherido a mi necio corazón que sólo quiere continuar amándolo.
Segundos más tarde, le envié las capturas de pantalla de la conversación entre Steve y yo. Coloqué mi celular encima de la mesita de noche que está ubicada a un extremo de mi cómoda y mullida cama, con el objetivo principal de regalarle un poco de tiempo a mi amiga, mientras lee todo.
—Bueno Rose, ya leí todo —responde minutos después—, creo que eso fue lo mejor. Se que lo quieres, pero no le puede decir lo mismo a todas las chicas que conoce.
Amo la forma efusiva en que Ashley me dice las cosas. Ella siempre está ahí cuando más la necesito.
—Eso creo Ashley.
La tristeza regresó a mi, es como si siempre me acompaña, se ha convertido en mi sombra.
—Es lo mejor linda, sigan siendo amigos.
El problema es que no me conformo con ser sólo su amiga...
—Tal vez si.
No pude evitar que se originara un inmenso nudo en mi garganta, las lágrimas conminaban con escaparse de mis ojos, agité mi mano en forma de abanico para evitar llorar por él. Lo logré, pero no se si podré seguir soportando el dolor, la desilusión y la tristeza.
***
—¿Y qué haces? —me cuestiona Steve, quien recién se ha conectado para responder mi mensaje, esta vez le escribí yo, ya que él me escribió ayer.
—Ayudándole a mi hermana con una tarea —le informo, Emeisy está escribiendo una corta historia en inglés, yo le doy la mayoría de ideas, a ella casi no le gusta utilizar mucho su cerebro en cosas como estas; mi deber es revisar su gramática y ortografía—. ¿Y tu?
—Manejando.
—Que bien, ayúdame 😉
—Esta bien, te ayudo, quiero ver como van.
—Es que estoy escribiendo en el cuaderno mi amor.
—Por eso, déjame ver.
Con gusto lo dejaría ver lo que tengo hasta hora, pero el inútil celular que poseo no me permite tomar fotografías en la noche, bueno si se puede, pero la imágenes no son de alta resolución, en otras palabras quedan oscuras y no se mira nada. Triste ¿no? Eso es gracias a mis padres que dicen que no tenemos que ser de esas personas que compran teléfonos de más de cien dólares.
—Ash, es que no te la puedo enviar gracias a mi tonto teléfono. 😬 Pero gracias por tratar de ayudarme.
Yo y mi gran bocota, si no podía enviarle la imagen ¿para qué le pedí ayuda? Ay Rose.
—Tranquila, no te enojes.
—Es que me choca que no puedo tomar fotos en la noche.
—Ya veo. —Se limita a responder y un minuto después pregunta—: Oye, ¿te puedo llamar?
—No, es que mis padres están en casa 😕
—Me los saludas, entonces 😂 —me pide sabiendo que ellos no se saben ni su nombre.
—Ya están dormidos.
—Que bien y ¿me vas a dejar entrar? 😏
—Claro amor.
—Entonces ya llego, mi vida. —Bromeó. Amo cuando lo hace.
—Aquí te espero 😉 —le indico continuando con la broma que él inició.
Como me hubiera gustado escuchar su voz de nuevo, tengo alrededor de un mes desde nuestra última llamada. Extraño su voz, la melodía de su risa, el espléndido e incomparable sonido de sus besos y esas promesas que quedaron olvidadas en el pasado.
—Jajaja 😂😂😂
—Te apuras 😜
—Yo siempre lo hago.
—¿Te puedo hacer una pregunta? —lo interrogo. Espero no arrepentirme de esto después.
—Sí, ¿porque no?
—Esta bien —¡Dios, que nervios! Bien, aquí voy—, Steve, ¿me quieres?
—¿Por qué la pregunta?
—Solo quiero saber —admití con los nervios a flor de piel y un escalofrío fugaz que recorre mi cuerpo. Espero una respuesta favorable de su parte. De verdad la espero.
—¿Y tu a mi? —Cuestiona, devolviendo la pregunta, pienso que la respuesta es negativa. No debí preguntar.
—Amor yo te quiero cada día mucho más.
No puedo mentirle, es lo que realmente siento ya no continuaré ocultándolo.
—Yo también —expresó, pero no se si fue sincero conmigo—; aunque hay una gran diferencia.
Sé a lo que se refiere. Somos muy diferentes al él le gustan ciertas cosas y yo prefiero otras. Me imagino que no está de acuerdo con eso.
—Si, lo sé.
—A ver como nos va. —Comentó.
¿Qué? ¿Cómo nos va en qué? Me dejo con un gran signo de interrogación en mi cabeza. No haré ningún comentario, puesto que no quiero seguir haciéndome falsas ilusiones. Sin embargo, no se a que se refiere.
—Solo Dios sabe. —Concluí.
Seguimos hablando durante 2 horas más sobre temas triviales y ya era hora de despedirme, siempre soy yo la que me despido debido a que mis padres me permiten estar despierta hasta las 9:00 p.m.
—Amor, ya me voy a dormir —le indico, quisiera seguir hablando con él, pero es casi imposible—. Buenas noches 😘😘😘
—Esta bien, buenas noches —se despide—, te quiero 😘😘😘
—También te quiero mi vida.
Aún no puedo creer que me volvió a decir te quiero, hoy dormiré en paz. Muy a gusto.
—No te ilusiones Rose, solo lo dice por costumbre —me interrumpe mi conciencia.
—Y tu que sabes —respondo enojada por haberme arruinado la noche.
—Eres una tonta, no te das cuenta que él ya no te quiere, solo te lo dijo por lo que hablaron.
—Ya cállate. No sabes nada.
—Como quieras, sigue soñando en las nubes de colores. Ojalá y tu caída no sea tan dolorosa —me advierte con evidente sarcasmo—; solo digo. —Finaliza haciendo que mis esperanzas disminuyan al 10%.
Mi conciencia tiene toda la razón. Steve ya no me quiere como antes, quizás aún existan residuos del hermoso amor que me demostraba. Sin embargo, las migajas de este amor, no sacian mi hambre de amor verdadero, ni las esperanzas de que algún día tengamos la posibilidad de estar juntos en un futuro.
Ojalá y él se volviera a enamorar de mi.
En este preciso momento, quiero ir a reclamarle al tal "CUPIDO" y obligarlo a realizar su trabajo como se debe. Él es el culpable de los innumerables desastres amorosos alrededor del mundo.
Deberían de sustituirlo por alguien mejor. Ya es demasiado. Hay que darle su merecido.
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Nos leemos en el próximo capítulo. 😘😘😘
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