El día que te conocí
❇❇❇
Cuando me di cuenta de que el mensaje que había recibido era de una persona que jamás había visto en mi vida y se que quizás mi destino jamás me hubiera podido permitir conocer a esa persona, no estoy segura si contestar o no.
Ay Dios ¿qué hago? Lo bueno es que me lo envió hace días y yo como casi no entro a Facebook mucho menos para ver solicitudes de mensajes no me había percatado de que él es cristiano; lo supe porque su mensaje dice:
Dios la bendiga.
Yo solo quería
saber de su iglesia.
×Bueno primero revisaré su perfil para saber que información tiene —digo en mi mente.
Una vez que he revisado su perfil, descubro que su foto no la ha actualizado desde hace meses o años no lo sé porque no puedo ver nada solo su foto de perfil y sus amigos, no tenemos ni un tan sólo amigo en común. Al final decidí contestarle con la esperanza de que no esté conectado o se haya aburrido de esperar mi respuesta.
Le escribí amén y ¿qué creen? Me contestó al instante ni siquiera me dio tiempo para responderle su segundo mensaje.
Me siento tan extraña hablando con alguien que sería muy difícil de conocer en persona, sobretodo porque mis padres no me permiten salir con ningún chico mucho menos que sea desconocido. Ellos me quemarán viva o me encerrarán en una torre con un dragón guardián que no le permitirá la entrada a nadie.
No les diré nada porque no es necesario que sepan que es lo que hago cada segundo de mi vida, ¿o sí?
Seguimos en el chat, él me hace las típicas preguntas que cualquier persona hace cuando se conoce a alguien. Como por ejemplo: ¿Donde vives? ¿A que iglesia vas? ¿Cuál es tu color favorito? ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre?
________________________
___________
Conversación de Messenger.
—Dios la bendiga.
Solo quería saber de tu iglesia.
—Amén—Le respondo.
—¿Como esta?—Me pregunta en pocos segundos, no tuve tiempo de contarlos.
—Bien, ¿y usted?
—Bien... ¿Y de dónde es?
—De El Salvador, ¿y usted? —indago en espera de su respuesta, pienso que no es de mi país, ya que su perfil muestra que es de otro lugar.
—De Estados Unidos —contesta—. Mis padres vivían ahí y tienen una casa en la ciudad.
—¿En serio? Que bien.
—Si y ¿cuál es tu color favorito?
—El rosado. ¿Y el suyo?
—El rojo oscuro.
—Que bien.
—Y ¿que hace? —inquiere interesado en mi respuesta.
—Estoy leyendo un libro —comento—. Y usted ¿que hace?
—Estoy viendo televisión.
—Ahh si? Y ¿que está viendo?
—Una película.
—¿Cuál es el nombre?
—Underwater.
—Suena interesante.
—Si, y ¿cuántos años tienes? —pregunta.
—20 y ¿tu? —comuniqué regresando la interrogante.
—Yo tengo 21 y quiero quedarme ahí. Voy a orar para no seguir cumpliendo años.
—Pero con el tiempo se adquiere más sabiduría ¿no crees?
—Eso sí.
—Oye y ¿cada cuanto vas a la iglesia?
—Casi todos los días ¿y tu?
—Solo los sábados y domingos. Es que en mi iglesia solo nos reunimos porque aquí las personas trabajan mucho y casi no les queda tiempo solo los domingos.
—Ohhh ya en mi iglesia se hacen cultos todos los días.
—Entonces ustedes están mejor así.
—Si claro.
—Así me han dicho que allá sí hacen todos los días.
—Si aquí es diferente. Bueno ya me tengo que ir a dormir.
—Okay buenas noches —se despide—. Dios te bendiga.
—Amén buenas noches. —respondo, finalizando nuestra corta conversación.
________________
_________
Al principio me pareció un poco extraño que alguien de otra iglesia quisiera ser mi amigo en Facebook, sin embargo, él me pareció un chico muy agradable y respetuoso.
Después de unos minutos de chatear, me di cuenta de que ya es algo tarde y que mañana tengo que madrugar para ir a la universidad. No se porque tuve que tomar ese horario tan vespertino, ni modo. Así que, me despedí de él porque también estaba un poco cansada por unas tareas que recién había terminado y lo peor es que mi amiga se había quedado con uno de mis cuadernos que le presté para que copiará unas clases que no tenía.
Luego de cerrar la sesión de Facebook, fui a lavar mi rostro con agua fría, cepillar mis dientes y beber un poco de agua antes de irme a la cama.
Me quedé pensando en lo que había hecho por unos minutos antes de que pueda conciliar el sueño; ya que para mis padres eso sería una desobediencia muy grande dirían que a saber que ando pensando, puedo escuchar a mi padre en mi mente diciendo:
—Como que si no tenés cerebro para pensar, ni siquiera sabes si es él que sale en su foto de perfil, uno nunca sabe hija que tipo de personas están detrás de esa insignificante pantalla. Es el tipo de cosas que diría.
Ya casi me estoy durmiendo, pero no se porque siempre comienzo a pensar en como sería mi vida si Dios no estuviera en mi corazón y el tipo de persona que podría ser si mi rutina diaria fuera un poco diferente; o en qué haré en el futuro, si encontraré a mi mitad perfecta algún día o si tendré hijos, me graduare de la universidad o no.
Esas son el tipo de cosas que pasan por mi mente algunas veces. Me gustaría saber que pasará en el futuro y estar preparada para ello, eso no lo sabré nunca, pero así es mejor si no la vida sería aburrida.
Nuestro futuro es incierto.
❇❇❇
Bueno que les pareció el capítulo? Que creen que sucederá después? Será que Rose le seguirá hablando o no?
Eso lo sabrán en el siguiente capítulo
Mil gracias por leer<3
Por favor queridos lectores voten y comenten se los agradecería mucho
Los quiero a todos y recuerden vivan la vida al máximo, continúen leyendo y no dejen de escribir su propia historia de amor👌👌
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro