Jaha

Las pequeñas luces del sol resplandeciente se hacían paso por las aberturas de mis persianas.

Estire mi cuerpo para sacar toda la pereza, pero al girar me topé con algo duro.

Sonreí al recordar la noche fogosa por la que pase y comencé a dar suaves caricias en su espalda.

─¿Qué haces Jaha? ─murmuro adormilado, entonces paré, sabía que estaba siendo muy afectuosa.

─Te estaba despertando, tienes que irte ─un error más Jaha, ¿que coño tienes en la cabeza?

─Si, claro ─dijo sarcástico, apreté mi mandíbula, me levanté tapando mi cuerpo con la sábana y camine al baño ─¿porque te tapas? si anoche gemías como una gata ─soltó una risita, mire de reojo y se estaba poniendo su ropa.

─Deja tu chulería y vete ─solté brusca.

─¿Ya estás divorciada oficialmente?

─Que te importa Jeremy .

─La verdad no me importa nada, sólo que me daba pena por Jeon ─su mirada oscura me hizo erizar la piel ─ya sabes....

─¡Cállate y vete! ─la ira invadía mi cuerpo, podía sentir como la sangre se situaba en mi rostro.

─Fue una buena opción en divorciarte de Jeon, Jaha ─volvió a estar serio─ no olvides tomar las pastillas o sino vete a una clínica y ponte las inyecciones, no quiero obstáculos en mi vida, bastante tengo contigo ─y salió azotando la puerta.

¿Cómo pude interesarme en alguien como el? Pero lo más doloroso es que aún así con su temperamento, mi cuerpo sigue reaccionando a él.

Que perra eres Choi Jaha.

¿Cómo estará Jungkook? De seguro debe estarse preguntando el porque le engañe durante tres años o debe estar llamando para preguntar que hago...

Estoy más que segura que debe estarse comparando con Jeremy.

Camine rápido hacía mi mesita de noche. Estaba por ver mi registro de llamadas pero en ese momento mi pantalla se alumbró con una llamada entrante.

Ahora quién necesita a quién kookie.

─Hola kookie

(...)

Jungkook

─¿En donde estas?

─Acabo de salir dándome una ducha ─su tono sensual me saco una risita, de seguro estaba esperando mi llamada.

─Ok, necesito que te vayas a mi casa y saques tus cosas restantes, la casa acabó de ser vendida ─juraría que su sonrisa acaba de desaparecer.

─¡¿P-pero que dices?! Jeon, esa casa es de nosotros, vivimos 10 años en ese lugar, como se te ocurre venderlo, ahí están todos nuestros recuerdos.

Resople─ nuestros recuerdos se perdieron cuando nos divorciamos, así que necesito que saques tus cosas, esa casa debe estar vacía para la tarde, adiós.

─¡Espera! ¿No preguntarás como estoy?.

─¿Para que quieres que pregunte si se te oye bien? ─bufe.

Murmuro algo que no entendí ─Esta bien, sacaré las cosas restantes, iré con Jeremy ¿no te molesta?

Sonreí ocultando las ganas de mandar al demonio todo, sabía que quería llegar a ese tema.

─Mejor, así me ahorro de ir hasta allá, me llamas cuando dejes vacía la casa.

Iba a decir algo más pero colgué una vez llegué a mi destino, soltando un suspiro entré a la empresa.

Mentiría si dijera que no me dolió.

Deje mi familia y estudios por cansarme con ella, mi madre me advirtió miles de veces nunca haciéndole caso y ahora poniendo mi vista en mi oficina quiero regresarme por donde vine.

─Ni se te ocurra Jeon Jungkook ─advirtió mi madre.

Mordí mi lengua para no decir nada.

─Adelante mamá ─suspire abriendo la puerta de mi oficina entrando después de ella.

─¿Cuando pensabas decírmelo? ─pregunto dando un golpe en mi brazo, fruncí mi ceño sobando el lugar donde golpeó ─crees que no me enteraría, 10 años perdidos con esa mujer de mala muerte. Por ella dejaste de vernos, por ella no estuviste en el último día de tu padre ─sus ojos comenzaron a cristalizarse y eso me encogió el corazón, ella no mentía en nada ─¡te repetí una y mil veces que ella no era buena para ti!.

─Mamá ─susurre.

─No Jungkook, tenías tus planes listos, tenías metas, sueños, tu querías ser un gran arquitecto como lo era tu padre, mira ─extendió sus manos señalando mi lugar de trabajo─ ya con 31 años Jungkook, y recién hace 3 años lograste ser gerente de un puesto que ni te pagan lo que deben ─soltó una risa suspiro y me vio─ nos regresamos a Canadá.

Abrí los ojos sorprendido─ ¿Q-qué dices?

─Como oíste Jeon Jungkook, la empresa de tu padre necesita ser dirigido por alguien y tenemos que hablar de algo.

─Estas diciendo que... ─ignore lo último que dijo.

─Si hijo, tu debes dirigir la empresa, yo tengo mi trabajo y no puedo estar de un lado a otro. También tenemos que leer el testamento de tu padre.

Que me detenía....

Ahora nada, Jaha sigue con su vida, a pesar de que tenía una pequeña esperanza de que se arrepienta y regrese a mi. Pero si me voy, ahí ella se dará cuenta de que le hago falta.

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─Tengo que ir Jaha, no puedes prohibirme....

─No me importa Jungkook, mi madre nos necesita ─su voz entrecortada me había convencido otra vez más.

─Estoy allá en unos minutos.

Y cuando llegué a ese lugar no había ninguna madre enferma, no había ninguna señora que nos necesite. Sólo había caído otra vez por mi esposa.

─¿No dijiste que nos necesitaba?.

Soltó una risita─ amor, la única que te necesita soy yo─ atacó mis labios con desespero.

Había pospuesto mi viaje a Canadá y me quedé haciéndole "el amor" a mi esposa.

Mis manos recorrían su cuerpo, ese cuerpo que con los días empecé a sentir ajeno.

Sus gritos junto a los gemidos me hicieron llegar al clímax

─Joder amor te amo tanto ─seguía penetrando para que ella llegue a su punto de placer.

Y en unos minutos lo logró, el sonido de un celular me sacó de la ensoñación.

─Diga.

─Tu padre acaba de fallecer Jungkook y tú no llegaste ─mi madre habló sollozando, ese día quise morir junto a mi padre.

Regrese a ver a Jaha,  alzó los hombros y salió riendo de la habitación.

Ella lo sabía y aún así no le importó.

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─Esta bien mamá, regresemos a Canadá

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¿Que les parece?

La verdad este capítulo fue para que sepan una pequeña fracción de cómo a sido la vida de esos dos.

Se que no explique mucho pero en cada capítulo habrá flash back's de los años vividos con Jaha.

No olviden dejar una estrellita..

Besos Reinas ❤

ParkNochu ©