TaeHyung entraba al auto de SeokJin, éste había optado esperar por él allí, se sentaba en el asiento del copiloto con un esmoquin negro, su cabello también hacia un lado y estaba perfumado. Una fragancia dulce que obligaba a SeokJin a frotar su nariz.

-Woah, tú si necesitas sexo esta noche. Te bañaste en perfume -se burlaba y quejaba a la vez.

TaeHyung ponía sus ojos en blanco y mientras abrochaba el cinturón de seguridad le daba una mirada de poco amigos.

-Tú también apestas, angelito cretino -disparaba.

SeokJin reía ladino y se ponía en marcha. El viaje era silencioso y TaeHyung no quería mirar lo atractivo que su falso esposo se veía aquella noche. La frase "mi chico baila ahí" seguía dando vueltas en su cabeza. ¿Hacia cuánto frecuentaba a su chico? ¿Era algo serio? Claramente no era hacía mucho tiempo, porque SeokJin presumía de sus conquistas en su programa radial hasta antes de su casamiento. Y jamás había escuchado alguna anécdota de un bailarín. Así que definitivamente era: o bien algo reciente o solo una follada segura.

»¿Pero que mierda te importa? pensaba, chistando con su lengua.

SeokJin lo miraba, aprovechando una luz roja.

- ¿Qué te pasa? -cuestionaba. Sorprendido TaeHyung lo miraba.

-Nada ¿Por qué?

-Chistaste y estás muy serio, no te veías así segundos atrás cuando me pediste traerte -mencionaba, poniendo el auto en marcha de nuevo.

TaeHyung seguía serio, sin saber que responderle con exactitud-. Solo estoy irritado por todo esto. Me pasa en ocasiones, es ridícula la situación en la que estamos.

SeokJin suspiraba mientras daba una vuelta y se metía por un callejón que parecía ser poco amigable.

-Concuerdo contigo, pero ambos estuvimos de acuerdo. Tenemos un arreglo con ellos... -mencionaba mientras se paraba frente a una puerta negra con luces de neon en púrpura, detenía el auto y miraba a TaeHyung-. Mientras que tú y yo, tenemos nuestro propio arreglo.

TaeHyung pensaba en sus palabras y luego se hacía hacia delante para ver el nombre de dicho burdel.

"ILLECEBRA"

-No haré de tu vida un infierno -mencionaba SeokJin, inclinándose para abrir su guantera y quedar cerca del rostro de TaeHyung-, somos grandes ahora, Tae -alzaba la vista con algo en mano que, había tomado de dicha guantera-, puedes estar tranquilo. No te humillare y espero el mismo trato.

TaeHyung miraba sus ojos y rápidamente un vistazo cercano a esos rojos, brillosos y carnosos labios de los que SeokJin era dueño-y de los cuales apenas-recordaba su sabor y textura. SeokJin alzaba sus cejas y lo golpeaba nuevamente con lo que tenía en la mano para llamar su atención a esto.

-Toma una -pedía.

TaeHyung agachaba la vista y miraba su mano, tomaba algo negro y cuando lograba tener una mejor vista, notaba un precioso antifaz de encaje y otro dorado que SeokJin se dejaba.

- ¿Qué es esto? -cuestionaba viendo el objeto.

-Te lo colocas, pestañas. Toda la noche con él y si se te antoja te abres una cuenta y el ILLECEBRA no dirá quién eres, pero con esto resguardas tu identidad del resto. No todos lo usan, es optativo, pero la mayoría tiene el culo sucio -mencionaba el castaño colocándose el suyo y mirandose en el espejo retrovisor.

TaeHyung notaba lo bien que le quedaba aquello y como contrastaba el dorado del antifaz con el rojo de sus labios. Estaba demasiado sensual y llamativo cuando se suponía que debía de pasar desapercibido.

-Tú si quieres llamar la atención, eh... -soltaba poniéndose el suyo propio.

SeokJin se sentaba en su asiento y quitaba la llave de la hendidura.

- ¿A qué te refieres? -cuestionaba.

-Llamas mucho la atención ¿Quieres irte con más de una compañía? -mencionaba burlón mientras ataba el antifaz detrás de su cabeza.

-Solo quiero irme con una sola compañía esta noche -replicaba.

Salía del auto y TaeHyung hacía lo mismo, luego un muchacho tomaba la llave del vehículo de SeokJin y se lo llevaba. Ambos acomodaban su traje y se disponían a entrar, la entrada tenía un pasillo largo, en rojo, con cuadros de diferentes estrellas que el ILLECEBRA había tenido. TaeHyung miraba todo con cautela solo para no mirar a SeokJin, pero fallaba miserablemente cuando su curiosidad tomaba posesión de su boca.

- ¿Y como es que te llevas un chico de aquí?

SeokJin suspiraba-. Eso suena horrible, en serio

- ¿Por qué?

Las fosas nasales de SeokJin se expandían y se detenía en seco para girar y mirar de frente a TaeHyung.

-Lo chicos que bailan aquí, no son acompañantes, ni prostitutos -replicaba-. Ni se te ocurra hacer alguna burrada, puedes invitarles un trago si se te antoja y si ellos te lo permiten puedes invitarlos a salir o una aventura de una noche... Pero todo es si ellos te lo permiten, son personas que tienen un trabajo y no, no viven de los ligues...

-Oh, que sentimental resultaste -se mofaba TaeHyung, jugando con el cuello de su saco y bajando hasta los botones que se centraban en el centro de su abdomen-. No te recordaba tan caballeroso... -susurraba mirándolo de cerca.

Había dado unos pasos hacia adelante, metiéndose por completo en el espacio personal de un SeokJin que tenía el ceño fruncido, pero él no podía verlo por culpa del antifaz. Solo veía esos ojos avellana completamente oscuros y con toda su atención puesta en él. Para su sorpresa SeokJin daba unos pasos hacia adelante y lo dejaba entre la pared y su cuerpo, demasiado cerca, logrando hacer que masacrara su labio inferior.

-Tú solo recuerdas lo que te conviene, pestañas -susurraba-. Deberías recordar aquella vez en la cabaña cuando te hice mío por primea vez... -soltaba en un suave murmullo que lograba hacer que TaeHyung pasará saliva y sintiera los cabellos de su nuca erizarse-. Fui jodidamente atento contigo y te lo hice suavemente -se acercaba a su oreja y soltaba-. ¿O no recuerdas que también fui caballero?

TaeHyung esbozaba una sonrisa ladina buscando su rostro, hacía tanto que no escuchaba a SeokJin decir algo sobre aquel primer encuentro que, solo podía sonreír a pesar de que recordará otras cosas más que opacaban lo caballeroso y atento que había sido.

-El después de ese recuerdo, suele ser más fuerte, será por eso que me cuesta recordar que fuiste caballero y que no eres un completo imbécil... -cotraatacaba. Luego se inclinaba para acercarse a SeokJin un poco más, pero de inmediato el castaño se alejaba.

La mirada que el más alto le daba era fría, recorriendole de arriba abajo sin poder creer el atisbo de coraje que le había agarrado por atreverse a acercarse un poco más.

-Entiendo que te guste jugar y que estés necesitado -replicaba SeokJin-, pero no vuelvas a acercarte con otras intenciones. Yo solo te acorrale para intimidarte, no buscaba un beso.

TaeHyung apretaba sus puños y dibujaba una sonrisa tensa en su rostro, pero era bueno con las palabras por lo que se enderezaba acomodaba su saco y replicaba con altivez-. Bien, angelito cretino. Repitelo hasta que te lo creas.

SeokJin desviaba su mirada y reía con sarcasmo-. Eres un idiota importante

-Toi aussi -tú también, replicaba TaeHyung.

Un suspiro le seguía al castaño y añadía-. No vas a arruinar mí velada, te deje en claro las reglas del lugar. Yo tengo mí propia mesa y dejaré que te sientes en ella si mantienes esa boca sucia tuya, cerrada.

TaeHyung se tapaba la misma con una ademán delicado y ojos grandes, abiertos de par en par.

-Mi boca sucia estará cerrada, cretino... Seré una excelente compañía.

SeokJin negaba y antes de echarse a andar soltaba-. Sabía desde el momento en el que firme el contrato que serías un jodido grano en el culo.

Caminando con elegancia se alejaba, TaeHyung lo seguía presuroso y soltaba:

- ¡Eugh! ¿te salen granos en el culo? -se mofaba.

SeokJin volvía a negar con el suspiro número noventa y cinco abandonando sus labios. Al entrar oficialmente, recibían un sello en cada mano, una chica elegante de vestido rojo, lo llevaba a su mesa de siempre y se sentaba con TaeHyung a su lado.

-Lo mismo de siempre -mencionaba SeokJin y miraba a TaeHyung.

-Un jally shot -soltaba sonriente. La chica desaparecía y luego miraba el escenario cubierto con un telón negro-. ¿Y qué es lo de siempre? -curioseaba.

SeokJin lo miraba-. Gin tonic.

TaeHyung asentía y volvía su rostro al escenario, las luces bajaban y la chica de recién llegaba con sus tragos y un: "Disfruten del show" abandonando sus rojos labios cual carmesí. El telón subía y una música sensual comenzaba. TaeHyung veía a los presentes, la mayoría, llevaba un antifaz. Todos diferentes entre si, cada uno en su mesa con algún que otro acompañante. Luego la gente que no tenía antifaz alguno eran parejas, se notaba por sus manos unidas y sus cuerpos apoyados entre si, que estaba ahí solo disfrutando del show y quizás explorando un poco lo que les excitaba en la intimidad. Había pasado un tiempo ya de la canción y estudiando al público.

Ahora en el escenario un chico de cabello ceniza y ropa negra entallada, cantaba y bailaba con mujeres y hombres brindando un exquisito show. TaeHyung lo miraba en demasía y le encantaba como se movía y lo seductor que el tipo era. Buen cuerpo, piernas largas, aunque probablemente tenía la altura de SeokJin y no estaba en busca de alguien tan largirucho. Especialmente porque no tenía los hombros o caderas de su falso esposo, quien reposaba con su bebida muy concentrado y con cara de poker.

Se inclinaba para preguntar en su oreja-sin tocarle demasiado-. ¿Ese es tu chico? -SeokJin negaba, considerando que el castaño parecía más relajado, TaeHyung continuaba-. ¿Y como conociste a tu chico?

-Bailando ¿no es obvio? -soltaba con sarcasmo, encontrando los ojos de Tae a través del antifaz.

El azabache hacía una mueca con sus labios en respuesta, luego el show terminaba.

- ¿Cuántos bailan? -preguntaba nuevamente.

-Considerando la hora... -mencionaba SeokJin, viendo la pantalla de su teléfono-, solo quedan dos actuaciones.

- ¿Tu chico sale último? -preguntaba relajado, pero curioso a más no poder.

-No lo sé. A veces se turnan entre él y Chim, ya que junto con Kai -señalaba el escenario al chico que finalizaba su presentación-, son los favoritos del lugar.

TaeHyung lo miraba-. ¿Chim? que estúpido apodo es ese...

SeokJin reía negando con su cabeza-. Bueno, el apodo será estúpido, pero el dueño del mismo es precioso

- ¿Tu chico sabe que piensas de esa forma? -se burlaba con cierto ácido en sus palabras.

-Mi chico es hermoso, no tiene porqué sentirse inferior a Chim -respondía mirando fijamente a los ojos de TaeHyung-. Jamás lo haría sentirse inferior a nadie

- ¡Pfff! -TaeHyung estallaba en risas, pero un nuevo chico era presentado. Y el famoso Chim era anunciado en los parlantes y pantallas-. Oh, el precioso

-Eres tan infantil -susurraba SeokJin a su lado. Debido a que su propio cuerpo estaba muy inclinado, había escuchado este tono ronco y áspero acariciarle los tímpanos y esparcirse por su columna vertebral.

Miraba a castaño y nuevamente, tan cerca replicaba-Eres tan mentiroso que no entiendo cómo conquistaste a alguien con toda tu mierda y más encima dices que no lo haces sentir inferior, considerando las conquistas que tiras en tu pro-...

- ¡Shhh! -le chistaba SeokJin, sin un rastro de rabia por todo lo que había escupido en cuestión de segundos, recién-. Miralo... -ordenaba con la canción movida ya empezada.

-No me digas que hacer -replicaba TaeHyung, la cólera le había llegado y ni siquiera había notado que el nuevo número ya había comenzado.

-Voltea, está mirándote -soltaba otra vez.

TaeHyung giraba su rostro al escenario finalmente y el chico de traje bordo, cabello rubio ceniza con una sombra preciosa en sus párpados, del mismo tono de su traje, le estaba bailando y cantando una canción de ritmo pegajoso. Al verlo, TaeHyung había quedado prendido de inmediato. Sus ojos rasgados, rostro ovalado y labios carnosos tenían una extraña similitud a SeokJin, solo que este chico era más pequeño, con una estatura menor a la suya. Delgado y con un culo de manzana que era protagonistas en esos pantalones de cintura alta.

-Mierda...

-Sep. Todos reaccionan así cuando lo ven -exclamaba SeokJin con una sonrisa burlona.

TaeHyung se sentaba más erguido, ignorando por primera vez en la noche a su falso esposo. Toda su atención se la llevaba el muchacho que se movía igual o mejor que el anterior, le encantaba lo que estaba viendo y con toda esa desfachatez que lo caracterizaba, cruzaba sus piernas y mordía su labio inferior mientras que el tal Chim le cantaba y bailaba de la misma forma osada con la que él lo miraba. SeokJin alzaba sus cejas ante aquello y carraspeaba su garganta mientras pedía otro trago, su trabajo allí estaba hecho, TaeHyung había quedado flechado.

Cuando el show de Chim finalizaba, TaeHyung aplaudía encantado, el rubio le tiraba un descarado beso y él bebía su jally shot de un trago. Miraba a SeokJin decidido y preguntaba:

- ¿Cómo hago para llevarme a ese chico a la cama?

El castaño sentía que sus cejas saldrían de su frente y agradecía que TaeHyung no pudiera verlo en detalle.

-Le invitas un trago cuando salga a caminar por el lugar. Todos lo hacen y Chim es un jugador y experto. No será un trabajo complicado

-Oh, es fácil. Me agrada -replicaba, llamando a la sexie mesera y pidiéndole lo mismo.

-Es un chico decidido, si te quere vendra a ti o dejara que lo alcances. Nunca dije que fuera fácil, solo no será un trabajo complicado, así que relájate. Imbécil y todo te eligió entre la gente -respondía.

-Por supuesto. Soy Kim TaeHyung -presumía mientras la chica se acercaba con dos tragos iguales a los anteriores para ambos.

-Él lo sabe, seguramente -afirmaba SeokJin-. Te vió por estar a mí lado -aseguraba.

- ¿Y eso que significa?-soltaba altivo.

-Sabe quien soy y jamás vengo acompañado.

TaeHyung volvía a caer a la realidad, las luces volvían a bajar y soltaba un débil-. Por tu chico... -SeokJin se sentaba erguido, dispuesto a poner toda su atención en el próximo show.

-De todas formas le gustaste. Estar a mí lado solo fue extra curiosidad para él -bebía de su gin tonic y relamía sus labios.

Estaba ansioso y atento, sin siquiera mirar a TaeHyung por no descuidar el escenario ni apartar sus ojos de él. El telón volvía subir y un chico con pantalones y chaqueta de cuero estaba en el centro. Su cabello estaba largo y hacia atrás.

»Demasiado salvaje, pensaba TaeHyung, sintiéndose casi intimidado.

El chico llevaba una camisa que dejaba ver su pecho trabajado y lampiño, con un toque de aceite que lograba darle ese brillo sensual. Comenzaba a cantar y a bailar, una voz perfecta y los movimientos, jesús. TaeHyung hubiera puesto sus ojos en él si el escenario fuera diferente. Pero el hecho de que aquel espécimen era el chico de su esposo, lo hacía sentir cierto rechazo.

Miraba de lado a SeokJin y este relamía sus labios, estaba sonriendo de esa forma ladina, pero sensual-no de esa sarcásticas que le daba a él-sus ojos seguían hasta el más mínimo movimiento del famoso "Kook" como había sido presentado. Volvía su vista al escenario y notaba como el chico miraba y bailaba a SeokJin con cierta delicadeza, no estaba siendo descarado como el tal Chim con él, sino parecía ser más cómplice la cosa entre él y su falso esposo.

Un sentimiento extraño se instalaba en su pecho, no quería ver al tal chico siendo jodidamente sensual y la fantasía en carne y hueso de muchos presentes, incluído SeokJin. Tomaba su trago y su visión captaba al castaño, apoyado sobre la mesa y acariciando su belfo inferior mientras que, a través del antifaz parecía estar follandose al chico del escenario. Apartaba la vista y el baile seductor del chico incluía una levantada de camisa, mostrando ese abdomen que TaeHyung sabía que no tenía.

Un maldito six o eigth packs, una cintura diminuta y unas piernas musculosas. »Maldita sea mí suerte.

Sus piernas eran gruesas cuesta arriba llegando a su buen cuelo-el cual dicho chico no tenía tanto a comparación de él-pero era pura masa muscular. Su abdomen no tenía un maldito six pack, recién estaba teniendo un four packs del que estaba jodidamente orgulloso, pero justo ahora, en ese mismo instante detestaba no estar-segun él-mejor que dicho cantante y bailarín frente a él.

El show terminaba luego de ver el cuerpo perfecto de tal Kook contornearse por todo el jodido escenario. La gente lo ovacionaba y SeokJin aplaudía por única vez en la noche. Lo miraba con su vaso vacío y sus ojos sin rastro de diversión alguna.

-Con razón vienes tanto aquí -mencionaba usando ese tono juguetón-. Quien no quisiera pasar la lengua por ese cuerpo...

SeokJin lo miraba con suma seriedad finalmente y probablemente fuego salía de sus ojos-. Con Jungkook no ¿me oíste?

TaeHyung sonreía satisfecho por haber tocado un pequeño botón-. Oh, tranquilo. Quiero al rubiecito de culo pomposo, pero puedo entender que te gustó el cuerpo del Adonis ese, pareciera hecho para follar y ser follado

- ¡Ya! -advertía SeokJin con ese tono que lo hubiera puesto caliente si no fuera porque le estaba advirtiendo que cerrará la boca-. Eres tan, pero tan predecible y básico. No quiero imaginarte cuando tengas cincuenta y cinco y la polla ya no se te ponga dura

- ¡Oh vamos, angelito! no vengas a decirme que te gustó su voz -se burlaba.

Como si SeokJin fuera una simple polla con patas.

-Vete a la mierda -setenciaba-. No preguntes que me interesó si vas a lanzar un jodido dardo de veneno y rencor -se ponía de pie y dejaba dinero en la mesa por ambos.

Se dirigía a la barra y ahí se quedaba con TaeHyung que lo seguía de cerca.

-De acuerdo, de acuerdo -soltaba con sus manos en alto, como en son de paz-. ¿Qué te atrajo para que le acosaras y lo hicieras tuyo? a ver...

Se paraba a su lado, con espacio cerrado entre su cuerpo y el ajeno. SeokJin reía con sarcasmo mientras negaba con su cabeza.

-Primero, yo no lo acose. Él me invitó un trago la primera vez que nos vimos y segundo... -alzaba dos de sus peculiares dedos-, no me atrajo ni su cuerpo ni su baile, tampoco su preciosa voz...

-Mientes -afirmaba el azabache.

-Fue un plus, no lo niego -afirmaba, apoyado contra la barra-. Era un chico más atractivo, como el resto, pero cuando se acercó lo que realmente me gustó, fueron sus ojos -respondía, sonriendo con dulzura-. Tenía estos ojos solitarios... Se veía muy desolado y yo estaba igual que él -respondía con dulzura y seriedad.

TaeHyung sentía su garganta cerrarse-. No mientas ¿desde cuándo solitario un tipo que cuenta sus folladas en su programa radial para adultos? -soltaba con veneno y SeokJin reía, pero de forma natural, sin resentimiento ante la acusación del azabache-. Vamos Jin, puedes mentirle a él pero no a mí ¿hace cuanto que follas a tu chico de ojos solitarios?

La voz de TaeHyung era burlona, tanto que escarbaba a fondo en el pecho de SeokJin. Éste enseriaba sus rasgos y lo miraba fijamente a través del antifaz dorado.

-Hace año y medio que Jungkook es mí amante. Y mis aventuras relatadas en mí programa fueron historias con él y conmigo en diferentes escenario -la mandibula de TaeHyung por poco y se desencajaba de su lugar para soltarse y caerse al maldito suelo-, no me ando follando diferentes tipos. Él es mí pareja.

👁👄👁
Surprise mother fuckers.

*C va corriendo sabiendo que ustedes no se esperaban esa bomba*

Con amor niñita Nany 💜