2🖍
Misel por lo general no solía prestarle atención a cosas como estas, no estaba notándolo por nada en específico, sólo que ese Alfa enseñaba su piel sin problema alguno.
En el último mes, Misel vio marcas, muchas de ellas, luego del moretón en su cuello, Damon tenía chupetones mal ocultos, marcas de correa en las muñecas y en ocasiones los labios heridos.
Misel no quería saber lo que escondía bajo su ropa.
Era extraño, pero no preguntó de nuevo, imaginaba en lo que trabajaba para Yulián, así que decidió creer en su absurda historia cuando obviamente esas no eran heridas de pelea.
Misel se estremeció por el aroma que llegó a él otra vez, desde su llegada estaba olfateando lo mismo, y eso lo ponía nervioso, le traía malos recuerdos.
No lo soportaba, así que miró a Darien y frunció el ceño.
—¿Qué es ese aroma?
—¿Qué aroma? —preguntó Darien olfateando, el Omega miró a Damon, Misel no esperaba mucho de él, se veía demasiado cansado, el muchacho se encogió de hombros.
—Huele a ese Alfa y a ti.
Darien rodó los ojos.
—Ya te dije que es normal, vivimos juntos.
Misel pestañeó y arrugó el ceño, lo sabía, incluso que se acostaban, pero esto era diferente en todos los sentidos posibles, le recordaba a su situación, ese aroma era inconfundible.
—No, es… un aroma más suave que eso, como… como si estuvieses… uh… esperando un cachorro —Darien tragó con nerviosismo mirando a un lado, Misel se puso de pie y lo miró—. Dime que no estás esperando un cachorro de ese bastardo —Darien también se puso de pie al sentirse atacado.
—¿Y eso por qué te importaría?
Misel negó, sabía de la propuesta del padre de Darien y pensó que ese Alfa lo protegería de la situación, pero nunca imaginó que él mismo lo engañaría para tener a ese cachorro.
—Porque ese tipo sólo está utilizándote ¿Por qué no te das cuenta de eso?
Darien peinó su cabello negro hacia atrás con desesperación.
—No digas tonterías —replicó, Misel se echó a reír sin nada de diversión.
Maldición ¿Hizo bien en dejar ir a este Omega? Con él nada de esto hubiese pasado, no habría posibilidad alguna.
—Tu padre quiere un descendiente, e irás derechito a dárselo como el buen esclavo que eres.
—Cállate, las cosas no son así.
Misel cruzó los brazos y lo miró con altanería.
—¿No es extraño que el Alfa que estuvo viviendo durante años contigo sin voltear a mirarte ni una vez, ahora quiera cortejarte?
Darien tragó con nerviosismo, Misel odiaba hacerle daño, pero él tenía que saber sobre esto.
—¿Cómo sabes…? —Misel lo interrumpió negando.
—Yulián sólo se acercó a ti para que no le quitaran el puesto —Darien lo agarró del frente de la camisa y gruñó.
—¿De qué hablas?
Misel lo miró con lástima, era demasiado decirle algo como esto.
—El que te consiga se queda con todo, el que logre enlazarse contigo gana al Omega, el cachorro, y por supuesto, el liderazgo.
—No —murmuró Darien empujándolo y tocando su frente.
—Te digo la verdad.
—¿Cómo lo sabes?
Misel mordió su labio inferior y finalmente suspiró.
—Todos lo saben, Darien, pregúntale al chiquillo si te miento —murmuró mirando hacia Damon, el muchacho se peinó hacia atrás en un gesto perturbado que le dijo que todo era completamente cierto—. ¿Ahora me crees?
Darien se acercó a él y achicó los ojos, su voz fue un susurro.
—¿Por qué te acostaste conmigo, por esto?
Misel sólo quería reírse de esta situación, acostarse con él por ese negocio, eso no fue lo que pasó, era una tontería, él no podía hacerlo, además, estaba enamorado de Darien desde sus años de pasante, acusarlo de algo como esto era estúpido.
Pero no podía decirle sus motivos.
—No, esa vez no, sólo fueron mis razones egoístas.
—Maldición, eres tan malo mintiendo.
—Darien… —murmuró Misel con preocupación.
—Demos por terminada la reunión, no vengas otra vez, no seguiré trabajando contigo, hablaré con Héctor —Damon se puso de pie e intentó acercarse.
—Darien… —Darien lo señaló con su dedo índice y lo fulminó con la mirada.
—Y tú, ya puedes irte, acabo de dejarte sin trabajo.
—Lo siento —susurró mirando hacia el suelo, Misel mordió su labio inferior, también hizo las cosas difíciles para Damon sin darse cuenta.
—No te disculpes, no me debes nada, trabajas para Yulián, por supuesto que lo ayudarías.
—No fue así, yo… —Darien lo fulminó con la mirada, sus feromonas estaban saliéndose de control, así que Misel se acercó al Alfa y negó tratando de mitigar el problema.
—Detente, estas enojándolo aún más.
—Me retiro —murmuró saliendo de su oficina.
Damon lo empujó y fulminó con la mirada, Misel mordió su labio inferior, lo merecía totalmente.
—¿Qué hiciste, imbécil? —gruñó.
—¿Qué, ibas a seguir ocultándoselo a pesar de saber lo lejos que llegó ese Alfa?
Damon negó, Misel estaba comenzando a enojarse por alguna razón que desconocía.
—Yulián no es así, las cosas no se desarrollaron de la forma en que crees.
—¿Y cómo creo que fue? —replicó de vuelta, Damon mordió su labio inferior y negó con desesperación.
—Cometiste un error, Yulián está enamorado de ese Omega.
Misel tragó, la mirada de este Alfa no era normal, el pelo de sus brazos se levantó.
—Defendiéndolo de esta forma parece que estás enamorado de él —escupió con ira.
Damon lo golpeó tirándolo al suelo, Misel llevó una mano a su mejilla, sentía la sangre acumulándose en el interior de su boca.
—Yulián es una persona importante para mí, pero definitivamente no es eso lo que siento por él, no intentes ofenderme de esa forma —Damon se veía herido, pero a Misel le importaba poco, se puso de pie y le dio su mirada más fría.
—No me importa tu maldita vida, al menos hay algo bueno en toda esta situación —Damon lo miró con confusión, Misel resopló con diversión—. No tendré que volver a verte.
Misel no vio su reacción, pero definitivamente no le importaba como se sentía ese Alfa, sólo quería paz después de todo este maldito problema.
……
Ese estúpido Alfa era malvado, Damon no quería verlo de nuevo después de lo que hizo sin pensar. Se colocó la camisa y jaló el final de las mangas tratando de ocultar las marcas, el Alfa con el que estaba viviendo recientemente lo abrazó por la espalda y besó su cuello de forma cariñosa.
Yulián estaba en apuros con el padre de Darien y estaba escondiéndose en su casa, específicamente era el apartamento de Yulián, así que sólo lo tomó de vuelta, él se lo había prestado.
Damon lo miró ladeando la cabeza, su cabello rojo era bonito y sus ojos azules, le recordaba a él, aunque los ojos eran diferentes, Damon se giró y besó sus labios.
El Alfa sonrió y deslizó la lengua en el interior de su boca con rudeza, Damon gimió cuando lo acorraló contra la cómoda, su erección estaba frotándose contra él diciéndole exactamente lo que quería.
Damon lo alejó, no podía, ya era tarde y Yulián estaba esperándolo.
—¿Podemos hacer esto más tarde? —preguntó mordisqueando su oreja, el Alfa se echó a reír y dejó un beso en su cuello.
—Definitivamente lo haremos —replicó alejándose de él.
Damon cogió su teléfono y salió, subió al auto, condujo a casa y entró sin siquiera pedir permiso, Yulián suspiró en cuanto lo vio.
—Damon, estoy preocupado, estás fuera de casa, pero sabes muy bien que puedes vivir aquí conmigo.
Damon negó, eso no sería cómodo para ninguno de los dos, no en estos momentos.
—Estoy bien —murmuró con una sonrisa, Yulián suspiró.
—Bien, aquí está la maleta, asegúrate de que se quede con ella —dijo rodando la maleta hacia él.
Luego de la pelea Yulián y Darien se separaron, de eso eran ya quince días y luego de una llamada de Karl se enteraron de que el Omega no estaba llevando bien la separación.
Su descontrol hormonal no era bueno para el cachorro, así que Yulián puso ropa con su aroma en la maleta, Damon cogió la maleta y salió, tuvo que trabajar de más estos últimos días y estaba cansado.
Recogió al Omega de camino y subió, Darien frunció el ceño mirando a Karl luego de tocar la puerta.
Darien mordió su labio inferior, pero finalmente abrió la puerta para ellos, Damon dejó maleta en una esquina de la entrada y miró al Omega frente a él, Darien estaba enojado, pero sus feromonas eran un lío.
—Damon. ¿Qué haces aquí? —preguntó, luego miró a Karl—. ¿Por qué lo trajiste?
Karl torció los ojos y negó.
—Porque necesitas ayuda —murmuró, Darien apretó los labios.
—Eres un traidor.
—Sólo escúchalo —pidió Karl, Darien lo miró esperando lo que iba a decir.
—No creo que tengas problemas con lo de la indemnización.
—¿Cómo sabes sobre…?
—No importa como lo sé, sólo que ya está solucionado.
—¿Cómo? —murmuró, Damon le tendió su teléfono, Darien miró la noticia que estaban reproduciendo.
Damon estuvo lo últimos días investigando a Héctor y había descubierto algo, su Omega estuvo engañándolo durante meses y lo sacó a la luz por beneficio.
La boda se canceló, con ello, también el regalo de bodas que era en lo que trabajaba el Omega.
Darien miró a Damon y devolvió su teléfono, no estaba muy feliz después de eso, Damon no lo entendía para nada.
—¿Eso fue tu idea? ¿Has desprestigiado a alguien sólo para que no tuviese que pagar?
—No, la noticia no es falsa, simplemente lo saqué a la luz —Darien resopló mirándolo.
—¿Yulián tiene algo que ver en esto?
Damon suspiró.
—Sí, quiere que estés tranquilo, que nada te afecte a tí, o al cachorro —Darien achicó los ojos y gruñó.
—No me interesa nada de Yulián, es un maldito mentiroso —Damon se encogió de hombros.
Antes había dicho que Yulián era el terco en la relación, su perspectiva estaba comenzando a cambiar.
—Ambos sabemos que no tienes más remedio, Yulián es el padre de ese cachorro, Darien —murmuró, Darien lo empujó hacia la entrada.
—Si ya terminaste vete, gracias por la ayuda, pero no la necesitaba.
Damon agarró la maleta y la dejó frente a él, Darien la miró.
—Traje esto.
—¿Y eso es?
—Ropa de Yulián, aquí tienes las feromonas que necesita el cachorro —dijo apuntando a su vientre, Darien apretó la mandíbula.
—No, vete y llévate la maldita maleta.
Damon perdió la compostura y gruñó, sus ojos se tiñeron de dorado y los colmillos se alargaron, tenía que hacer que este idiota entrara en razón de una vez por todas.
—¿Cómo puedes ser tan orgulloso cuando la vida de tu hijo puede estar en peligro? ¿Estás loco? Necesitas a Yulián.
—Yulián no está aquí y espero que no regrese nunca más a mi vida.
Damon negó con un resoplido, este Omega era increíble.
—¿De verdad crees que un vínculo se forma sólo con una mordida? —Darien se tensó, él no se lo perdió—. Lo sabes ¿no? Ustedes ya tienen un vínculo y él ni siquiera tuvo que acercar los colmillos a tu cuello.
—Vete.
—Está bien, no quiero ponerte más ansioso, pero te quedarás con la maleta —dijo apuntando a ella—. Yulián vendrá en estos días, no puedo especificarte nada, será cuando logre deshacerse de sus perseguidores, pero por el momento esto te servirá.
—¿Perseguidores? —murmuró, Damon asintió.
—Hay cosas que no sabes, que ignoraste todo este tiempo —declaró, Darien frunció el ceño.
—¿Así que es mi culpa, por no querer saber lo que pasa en ese maldito negocio?
Damon suspiró, no era para que lo tomara de esta forma.
—No, me parece bien que te fueses, pero no puedes seguir ignorando la situación.
—¿Qué, vas a explicármela tú? —Damon negó.
—No, no debería ser yo quien lo haga, sólo espero que cuando venga Yulián te tomes al menos la molestia de escucharlo.
—Esperas mucho de mí —gruñó, Damon suspiró.
—Sé que estas herido, pero cometiste el mismo error en el pasado de actuar antes de escucharlo, esta vez inténtalo antes de que sea demasiado tarde.
—Vete —gruñó fulminándolo con la mirada.
Damon se marchó y fue a casa del Alfa, él estaba de humor todavía así que tuvieron un rato agradable, excepto por algunas cosas que tenía que aguantar, pero no era tan malo.
Mientras descansaba en la cama su teléfono sonó, Damon no conocía el número, pero supo perfectamente quien quería verlo después de que lo llamase muchacho.
Ese tono hasta para escribirle un mensaje.
Ese estúpido Alfa era increíble.
Joder ¿Y ahora que quería ese imbécil después de joder las cosas?
******
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro