—Ten, ponte esto en la frente —Byungchan le dió la toalla y recostó a Sejun en el sofá —. No te muevas, voy por ropa para que estés más cómodo.

Byungchan fue a su cuarto, se pusó su pijama y buscó ropa para su amigo, cuando la tuvo fue rápidamente a él, se estaba poniendo rojo.

—¡Oh, Dios, estás rojo! ¿Qué tienes?

—N-no sé.

—Pontelo —Sejun se levantó de nuevo y agarró la ropa —. ¿Te puedes vo-ltear?

—Ah, sí —Byungchan se volteo y oía como Sejun se quitaba la ropa, pero vió su espalda sin ropa ya que había un espejo frente a Byungchan; pudo ver perfectamente el reflejo de Sejun.

Volteo disimuladamente y pudo verlo mejor, aunque regresó su mirada nuevamente, por miedo a que Sejun lo cachara.

—Ya puedes voltear.

—A-acuéstate de nuevo, te traeré alguna pastilla para el dolor y fiebre.

—Gracias.

Byungchan de nuevo bajó, agarró la pastilla y un vaso de agua, fue con Sejun y se la dió.

—¿No tienes jarabe?

—¿Qué?

—Es que... N-no sé tragar pastillas, nun-ca me enfermo.

—Jajaja, no te preocupes, no se siente nada, trata de hacerlo.

—¿Si me ahogo?

—No pasará, que inocente eres.

—Bien, confío en ti.

Sejun tardó un poco en tragarsela, pero lo logró.

—¿Te sientes mejor?

—Sí, gracias.

—No hay de qué, me quedaré aquí contigo para cuidarte.

—Eres tan amable, gracias por todo, eres un gran amigo.

—Sí, soy tu amigo, para eso estamos.

—Te quiero.

—Yo también.

Más de lo que piensas.

—¿Tienes hambre?

—Eh, no.

—Como quiera te traeré sopa, iré a preparar, no tardo.

Byungchan fue a prepararla y se demoro unos 20 minutos. Terminó y se sirvió un plato para él y su amigo.

—Toma, yo te la daré. Sopla por favor.

Sejun sopló y Byungchan le dio la primera cucharadita de sopa, un poco se chorreo por los labios del peli azul, Byungchan rápidamente agarró una servilleta y limpió sus labios, lo hacia lentamente y mirándolos con ganas de besarlos.

Sejun al ver lo que hacia Byungchan solo le sonrió.

Tengo ganas de probarlos, en serio. Te deseo tanto.

Pensó Byungchan.

(...)

—Hola... Channie —susurró Sejun mientras entraba a la habitación de su amigo.

Era un nuevo día y Sejun se sentía mejor, por lo que quiso ir con Byungchan.

Observó que su amigo estaba dormido, fue a su lado para moverlo y lograr que despertara, pues ya eran las 9:00 am. Al momento que iba a moverlo vió como él chico se cambió de posición mirando hacia él, pues antes estaba de espalda.

Sejun no hizo nada y observó su rostro, se le hacía lo más hermoso que había visto en una persona, se veía tierno, inocente. Le dieron ganas de... acariciarlo y besarlo.

¿Qué pasa conmigo? ¿Por qué me estás haciendo esto?

—¿Acaso quieres torturarme? —susurró y salió del cuarto.

Bajó las escaleras y le dió hambre, se le ocurrió cocinar algo para los dos. Le llegó la idea de unos Hot Cakes, los estaba preparando hasta que una voz lo hizo voltear.

—¿Sejun?

—Buenos días.

A Sejun se le hizo lindo el menor, pues su cabello estaba desordenado. Y eso se le hacia tierno y muy dulce.

—¿Qué haces aquí? ¡Debes de estar descansando!

—¡Me siento mejor! Además estoy haciendo el desayuno.

—Debes de descansar.

—No, no, ya estoy bien. Recupero defensas rápido. Ahora siéntete que ahorita sirvo los Hot Cakes que estoy preparando.

—Bueno...

Después de unos minutos ambos se sentaron a desayunar.

—¡Oh, están bien buenos!

—Gracias, mi madre me enseñó... MI MADRE, NO LE AVISÉ.

—Tránquilo, ayer le hable por teléfono que te quedarías conmigo.

—Mu-muchas gracias, te debo una.

Byungchan tan solo sonrió. Terminaron, Sejun se volvió a poner su ropa que traía y fueron a dejarlo a casa. Sejun en verdad comenzaba a sentir algo por su amigo, estaba seguro, le comenzaba a atraer y se lo tenía que decir a alguien: a Seungwoo y Seungsik.

Los citó en el parque cuando ya se había bañado y recuperado de su enfermada.

—¿Qué es eso de lo que quieres hablar?

—Debe ser importante, recibí tu mensaje en mayúscula "Te veo en el parque con Seungsik, es urgente, no faltes o verás"

—Jajaja, hasta con amenaza —se burló Seungsik.

—Es importante.

—Cuenta ahora o calla para siempre.

—Pensé sobre mí... Y me estoy dando cuenta que no puedo dejar de pensar en lo que me dijeron, sobre Byungchan, que podía estar sintiendo algo por él.

—Interesante... —dijo Seungwoo.

—Ayer fui a ver una película con él y cuando terminó nos sentamos en una banca, una chica después se le acercó con intensión de coqueteo y me puse celoso. Después de eso y que la chica se fuera me empece a sentir mal y él me llevo a su casa; la atención que puso en mí, la manera en que me cuidó. En ese momento no lo ví como un amigo.

—¿Entonces...?

—Creo que... me estoy enamorando de Byungchan, de mi mejor amigo.