32; FELICIDAD EN PARÍS
Tres semanas después.
...
...
...
mientras tanto, chat de jungkook y jin:
narración by jk:
Mi corazón dolía de una manera muy bonita cuando pensaba en Jimin. Simplemente jamás podía sacarlo de mi cabeza, no podía borrarlo ni bloquearlo. Mi mente reproducía cada cosa dicha por él y la manera en la que reía y sonreía.
Porque yo jodidamente lo amo. Lo amo demasiado, y estoy completamente enamorado de él. Ni siquiera le veo un final a mi amor por él, es infinito. Es increíble, la manera en la que se siente este amor y poder sentir a Jimin cerca en cada abrazo, la manera en la que me mira y todo es tan increíble, tan especial... Incluso las cosas pequeñas son maravillosas, incluso lo más sencillo es precioso y todo gracias a Park Jimin.
Nadie iba a entenderlo, todos iban a ir en contra. Pero eso no importaba mientras lo amara y él me amara, porque ese amor es toda la razón por la que mi corazón late.
Suspirando como tonto al escucharlo gruñir a mi lado, mordí mi labio inferior para reprimir una sonrisa.
Jimin estaba bajo mil mantas suaves, gruñendo cada dos segundos, seguramente por cosas malas hacia nosotros que leía en su móvil.
No quería molestarlo, pero me acerqué un poco más y golpeé suavemente las mantas con mis nudillos como si llamara a una puerta, intentando llamar su atención.
No había entrado a Twitter o instagram en semanas, no tenía idea de qué cosas pasaban ahora.
— ¿Precioso? ¿Estás bien? — lo llamé con voz suave, siendo dulce.
Entonces reí cuando su respuesta fue sólo un gruñido.
— ¿Puedo entrar ahí abajo contigo? — le susurré divertido, y él empezó a lanzar patadas y quejas.
— ¡Quiero incendiar al mundo entero, mierda! — se quejó, escuchándose realmente fuera de sus casillas. Estaba enojado.
— Entonces vamos y prendamos todo en fuego. — acepté, riendo.
Él enseguida se quitó las mantas de encima para mirarme, teniendo sus cabellos desordenados y una media sonrisa. Su mirada atenta en la mía como siempre que me miraba, con esa intensidad.
— ¿Quieres ir a cenar conmigo hoy, bonito principito mío? — le sonreí sincero, seguramente mirándolo con esa expresión de enamorado que no podía sacar de mi rostro. Porque estaba tan enamorado de él.
— Sí a todo cuando es contigo. — me dijo él, suspirando felizmente de repente.
Parecía que mirarme había aliviado algo en él, y eso llenaba mi corazón completamente.
Pero entonces...
Algo en la pantalla de su teléfono llamó mi atención.
Una sola palabra que me destruyó al instante.
Muerete. Y eran los comentarios de su última publicación y de la nada sentí que tenía tantas ganas de llorar.
— ¿Kook...? — me miró con preocupación al instante, seguramente notando el cambio de mi rostro.
Y entonces se lanzó a mi regazo enseguida, con rapidez, enredando sus piernas a mi cintura y sus brazos a mi cuello, mirándome fijamente en su preocupación.
Sintiendo mis ojos picar, tomé sus caderas delicadamente, aferrándome a él como si no quisiera soltarlo nunca jamás. Y es que por mí me quedaría toda una vida a su lado, sólo observándolo y amándolo. Sin nadie que intente dañar ese momento.
— ¿Por qué te hacen esto, principito? No pueden... Ellos no pueden... — intenté hablar, pero el nudo en mi garganta me lo impedía.
Mi corazón dolía tanto, joder.
— Bebé, no... No es nada. No te pongas mal. — apoyó su frente en la mía, intentando calmarme. Pero no tendría calma hasta que nadie le hiciera daño.
— Eres lo más precioso de este universo, Jimin. No mereces nada de esto. No mereces nada de esto. — negué con la cabeza, tomando su rostro en mis manos, empezando a besarlo por cada espacio de sus mejillas y frente, intentando transmitir mi amor —. De verdad no lo mereces, no...
— Mi amor, lo sé. Y tú tampoco. Todo estará bien. Yo te tengo conmigo y eso me hace feliz, lo demás no importa. — apoyando nuestras narices juntas, Jimin me susurraba pacientemente —. Eres mi todo, nadie importa. Todo está bien.
— Odio a quién sea que te dañe, Jimin. — sin poder evitarlo, yo había empezado a llorar de manera desgarradora.
— Pero tenemos amor entre nosotros, Kook. Las cosas negativas de los demás no nos debe afectar, no podemos dejar que tengan ese poder en nosotros. Aunque se nos haga difícil lidiar con todo esto al principio, estamos juntos y podemos apoyarnos mutuamente. — ahora él tomando mi rostro con sus manos, apretó mis mejillas y habló sobre mis labios, cálidamente —. Te amo. Yo sólo sé que te amo.
— También te amo. — pude decir en medio de todo.
Porque como siempre, ante toda jodida cosa, Park Jimin es mi claridad y mi remedio.
(...)
spoiler: se viene beso en poco 😳
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro