Título: (pendiente)
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Especificaciones:

- Se podría decir que es un AU de Shingeki no Kyojin a medias, ya que sí seguiría la línea del manga pero desde una perspectiva distinta y con cambios

- Fanfic Levi Ackerman x lector

- Temática extra de "ángeles"
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Rayito:

- Es un "ángel", o al menos algo que los humanos perciben como eso

- No tiene una apariencia fija del todo, pero lo que no cambia es que su cabello es blanco y sus ojos son negros totalmente, con la única excepción del brillo que tienen

- (Más detalles pendientes por definir)

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Contexto:

Por alguna razón, los humanos piensa que los ángeles están ahí para cuidarlos.
Los ángeles dan algo de miedo, con todos esos ojos y pares enormes de alas oscuras que apoyan a su cuerpo en constante cambio.

No sé si ellos cuidan a los humanos, pero definitivamente los humanos piensan eso, y están parcialmente equivocados.
Las imágenes de humanoides hermosos con aureolas sobre sus cabezas y alas en su espalda, esas que repiten tanto en sus templos y alabanzas... No son ángeles.

Somos nosotros, y lo último que hacemos es cuidarlos.
Nosotros solo venimos por ellos.
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Adelanto de capítulo:

Creo que acerté. La mayoría murió.
Seguro que Erwin se debe sentir mal, es una buena estrategia pero no había manera de que supieran de que hoy habría una lluvia que traería niebla consigo.

Incluso aunque le envié señales las ignoró, por eso prefiero no meterme.

Moví un par de veces más de las necesarias las alas en mi espalda cuando aterricé en el último espacio que me quedaba por cubrir. Puedo recogerlas sin necesidad de tocar el suelo, pero está textura en mis pies... creo que la apariencia humana vale la pena por esto.
La tierra está tan húmeda y fresca por la lluvia reciente, y también está cálida por la sangre.
Siento como se mete entre los dedos de mis pies, es increíble...

Sentí una brisa fría en la base de mi nuca, ladee la cabeza mientras cerraba los ojos antes de darme la vuelta.
Tengo que recogerlas, por un momento lo olvidé.

Caminé entre el desastre sin mucha prisa, hasta que fui localizando los cuerpos uno por uno.
Creo que estos fueron los que quedaron más destrozados, eso sí no contamos el desgraciado que terminó aplastado en el grupo de más adelante.

- Hola, ¿tú eres la última?

Me agaché y tomé entre mis manos la cabeza decapitada de Isabel.
Le acaricié la cabeza, despejando su frente del cabello rojizo y mojado que cubría su cabeza.

- Isabel, ahora vendrás conmigo

No es necesario hablarles, pero no veo por qué no hacerlo.
Formé una sonrisa suave con mis labios, ella me regresó la sonrisa.

- ¿Eres un ángel?

La fría brisa que era su aliento inexistente acarició mi rostro con suavidad.
Lo pensé un poco, pero finalmente respondí.

- ... ¿Crees que lo soy? Entonces lo seré para ti

Acerqué un poco más la cabeza y junté mis labios entreabiertos con los suyos.
Sentí la calidez y el sabor dulce de su sangre, junto con esa sensación tan curiosa de de frío deslizarse por mi boca y garganta, y después... Nada.
Sólo una cáscara vacía.
Alejé el cadáver de mi y lo arrojé lejos de un solo movimiento de mi mano.

Veamos, creo que esos ya deberían de haber sido todos, debería revisar en... ¿Uh? ¿Qué es esto?

Sentí una picazón curiosa en el cuello, al llevarme una mano ahí esta se llenó del tacto frío y resbaladizo de mi propia escencia negra.
Observé un momento el contraste que tenía mi piel pálida con ese color tan oscuro y brillante, antes de llevarme los dedos a la boca y lamerlo. No sabe a nada.

- ¿Pero qué mierda...?

El sonido de una voz masculina me hizo detenerme. Voltee en esa dirección lentamente, mientras me limpiaba el resto de la escencia con mi mano, ensuciando mi piel en el proceso.
Creo que la herida ya cerró.

Era un humano joven, un hombre.
Su cabello era negro como la noche, y sus ojos eran grises como la niebla.
Estaba en posición defensiva y sostenía en alto un par de esas largas y finas espadas, una de ellas estaba manchada de mi escencia negra, la cual poco a poco se iba despegando de esa superficie y ascendiendo en forma de pequeñas gotas redondas, las cuales se desvanecían después de elevarse un poco.
No era un humano muy alto, de hecho, me sorprende que me haya podido alcanzar con su arma sin usar ese equipo que les hace volar sin alas.

El hombre parecía alterado mientras miraba mi escencia alejarse de su arma, pero al notar que yo lo miraba me regresó toda su atención.
Está lleno de sangre.

- ¡¿Qué mierda eres?!

Sus ojos se clavaron profundamente en los míos, cargados de furia y miedo.
Justo en ese momento, sentí algo nuevo, un inusual alboroto en mi interior, a la altura del estómago de la forma humana que estaba usando.

Me... Me mira. Me está mirando.

- ...¿Tú qué eres?

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Notas/Advertencias:

- Si eres alguien demasiado sensible con el tema de la religión te voy a pedir que no leas este fanfic cuando lo publique, y si lo lees te voy a pedir de favor que no te lo tomes tan en serio y evites comentarios ofensivos

- Va a ser un fanfic romántico en un sentido... Raro. No se si a esto se le podría llegar a llamar romance como tal, y va a ser algo con un avance lento y tedioso que probablemente no llegue a algo demasiado profundo

- Probablemente sea una historia corta
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