—¡Nayeon! ¿Me estás escuchando? —Dahyun le dio un golpe en la nuca a su amiga.

—¿Eh? —Dijo desconcertada.

—Andas en la nubes, ¿Qué pasa por tu cabecita?

—Uh, nada en especial. —Le dio un sorbo a su café.— Me dijiste que tú y Momo estaban hablando.

—Es un amor, eso te puedo asegurar.  —Recostó su cara en sus dos puños, soltando un suspiro enamorado.

Nayeon quería hablar sobre lo que Tzuyu le había contado, pero no estaba segura de hacerlo.

—¿Qué? —Le preguntó cuando la omega parecía que quería decir algo.

—¿Qué de qué?

—Quieres decir algo.

—Uh, bueno… Tzuyu me dijo algunas cosas sobre su hermana, pero te ves muy feliz con ella y no sé si debo decírtelo yo.

—Nayeon, ¿Qué te dijo Tzuyu?

—Me dijo que Momo solía ser muy coqueta, si sabes a lo que me refiero. —El brillo de los ojos de Dahyun se apagó por un momento.—¡Pero me dijo eso era cuando era más joven! Además, se ve que le interesas.

—¿Tú crees?

—Mjum. —Asintió mientras tomaba las manos de su amiga.— Igual deberías hablar con ella sobre eso, no quisiera que te ilusiones.

—Lo haré, hablaré con ella cuando la vea.—Sonrió, pero no duró mucho cuando recordó que le había preguntado algo a la rubia y esta no le dio respuesta.—Hey, no respondiste mi pregunta.

—No te escuché, ¿qué me habías preguntado?

—Que si pasaste tu celo con Tzuyu, Sana me dijo que te había llamado para preguntar por qué no habías ido y una alfa contestó, supongo que era ella ¿No?

La omega se sonrojó y Dahyun supo la respuesta.

—¡Te acostaste con Tzuyu!

—¡No me acosté con Tzuyu!

Agradecía que estuvieran en su casa porque si estuvieran en un lugar público querría arrancarse la cara de la vergüenza.

—Ay Nayeon, ese cuento de que no hicieron nada no te lo cree nadie.

—O sea, sí, pero no como tú piensas—Dahyun la miró confundida sin entender.—Ella me ayudó… Ya sabes.

Dahyun no entendía hasta que una lucecita en su cabeza conectó todo, abriendo su boca en una gran O con sorpresa.

—Me dijo que quería esperar un poco más para llegar a ese paso, pero es un pequeño avance.—Terminó de explicar.

—Con razón estabas tan callada.—Le sonrió con picardía.— Me sorprende que se haya negado, cualquier alfa no hubiese desaprovechado esa oportunidad.

—Tzuyu es diferente, me cuidó todos esos días e incluso trajo sus cosas para trabajar desde aquí.

—Ustedes van a ser de esas parejitas cursis que tienen como tres hijos y dos perros —Hizo una mueca de asco al pensarlo.—. Ugh, yo seré la tía millonaria que les comprará todo.

La omega sonrió ante el comentario de su amiga, eso de tener hijos no le sonaba mal ahora, estaba segura que Tzuyu sería una buena madre.

…

—¡¿Pasaste el celo de Nayeon con ella?!

—Jeongyeon, estoy enfrente tuyo, te escucho fuerte y claro.—Se quejó la alfa irritada.

—Lo siento, me sorprendí —Se disculpó.—. ¿Eso significa que ya son novias?

Tzuyu no dijo nada, ella tampoco sabía qué responder.

Hacían cosas que las parejas hacían, salían a citas, iban a la casa de la otra para comer, ella la pasaba buscando luego de trabajar y recientemente habían empezado con los besos, pero ninguna de las dos había formalizado la relación.

—¿Aún no se lo has pedido?—La alfa negó.—¿Y qué esperas? El solo hecho de pasar algo como el celo juntas es un gran paso como pareja, no todos hacen eso si no confían plenamente en su pareja.

Tzuyu lo meditó un poco, Jeongyeon tenía razón, ella también había estado pensando en pedirle a Nayeon que fuera su novia, sólo no sabía cómo.

—Lo he pensado, aunque también me preocupan otras cosas…

—¿Que te rechace?—Tzuyu negó.—¿Entonces?

—Me da miedo que alguien de la prensa se entere y armen un escándalo.—Empezó a explicar.—No quiero esconder a Nayeon, pero me preocupa un poco lo abrumadora que puede llegar a ser la prensa, no quisiera que cuando saliera esté pendiente de que nadie la esté siguiendo.

Tzuyu había estado siendo muy cuidadosa en cuanto a ir a buscar a Nayeon o ir a su casa, sus sentidos estarían alerta para detectar si alguien las estaba siguiendo.

—Eso ya tendrías que hablarlo tú con ella más adelante, es una decisión que deben tomar las dos.—Comentó.—Por ahora, concéntrate en cómo pedirle ser su novia, ¿Tienes alguna idea?

—Bueno, ella una vez me contó que…