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2. Los extraño

Madison Starfall

No podía creer que estuviera aquí, no podía creer que estuviera viva.

Viva.

Ni siquiera me sentía de este modo. Lo había perdido todo en esa maldita noche y ni siquiera sabía si Harry había salido vivo de esa. Tenía la esperanza de que tanto Sirius como Remus lo cuidaran, porque evidentemente James y yo no podíamos.

Aún recuerdo perfectamente esa noche.

Un fuerte estruendo se escuchó logrando que parara de caminar para darme la vuelta y ver de alguna forma lo que estaba pasando. 

El sonido provenía de fuera y estaba bastante cerca. 

Nos habían descubierto...

Vi como James, preocupado y asustado, subía las pocas escaleras que nos separaban.

Me tomó con cuidado por los hombros para verme y le miré realmente preocupada. No quería que notara que estaba asustada, pero sí lo estaba y demasiado.

—Mads, debes irte con Harry. Es él —abrí los ojos de golpe todavía más preocupada, me empujó ligeramente para que siguiera subiendo las escaleras. 

¿Acaso él iba a enfrentarse solo a Voldemort? 

¿Acaso creía que le dejaría hacerlo?

—No pienso dejarte —él quiso hablar, pero otro fuerte estruendo nos interrumpió. Esta vez, los dos sabíamos que se trataba de la puerta porque lo vimos. 

Él se estaba acercando y no había tiempo.

James quería ganar tiempo para que Harry y yo pudiéramos escapar, ¿pero como podía dejarlo? 

No podía perderlo.

Me negaba a dejar que él tuviera que sacrificarse por nosotros.

—Debes irte amor, yo le entretendré, pero debes salvar a Harry y salvarte a ti —negué con lágrimas en los ojos al igual que él y nos dio un beso en la frente a cada uno—. Nunca olvidéis lo mucho que os amo —dejé correr las lágrimas por mis mejillas sin dejar de verlo.

Era la última vez que podría verlo y no estaba preparada para eso, de ninguna manera podría soportarlo. 

—Y nosotros a ti —susurré a media voz.

Él me regaló una sonrisa llena de tristeza. 

Era la última vez que estaríamos los tres juntos.

Le miré por última vez, antes de subir corriendo a la habitación de Harry y encerrarme ahí. No sabía que más podría hacer, ni siquiera teníamos la Capa y todo era más difícil. 

Apreté suavemente a Harry contra mi pecho, protegiéndolo de todo e intentando calmarlo, porque hasta incluso él sabía que estaba ocurriendo algo. 

De pronto escuché la maldición y como el cuerpo de James caía, ahogue un sollozo intentando calmar a Harry de todas las maneras posibles.

—Todo irá bien, te lo prometo mi pequeño —susurré dándole un beso en la frente meciéndolo. 

Escuché los pasos acercándose a la puerta, así que me aparté de ella para que ninguno saliéramos dañados. 

—Recuerda que mamá y papá te quieren mucho. Necesito que seas fuerte y valiente mi pequeño. Recuerda que nosotros nunca te dejaremos solo y estoy segura de que tus tíos cuidarán muy bien de ti. Te lo prometo —murmuré con lágrimas en los ojos y de pronto se escuchó la puerta, hacerse añicos, le di la espalda protegiendo a Harry y rápidamente lo coloqué en su cuna con una pequeña sonrisa triste.

Me di la vuelta, parta encarar a Voldemort, me coloqué delante de la cuna de Harry y podía escuchar su suave llanto llamándome.

—Apártate —me dijo él—. Tienes suerte que te deje vivir a petición de otra persona.

¿Peter?

¿Snape?

Los dos eran unos malditos cobardes, uno por dar la dirección de donde estábamos después de confiar en él. 

—¿Esa persona que te pidió? ¿Salvarme? Prefiero estar muerta antes de que me lo arrebates todo. Así que no dejaré que le hagas nada a mi hijo y me da igual el trato que hayas hecho con Snape.

Me negaba a estar en un mundo donde James no estuviera y sabía que Harry saldría de esta.

Sabía que debía luchar por él.

Era consciente de que tendría que dejarlo solo después de esto.

Tal vez James me odiaría por dejar a nuestro hijo.

Puede que Harry lo hiciera, pero no dejaría que Tom le hiciera daño a mi hijo. Él me había arrebatado todo y no dejaría que me quitara a Harry.

—Apártate, no pienso volvértelo a repetir —me quedé firme en mi lugar desafiándolo con la mirada.

No iba a apartarme, antes debía matarme.

—No pienso dejarte que le hagas nada a mi hijo, así que si quieres matarme hazlo —estaba lista para todo lo que pudiera ocurrir. 

No sabía si mi plan saldría bien, solo esperaba que Harry se salvara de todo esto.

—Bien, no me estás ayudando, así que de una forma u otra debo encargarme de ti. Aunque te daré una última oportunidad... Apártate del niño y huye —no me moví de mi sitio, no iba a hacerlo nunca. 

¿Cómo podía dejar que mataran a mi hijo después de perder al amor de mi vida?

—Ya veo. Bien, no me dejaste otra opción —me apuntó con su varita enfadado—. ¡Avada Kedavra! —el rayo verde fue hacia mí y no solté ningún sonido, simplemente caí en la oscuridad rezando para que mi pequeño saliera con vida de esa, al menos esperaba que mi plan funcionara.

Me desperté sobresaltada, sentí el sudor caer por mi frente... No era la primera vez que me despertaba de esta forma por culpa de esa noche. 

Ahora estaba en otro universo.  

Viviendo junto a Tony Stark, que me encontró hace unos meses tirada en el suelo inconsciente. Él se ocupó de todo y pude considerarlo como un padre, supongo que después de todo lo que había hecho por mí yo lo sentía así.

Pero en ningún momento pude olvidarme de mi familia. Estaba claro que James estaba muerto, ¿pero Harry había sobrevivido a esa noche?

¿El hechizo había funcionado?

Tenía muchas dudas de las cuales carecía de respuestas claras, pero no podía hacer nada más. Tony me dijo que pasara página, ¿pero como podía hacer eso?

Lo bueno es que había hecho buenas amistades, y formaba parte de los Vengadores, a veces eran unos granos en el culo, pero se les quería igualmente.

Aunque debía reconocer que la mayoría de las veces lograban provocarme dolores de cabeza impresionantes. Ni siquiera sabía como podían conseguirlo, parecía que cada uno poseía ese don, menos Nat y Clint, ellos eran los más normalitos por así decirlo.

Porque ninguno se salvaba, tal vez yo, pero ese era otro caso.

Solté un pequeño suspiro acostándome de nuevo, era demasiado temprano, así que intentaría dormir de nuevo si es que podía.

Lo único en lo que podía pensar, era en mi familia y en cuanto los extrañaba.

Esperaba algún día verlos de nuevo, aunque solo fuera una vez.









NOTA DE LA AUTORA

¿Qué os ha parecido el capítulo?

Perdón por la tardanza.

Igualmente, gracias por todo el apoyo y lo siento por no cumplir con mis responsabilidades de actualizar.

Os amo demasiado y gracias por todo el apoyo. Ya sabéis que podéis seguirme en tiktok para ver todos los edits de mis historias. La cuenta es lvprongs también hay un Hashtag por si queréis hacer edits de la historia yo encantada de verlos #iwillalwaysfindyouwattpad ❤

Os amo❤


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