Darko abrió la puerta del coche y salió muy seria, el miedo se la había pasado volando, algo debíamos de saber por como ella cerró la puerta.

-Venid-Nos dijo haciendo un gesto con la mano, ella comenzó a caminar hacia delante mientras miraba arriba, de momento no la seguimos-Venid, rápido-Nos comentó y nosotros ya nos pusimos nerviosos, algo estaba pasando, algo me decía a mi que debíamos ir con ella, no dudamos en caminar, pero en cuanto comenzamos, ella volvió hacia dónde estábamos nosotros-No están por aquí... Debe de ser un error... Algo me dicen que están aquí, ¿pero dónde?-Se tapó la boca con una mano de manera pensativa, ¿a quién se refería? ¿quiénes estaban allí?

-Darko, ¿a quién te refieres diciendo que están aquí?-Le pregunté. Ella volteó su ojo hacia delante al ver que unos hombres con traje militar venían hacia nosotros.

-A ellos-Nos respondió. Ella se mordió los labios por un segundo y volteó al frente para verlos.

Nos pusimos nerviosos al ver a un hombre gordo con un símbolo... ¿nazi? Y una expresión maligna que miraba a Darko situado entre cuatro hombres con rifles en las manos, dos a un lado y dos al otro.

Darko les vio y su expresión cambió totalmente, les miró con los ojos sin los reflejos de luz que tenía antes y una expresión de odio e ira se veía en su rostro, les miró con muy mala gana. Apretó un poco los puños, puso sus manos en su camisa y la estiró un poco, ocultando algo que no quería que los de delante viera, luego volvió a mirarles mientras ponía sus manos como antes, colgando por completo.

En segundos, el hombre gordo estaba delante de nosotros. Rió un poco de manera sarcástica y miró a Darko.

-Hombre, Darko, ¿cómo tú por aquí? ¿Acaso te aliaste para que cuando volvieses a tu hogar no te atacasemos?-La preguntó el hombre, ella seguía mirándole con odio, no hizo nada parecido a lo de antes, sólo le miró.

-No-Le respondió con aire de cólera-Ellos son mis amigos, no tiene nada que ver con todo esto-Le dijo mientras llevaba una mano a nosotros para... ¿protegernos? ¿Esa gente nos quiere hacer daño?

-Qué curioso-El hombre rió un poco de manera sarcástica y Darko quitó la mano de nosotros-Aún así sabes muy bien porque estoy aquí, todos lo saben, incluso el pobrecito de Dalan lo sabría, sie estuviera vivo-Ella lanzó una mirada algo asesina y nosotros quedamos confusos. ¿Dalan? ¿Quién era Dalan? ¿Acaso era familiar de Darko? Oh, Dios... Esto comenzaba a asustarme.

-Coronel, claro que sé muy bien porque ustedes están aquí, pero le digo una cosa, no meta a Dalan en esto ahora que está muerto, él sólo me protegió de vosotros, panda de caníbales-Le lanzó la mirada más odiosa del mundo tras decir esto, ¿qué ocurría? ¿Qué querían de ella? Empezamos a asustarnos.

-Uuuuuuuhhh, como me gusta que nos llames eso, más que nada porque tu expresión me dice que tú no quieres volver a Auschwitz, o cómo yo suelo decirte: Hogar dulce hogar-Darko apretó otra vez más los puños y le miró con... como con ganas de... ¿matarle? No podía ser cierto aquello.

-Si de verdad eres alemán, no tengo ningún problema en decírtelo en tú idioma. Sie gehen rot nach Auschwitz mit Schweinen, die Hitler, hurensohn!-Hubo un silencio cuando Darko dijo esto. No hablaron, ella les miró con odio otra vez, no sabíamos que había dicho pero dijo... ¿Hitler? ¿Auschwitz? Oh, oh...-¿Y ahora qué?-Se levantó un poco más para dirigirle la mirada de nuevo, ahora se comenzaba a dibujar una sonrisa psicópata en su rostro-¿Sigues pidiéndole ayuda al führer, puerco soviético?-Ahora ella lanzaba una sonrisa bastante diabólica, el hombre la miró con ira, fue algo completamente extraño, pero seguimos sin decir nada.

-Mira, no tengo nada que discutir contigo, o vuelves a Auschwitz o entonces seré yo quién vaya a por ti a dónde quiera que te vayas-Ella le seguía mirando de manera sarcástica, y el hombre comenzaba a enfadarse.

-¿Tengo la obligación de volver a esa cuadra?-Preguntó ella burlandose, el hombre la lanzó una mirada más que asesina.

-Si no vas tú, me llevo a tus amigos-Nosotros nos escondimos detrás de ella cuando dijo esto, ella nos dio un gesto de que no nos pasaría nada, y metió su mano derecha en el bolsillo de detrás del pantalón que llevaba.

Pausa, el aire se ''calmó'' un poco mientras los soldados se arrascaban el cuerpo de manera hiperactiva, ella sonrió diabólicamente, ¿sabía el motivo de los picores de aquellos soldados? Todo estaba dando un giro muy extraño.

-Mira, empiezo a pensar que tus amigos como no tienen nada que ver deben ser libres, así qué, entrégate ahora mismo para volver a Auschiwtz o...-El hombre fue interrumpido cuando Darko hizo una jugada maestra.

-¿O qué?-Le preguntó con odio agarrando una pistola en la mano, ¿cómo? ¿Una pistola? ¿Por qué tenía una pistola? La miramos más que asustados por lo que estaba haciendo.

-Preciosa, no sé si sabes que es una pistola contra cuatro rifles esto, así que, piensa mejor la siguiente vez-Darko le sonrió de manera diabólica de nuevo mientras el hombre miraba a sus soldados-¡Fuego!-Les ordenó a los soldados.

Pero cuando intentaron disparar, las escopetas sólo hicieron el ''clinck'' del gatillo, no dispararon nada. ¿Cómo era posible? ¡Si estaban cargadas!

-Vaya vaya-Dijo Darko con la pistola todavía apuntando a su blanco-Al parecer los temidos rifles son cachorros indefensos, ¿no es así?-El hombre se quedó estupefacto, los soldados ni hablaban, se quedaron en shock.

-¿Pero qué has hecho, zorra? ¿Qué cojones has hecho?-Le preguntó el hombre lleno de rabia, nosotros seguíamos boquiabiertos ante aquel espectáculo.

-Yo no fui. Fue ella-Y de su hombro salió una serpiente negra que lanzó un grito de ataque para asustarnos, nosotros nos echamos para atrás al ver a semejante animal.

-¿Una serpiente? ¿Ese maldito bicho?-Le preguntó el hombre enrabietado como niño pequeño.

-Esta hija de puta que me hace de todo y me ama al darme estas preciosidades-Y de su mano sacó las balas de los rifles que llevaban los soldados.

Silencio absoluto. El hombre se quedó en blanco por varios segundos, ella sólo les miraba de la manera más asesina que ninguno podría imaginar, les tenía demsiadas ganas, algo decía que estaba a punto de pasar algo gordo.

-¡Cogerla!-Ordenó el hombre a sus soldados, estos corrieron a por ella.

Sin embargo, no salió bien, debido a que Darko comenzó a hacer su jugada sangrienta. Sin ningún temor, apretó el gatillo cuatro veces, matando a los soldados, dejando al hombre sólo, cuando hizo esto, nos acercó a ella y la serpiente iba por debajo nuestro, ¿qué pasaba?

-¡Heil Hitler!-Gritó el hombre, había llamado a sus hombres, estos ya venían por los lados, delante y detrás de nosotros.

-Darko, nos van a matar todos estos soldados-Le dijo Lars muy asustado, ella nos comenzó a atar algo a la cintura.

-Tranquilos, chicos, no harán nada. A mi señal, apretar el botón rojo de vuestros cinturones, no os mováis-Decía en voz baja mientras los hombres venían hacia nosotros, no nos movimos ni medio milímetro-¡Ahora!-Y apretamos nuestro botón rojo justo cuando teníamos a los hombres al lado nuestro.

Salimos volando por los aires los cinco, gritamos todos menos ella, quién nos agarró de las cuerdas que tiraban de nosotros enganchadas a una especie de gancho que estaba sujeto a un edificio, ella nos miró para decirnos que no pasaría nada, y cuando menos lo quisimos, caímos en un edificio mientras oíamos voces. No sé como pasó todo, por eso explico de manera extramadamente inentendible, debido a que fue algo muy confuso y rápido como para explicarlo de manera razonable.

-¿Dónde está esa maldita aliada?-Decían las voces de abajo, todos iban muy bien armados por como se oían las pistolas cargándose.

Darko se volteó y gateó para observar a los soldados a ver si se iban o algo parecido, estabamos en la azotea de un edificio, ella volvió para suspirar.

-Vía libre, no saben que estamos aquí, todo bien-Nos dijó mientras comenzaba a cargar su pistola de nuevo, se volteó y vio algo que la dejó impresionada-Se han dejado aquí un rifle cuando saltaron, me viene de perlas-Gateó hacia el rifle y lo agarró con sus manos, en segundo comenzó a cargarlo.

Pero mientras la mirabamos, yo noté que algo no iba bien, algo faltaba allí. Oh, no.

-¡¿Lars?!-Grité muy asustado. Darko volteó a ver si le veía-¡Lars, dónde estás!-No estaba con nosotros, ella gateó para mirar de nuevo abajo. Vio algo terrible.

-¡Socorro! ¡Ayudarme!-Una vocecilla gritaba desde debajo de nosotros, Darko abrió la boca de miedo de lo que acababa de ver.

-Lars está abajo. Tengo que salvarle-Dijo, yo me asusté cuando dijo la ubicación de Lars.

-Darko, están muy armados, no deberías bajar-Le dije yo, Jason y Kirk no hacían otra cosa más que mirar.

-Lars necesita mi ayuda. Voy a rescatarle-Dijo mientras se ponía de pie en el borde de la azotea. Nos quedamos en shock al ver esto.

-Darko, te matarán, no debes bajar abajo, no podemos salvar a Lars-Dijo Jason, ella volteó para hablarle.

-Podremos salvar su vida si bajo a por él-Y dicho esto volvió a voltearse hacia delante y se lanzó hacia debajo.

Quedamos boquiabiertos al ver aquello. Pero segundos después un gancho se agarró al borde de la azotea en la que estabamos, vimos a Darko balancearse de la cuerda que colgaba del gancho, estaba atada a su cinturón. Agarró con las dos manos el extremo de la cuerda y se lanzó para abajo en busca de nuestro amigo.

-¡Lars!-Gritó ella, yo sólo vi que estaba en una esquina escondido de los soldados, muerto de miedo, pero yo y el resto volvimos a mirar para ver lo que pasaba.

-¿Darko?-Le oímos confuso de si había oido a quién decía, él volvió su mirada hacia Darko, quién puso sus pies en el suelo y corrió hacia él.

-Lars, escúchame, no estoy aquí para hacerte daño, voy a salvarte de esos cabr...-Volvió sus ojos hacia detrás para observar un extraño cuerpo que silbaba venir hacia ella-¡Cuidado!-Ese cuerpo era un misil que estalló cerca suyo, ella se abalanzó sobre Lars para protegerle y le abrazó provocando que el misil no les dañase. En poquísimos segundos, volvieron sus miradas hacia la zona destrozada por el misil, luego volvieron a mirarse-Escúchame Lars. Hoy no te haré daño. Estoy para salvarte de los soldados porque quieren matarte, y no sólo a ti. No te atacaré, voy a protegerte y no dejaré que te hagan daño. ¿Me has entendido?-Lars asintió estando muy asustado mientras ella tenía sus manos sobre los hombros de Lars.

Se volvieron a oir los soldados que caminaban, o mejor dicho, corrían buscándonos, a lo que nosotros escondimos un poco nuestros ojos para que no nos vieran y ella se acercó al oido de Lars mientras le abrazaba con fuerza y se volvía a atar la cuerda que hacía contracción y flexión y le pegó a ella con su brazo derecho.

-Agárrate-Le dijo al oido, ella se retiró de su cuerpo y tiró de la cuerda, haciendo que se flexionase y los lanzase hacia arriba, con efecto acción-reacción. La cuerda comenzó a ''hacerse más pequeña'' y ellos cayeron de nuevo en la azotea.

Ella suspiró y Lars corrió hacia nosotros llorando y nos abrazó, nosotros le devolvimos el abrazo, mientras ella se levantó de nuevo y miró hacia el sol, que ahora estaba arriba del todo, nosotros también nos levantamos.

-¿Ya se ha acabado?-Preguntó Lars sollozando y muerto de miedo, abrazado a Jason.

-No lo sé-Nos contestó ella, vimos que tenía un arañazo muy visible en su brazo izquierdo, no la comunicamos esa herida, debido a que no era muy grave.

-¿Qué está pasando Darko? ¿Qué quieren de nosotros, en especial de ti?-Preguntó Kirk más que alterado, el miedo también nos devoró a nosotros.

-Quieren vernos muertos-Dijo ella, nos dejó huella cuando dijo esto.

A partir de ese día teníamos un futuro muy negro por delante. Una orden militar de Alemania nos quería muertos, y Darko sabía que a ella a la que más, a poder ser la primera en morir. Todos miramos hacia el sol dando a conocer que esa guerra, acababa de empezar.