Dos meses habían pasado, muy duros, por cierto

Jimin estaba en una situación demasiado incómoda, tenía a dos alfas detrás suyo cuidándolo e intentando ganarse su corazón

El pequeño omega estaba agobiado, primero tenía a Chanyeol, el chico que había estado cuando había sufrido tanto por perder a Yoongi en aquel momento donde era la persona más importante en toda su vida. No podía quejarse en absoluto de él porque el mayor le había tratado como si se tratara de su tesoro más preciado, y eso el menor lo valoraba bastante 

Por otro lado tenía a Yoongi, qué decir de él. El corazón de Jimin se aceleraba sin razón alguna solo al oler su aroma, era algo inevitable y no podía hacer nada al respecto, su omega interior estaba más que enamorado de ese alfa que tan bien lo había tratado toda su vida, y bueno, Jimin tampoco podía decir que Yoongi no le gustaba porque eso sería mentir. El chico adoraba a su hyung desde pequeño 

Así que Jimin estaba en un gran problema entre dos corazones, donde hiciera lo que hiciera acabaría destrozando alguno de los dos

Actualmente era martes 18 de abril, Jimin estaba en la cafetería limpiando algunas mesas vacías, esta hora era la preferida del menor en el trabajo, el periodo de las 16:00 a las 18:00 era bastante tranquilo y eso le gustaba 

Terminó de limpiar y con una sonrisa se acercó al mostrador guardando el dinero que habían dejado ahí para pagar la merienda unos de los tantos clientes. Iba a ir de nuevo a seguir limpiando pero unas manos en su cintura se lo impidieron 

-Chanyeol: Bonito ¿Estás bien? 

El menor enarcó una de sus cejas dándose la vuelta para poder quedar cara a cara con el que aún era su pareja 

-Jimin: Claro que lo estoy Channie ¿Por qué? 

Preguntó mientras llevaba sus manitas hacia el torso del alfa acariciándolo, este a gusto con los mimos que le estaba proporcionando se acercó al cuello de el omega y escondió su rostro ahí 

-Chanyeol: Tu aroma, hueles muy bien. Pensé que tendrías el celo cerca, en serio puedo sentir tu aroma por toda la cafetería 

El rubio se tensó un poco, la realidad era que no llevaba la cuenta de su celo, pero por lo que recordaba era cierto que debía de estar muy próximo. Relamió sus labios e intentó separar al alfa un poco de su cuerpo ya que había comenzado a dejar besos por su cuello y sabía que no era momento ni lugar

-Jimin: Tranquilo ¿si? Estoy bien, si en algún momento comienzo a sentirme extraño te lo diré

Jimin  le sonrió para así intentar dejar en el mayor un sentimiento de tranquilidad cosa que consiguió a medias, Chanyeol se había separado de él dejándole un último beso en su frente antes de volver al trabajo 

Las horas estaban pasando y el rubio no sabía en qué momento de la tarde sus piernas habían comenzado a temblar tanto, cuando había subido la temperatura de su cuerpo y sobre todo en qué momento su pantalón se había empezado a sentir húmedo 

Ahora mismo se encontraba en la pequeña sala de descanso que los trabajadores tenían,  le había dicho a sus compañeros que se había mareado un poco y que por eso iba a estar ahí unos minutos para después seguir con el trabajo correspondiente

Estaba intentando calmarse, pero nada funcionaba. Su respiración se estaba volviendo irregular y cada parte de su cuerpo ardía a tal punto de querer llorar desesperadamente 

Pero como si algún Dios lo hubiera estado escuchando un aroma conocido se hizo presente en la cafetería, un olor que conocía muy bien desde que era niño. Por eso es que agarró su móvil y corrió hacia afuera con rapidez 

Al salir pudo ver a Jihyo, la señora Min. Ella era una alfa y es por eso que el olor le había impactado tanto, su aroma era muy parecido al de Yoongi, oh Yoongi

El rubio se abrazó a la mujer y esta no tardó en estrecharlo entre sus brazos mientras le acariciaba aquellas hebras doradas que poseía el menor; que para ella era como un hijo más 

-Jihyo: Jimin-ah cariño ¿Todo bien? 

El menor negó queriendo esconder su rostro en la curvatura del cuello de la mujer, el olor de cualquier Min para él era demasiado tranquilizante 

Algo curioso de todo esto era que por primera vez en años Jimin estaba sintiendo esta gran necesidad, obviamente había tenido celos, pero nada comparados con este. Los anteriores habían sido menos intensos y por eso con unas pastillas había sido más que suficiente para hacer que el deseo se calmara

Sin ir más lejos uno de los grandes problemas de la relación con Chanyeol era que nunca habían mantenido relaciones sexuales,  era algo que al alfa lo tenía demasiado inquieto, por supuesto lo entendía, sabía que para Jimin no era nada fácil enseñar su cuerpo y menos después de lo que le pasó a Yoongi, por eso a día de hoy seguía esperando a Jimin 

-Jimin: Yoon... quiero a Yoongi

Musitó abultando su labio inferior mientras jugaba con el extremo de la camisa que usaba como uniforme. Jihyo sabía lo que era pasar un celo sola ya que el señor Min al se militar a veces tuvo que pasar bastantes meses fuera. Por eso miró a el menor a los ojos y no pudo evitar tomar su mano para llevárselo 

El pensamiento de la mujer era tomar un café tranquilamente mientras esperaba a que su marido llegara a recogerla, Jooheon -el señor Min- le había prometido llevarla a cenar a su restaurante favorito cuando saliera de el trabajo 

La alfa se acercó al mostrador y miró a Chanyeol, ella no tenía nada en contra del muchacho, pero no le gustaba. Sabía perfectamente quien era y a pesar de que no le parecía mala persona no le gustaba que se estuviera interponiendo entre su hijo y el omega, ella desde pequeños pudo comprobar que estaban hechos el uno para el otro 

Y para qué mentir, Jihyo estaba deseando su hijo y el bonito omega terminaran con esta estúpida brecha que los estaba separando sin razón. Miró de forma desafiante a Chanyeol y habló demandante 

-Jihyo: Me llevo a Jimin, no se encuentra bien y por eso creo que no debería de estar aquí trabajando. Habla con el jefe por favor, gracias 

El chico no pudo decir nada, sabía que contra aquella mujer no tenía nada que hacer, así que simplemente asintió soltando un suspiro cuando vio como ambos desaparecían por la puerta de la cafetería 

Una risa sonó y Chanyeol se giró con el ceño fruncido, ahí estaba Baekhyun, un omega que a veces llegaba a detestar por su forma de ser, sin embargo siempre acababa rendido ante él 

Porque si, aunque Jimin no lo supiera; Chanyeol no había estado estos años en abstinencia. Claro que no, el alfa estaba enamorado de el rubio omega sin embargo en sus celos y algunos días salteados necesitaba descargar; y no había mejor persona que Baekhyun 

-Chanyeol: ¿De qué te ríes, medio metro? 

-Baekhyun: ¿Cuándo te vas a dar cuenta de que no está hecho para ti, Dumbo? 

Soltó sin más a la vez que preparaba un café con leche que le habían encargado. Un gruñido se escuchó de parte del alfa y Baek alzó su rostro 

-Baekhyun: A mi no me gruñas, alfa tonto ilusionado

Y por esto Chanyeol odiaba a veces al chico. Baekhyun era un omega, un omega que podía llegar a atraerte si lo veías físicamente, pero su personalidad no concordaba con lo que Chanyeol buscaba. Este omega era contestón, nada sumiso y además tenía carácter. Al pelinegro le gustaba alguien como Jimin, tan lindo, siempre con una sonrisa y tan dulce. Los dos omegas eran polos opuestos

-Chanyeol: Vas a acabar sólo, nadie te va a soportar en la jodida vida Baek 

El más bajo no dijo nada, solo se mantuvo en silencio frunciendo los labios para no llorar o gritarle cuatro cosas. El omega sabía que nadie lo iba a querer, y si alguien llegaba a hacerlo le iba a dar igual, porque seguramente la otra persona no se llamaría Park Chanyeol y por eso a él no le interesaría 

Baek desarrolló esta personalidad porque sabía que era la única manera en la que podría conseguir un poco de atención del contrario. Sabía que Chanyeol no se fijaría en él porque vamos, tenía como pareja a Jimin y eso para los alfas de la ciudad era como tener la luna llena en tus manos 

Y Baek, era simplemente Baek 

Rió de nuevo ahogando el primer sollozo intentando restarle importancia a los duros pensamientos que estaban llegando a su cabeza, agarró la taza de café y sin más fue a llevarla a la mesa correspondiente 

Por otro lado teníamos a Jihyo quien iba ahuyentando a todos los alfas y betas que se paraban a mirar a Jimin quien iba sollozando bajito, andando de una forma bastante extraña por su incomodidad en los pantalones y mordiendo su labio inferior 

El menor no sabía en absoluto a donde lo estaba llevando la señora Min, pero le daba igual, confiaba en ella ciegamente, sabía que ella haría lo posible por verlo bien 

En unos minutos se hallaban en la escuela de música, donde por las tardes Yoongi daba clases a niños pequeños que tenían interés en aprender este tan bonito arte

-Jihyo: Hola, necesito que Min Yoongi salga un momento 

Dijo con el mismo tono demandante a la beta que se encontraba en la recepción, esta se quitó las gafas dejándolas en el escritorio. Miró a Jimin algo confusa, arrugó su nariz y asintió. Sus tacones fueron sonando hasta que se perdieron por el pasillo que llevaba hacia las clases 

Aprovechando que los dos se habían quedado solos de nuevo , la alfa acunó las sonrojadas mejillas de Jimin y besó la nariz de botoncito de este

-Jihyo: Te dejaré en manos de Yoongi ¿Te sientes seguro con eso? 

El rubio asintió frenéticamente, es de lo único que tenía ganas, de estar entre los brazos de Yoongi 

Este entró en la recepción con la respiración irregular, parecía que había corrido hasta aquí

El omega en cuanto lo vio en el marco de la puerta se separó de Jihyo y se tiró sobre el alfa rodeando el cuello de este con sus pequeñas y suaves manitas mientras sus labios buscaban con desesperación los de Yoongi 

Este sin embargo con algo más de cordura que su menor lo tomó por la cintura intentando separarlo un poco, no podía hacer ese tipo de cosas aquí, pero entendía que Jimin lo estuviera haciendo. En estos meses de rehabilitación el peliblanco había conseguido recordar prácticamente todo, y entre todas estas cosas se encontraban los celos de su omega quien se ponía demasiado inquieto siempre

-Yoongi: Mamá ¿todo bien? 

Preguntó el alfa mientras metía una sus grandes manos por debajo de el uniforme de Jimin pasando esta por la espalda del menor quien ronroneaba casi de el gusto de sentir aunque fuera esos roces del alfa, su alfa

-Jihyo: Creo que vas a tener que ausentarte, ya lleva unas horas con su celo y necesita atención, bastante diría yo 

-Yoongi: Pero...aún no he terminado de dar las clas--

-Jimin: Hyungie, por favor...

Jadeó el menor abultando su belfo inferior pegando su cuerpo al del contrario intentando poder transmitirle su calor, sus ganas, su necesidad 

Y en ese momento Yoongi pudo comprender muchas cosas, pudo comprender que su omega lo necesitaba y él iba a a estar ahí para cuidarlo y darle toda esa atención que necesita, pero más importante, se dio cuenta que el omega de Jimin sabía quien era su alfa, sabía a quien debía de acudir en estos casos

Por eso ahora a Yoongi le había quedado claro que definitivamente Park Jimin era su pareja predestinada, su pequeña alma gemela 

-Yoongi: Bien, mamá por favor, cuando vuelva Sana, la señorita secretaria, dile que me he tenido que ausentar la última media hora de clase. Gracias por haberte encargado de Jimin hasta ahora. Nos vemos más tarde 

El alfa tomó al menor por los muslos de este, la cabecita del rubio se encajó en la curvatura del cuello del mayor y sintiéndose más protegido que nunca se quedó escondido ahí dejando besos por esa zona dejándose llevar por Yoongi

El peliblanco a toda prisa salió de la escuela en la que trabaja, no sabía muy bien como iba a salir todo esto, hacía muchos años que no tocaba a Jimin, hacía mucho años que no tocaba a nadie. Pero eso daba igual ahora mismo, estaba seguro de que sabría que hacer en el momento adecuado como todas las otras veces

Min dejó a su pequeño en el asiento de el copiloto, le costó un poco ya que el rubio no quería separarse de él en absoluto y estaba formando un pequeño berrinche como si cuatro años tuviese 

-Yoongi: Cariño, es un momento, solo los segundos que tarde en sentarme en mi asiento. Te prometo que mientras conduzco te acariciaré también ¿Sí? Ahora por favor, mi vida, déjame un momento 

El rubio asintió poco convencido

Yoongi tardando lo menos que pudo le dio la vuelta al coche y se sentó donde le correspondía para conducir. Como había prometido, dejó su mano derecha en el muslo de Jimin y con la otra mano tomó el volante

Ya se encontraba conduciendo y la verdad es que no sabía muy bien qué hacer. No podía ir a su casa, ya que no sabía a qué hora iban a volver sus padres y no era muy correcto el hecho de que apreciasen la escena, tampoco podían ir a la casa de Jimin; allí también estaba su familia 

Yoongi suspiró frustrado y por si su cabeza todavía no estaba hecha suficientemente lío ahora lo estaba aún más

Jimin se encontraba gimiendo bajito frotando su entrepierna con la mano del alfa

-JImin: Yoon~ No pu-puedo más ...

Bien, Yoongi estaba jodido, muy jodido. Así que como última opción decidió aparcar el coche en los aparcamientos de la playa donde sabía que en abril a las 21:10 de la noche no habría nadie. A toda la velocidad que pudo se dirigió hacia allí intentando no desconcentrarse para no chocar 

Pero los gemidos y toqueteos de Jimin no ayudaban, porque si no era suficiente con tener a su omega ahí retorciéndose en busca de placer, ahora el menor había decidido también tocar a Yoongi sin dar importancia a que estuviera conduciendo 

Por fin el alfa pudo aparcar donde había planeado y para su suerte efectivamente estaba todo completamente solo. Yoongi se quitó el cinturón, separó su asiento del volante y quitó el cinturón de Jimin 

-Yoongi: Ven aquí cariño, tu alfa se va a encargar de ti 

 Al rubio le brillaron los ojos de emoción, no tardó en absoluto en subirse a horcajadas sobre las piernas de el peliblanco, acunó sus pálidas mejillas con sus cálidas manos y unió sus labios con desesperación 

-Jimin: Mn-mng...

Jadeó el menor cuando sintió las manos de Yoongi apretar su trasero, cuanto había extrañado sentir esas  manos recorrer su cuerpo

Las lenguas de ambos se encontraban casi danzando en la boca del menor. Podrían haber seguido casi devorándose el uno al otro pero Yoongi sonrió cuando sintió como el pantalón de su menor se estaba humedeciendo aún más 

Por eso es que mordió el labio inferior del rubio y tiró de este con suavidad mientras desabotonaba  el pantalón de Jimin. Luego fue dejando un camino de besos empezando por el mentón del menor hasta llegar a su cuello, hombros y clavículas las cuales tenía a la vista porque por el camino se había dedicado a desabotonar su propia camisa  

Una de las manos de el alfa se había encargado de introducirse por los pantalones y ropa interior de Jimin, paseó dos de sus dedos por la húmeda entrada del omega y este tembló bajo aquella caricia 

-Jimin: mierda, hyungie...

Susurró con su respiración irregular enredando sus dedos regordetes entre las hebras plateadas de Yoongi quien ya sentía como su alfa arañaba su interior por introducirse en el menor, pero esto le estaba encantado, tener a se pequeño tan vulnerable en sus piernas mimándolo como hacía años que no podía 

-Yoongi: Dime precioso, ¿Qué debería de hacer aquí? ¿hm?

Preguntó deslizando dos de sus dedos en el interior del rubio quien gimió alto, en sus celos solía masturbarse él solo pero ahora mismo había recordado lo placentero que era que alguien más lo hiciera 

De forma casi inconsciente se comenzó a mover penetrándose así mismo con los largos dedos de Yoongi quien miraba más que lascivo la escena 

-Yoongi: No cariño, no gastes energías ahora, tendrás ahora tiempo de moverte 

sonrió de nuevo acercando ambos labios para comenzar otro morboso beso mientras metía más dedos en el interior de Jimin quien ahogaba gemidos en el beso más que encantado 

Unos minutos bastaron, Yoongi con algo de desespero casi arranco los pantalones de Jimin al igual que la ropa interior quitándolas del medio, también se deshizo de su camisa y por último desabrochó su pantalones bajándolos junto a los boxers dejando a la luz la gran erección que ahora mismo mantenía 

El rubio ahogó un gemido relamiendo sus labios, posó una de sus manos en el hombro de Yoongi y con su mano libre tomó el miembro de este guiándolo a su entrada 

Puede que en este momento ambos sintieran la excitación recorrer sus cuerpos de arriba abajo, pero eso no era comparado con la mirada que ahora se mantenían, el mayor sonrió levemente acunó las mejillas regordetas de Jimin entre sus manos y a diferencia de los otros besos ahora depositó uno de lo más dulce 

Se separó lentamente y susurró un "te amo Jimin" 

Este volvió a juntar ambos labios queriendo transmitirle un "yo también", mientras fue introduciéndose poco a poco 

El menor se separó de los labios contrarios para jadear por el dolor, hacia años que no hacia esto y a pesar de que a el menor le estaba doliendo un poco ya que los dedos no habían sido suficiente, Yoongi lo estaba disfrutando de sobre manera 

-Yoongi: D-dios...no me acordaba lo que era esto...

Jadeó con voz ronca abrazando al pequeño para brindarle su calor y protección. Jimin agradecía la paciencia de  su alfa, agradecía que le estuviera acariciando tiernamente con el fin de tranquilizarlo y agradecía nunca antes haber hecho estas cosas con Chanyeol y haberse hecho caso a si mismo

-Jimin: Me...me voy a mover Yoonnie...

Gimió bajito apoyando ahora sus dos manos en los hombros desnudos de Yoongi quien asintió dejando besos por todo el rostro del menor dándole más seguridad aún. El rubio hundió sus deditos en la carne del mayor comenzando a mover las caderas de arriba abajo sintiendo como el miembro entraba y salía de su interior  casi por completo 

-Yoongi: Sigue, bonito...lo haces tan bien 

Susurró con su voz llena de excitación echando su cabeza hacia detrás mirando atentamente el rostro de Jimin el cual para el mayor estaba siendo una obra de arte, como las facciones del omega cambiaban por el placer, como sus ojos estaban cristalinos y sus mejillas sonrojadas, como su flequillo se pegaba a su frente por el sudor y como los gemidos salían de aquellos gruesos belfos hinchados por los tantos besos y mordidas 

Unos instantes bastaron para que Jimin ya se encontrara gimiendo alto y agudo botando sobre el miembro de Yoongi quien ayudaba a su pequeño a moverse sosteniéndole de la cintura. Todo se salió más de descontrol cuando Park había conseguido encontrar su punto dulce; ahí pareció que todas las energías de el rubio se habían perdido para seguir saltando, por eso el mayor echó el sillón hacia detrás y se dio la vuelta dejando ahora al omega debajo suya 

-Jimin: Vamos Yoonnie, házmelo...

Gemía el rubio enredando sus dedos en las hebras plateadas, el mayor sonrió lascivo, junto su frente con la del contrario y comenzó a embestirlo tan rudo y profundo que el omega sintió desfallecer 

-Jimin: ¡S-si! ¡Ahí! M-mnh...

El coche se movía levemente por las embestidas del mayor, los cristales empañados por la elevada temperatura y el interior lleno de gemidos y sonidos de pieles chocando 

Apenas minutos después él menor había terminando manchando su abdomen y Yoongi no tardó en hacerlo también en el interior de Jimin

El nudo de el alfa esta en el interior de el omega terminando de hincharse por completo para desanudarse mientras ambos relajaban sus respiraciones. Los dos callados sonriéndose; siendo Jimin el primero en reaccionar echando su rostro hacia un lado dejando su cuello al descubierto en muestra de sumisión 

-Jimin: Vamos hyung...¿A qué esperas? 

El peliblanco tragó duro, había esperado tanto por esto que no lo pensó, simplemente acarició la mejilla del menor con una de sus manos y llevó sus belfos al cuello de el pequeño donde dejó una marca haciéndole saber así al mundo que Park Jimin ya estaba con alguien 

seis años más tarde...

-Jimin: Dahyun! Chaeyoung! Papá está en casa 

Gritó el omega desde el salón donde se encontraba con Yoongi ahora acariciando enternecido la abultada barriga de Jimin mientras se desabotonaba algunos botones de la camisa relajándose después de una tarde entera dando clases 

Los pasitos y chillidos de dos niñas pequeñas se escucharon bajar las escalera y ambos mayores compartieron una sonrisa cómplice, esa era la familia que ambos estaban creando, una familia llena de amor y cariño 

-Chaeyoung: Papá! Hoy he ganado el concurso de baile en el cole! 

Dijo la castaña dando saltitos alrededor de su padre alfa, este no dudó en tomarla en brazos alzándola mientras besaba el rostro de esta

-Yoongi: Estoy orgulloso de ti cariño, una de mis princesas va a ser una gran bailarina ¿cierto? 

La castaña asintió feliz, le encantaba su padre Yoongi. Obviamente la menor amaba a sus padres por igual, pero siempre tuvo un lazo con el alfa muy especial y el peliblanco sabía el por qué, esa pequeña iba a ser una alfa, una alfa muy parecida a su abuela Jihyo llena de cariño y energía para repartir 

Después estaba Dahyun quien siempre esperaba  a que su hermana pequeña terminara de saludar primero a su padre alfa, sabía que era uno de los caprichos de Chaeyoung y ella se lo consentía 

Yoongi dejó a la más pequeña en el suelo y ahora fue él quien se agachó frente a Dahyun, le sonrió dulcemente y con sus manos acunó las regordetas mejillas de la chica las cuales había heredado del omega 

-Yoongi: ¿y mi reina? ¿qué tal en el concurso de poesía? 

-Dahyun: Hemos ganado el primer premio

Dijo la pequeña abrazando a su padre escondiéndose en el cuello de este en busca de su aroma 

Si Chaeyoung era una alfa como los Min, Dahyun era una tierna omega, era una copia en mujer de Jimin y eso no podía alegrar más a Yoongi porque joder, para él su marido era el ser más perfecto del mundo

-Yoongi: Bien, como hoy habéis sido las ganadoras y además el pequeño Jae va a cumplir ocho meses en la barriga de papá...¿Qué tal si nos vamos a cenar todos juntos? 

Ambas chicas se miraron y asintieron felices saltando alrededor de sus padres, aunque no tardaron en subir las escaleras corriendo de nuevo para arreglarse con sus prendas favoritas 

-Jimin: Creo nos mimas demasiado 

El omega sonrió dulcemente entrelazando sus dedos con los de Yoongi

El peliblanco negó suavemente dejando un beso en la mejilla del contrario para luego susurrar "nunca será suficiente para agradeceros hacerme tan feliz..." 

Desde luego Yoongi no podía estar más agradecido, daba gracias a la mismísima luna cada noche por tener a sus dos bebés y al tercero en camino, daba gracias por tener a su pareja con él, daba gracias a la vida por hacer que su alfa se enamorase de un omega como Jimin porque no se imaginaba una vida sin él

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Okay, este Au  me hace mucha ilusión porque la primera parte la escribí por los 100 seguidores y está parte la he escrito por los 1000.

Bueno, espero que os haya gustado. <3

Lo he escrito con todo mi cariño para ustedes.

Os quierito. <3 

Estas son las dos bebés. <3