N/A:  En primer lugar, si no hago una segunda temporada es porque no quiero darme más largo y drama. Serán tres especiales sobre los hijos de nuestras parejas principales y unas sorpresas de los adultos.
Pd: Es mi historia, si no quieres leer no leas, yo decido si hago 30 temporadas. Serán solo tres especiales con sorpresas.

                       [***]

Jungkook se encontraba terminando de firmar unos documentos, algo acumulado sobre su escritorio desde hace varias semanas, desde que habían decidido agrandar su negocio hostelero, no tenía tiempo para nada más, por eso mismo mandó a su secretaria a llevarle todos los pendientes, pues estaría ausente durante unos días de la oficina, quería pasar tiempo con su familia, tomarse un descanso, y sobre todo, quedarse a dormir hasta bien tarde en la mañana.

Solo que hoy, aprovechando que su esposo estaba cerrando unas ventas en la galería, y sus hijos estaban en la universidad, trabajaba en esas importantes firmas.

Se levantó para dirigirse a la cocina por un poco de agua, cuando escuchó la puerta abrirse y luego ser cerrada de golpe, miró hacia el reloj de la pared, era muy temprano aún para que Jimin terminara su trabajo, así que un poco confundido, se apoyó en el arco que conectaba el recibidor del comedor, solo para ver quien era el intruso.

— ¡Papá! — Exclamó Jungguk asustado en cuanto vio al hombre pelinegro a su lado, totalmente exento de la agenda laboral de su padre, claramente no esperaba que estuviese en casa. — ¿Qué haces aquí? — Sonrió avergonzado, mientras rascaba la parte trasera de su nuca.

— ¿Qué haces tú aquí? ¿No tienes universidad? — Respondió con otra interrogante que dejó fuera de lugar a Jungguk, él cuál no sabía cómo explicarle aún a su padre, el motivo por el cual estaba tan temprano de regreso — ¿Y Jimsun?

— Está en clases. Papá tengo que hablarte sobre algo.

— ¿Qué hiciste?

— ¿Porqué tuve que haber hecho algo? — Jungkook arqueó una ceja, conocía tan bien a su hijo, vamos, como si el mismo le hubiese dado a luz y no Jimin. — Pa, Minjae está embarazado. — Jeon que no se esperaba ni de cerca aquella sorpresa, comenzó a toser violentamente provocado por la saliva, Jungguk aterrado por la condición de su padre, golpeó su espalda con fuerza ayudándolo a mantenerse nuevamente calmado, algo totalmente imposible, ya que la situación en la que se encontraba era mucho peor.

— Jungguk.

— Ya sé, ya sé lo que dirás papá, pero somos adultos, y llevamos 3 años de novios.

— Aún no terminan la carrera, Minjae tiene 22 años, no es momento para tener un bebé, no sabes la responsabilidad que eso conlleva, y tú eres tan inmaduro hijo, ¿Cómo vas a convertirte en el hombre de familia cuando no sales debajo de los pantalones de tu  padre?

Aunque dolieron sus palabras, no dejaba de tener razón, los gemelos aún vivían con ellos, por más que Jungkook les proponía formar parte de la empresa, para que por fin tuviesen algo suyo, nunca aceptaban, principalmente Jungguk que no podía separarse de Jimin, era como si aún tuviese el cordón umbilical que los conectaba.

Jeon vivió momentos difíciles de adolescente, se vio obligado a buscarse la vida; independizarse, pero sus hijos eran totalmente diferentes a él, lo tenían todo, nacieron con sus dos padres juntos, que se amaban, que nunca se separarían, su posición económica era la mejor, pero aún así, les quedaba un largo camino por recorrer, eran demasiado jóvenes, Jimin los seguía viendo como niños pequeños.

Cuando su esposo supiera esto, posiblemente pegaría un grito.

— Papá, amo a Minjae, si tengo que dejar la carrera para cuidar de él y mi bebé lo haré.

— Hablamos cuando tu padre esté en casa, esta es una decisión que debes tomar tú y Minjae, pero deben hablarlo con Taehyung y...dios, cuando Yoongi lo sepa. — La seriedad de Jungkook se había ido al caño, de solo pensar en la reacción de Min cuando se enterara de que su único hijo estaba esperando un bebé seria épica, eso no podría perdérsela por nada del mundo. Por otro lado, saber que sería abuelo lo hacia feliz.

Eran las 7:30 pm cuando Jimin llegó a casa, como era costumbre, solía preparar la cena para sus hombres, pero ahora que Jungkook no iba a la oficina, sería él quien se encargaría de todas las tareas de la casa, al menos de la cocina, ya que tenían a unas señoras que se ocupaban de mantener la limpieza de la mansión dos veces a la semana. Jungkook se encontraba sentado en uno de los sofás con sus dos hijos a cada lado, Jungguk movía los pies nerviosamente, mientras que Jimsun estaba tranquilo, al estar ajeno a todo lo que acontecía.

— ¿Qué pasa?

Fue lo primero que dijo Jimin una vez frente a ellos, dejó sus cosas a un lado, para luego centrar su mirada únicamente en su esposo. — Jungguk nos tiene que contar algo.

— ¡Oh, no no no! — Exclamó Jimin como si ya supiera de qué se trataba.

— Papá aún no he hablado.

— ¿Haz dejado a Minjae embarazado?

El grito de Park se escuchó por toda la casa y de seguro llegaría a sus vecinos.

— Y eso que no es mujer. — Murmuró Jungkook.

— Seré tío. — Fue lo único que dijo Jimsun.

— Esto no puede estar pasando, Jungguk, hay algo que se llama condón hijo.

—Papá, lo puedo explicar.

— ¿Me vas a explicar como se hace un bebé? Porqué si no te diste cuenta, ni tu padre ni yo los hicimos en una fábrica de bebés.

Jungkook se puso de pie, las cosas comenzarían a salirse un poco de control, y lo que menos necesitaban en estos momentos era una discusión de mayor magnitud, porque aún faltaba por explotar la bomba más grande, una de nombre de Min Yoongi. Una vez que el pelinegro tuvo en sus brazos al rubio, lo abrazó, Jimin se calmaba cada vez que Jungkook iba hasta él, era su mayor fortaleza, pero con todo esto, no había nada que pudiese calmar lo que sentía. — Primero nos vamos a tranquilizar, luego, hablaremos con Taehyung y Yoongi ¿Está bien?

Todos reunidos como cada fin de semana por una cena familiar, con la diferencia, de que no cenarian y que no era fin de semana, Minjae sostenía la mano de Jungguk permaneciendo a su lado, asustado por la reacción de sus padres. — ¿Bien, y que es lo que pasa? — Un Yoongi bastante furioso salió a relucir. — Llevamos más de una hora mirándonos las caras. — Taehyung le dio un golpe en el brazo para que se relajara.

— Somos amigos, por más de 20 años. — Cuando Jungkook dijo aquello, Tae no pudo evitar darse cuenta de lo que sucedía, debía ser ciego para no verlo, así que se puso de pie, caminó hasta su hijo y tranquilamente le dio el apoyo que necesitaba, como su padre.

— Hijo, ¿Estás embarazado?

El joven se mordió los labios nerviosamente, para luego abrazarse a su padre con fuerza, comenzó a llorar desesperado, y es que por más que Jungguk creyera que tenían la situación controlada no era así, se podía ver lo asustado que estaba su novio, claramente no estaba preparado para traer un bebé al mundo, Minjae era demasiado estudioso, lógicamente quería culminar sus estudios.

— ¿Embarasaste a mi hijo, Jungguk? — Le gritó Yoongi caminando hacia él, pero Jungkook se interpuso en su camino.

— ¡Eh, cálmate Min, le estas hablando a mi hijo hermano, no puedes olvidar que somos como familia aquí! — Min apretó los puños como muestra de tranquilidad.

— Lo siento. — Se disculpó el pelinegro menor dando un paso al frente. — Realmente lo siento, no fue mi intención poner a Minjae en esta situación, pero nos amamos, y lo vamos a enfrentar juntos. — Apretó la mano de su novio, — Amor, si no estas preparado, más adelante lo estaremos.

— Te amo Jungguk.

— Yo también.

— ¿Qué es lo que tu deseas, hijo? ¿Quieres tener ese bebé?

Taehyung había madurado más de la cuenta, ahora sabia como controlar una situación sin que saliera de sus manos, cuando supo que estaba en  espera de Minjae no supo más que llorar asustado, pero ahora podía con eso, y mucho más.

— ¿Te sientes mal, cariño? — Aún lado de la sala principal, Jungkook notaba que su esposo se estaba poniendo blanco como un papel.

— Estoy un poco mareado, pero estoy bien. — Sonrió abrazándose a su marido nuevamente.

— Minjae hijo, si tienes a ese niño, tienes que olvidarte de tus sueños, de tu carrera.

Taehyung miró mal a Yoongi.

— ¿Te callas?, nosotros tuvimos a nuestro hijo, y ninguno tuvo que abandonar su sueño. — Yoongi tragó seco y bajó la cabeza ante el regaño de su esposo — Vamos a casa, mañana nuestros hijos decidirán que quieren realmente. — Sin nada más que decir, Taehyung fue el primero en caminar hasta la salida, más atrás lo siguió Yoongi y luego de que su hijo se despidiera de su novio, se marchó junto a sus padres.

— Papá yo...

— Mañana Jungguk, mañana.

Dijo Jimin de camino a su habitación.