No sabía ni como ni cuándo pero se despertó con las piernas entre abiertas y con la cabeza de la rubia subiendo y bajando por toda la extensión de su falo.

Estaba boquiabierto por las acciones de su menor pero decidió callar y seguir observando en silencio.

En la habitación sólo se escuchaban los ruidos obscenos que provocaban las succiones de la mamada que le estaba realizando su mejor amiga.

─¿Te gusta cómo te la estoy chupando? ─el mayor se exaltó al escuchar la pregunta de la rubia ─Te hice una pregunta Hoon ─ parpadeó confuso. Iba a hablar pero la menor volvió a introducir el gran tronco dentro de su boca y chupo con más fuerza mandando corrientes eléctricas por todo el cuerpo del azabache.

─Oh por Dios Yuna... ─gimió cuando la punta de su pene tocó el fondo de la garganta de la menor.

─¿Te gusta cómo te la mamo, verdad? ─saco de su boca el miembro de la mayor nuevamente.

─S-Si ─la menor ladeó la cabeza.

─"Si" qué? ─sonrió burlona

─Me gusta como me la chupas Yuna ─sonrió triunfante ante la respuesta. Bajo la mirada y vio las venas palpitantes en todo el tronco del mayor, la punta roja e hinchada, y el líquido pre seminal mezclado con su saliva gotear por toda la extensión del pelinegro, haciéndolo ver más apetecible de lo que ya era. Ahora quería jugar un poco con la excitación de su mayor.

─¿Quieres que... Siga? Podría detenerme si- ─Sunghoon negó rápidamente jadeando.

─Sigue por favor ─dijo y así fue. Ahora su mano subía y bajaba a un ritmo rápido por el pene del pelinegro, lo estaba masturbando, y vaya, Sunghoon podía jurar que jamás en la vida alguien le haría una mamada y la masturbaría tan bien como lo estaba haciendo Yuna ahora.

─Estoy cerca Yuna ─murmuró a duras penas tapándose el rostro con la almohada tratando de ahogar sus gemidos.

Yuna aceleró sus movimientos y sonrió satisfecha cuando un gemido ahogado sonó a través de la almohada y un líquido espeso y caliente empezó a chorrearse por su mano, y sin pudor alguno llevó su mano a su boca y comenzó a lamerlo como si de un helado se tratase. Sunghoon estaba atónito con todo esto.

─Yuna, ¿Puedo hacerte una pregunta? ─Sunghoon hablo tratando de ignorar el hecho de que su mejor amiga se estaba tragando su orgasmo delante de él ajena a su presencia

─Ya la estás haciendo Hoon ─respondió la contraria concentrada en su labor.

─¿Por qué hiciste eso? ─pregunto reincorporándose en el espaldar de la cama.

─Fácil. Porque me gustas y quiero hacerte sentir bien.

─¿Q-Qué? ─estaba en shock por esa confesión. ─¿Te g-gustó? -pregunto sin poder creerlo.

-Así es, y no sabes cuándo tiempo estuve aguantándome las ganas de chupar tu deliciosa polla, y me alegra que tú y Wonyoung hayan terminado porque si no, está oportunidad no se me hubiera dado.

Sunghoon seguía sin entender, pero cuando pensó que comenzaba a hacerlo, el chirrido de la cama la hizo voltear la mirada encontrándose a Yuna gatear hacia él de forma provocativa y sensual, meneando las caderas con cada avance que daba, y Sunghoon sólo se pudo imaginar sosteniendo esa diminuta cintura entre sus manos mientras embestía con fuerza a la menor.

─La diversión aún no termina oppa~ ─Sunghoon abrió su boca en una perfecta "o" cuando Yuna empezó a desabotonar su camisa de dormir dejando al aire libre sus perfectos y redondos pechos.

Sintió babear por un instante.

─Acuéstate para mí ─pidió de forma inocente, cosa que no era, y Sunghoon sólo obedeció ─Te haré sentir tan bien que de ahora en adelante en lo único que pensaras en el día será en follarme a cada instante, en cualquier lugar y yo, te estaré esperando con esta boquita y las piernas abiertas para que lo hagas.

─Y cuánta razón tienes, en este momento solo pienso en hundirme en ti, follarte hasta el cansancio, y no parar hasta escuchar mi nombre saliendo de tu boca pidiéndome que me detenga.

Yuna sintió la humedad gotear por sus piernas, pero no podía flaquear, le faltaba algo por hacer.

Acomodó sus piernas a cada lado de las pantorrillas del mayor, se inclinó un poco hacia adelante, tomo sus pechos entre sus manos y atrapó el erecto miembro de Sunghoon entre ellos.

Estaba haciendo como una especie de masaje, y Sunghoon estaba fascinado. La menor se encontraba follando su polla con sus pechos y era una imagen que jamás querría borrar de su memoria.

Yuna aprovecho la posición y entre sus pequeños labios tomo la punta del pene con ellos y comenzó a darle pequeñas mordidas alrededor. Sunghoon se tensó y supo que se acercaba su orgasmo, así que aceleró sus movimientos y chupo con más fuerza, metiendo nuevamente la gran polla de su amiga a su boca. Ambos gimieron cuando Sunghoon se corrió desprevenidamente en la boca de la rubia llenándola por completo que tuvo que sacarse el pene aún erecto de la boca porque pensó que se asfixiaría.

Tenía algunos rastros de semen alrededor de la boca, y algunos de ellos cayeron por sus pechos deslizándose y causando una vista realmente erótica para el pelinegro.

Los dos se miraron por unos segundos y Sunghoon no dudó en lanzarse a los labios de Yuna, sin importarle que está tenga su propio sabor en la boca. El beso era hambriento y cargado de lujuria, ambos sabían lo que ocurriría y ninguna de las dos se arrepentiría de ello.

Se separaron jadeando de deseo y el mayor se levantó de la cama con los pantalones abajo a buscar algo, su polla moviéndose con cada desplazamiento hace agua la boca de Yuna, así que evita seguir mirando y se muerde el labio ignorando a Sunghoon por completo.

Después de dos minutos Sunghoon vuelve a la cama y termina de desnudar por completo a Yuna, robándose besos y caricias en el camino. Acerca su rostro a la intimidad de la menor e inhala su olor sintiendo un respingo en su amiguito, Yuna se estremeció al sentir la respiración de su mejor amigo cerca de su húmedo centro y gimió en alto cuando sintió una gran lamida en su coño provocando que cerrara los ojos con fuerza y se agarrara de las sábanas con fuerza.

No quería correrse tan pronto.

─Mgh Sunghoon, así ─se retorcía de placer cuando la lengua del pelinegro se adentraba aún más en su interior.

El mayor acariciaba sus muslos de manera tortuosa generándole más placer con sus carrasposas manos.

─M-Más rápido ─suplicó respirado con dificultad. Sunghoon introdujo el primer dígito dentro de la cavidad de la rubia pero sin embargo no era suficiente para la menor y gruño frustrada.

─P-Por favor... ─lloriqueó. Sunghoon rió bajo aún en su labor e introdujo dos dedos de golpe. La menor gimió alto satisfecha.

─Estas tan estrecha Yuna ─murmuró Sunghoon, doblo sus dedos buscando el punto G de la menor y cuando ella gimió un "oh sí" supo que lo había encontrado. Movió sus dedos mas rápido y con la otra agito el clítoris de la menor para brindándole más placer, la rubia era un mar de jadeos y su tan anhelado orgasmo llegó. Arqueó la espalda y con sus piernas apretó el rostro de Sunghoon haciendo que este gruñera y Yuna riera tratando de regular su respiración.

El mayor subió lentamente hasta quedar a la altura de la menor, y la beso delicadamente mezclando sus fluidos creando un sabor amargo pero excitante.

─Sunghoon... ─llamó empujando al nombrando por los hombros.

─¿Qué pasa? ─preguntó mirándola directamente a los ojos.

─Lo quiero adentro ─sentenció la menor acercándose al rostro del mayor para atrapar su labio mordiéndolo fuerte, Sunghoon sonrió y tomo de la cintura a la menor volteándola boca abajo.

─Sostente fuerte del espaldar de la cama Yuna ─la más baja obedeció y le ofreció una perfecta vista de su culo al mayor.

Sunghoon relamió sus labios y dio un lengüetazo en todo el coño expuesto de la castaña quien se estremeció por eso. Tomó su erecto miembro entre sus manos y lo pasó lentamente por toda la entrada lubricándolo con los fluidos de ambos. Lo alineó en toda la entrada y de una sola estocada entro en ella.

─¡S-Sunghoon! ─se quejó la menor.

─Perdón, avísame cuando ya pueda moverme. Así que por favor relájate porque si no te va a doler, ¿Ok? ─besó suavemente su espalda y espero unos segundos hasta que vio un asentimiento de cabeza de parte de la menor y empezó a embestirla lentamente haciendo que se acoplara a su gran tamaño.

─Uh~ ─Yuna echo su cabeza hacía atrás y sus ojos se voltearon tortuosamente poniéndose en blanco cuando sintió al mayor tocar su punto G otra vez de una manera tan jodidamente deliciosa.

Sentía como sus paredes estrechas eran llenadas por completo por el gran falo de Sunghoon.

Sunghoon por su parte, siguió embistiendo con más fuerza, de vez en cuando brindaba unas nalgadas al trasero de la menor que hacían que la temperatura del ambiente subiera más.

La espalda de Yuna se arqueó totalmente y Sunghoon bajó el ritmo de sus embestidas a unas más lentas.

El pelinegro tomo de la cintura la menor ya roja por el agarre, y la volteó quedando frente a frente, obligándola a salir de la vagina de la menor para acomodarse mejor.

Sunghoon quería ver la cara de Yuna al momento de llegar al orgasmo.

Embistió unas cuantas veces más, entraba y salía completamente de la cavidad de la rubia haciendo que se retorciera de placer.

Ambos gimieron alto cuando el placer los inundó por completo. Yuna sintiendo el líquido espeso deslizarse por sus piernas y Sunghoon sintiendo el como Yuna exprimía todo de él.

─¿Y ahora? ─preguntó el mayor saliendo por completo del interior de Yuna ganándose un puchero por parte de la rubia.

─¿Ahora qué? ─pregunto sin entender.

─Después de esto, ¿Qué pasará entre nosotros? ─Yuna lo miró confundida ─Digo, somos mejores amigos y mira dónde terminamos Yuna ─dijo obvio ante la mirada de confusión de su amiga.

─Bueno, ehm, qué te parece si salimos a cenar mañana, ¿Esta bien eso para ti?

─¿Es una cita? ─preguntó el azabache sin creerlo.

─Así es Hoon, mañana tú y yo saldremos juntos a una cita ─sonrió con dulzura. ─No sabes cuánto espere para esto y no pienso perder la oportunidad de salir contigo ─ Sunghoon rió entre dientes y tomo las sábanas de la cama para cubrirse a él y a Yuna.

─Espera ─Yuna lo detuvo.

─¿Qué sucede?

─Yo aún no termino contigo, quiero probar más de tu zanahoria~

Sunghoon sintió como alguien cobraba vida otra vez listo para la acción. ─¿Y que esperas? ─ante la "respuesta" positiva, Yuna emocionada se metió dentro de las sábanas y comenzó con su nuevo juego.

Sin duda, de ahora en adelante su comida favorita siempre será la zanahoria de Sunghoon.