-Por favor, Yongbok... duerme- 6 meses de vida, a las 2:23 de la mañana, Niki trataba de que su pequeño hijo concilie el sueño -¿Por favor?- miró los claros ojos de su hijo y este tan solo soltó una risita mientras seguía hiperactivo.

-Cielo...- Sunoo tampoco dormía, se sentiría culpable si él dormía y Niki no lo hiciera -Dámelo- estiró sus brazos cargando a su lindo hijo -Vamos a la cama, dormirá con nosotros hoy.

-¿Estás seguro? puede caer de la cama.

-Cierto....- sabía que Yongbok no dormía más rápido con el aroma de mamá, así que se le ocurrió una idea millonaria. -levántame.

-¿Qué?

-Levántame y ponme en su cuna, yo dormiré con Yongbok en su cuna.

-Pero Cariño... ¿Entrarás?- estaba por reírse.

-No lo sé... pero intentemos- dejó a Yongbok en una mecedora para que Niki lo levante y lo ponga en la cuna de su hijo.

-Eres tan liviano- lo levantó del suelo -tan pequeño y adorable...- se olvidó por completo de qué tenía que hacer, empezó a besar sus labios con tranquilidad, estaba cansado.... pero no demasiado como para no aprovechar la oportunidad de besar a su esposo -Te amo- el beso hubiera seguido de no ser por la risilla de Yongbok -oh... cierto.

Sorprendentemente Sunoo cupo mas que perfectamente en la cuna de su cachorro, después de entrar Niki le paso a su pequeño hijo para que duerman juntos ahí.

-Ya... ya se durmió- dormía en los brazos de mamá, era muy cómodo -ve a dormir, si algo pasa, te llamaré enseguida ¿si?

-Buenas noches, Cariño- besó la frente de su esposo y luego la de su hijo.

-Sueña bonito- se despidió de su marido.

.

.

-Niki!- llamaba Sunoo a las 10 de la mañana junto a su pequeño hijo, acababan de despertar y querían ir a desayunar.

Yongbok balbuceaba adorablemente, sus negros cabellos estaban algo rizados.

-Amor!- Sunoo llamó otra vez.

-Si! Ya llegué ¿qué pasó?- apareció en la habitación con una espátula en mano y vistiendo su pijama con un delantal encima, estaba haciendo el desayuno hasta que su lindo omega lo llamó, corrió hasta dónde lo llamaban riendo al ver lo que quería.

-Álzame~- levantaba sus brazos como un niño pequeño junto con su hijo -primero a YongBokkie- le pasó a su lindo bebé.

-Ven con papá~- Niki alzó en brazos a su cachorro haciéndolo reír, lo sostuvo con un brazo y con el otro alzó a Sunoo, para Niki, pesaban casi lo mismo, así que no fue difícil llevarlos a la cocina.

-Aa... Baba- balbuceó Yongbok en su sillita.

-¿Q-qué?- Sunoo se puso muy atento, parecía que quería hablar.

-Pa... papá- Sunoo y Niki se quedaron atónitos ante estas palabras, acababa de decir su primera palabra.

-A... así es! ¡Yo soy tu papá!-Niki lo levantó besando sus mejillitas haciéndolo soltar risitas -Yo soy tu papá....

Repartió varios besos en sus mejillas parando después de unos segundos, pero cuando paró Yongbok le devolvió los besos en su mejilla, bueno, frotaba su carita, pero de todas formas fue adorable.

.

.

-Intentaré regresar temprano- Niki, quien volvía al trabajo después de 6 meses de permiso parental, se alistaba una vez más para salir a trabajar.

-Ve con cuidado- el omega arreglaba el cabello de su alfa con su hijo en brazos.

-Siempre- en forma de despedida besó la frente de Yongbok y castamente los labios de Sunoo quien se quejó por la poca duración de este.

-Otro- hizo pico sus labios haciendo que inevitablemente Niki le otorgue un beso mucho más duradero -Ahora si, ve con cuidado, te amo.

-Yo te amo aún más.

.

.

-No hagas lo que mamá hace ¿Si?- estaba aburrido y había pedido tinte de pelo, acababa de llegar y ya tenía todo listo, todo bajo la atenta mirada de Yongbok.

-Ababa.

-Papá está en el trabajo... no me dejaría hacerlo en casa... pero el no está así que mando yo.

Yuna ladró pensando que no era una buena idea, solía ver el celular de su amo y veía muchos intentos fallidos de blanqueamiento del cabello.

-Lo sé... pero si sale mal, no importa, no tengo que verme bonito, ya estoy casado y marcado- sonrió dejando a su hijo en la cuna de la sala al cuidado de Yuna mientras él preparaba las mezclas que tenía que ponerse al pelo.

Se cambió de ropa a una que no le importase manchar, se puso guantes y finalmente estaba listo, con algo de miedo empezó a esparcir aquella mezcla en su negro cabello.

Cuando ya todo su pelo estaba embarrado de aquellas raras cremas se colocó un gorro de ducha para esperar 75 minutos y retirarlo de su cabello con una ducha.

-Si fallo...- habló a su adorable hijo que jugaba con el rostro de Yuna -aprende de mis errores ¿Si? 

-Aammaaa.

-¿Amá?

-A mama.

-¡Oh Dios santo! ¿A caso eres súper dotado? S-se supone que puedas pronunciar dos palabras diferentes a los 10 meses o 12, apenas tienes 6- abrazaba cariñosamente a su hijo, era muy inteligente.

.

.

-Es hora de la revelación- Sunoo estaba en el baño, Yongbok estaba dormido, Yuna estaba al lado de Sunoo para ver cómo resultó aquel experimento en su cabello.

Se sacó el gorro, se metió a la ducha y se bañó con normalidad, al salir se puso nervioso y sin mirarse al espejo se empezó a secar el pelo, una vez lo sintió seco miró su reflejo con rapidez sorprendiéndose, no quedó tan blanco, quedó rubio, pero le quedaba extremadamente bien.

-Wow, supongo que como soy tan hermoso, me quedan todos los colores- posó frente al espejo y segundos después sonó la puerta abriéndose.

Sunoo corrió como todos los días a recibir a su amado alfa.

-Cariño, ya lleg-- sus palabras se cortaron al ver la rubia cabellera de su omega, no le puso atención a que solo estaba con una de sus largas remeras blancas con sólo su ropa interior puesta. 

-¿Te gusta? sabía que no me dejarías hacerlo si te preguntaba, porque me dirías que lo hiciera en algún peluquero, pero nah, es muy caro, hacérmelo solito me costó menos de la mitad- se abrazó a su esposo besando su mentón pues no llegaba a besar sus labios.

-Yo... no, tienes razón, no te hubiera dejado hacerlo en casa, pero mírate, te queda muy bien- dejó su bolso a un lado para poder poner sus dos manos en la cintura de Sunoo.

-No siempre tienes que hacerlo con un profesional, mis galletas son mucho más ricas que la de aquella panadería- sonrió orgulloso.

-Tenía miedo que te hicieras daño, es todo.

-Puedo cuidarme solo y lo sabes, hasta te cuido a ti y a nuestro hijo que ya sabe decir "mamá"

-¿Qué?¿Tan pronto?

-Sipi, pero ahora está durmiendo, así que... ¿Quieres hacer algo conmigo?

Niki sabía a lo que se refería así que esbozó una sonrisa ladina.

.

.

-No! ponlo aquí- ya estaban terminando de hacer su fuerte de colchones y almohadas en la sala, Niki casi hace que una torre de cojines se caiga si es que Sunoo no lo hubiera detenido.

-Si, Cariño- colocó el cojín en la otra torre para que ambas se mantengan parejas y fuertes.

Niki era un famoso director de cines, todos sabían que era casado, pero nunca había mostrado la cara de Sunoo en cámaras, por su seguridad, la familia de Sunoo tampoco sabía que se había casado con Niki, ni si quiera sabían dónde estaba y parecía no importarles, pues nunca lo buscaron.

Pero había algo que Niki no sabía, hace dos días, cuando fueron al centro comercial por unas cuántas cosas, alguien los había fotografiado tomados de las manos y Sunoo conduciendo el carrito de compras con Yongbok dentro.

Los problemas eran grandes si esas fotografías se daban a conocer.

Y ya lo había hecho, poco a poco, esa fotografía llegaba a los periódicos y medios coreanos, pues Niki al ser el 4º alfa más apuesto en Seúl, el embrollo si que era grande.

Y cada vez crecía más y más

Cami~