Aunque Kim se fue a Zurich, KyungSoo no tuvo menos trabajo en su ausencia.

Aún tenía que encargarse de recibir las llamadas de algunos socios comerciales de Kai Corp., lidiar con las amantes desesperanzadas de su jefe -no, señorita Rachel, el señor Kim no ha vuelto aún-, asegurarse de que la despensa en su penthouse estuviera llena y enviar informes de cinco mil palabras directamente al correo electrónico del Señor de las Tinieblas.

Hubo otras pocas tareas que Kim le había encargado hacer, como enviarle un par de mensajes formales a SooJung para recordarle sobre la próxima reunión en la mansión Kim, enviar sus horarios y establecer una nueva agenda con las reuniones venideras.

Entonces, sí, KyungSoo seguía esforzándose.

El lado bueno de todo era que podía salir en horario de oficina y no tenía el ceño fruncido de Kim rondando a su alrededor todo el tiempo. Fue un buen descanso, KyungSoo casi podría sentir como sus energías estaban llenándose poco a poco.

Ese día almorzó con NaYeon y algunos compañeros de piso; se divirtieron un poco en un restaurante cercano y se desahogaron del estrés y la presión característica de Kai.

ㅡAunque nosotros no podemos quejarnos demasiado; por fortuna no tratamos directamente con el señor Kim, en cambio, Soo está lleno de él todo el tiempo. Es el más miserable de todos los que se encuentran aquí.

ㅡOh, de eso no hay duda. Debes aprovechar mientras el jefe no está, KyungSoo; usa estos días como unas pequeñas vacaciones aunque aún estés en el trabajo.

KyungSoo simplemente había sonreído con amplitud y comió un poco más de kimchi.

Salir temprano significaba poder hablar un poco más con BaekHyun, también. Su mejor amigo lo había abrazado con fuerza cuando llegó a casa a eso de las seis de la tarde y no dudó en servirle un gran tazón de arroz luego de apartar el maletín y el saco de sus manos, y ambos se sentaron en el comedor con un par de sonrisas contentas.

ㅡCasi no te reconozco, no sé quién eres, extraño.

ㅡYo tampoco sabía quién eras cuando te vi. Oh, está tan bueno y yo tenía tanta hambre.

ㅡPor supuesto que sí; no has comido muy bien, ¿cierto? Adelgazaste.

KyungSoo parpadeó y bajó la mirada hacia sus muslos, como si pudiera mirarse a través de la ropa y descubrir cuánto peso había perdido solo con esa acción. 

Tragó el bocado que había engullido hace tan solo un momento y preguntó con sorpresa:

ㅡ¿De verdad?

BaekHyun asintió, sus ojos enfocados en su rostro, y afirmó suavemente:

ㅡDe verdad. No es demasiado obvio, pero para alguien que te ha visto todos los días durante varios años puede ser notable. Aunque no debes preocuparte, tu trasero no ha ido a ninguna parte. 

ㅡEso es tranquilizador.

BaekHyun sonrió cálidamente y luego de un momento de silencio entre ellos, preguntó con preocupación:

ㅡ¿No ha sido demasiado difícil y exigente, Soo? Trabajar para Kim JongIn, quiero decir. Llegas tan tarde y siempre pareces tan cansado... parece que te está consumiendo.

KyungSoo guardó silencio por un momento y bajó la mirada hacia su comida a medio comer.

ㅡEs un poco difícil; Kim no es un hombre fácil, precisamente, pero mi ritmo no es tan terrible como el suyo. Sé que parece horrendo, pero no es tan malo ahora que me he acostumbrado. Yah, dejemos de hablar de mí, ¿cómo están las cosas contigo?

Ellos conversaron mientras comían y esto no le importó demasiado. BaekHyun tenía mucho para decir y parecía que necesitaba un desahogo de su propio jefe horrible, así que KyungSoo lo escuchó tranquilamente y le dio su opinión de vez en cuando.

Para cuando terminaron de comer y recogieron el desorden, ambos se encontraban lo suficientemente cansados como para irse a la cama. Se despidieron brevemente y KyungSoo se encerró en medio de un bostezo; él no pensó demasiado en las palabras de BaekHyun y simplemente se quedó dormido, sintiéndose relajado y feliz.

. . .

KyungSoo había estado conversando animadamente con NaYeon cuando las puertas del elevador se abrieron y Kim salió del interior luciendo igual de enorme e impactante que siempre.

El silencio fue absoluto, la tensión flotando en el aire.

Kim no le tomó importancia a esto, siempre imperturbable, y se dirigió hacia ellos con su permanente ceño fruncido y postura correcta.

A medida que Kim se acercaba, el lugar pareció reducirse exclusivamente a él; parecía el dueño de la habitación, seguro y confiado, poderoso y dominante. Era imposible no mirarle, admirarlo y sentirse ligeramente fascinado.

KyungSoo podría patearse a sí mismo por pensar de esa manera, pero no podía dejar de hacerlo. Él era imponente y KyungSoo siempre tuvo algo por ese tipo de hombres grandes que podrían doblar su voluntad fácilmente.

Tragó en seco cuando los ojos fríos y oscuros de Kim se posaron sobre él y NaYeon y reprimió un gemido cuando Kim no dudó en agarrarlo por la nuca y llevarlo consigo a la oficina sin decir una sola palabra ni detener su ritmo.

KyungSoo suspiró.

Se ganaría una reprimenda por "cotillear" en horas de trabajo, de eso estaba seguro.

La puerta se cerró y KyungSoo se movió de forma inconsciente para quitarle la chaqueta del traje, la colgó en el perchero a un lado y luego se deslizó hacia la cafetera que él mismo había comprado sin su permiso porque "estás loco, señor, no puedo correr todo el tiempo hasta la otra punta de la ciudad para traerte un americano; a partir de ahora lo haré yo" y comenzó a prepararle un café. 

Una vez estuvo listo, llenó una taza y la llevó hacia su jefe que, por supuesto, Dios, ya se encontraba mirándolo fijamente.

Kim se había doblado las mangas hasta el codo y tomó asiento tras su escritorio; aguardaba en silencio, observando sus movimientos, y KyungSoo tuvo el vago pensamiento de que él realmente parecía un depredador a punto de saltar a su cuello.

ㅡ¿Te gusta Im?

Su pregunta lo descolocó. Fue repentina y extraña y KyungSoo no pudo evitar fruncir el ceño con desconcierto.

ㅡ¿Qué? No veo como eso es de su incumbencia.

El músculo en su mandíbula saltó a la vista y KyungSoo se sintió brevemente regodeado al hacerle enfadar de forma tan sencilla.

El sentimiento no duró demasiado, sin embargo, porque la mirada de Kim se había intensificado, sus oscuros ojos taladrando los suyos, y KyungSoo tragó pesadamente bajo su escrutinio, removiéndose en su lugar con incomodidad.

Como si fuera un hombre frágil y vulnerable.

ㅡ¿Lo hace? ㅡinsistió y, mierda, él ni siquiera necesitó ser especialmente duro para tener a KyungSoo deseando obedecerle. Simplemente lo estaba mirando, estaba solicitando una respuesta, y con ello KyungSoo se estaba derritiendo porque quería complacerloㅡ.

Maldita sea.

ㅡMe gusta como una amiga ㅡterminó por responderㅡ... probablemente la querría de forma romántica si me sintiera atraído por las mujeres, pero solo somos amigos.

Kim tarareó como respuesta, tomó su café y le dio un sorbo.

Sorpresivamente, sus hombros parecían un poco más relajados y los bordes de sus ojos habían dejado de ser tan desgarradoramente fríos y distantes. KyungSoo no podía comprenderlo, y por ello, porque todo esto era nuevo y extraño, su corazón corrió con dureza en el interior de su pecho.

ㅡNecesito que prepares todo para mis próximas juntas. Comunícate con los diseñadores y envíalos a la sala de reuniones para que expongan el diseño del nuevo producto; el anterior fue una mierda; luego llama a mi madre, confirma mi asistencia al cumpleaños de RaHee y escríbele a SooJung. Mueve mi reunión con el señor Park para mañana a las dos de la tarde y dile a la señora Huang que no vaya a mi departamento. Después de la reunión, haz un resumen y envíalo a mi correo electrónico, recoge mis trajes y dales una fecha a ELLE Corea para la entrevista que solicitaron. Encárgate que el entrevistador sea Oh SeHun.

KyungSoo ya estaba un poco acostumbrado al bombardeo repentino de exigencias de Kim, así que solo tuvo que memorizar los datos claves para que nada se deslizara fuera de su control. Suspiró cuando hubo terminado y murmuró en voz baja, más para sí mismo que para su jefe.

ㅡHabía estado tan tranquilo...

Kim alzó una ceja.

ㅡNo deberías haberte acostumbrado y encariñado con mi falta; ahora ve a trabajar si quieres cobrar tu sueldo.

Demonios, él incluso tiene oídos supersónicos. Maldita sea.

Enfurruñado, KyungSoo salió pisando fuerte de la oficina y cerró la puerta detrás de él. Le envió un puchero a su escritorio y desde ese momento extrañó el orden que de había mantenido por tres días y que desaparecería en un momento.

Justo como su vida. La tranquilidad fue reemplazada por el desastroso manojo de emociones que despertaba Kim y ahora era difícil reconocerse a sí mismo.

Se acercó al escritorio arrastrando los pies y tomó su lugar en su silla. Nuevamente sus días serían dolorosamente largos.

.

KyungSoo siempre tenía que asistir con El Tenebroso a sus juntas y reuniones para tomar notas y luego enviárselas por correo electrónico, así que, por supuesto, se vio arrastrado por el firme agarre de la mano de esa montaña humana en su nuca -¿qué mierda? Aparentemente esa era una nueva manía suya y KyungSoo no estaba contento con eso- y ocupó un lugar alejado en la sala mientras lo presenciaba todo con su tableta en las manos.

Al menos así podía mantener una distancia prudente de Kim. Su toque siempre le hacía sentir cosas raras y esos momentos donde podría alejarse de él eran bien recibidos. Le ayudaban a calmarse.

Desbloqueó la tableta, accedió al programa de notas y esperó a que el equipo comenzara con la exposición de la nueva imagen producto.

El jefe del equipo se colocó en el centro de la habitación y dio inicio. Lamentablemente KyungSoo fue capaz de ver el primer problema inmediatamente después de haberlo hecho.

Él estaba nervioso, pálido y un poco sudoroso bajo la mirada dura de Kim, y si algo había aprendido KyungSoo era que El Tenebroso odiaba que las presentaciones estuvieran plagadas de miedo porque entorpecían la exposición y, bajo sus propias palabras, hacía "verse estúpidos a los hombres".

Este chico estaba siendo catalogado como un estúpido y apenas estaba comenzando.

Kim apretó la mandíbula con suave disgusto.

Dios. Él no tendría compasión.

Se mordió la esquina del labio inferior y tomó notas a medida que el hombre se desenvolvía con torpeza. No fue demasiado porque el pobre chico tartamudeaba, se tomaba algunos segundos para coger aire y retomaba con inseguridad.

Le echó un vistazo a Kim y ahí encontró el salto en el músculo de su mandíbula y las manos juntas sobre la mesa. Uy.

ㅡE-Entonces, pensando en el estilo clásico de Kai Corporation, mi equipo y yo decidimos hacer las modificaciones y t-traer...

ㅡ¿Eres tartamudo desde tu juventud o tu torpeza al hablar se debe a los nervios? ㅡlo interrumpió Kim de forma contundente y el chico se erizó bajo su mirada penetranteㅡ. Porque la primera opción puede ser medianamente aceptada, pero la segunda es inconcebible.

ㅡYo... señor...

ㅡTe hice una pregunta; responde.

El chico se removió con incomodidad en su lugar y la sala pareció extremadamente tensa y fría en ese momento. Nadie le defendió ni abogó por él, no ante Kim, y KyungSoo sintió un ligero malestar en el estómago.

ㅡEstoy nervioso, señor Kim.

No tenía sentido mentir en ese punto, así que el tipo solo pudo reconocerlo con vergüenza.

ㅡ¿Estarás nervioso también durante la reunión con nuestros socios en Samsung? ¿Pensabas exponer nuestro diseño de la misma manera patética y absolutamente lamentable e impropia del personal de Kai Corp.?

El líder de equipo mordió su labio inferior con fuerza y KyungSoo pudo notar las manos apretadas frente a su cuerpo. Dios.

ㅡYo no... señor Kim...

ㅡPero el problema no es sólo ese, el problema es que el resto de tus compañeros ha aceptado que seas el líder cuando ni siquiera eres capaz de exponer de forma fluida el trabajo en el que se han esforzado durante días. ¿Por qué lo hicieron? Son tan inútiles como él, por lo tanto, tienen la misma cantidad de culpa de que ahora mismo no quiera escuchar absolutamente nada de lo que tienen para ofrecer.

El resto del equipo se tensó tanto como el propio líder y el silencio dominó la sala. Los ojos fueron esquivos o se enfocaron en lo que Kim tenía que decir, como si él fuera el rey absoluto y su palabra fuera ley, y lo era. Realmente lo era.

ㅡHice un viaje largo y agotador y, no obstante, vine lo más pronto posible para poder escucharlos y ver lo que tenían para darme. Fue decepcionante no encontrar algo ni remotamente atractivo. Me han hecho perder el tiempo.

Kim hizo el amago de levantarse, pero entonces una voz femenina rompió el silencio mortal y lo enfrentó directa y rápidamente, frenando su movimiento en seco.

ㅡ¡No es justo que simplemente se vaya por el error de Junnie, señor Kim! Está bien, le han ganado los nervios, ¡pero todos hemos trabajado duro estos días, nos hemos ido tarde a casa y hemos planeado este diseño para que fuera lo suficientemente bueno para usted! Todos somos buenos trabajadores, no pude hacer eso a un lado por una presentación.

La mujer era pequeña, menuda y de rasgos adorables.

Si KyungSoo no la hubiera visto con sus propios ojos, él jamás hubiera creído que había sido esa pequeña cosita la que había tenido el valor suficiente para gritarle y regañar al mayor depredador de Kai Corp. con tanta seguridad y determinación. Fue impactante en el menor de los casos.

KyungSoo se sentía un poco incrédulo, no solo porque había sido una mujer la que había enfrentado al Señor de las Tinieblas, sino porque alguien tenía el valor suficiente para reclamarle algo. Y no fue el único en la sala con el mismo tren de pensamiento.

Echando un rápido visual, los hombres y mujeres que se encontraban reunidos parecieron un poco incómodos y fuera de lugar y el grupo de diseñadores se miraban entre sí con rostros pálidos y apesadumbrados. Dios, el líder de equipo parecía querer que la tierra lo tragara en ese momento. Y Kim...

Oh, Kim parecía especialmente filoso en ese instante.

Sus ojos eran helados, punzantes, totalmente oscuros en la habitación, y se posaron con toda su fuerza sobre la pequeña mujer.

Había vuelto a tomar asiento en su lugar y su índice golpeó la madera de la mesa a un ritmo pausado.

(Tap. Tap. Tap. Tap).

Fue absolutamente aterrador.

ㅡ¿Una simple presentación, dices? ㅡmurmuró con aparente tranquilidad, su grave voz perfectamente entendible en la habitación silenciosaㅡ ¿Llamas una "simple presentación" a lo que podría ser un trato millonario que llenaría tus bolsillos agradablemente en compensación por tus esfuerzos y trabajo duro? ¿Le estás restando importancia a esto cuando tienen que exponer el mismo trabajo ante los socios de Samsung en unos pocos días más? ¿Crees que es así de fácil, Jung? Te diré algo: no lo es.

Jung pareció un poco avergonzada por el desliz en sus palabras, pero ella se negó a desviar la mirada. Kim continuó.

ㅡTodos somos adultos aquí, todos nos jodemos la espalda todos los días para mantener esta empresa en pie, todos nos esforzamos. ¿Te estás quejando de salir tarde y de hacer tu trabajo? No estoy obligándolos a hacerlo, así como nadie me obliga a mí a permanecer aquí hasta las diez u once de la noche de lunes a sábado y, aún así, llevar trabajo a casa los domingos para que ustedes cobren un buen salario. ¿Crees que es muy difícil para ti? Puedes renunciar en cualquier momento, pero no voy a tolerar esta clase de presentaciones en mi empresa; no voy a escuchar esta mierda cuando ni siquiera están bien preparados. Son una vergüenza, y no me refiero al diseño, me refiero a lo que están haciendo frente a mí: vendiéndome algo que creen que es medianamente aceptable cuando no lo es.

»Eso ㅡKim señaló la diapositiva pausadaㅡ no convencería a ningún socio. No cerraría ningún trato, ¿y saben lo que significaría? No habrá producción ni ventas en el mercado, y por lo tanto, no habrá compensaciones monetarias para ustedes; simplemente habrían perdido el tiempo y esfuerzos en vano y a mí me harían perder cara frente a posibles inversionistas que también los podrían beneficiar a futuro. ¿Que a Jang le afectan sus nervios? Que practique o elijan otro líder, pero no me hagan perder el tiempo ni me traten como un idiota.

Eso fue suficiente para que Jung cerrara la boca y bajara la mirada con sumisión. Nadie dijo nada más después de aquello, pero no era sorprendente. Las cosas se habían puesto lo suficientemente tensas como para que solo el deseo de salir de ahí quedara en el aire; incluso KyungSoo quería irse.

Kim apartó su mirada de la chica y observó al grupo en general antes de decir:

ㅡNo quiero que vuelva a suceder. Mañana a la misma hora van a traer el diseño, van a exponerlo, van a convencerme de invertir en él, me dirán qué ganaría con ello y por qué elegiría este modelo por encima de los demás; no volverán a poner excusas estúpidas frente a mí y definitivamente no me retarán innecesariamente. La reunión ha terminado.

Kim se puso de pie nuevamente y KyungSoo lo imitó; nadie lo detuvo esta vez, así que salieron de la sala y se dirigieron hacia el elevador.

KyungSoo no dijo nada mientras estuvieron en él ni mientras caminaban por el pasillo del último piso; lo hizo cuando se encontraron solos en la comodidad de la oficina, con la puerta cerrada con seguro y la vista de Seúl siendo su único testigo.

KyungSoo le quitó la chaqueta del traje al notar la tensión en su expresión dura y la colgó en el perchero por segunda vez, luego volvió a seguirlo y se sentó en la silla vacía frente a su escritorio. Entonces él lo miró directamente, sin tabú, y le dijo con voz apacible:

ㅡTú realmente deberías dejar de ser tan duro con todos, jefe. No era necesario que los regañaras de esa manera frente a todos.

ㅡTú sabes tan bien como yo que esa presentación fue una mierda, así que no iba a silenciar lo obvio. Esta no es una empresa que conserva mediocres, por lo tanto, deberían pensarlo mejor antes de venir a mí con un trabajo de primaria como ese.

KyungSoo hizo una mueca.

De acuerdo, la presentación fue un completo desastre; obviamente no estaban preparados a pesar del plazo que Kim les había dado, pero aún así no podía dejar de sentirse mal por ellos.

Suspiró largamente y un breve puchero se apoderó de sus labios. Kim lo miró fijamente, como si quisiera intimidarlo a él también a través de sus ojos oscuros -no lo estaba consiguiendo- y su mandíbula se apretó ligeramente cuando su mirada cayó sobre su boca fruncida.

El movimiento lo dejó un poco sorprendido y con un tirón feo e incómodo en el vientre, así que deshizo de inmediato el puchero. La mirada de Kim volvió a sus ojos y él carraspeó torpemente.

ㅡPiensas que soy un desalmado hijo de puta ㅡdijo con seguridad y KyungSoo alzó las cejas mientras retomaba su conexión visualㅡ.

No sabía lo que Kim estaba pensado, lo que era muy extraño, ya que KyungSoo se había dedicado a observarlo de tal manera que podría distinguir sus deseos y emociones con solo una mirada, así que fue un poco inquietante.

De todas formas, no lo detuvo de responder con honestidad:

ㅡEs algo que siempre he pensado, así que no te preocupes, no es una cosa nueva para mí.

Kim bufó y su respuesta le hizo sonreír un poco.

ㅡNo te gustó que la señorita Jung te respondiera frente a todos, ¿no es cierto? Tu humor es un poco peor de lo que debería ser.

Sorprendentemente, Kim no se quedó en silencio ni negó sus palabras.

ㅡElla debería conocer su lugar. La escucharía y lo consideraría si fuera una queja por un problema real, pero no puedo tomarla en serio cuando está defendiendo lo indefendible. La gente que se cree más lista de lo que es me pone de mal humor. 

Wah. Nunca pensé que tendría el honor de escuchar una queja tan infantil como esta del gran Kim JongIn y, sin embargo, aquí estoy, viéndolo enfurruñarse y erizarse como un gran gato rabioso.

KyungSoo sonrió un poco más ante el pensamiento y le dijo con diversión:

ㅡ¿Entonces me dejas salirme con la mía todo el tiempo porque yo soy realmente listo?

Al escucharlo, Kim alzó una ceja y su rostro pareció un poco, solo un poquito, menos duro que antes. No sería visible para el ojo humano ordinario, pero KyungSoo había entrenado su vista sobre este ejemplar cavernícola y complicado y podía hallar estos pequeños movimientos sutiles si estaba lo suficientemente atento.

ㅡNo es que seas increíblemente listo, pero al menos eres competente; además, soy perfectamente capaz de ignorar tus palabras innecesarias.

Aún divertido, KyungSoo rió con libertad y sinceridad y no se perdió de la nueva mirada oscura lanzada directamente a sus labios sonrientes.

No le tomó mucha importancia esta vez porque se sentía un poco bien al ser reconocido por este hombre duro e impenetrable, y si bien "ser competente" no era el mejor de los halagos, KyungSoo aún estaba muy bien y feliz con ello.

ㅡEres increíble ㅡle dijo cuando paró de reír y simplemente sonrió para no perder la suavidad y comodidad de toda esa situación ridículaㅡ. Aunque debes practicar un poco más tu manera de dar halagos (porque realmente apestas en eso), me hace feliz que lo hayas dicho.

Luego de eso se puso de pie y aseguró su agarre sobre su tableta.

ㅡTe traeré un té para que calme tus nervios y luego volveré a hacer todo el trabajo que me dejaste, ¿está bien? Y, por favor, no vomites cosas desagradables sobre los empleados otra vez.

Kim no respondió pero KyungSoo tampoco esperaba que lo hiciera, así que se dirigió hacia la puerta con paso tranquilo y abandonó la oficina sintiendo la mirada persistente de su jefe en su espalda.

. . .

Había decidido pasar por el baño para aliviarse y lavarse la cara antes de ir a Lu Coffee por el té de Kim. Se suponía que era un viaje rápido que no le tomaría más de cinco minutos, pero no contaba con que ahí encontraría a un hombre secándose las lágrimas frente a los lavabos.

KyungSoo lo reconoció de inmediato. Fue el líder del equipo al que Kim había masticado hace algunos minutos.

Se detuvo por un momento y, al notarlo, el hombre se limpió rápidamente la cara y se inclinó profundamente ante él. KyungSoo hizo una mueca y cerró la puerta del baño, se acercó con paso tranquilo y se detuvo frente al joven, "Junnie".

ㅡL-lo siento, señor; y-yo me iré ahora... p-por favor, no se detenga por mí.

ㅡNo te avergüences por llorar ㅡle dijo de forma amable y conciliadora y el chico lo miró con los ojos empañados y las cejas alzadasㅡ. Está bien hacerlo, sobre todo después de que Kim fuera un idiota.

ㅡTodo eso sucedió por mi culpa... n-no creo que el señor Kim sea un idiota por reclamar por algo obvio. É-él tenía razón.

KyungSoo se encogió de hombros.

ㅡTal vez, pero aún así no te sientas tan mal; Kim es difícil, pero no es irracional. Él no odió el diseño ni creyó que hicieron un mal trabajo en su área, se molestó por la falta de preparación del equipo; si lo corriges, él lo aceptará y todo estará bien.

"Junnie" parpadeó torpemente y KyungSoo le dio una pequeña sonrisa mientras se dirigía al lavabo y mojaba su cara. El chico no se movió; KyungSoo pudo sentir su mirada sobre él, así que esperó pacientemente por lo que tenía para decir.

ㅡ¿Cómo está tan seguro? ¿U-usted cómo puede lidiar con él todo el tiempo? ¿N-no le teme? ㅡpreguntó en un suave hilo de voz y KyungSoo rió un poco y lo miró a través del espejoㅡ.

ㅡEstoy seguro porque creo que lo conozco un poco mejor de lo que la mayoría lo hace; si Kim hubiera odiado tu trabajo él habría sido aún más duro de lo que fue, los habría despedido de inmediato o hubiera asignado a otro grupo de diseñadores para hacer el trabajo; no hizo ninguna de las tres cosas, tampoco te ordenó repetirlo, solo arreglar la presentación. Por otra parte, no, no le temo; él es solo un hombre con mucho dinero y demasiado trabajo que hacer; si es idiota, simplemente lo ignoro o me demoro un poco más llevándole su café... justo como ahora.

En ese momento "Junnie" pareció un poco más tranquilo y menos sombrío y gris. Sus hombros se habían relajado y había secado los últimos rastros de lágrimas de sus ojos, así que solo parecía un joven que estaba analizando muchas cosas a un ritmo bastante rápido.

Fue bueno.

Se secó el rostro y las manos y luego le dio un golpecito en el hombro como muestra de apoyo.

ㅡSolo imagina que estás tratando con un gran gato con cara amargada y todo irá bien, ¿de acuerdo? No le temas; él reconocerá el esfuerzo si consiguen hacerlo bien mañana ㅡKyungSoo se alejó un paso, acomodó su camisa y luego dijo con buen humorㅡ. Me iré ahora porque no quiero ganarme un gruñido extra, pero nos estaremos viendo, ¿está bien?

El chico asintió y le dio una pequeña sonrisa.

ㅡSí... y muchas gracias.

KyungSoo le guiñó un ojo y luego se dio la vuelta para salir del baño. Después de toda aquella tensión y resignación, KyungSoo se sintió bien.

. . .

La reunión con el equipo de diseñadores se llevó a cabo a la misma hora, justo como lo había ordenado Kim.

KyungSoo entró a la sala detrás de su jefe y le echó un vistazo rápido a Junnie; él se encontraba de pie, con una postura recta, completamente perfecta, y una mirada determinada en sus rasgos dulces. Al encontrarse con él, sonrió suavemente y KyungSoo le hizo una señal para desearle buena suerte.

Todos ocuparon sus lugares y Kim colgó su máscara fría e inescrutable mientras taladraba a los diseñadores con sus ojos aterradores.

Hombre insufrible.

KyungSoo negó, pero no pudo evitar sonreír secretamente y seleccionó el programa de notas.

ㅡPueden comenzar ㅡordenó Kim. "Junnie" exhaló, serenó su expresión y dio inicio a la presentaciónㅡ.

ㅡMi equipo y yo hemos trabajo arduamente en el diseño del nuevo modelo de la unión entre Samsung y Kai. Siguiendo la línea elegante, cómoda y moderna de ambas empresas, nos enfocamos en la juventud y en los adultos jóvenes. El smartphone clásico, pero hermoso, con una altura adecuada y cómoda que facilita su manejo, un cuerpo liviano y delgado y una parte posterior hermosa, es la promesa de un buen recibimiento en el mercado. Hemos seguido las tendencias actuales y nuestra visión fue un poco más allá, eligiendo una paleta de colores suave y agradable y materiales ligeros y de buena calidad...

La presentación fue bastante bien. KyungSoo tomó notas con una sonrisa discreta y se sintió tranquilo al ver que, de hecho, Kim no lo había interrumpido en ningún momento y simplemente se dedicó a escuchar lo que Junnie tenía para decir.

Esto también ayudó bastante al chico; con el pasar de los minutos él pareció cada vez más relajado y a gusto, se movía por la sala, hacía uso de sus manos y señalaba las imágenes que exponía la diapositiva.

En algún punto, la señorita Jung dejó una carpeta con el diseño final del teléfono para que todos pudieran verlo y Junnie les hizo saber que, aparte de trabajar en la imagen del aparato, se tomaron el tiempo para preparar una serie de ideas que podrían funcionar en el área de publicidad y marketing.

Kim terminó de ojear el contenido de la carpeta como un verdadero halcón al finalizar la presentación y la sala se llenó de silencio, todos mirándolo con altas expectativas; KyungSoo incluso se encontró apretando su mano alrededor de la tableta, las notas listas y guardadas mientras la ansiedad crecía.

Kim se enfocó en el equipo y preguntó:

ㅡ¿Por qué debería invertir en tu diseño y no en el de alguien más? ¿Cuáles son las cualidades más importantes del modelo próximo a lanzarse?

Junnie se tomó un momento, solo un segundo para pensar, y luego contestó con la misma firmeza:

ㅡSi bien nuestro diseño se apega a las tradiciones de ambas compañías, nosotros tuvimos una visión un poco más lejana y tomamos los aspectos más frescos y agradables para que este trabajo fuera digno de los tiempos modernos y de los nuevos gustos en el público. Incluso para alguien que no sea joven o siga las tendencias, el diseño le resultará cómodo y atractivo. Creo que haría una buena inversión en él porque el diseño no solo es hermoso, el producto en general posee las mejores cualidades de Kai y Samsung: la resistencia, el gran espacio de almacenamiento, cámaras con tecnología avanzada y la posibilidad de manejarlo bajo el agua. Es uno de los smartphones más avanzados tecnológicamente creados hasta ahora y podrá ser vendido a un precio justo para tener mayor alcance y ganancias.

ㅡ¿Eso es todo? ㅡpreguntó Kim con desinterés y Junnie se tensó ligeramente antes de asentirㅡ.

ㅡSí señor.

Kim los miró un poco más, sin decir nada ni mostrar ninguna expresión en particular, y finalmente apartó la carpeta, se puso de pie y estiró su saco. KyungSoo lo miró con sorpresa, como lo habían hecho las otras personas en la sala, y se apresuró a imitarlo por si iba a salir de ahí en ese momento. No lo hizo, en cambio, él dijo:

ㅡEl diseño ha sido aprobado; KyungSoo, prepararás el documento y me lo entregarás para firmarlo.

ㅡSí, señor.

ㅡEn cuanto a ustedes, asegúrense de ensayar un poco más y prepárense para recibir a nuestros socios. Han hecho un buen trabajo. La reunión ha terminado.

KyungSoo miró a los chicos y ahí encontró alivio, enormes sonrisas, un brillo encantador en sus ojos y numerosas reverencias y agradecimientos. Kim salió de la habitación y él se apresuró a seguirlo después de alzar un pulgar en dirección a Junnie y al resto.

Nuevamente solos en la privacidad del elevador privado de Kim, KyungSoo lo miró de reojo y sonrió ampliamente mientras reunía sus manos detrás de su espalda, la tableta bien asegurada en su agarre.

Kim alzó una ceja y le echó un visual momentáneo antes de cruzarse de brazos.

ㅡ¿Qué?

KyungSoo se encogió de hombros, sin inmutarse por su tono hosco y su expresión fría, y respondió tranquilamente, sin dejar de sonreír:

ㅡNada... los halagaste, ¿eh?

Kim apretó la mandíbula y se negó a mirarlo.

ㅡHicieron un buen trabajo, solo estaba diciendo un hecho.

ㅡOh, por un momento creí que te estabas ablandando, señor, y que mi regaño había servido para algo. Incluso estaba planeando hacer un viaje terriblemente largo hacia el Lu Coffee para traerte un café por tu buen comportamiento. Supongo que ahora no lo haré.

Kim rodó los ojos, pero KyungSoo pudo notar el levísimo alzamiento en la esquina de su boca, y como había ocurrido la última vez que había visto algo como eso, KyungSoo sintió un gran alboroto y calidez en su interior.

Su propia sonrisa se volvió más cálida y gentil y volvió su vista al frente cuando las puertas se abrieron. 

.
.
.

[✍🏻]

No estoy segura tener internet mañana, así que ¡actualización sorpresa! Espero que lo hayan disfrutado; muchos besos y abrazos a todas/os ♥️