"Muchas gracias" murmuró Harry, mirando a sus dos amigos y dándoles una sonrisa "No puedo esperar para usarlos cuando llegue a casa" y no estaba mintiendo. No se había dado cuenta de lo mucho que echaba de menos dibujar hasta que Zayn le había dicho eso. Todavía tenía un cuaderno de bocetos debajo de la cama, medio lleno de dibujos. Muchos de ellos no estaban terminados.

"Hablando de casa, tenemos que irnos antes de que el tráfico empeore"

Harry frunció el ceño y miró a Zayn inquisitivamente cuando el chico de pelo oscuro le lanzó a Niall una mirada malvada.

"No, Niall" dijo entre dientes, sacudiendo la cabeza lentamente, y el rubio se dio una palmada en la frente.

"Oh sí" se rió entre dientes "Se me había olvidado. H, tu sorpresa no ha terminado, amigo"

Los ojos de Harry se agrandaron y agarró los lápices contra su pecho con fuerza, mirando de un lado a otro entre Zayn y Niall. Los dos le estaban sonriendo, como los amigos cursis que eran. Zayn extendió la mano y cogiendo sus lápices, metiéndolos en su mochila, antes de mirar a Harry a los ojos nuevamente.

"Vamos cariño" dijo.

"¿A dónde vamos?" Harry preguntó con incredulidad "Me acabáis de comprar estos lápices y son muy caros. Está bien, chicos, podemos irnos a casa"

Niall negó con la cabeza, haciendo que su rubio flequillo cayera sobre su rostro.

"No, ya lo hemos planeado. Tenemos algunas sorpresas más. Vamos, H, vamos al coche" Niall le agarró del brazo izquierdo, mientras que un sonriente Zayn le agarró por el derecho, y luego empezaron a saltar, lo que significaba que Harry también tenía que saltar, pero a mitad de camino hacia el coche le empezaron a doler las costillas por la respiración agitada.

"Está bien" bufó Harry "Tenemos que parar"

Niall no se detuvo, solo abrió sus brazos y corrió el resto del camino, las llaves en su mano tintinearon ruidosamente.

"No sé cuándo ha decidido que puede conducir mi coche" se rió Zayn, caminando junto a Harry y rodeando su cintura con un brazo "Pero está bien. Está sexy cuando lo hace"

Harry se detuvo en seco, antes de inclinar un poco su cabeza hacia abajo para mirar a Zayn.

"Zayn" dijo.

Zayn le miró, y si no estuviera tan oscuro, Harry realmente podría saber si se estaba sonrojando. Aunque sí sabía que estaba sonriendo, por la forma en que sus dientes perfectos estaban brillando y sus ojos se estaban arrugados a los lados. Harry se inclinó para darle un abrazo en ese momento, porque quería a Zayn.

Estaban en la acera, a unos pasos más del coche, cuando escucharon a Niall gritar en el aire.

"¡Vamos chicos!" dijo con su voz femenina, la cual usaba bastante. Sonaba un poco como su madre, Maura.

"Ya vamos gruñón" gritó Zayn, tirando de Harry con más fuerza por la acera hasta que llegaron a su coche. Niall se burló.

"No soy gruñón. Simplemente tenemos que irnos"

De nuevo, Zayn miró a Niall, sacudiendo la cabeza.

"¿De qué estáis hablando?" Harry se quejó, pisando fuerte con el pie en el pavimento, pero tropezó un poco cuando el tacón de su bota se atascó en la acera. Esto hizo que Niall se riera a carcajadas, y Zayn le levantase para sentarle en el asiento trasero del coche, como a un niño.

"No puedes ni caminar, H" se rió Zayn, sacudiendo la cabeza, antes de subir al asiento del copiloto. Niall se sentó en el asiento del conductor, metió la llave y el coche se sacudió un poco mientras cobraba vida. Harry frunció el ceño cuando se dio cuenta de que habían ignorado por completo su pregunta. Bueno, lo iba a descubrir más tarde. Tal vez.

Así que se reclinó en los asientos de cuero de Zayn, respirando profundamente y dejando que el aire caliente de las rejillas de ventilación relajara sus doloridos músculos. Había estado despierto todo el día, porque Tricia les hacía hacer las tareas del hogar cuando se quedaban ahí. Solía tener apuntados los nombres de Niall y Harry en la nevera con las tareas diarias, porque pasaban allí mucho tiempo. A Harry le gustaba. Era una rutina y le encantaban las rutinas.

Harry estaba escuchando la conversación de Niall y Zayn en los asientos delanteros mientras iban hacia el destino desconocido, y ocasionalmente comentaba o les decía que subieran la música. Zayn, por supuesto, estaba escuchando a Naughty Boy, cosa que Niall había dicho que le molestaba. Pero Niall estaba moviendo su cabeza junto con la canción mientras conducía, riendo a carcajadas cada vez que Zayn decía algo gracioso.

"Harry, ¿qué vas a hacer para celebrar tu cumpleaños?" Zayn dijo girándose hacia el asiento trasero, bajando un poco el volumen de la música para poder escuchar al chico.

Harry se encogió de hombros.

"No lo sé. Realmente no lo he pensado. Probablemente comeré pastel y veré películas de Disney" dijo honestamente, girando su anillo alrededor de su dedo una y otra vez. Le gustaba escuchar los zumbidos cuando pasaban cerca de un coche por la carretera. No le asustaba, aunque el médico había predicho que sí. No les tenía miedo a los coches. Y estaba muy agradecido de no tenerlo. A Louis, sin embargo, si le daban miedo.

"Aburrido" dijo Zayn inexpresivamente, y Harry le miró por el espejo retrovisor "Tienes que hacer algo divertido, cariño. Vas a cumplir diecinueve. Va a ser tu último año de adolescencia. Es más importante que cumplir veinte"

Harry entrecerró los ojos.

"Creo que cumplir veinte es más importante" dijo.

Niall inmediatamente negó con la cabeza.

"No. No lo es. Puedes preguntárselo a Louis. Es como preguntar si es mejor el libro o la película"

Harry frunció el ceño.

"El libro" dijo, a la vez que Zayn dijo la película.

"No, H, la película. Ahora, si no vas a planear nada, entonces Zayn y yo lo haremos" Niall miró a Zayn por un momento, moviendo las cejas antes de volver a la carretera "Y ya sabes cómo son las fiestas de Zayn y mías"

Harry negó con la cabeza.

"En realidad no, ¿cuándo habéis montado fiestas?"

"¡Todos los viernes, tonto!" Zayn se rió, y Harry solo le miró confundido.

"¿Desde cuándo eso era una fiesta?"

Zayn simplemente se inclinó hacia atrás y le dio una palmada en la mejilla.

"¡Hemos llegado!" Niall gritó, entrando en un pequeño aparcamiento. Se veían luces de navidad, y era la cafetería a la que Harry solía ir todo el tiempo con Louis.

Harry miró el edificio con los ojos muy abiertos, y no podía dejar de sonreír como un tonto mientras Zayn le sacaba de su coche y le llevaba hacia el de Niall, ¿por qué estaba ahí el coche de Niall? Cerró los ojos y suspiró feliz cuando finalmente se sentó en el asiento, porque sí. Ahí había sido donde él y Louis pasaron la noche un par de días antes de navidad, y cuando Harry le dijo por primera vez a Louis que le quería. Sintió que su labio comenzaba a temblar al pensar en el momento, porque eran muy jóvenes.

"¿Por qué me habéis traído aquí?" Harry preguntó, intentando ocultar el hecho de que estaba llorando.

Zayn se rió, sacando algo de su bolsillo trasero. Era una hoja de papel doblada, con algo escrito en un rotulador. Zayn se lo entregó.

"Toma cariño" dijo.

Harry lo cogió de mala gana y lo desdobló para revelar la caligrafía de Louis.

Harry Harry Harry

"Louis Louis Louis" susurró Harry, cerrando los ojos con fuerza y ​​sosteniendo el papel contra su pecho, apretándolo mientras se mordía el labio con fuerza. Siempre mantendría ese grato recuerdo en su corazón. Todavía estaba en su cuaderno de bocetos. Vaya, quería muchísimo a Louis. Miró a través de la ventanilla del pasajero y observó cómo titilaba la luz, de la misma forma que lo hacía hace más de un año. Pero la cosa era que no eran tan bonitas cuando no podía ver la forma en que se reflejaban en los ojos azul pálido de Louis. Niall y Zayn riendo y burlándose de él mientras se atacaban en el asiento trasero estaba amortiguado en sus oídos mientras miraba con los ojos muy abiertos alrededor del área pequeña y dejaba que su corazón recordara todo, se acordaba de cómo se sintió cuando esa misma noche Louis le pidió ser su novio.

Pero luego pensó en Louis ahora, y casi comenzó a sollozar, sentado allí en el frío coche de Niall, mirando las luces mientras se volvían borrosas debido a sus lágrimas. Se estremeció un poco, lamiendo las lágrimas de sus labios y saboreando la sal.

"Vamos, H, no hemos terminado nuestra aventura"

"Sí" Harry se atragantó "Sí, vale. Vamos"

Y caminaron de vuelta al coche de Zayn. Harry dio pequeños pasos detrás de sus dos mejores amigos mientras continuaban golpeándose en la cabeza, antes de rodearse la cintura con los brazos del otro. Harry sonrió cuando lo vio, sorbiéndose la nariz un poco y parpadeando hasta que las últimas lágrimas se le escaparon de los ojos.

Cuando subieron a su coche con calefacción, Zayn decidió conducir esta vez, y Niall se estuvo quejando los tres minutos del corto viaje.

"¿A dónde vamos ahora?" Harry preguntó. No estaba seguro de por qué le estaban llevando a esos lugares, pero estaba empezando a desgarrar su corazón.

Y decir que estaban desgarrando su corazón era un eufemismo cuando se pararon frente a su casa.

"¿Por qué estamos aquí?" Harry preguntó, moviendo la cabeza de un lado a otro en busca del coche de su madre. No estaba allí.

"No, Harry, tu madre no está aquí. Louis ha hablado con ella-

"¡¿Louis ha hablado con ella?!" Harry preguntó con incredulidad. Louis y Anne no se habían llevado bien últimamente. Bueno, tampoco Harry y Anne.

"Sí" Niall agitó la mano, girándose para mirar a Harry "Está bien, amigo. Confía en nosotros, ¿vale?"

Harry asintió a regañadientes, siguiéndoles a su casa. En el momento en que entró, respiró el olor y tenía que admitir que lo echaba mucho de menos. Se le llenaron los ojos de lágrimas y quiso tirarse a un rincón, hacerse una bola y llorar. Porque esa era su casa. Este era su escondite del resto del mundo cuando no había nadie allí. Solo tuvo que dar unos pasos largos y estaba en su habitación, con su cama hecha y fotos de sus amigos y Gemma y su madre, y su cuaderno de bocetos y su ropa extra. Todavía había una mancha debajo de la cama, en la alfombra, de cuando se le había caído la bebida, y el anillo que Gemma le dio que solía llevarlo en todas partes, excepto en el bolsillo. Estaba a punto de entrar, pero Zayn le paró.

"Más tarde. Ven"

Llevó a Harry a su cocina, justo en frente de la nevera. Luego, Niall le entregó otra nota doblada. Harry arqueó una ceja, apoyándose en la nevera y cruzando los tobillos antes de coger la nota de Niall. La desenvolvió con cuidado, conteniendo la respiración mientras la leía.

Te quiero a ti

Y Harry tuvo que buscar hasta los rincones más profundos y oscuros de su mente despejada en busca de ese recuerdo, porque obviamente significaba algo importante para su Louis. Zayn se aclaró la garganta.

"¿Qué te gustaría beber Niall?"

"Un refresco" dijo Niall en voz alta. Zayn rodeó a Harry y abrió la nevera, antes de meter la mano en la nevera y tirarle a Niall una lata. Se rió cuando Niall la dejó caer al suelo justo después.

"¿Qué quieres Louis?" preguntó Zayn al aire, y Harry se congeló, agarrando el papel con más fuerza en su mano, tan fuerte que sus uñas se clavaron en su palma.

"A ti" susurró Harry, y apoyó la cabeza contra la nevera con brusquedad, cerrando los ojos. Y luego sonrió, dejando que una pequeña risa escapara de sus labios cuando la sensación que tuvo cuando Louis le dijo eso por primera vez se apoderó de él. Estaba nervioso, conmocionado y muy emocionado.

"Coge tu cuaderno de bocetos y salgamos de aquí. La oscuridad de esta casa me está asustando" Zayn se estremeció, y Niall se echó a reír.

Harry corrió a su habitación después de guardar la nota en su bolsillo. Cayó sobre su cama, respirando el olor de sus mantas y de él mismo y no se había dado cuenta de cuánto echaba de menos su hogar hasta ahora. Buscó debajo de su cama y agarró su cuaderno de bocetos, antes de coger su anillo y salir de la habitación.

Y luego le dejó a su madre una nota diciendo que le quería.

"¡Vamos, vamos Harry! ¡No hemos terminado!" Niall gritó desde el coche, arrancando el motor y rebotando en su asiento. Tenía la música a todo volumen, y Harry se sorprendió de que Zayn no le estuviera diciendo que la bajara. Él era el sensato y sabía que podía dañar los tímpanos. Pero no dijo nada.

Pasaron todo el viaje en coche cantando Thinking Out Loud por Ed Sheeran a todo pulmón, y Harry se dio cuenta de que su voz se quebró un poco porque estaba llorando. Porque acordarse de todos esos recuerdos le estaba poniendo muy emocional. Se sonrojó cuando Zayn elogió su voz por millonésima vez.

"¡Ya estamos aquí!" Niall chilló, girando a la izquierda antes de entrar en el aparcamiento. Harry miró hacia arriba y vio el centro comercial. Cerraba bastante tarde los viernes, por lo que todavía estaba abierto.

"Vamos" sonrió Zayn.

Harry les miró confundido, dejando que los dos chicos le arrastraran fuera y cruzaran el aparcamiento mientras dejaba escapar pequeños ruidos de protesta.

"Zayn, Niall, ¿por qué estamos aquí?" ellos no respondieron, simplemente le abrieron las puertas y entraron. En el momento en que la puerta se cerró, Niall corrió hacia la zona de los restaurantes y Zayn le siguió desde cerca.

Harry caminó rápido detrás de ellos, tropezando un poco con cada cosa con la que podía tropezar porque era así de torpe. La gente estaba mirando raro a Niall y Zayn, porque estaban discutiendo.

"¡Es esta!" dijo Zayn, sentándose entrecruzado sobre una pequeña mesa cuadrada y entrecerrándole los ojos a Niall.

"No, es esta. Estoy seguro, ¡tiene el chicle verde en la parte inferior como nos enseñó ayer!"

"Oh" dijo Zayn, levantándose de la mesa y sonrojándose "Si, tienes razón" se acercó a Harry, que estaba de pie, perdido. El centro comercial estaba bastante vacío, debido a que eran alrededor de las ocho y media, pero la gente les estaba mirando de todos modos. Harry negó con la cabeza, su mente en un revoltijo mientras intentaba descifrar qué diablos estaba pasando.

Zayn le sentó a la mesa junto a la que Niall estaba de pie, en una silla azul. Y mientras Harry miraba a su alrededor, preguntándole a sus mejores amigos por qué le estaban torturando así, una ola le inundó. Reconoció los botes de basura a unos metros de distancia. Reconoció el patrón de baldosas de la mesa y los baños a los que podía ir si caminaba derecho.

Estaba donde Louis y él se habían dado su primer beso.

Y esta vez, no estalló en sollozos. Simplemente enterró la cabeza en sus brazos, su rostro ardía con un sonrojo, aunque no estaba avergonzado, y estaba sonriendo tanto que pensaba que su rostro se iba a romper. El recuerdo hizo que su corazón latiera más rápido, hizo que le sudaran las manos de emoción y se sintió como si estuviera en el centro comercial hace dos años, hecho un desastre nervioso. Escuchó a Niall hablando en voz baja con Zayn, y parecía que estaban un poco más lejos que antes. Harry saltó cuando la mesa se movió, y el chirrido de una silla moviéndose le hizo un poco de daño en los oídos.

Levantó la cabeza y casi se le cayó la baba porque Louis estaba sentado allí, sentado sobre sus manos y dándole una gran sonrisa con la boca cerrada, haciendo que sus ojos se arrugaran, casi como si estuvieran cerrados.

"Hola ángel" dijo, antes de que su rostro se suavizara y sus ojos azules se agrandaran, y Harry sintió una punzada en su corazón cuando ese hermoso color azul le golpeó, como si fuera algo físico.

"Louis" Harry sonrió "¿Dónde está Liam?"

"Estaba esperando que me preguntaras eso" sonrió Louis, y se inclinó para besar a Harry antes de empezar con su discurso "Te quiero, Harold ángel bebé Styles. Tú eres la razón por la que sonrío, eres la razón de mi felicidad más profunda que nunca creí que pudiera encontrar. Me encanta ver la forma en que te sonrojas cada vez que digo algo, como lo estás haciendo ahora, y me encanta la forma en que te quitas el flequillo de la cara con dos dedos. Me encanta tu nariz y tus ojos verdes, y me encanta lo tímido que eres. Me encanta cuando me cuentas historias, porque eres el mejor narrador de historias que alguna vez he conocido" Niall resopló, pero no sacó a Harry de su trance, ni un poco "Eres la persona más guapa en la que he tenido la fortuna de poner mis ojos. Consigues calar en cada persona que te ve. Niall y Zayn te tratan como a un príncipe, porque lo eres, pero no exiges nada, todo el mundo hace cosas por ti porque te lo mereces y eres maravilloso, humilde y amable y desconoces el poder que tienes sobre la gente. Más el poder que tienes sobre mí" Louis hizo una pausa, inclinándose y quitando algunos rizos de la cara de Harry.

"Me encanta cómo siempre te muerdes los labios y siempre olvidas lo que vas a decir, y me encanta que te ríes de todo lo que digo, aunque no sea gracioso, y me encantan las pequeñas bromas estúpidas que haces en voz baja que crees que nadie pueda oír. Me encantan tus botas y en especial me encantaba cómo solías usar siempre las playeras negras. Me encantan tus rizos y me encanta cómo hueles. Me encanta que seas mi Harry, y tus defectos son perfectos para mí. Te quiero más de lo que Allie quiere a Noah, y más de lo que Jack quiere a Rose" Louis tocó ligeramente la nariz de Harry, y sus ojos se cerraron por un momento y Harry se tomó el tiempo para uno, recuperar el aliento que había estado sosteniendo, y dos, para ver la forma en que sus pestañas cubrían sus pómulos.

"Eres mi ángel"

Harry observó como Louis sacaba algo de su bolsillo, lo desenvolvía y lo sostenía frente al rostro de Harry. Lo primero que Harry vio fue el dibujo de un ángel, con líneas irregulares y un cuerpo de figura de palo con un simple halo circular alrededor de su cabeza.

¿Quieres casarte conmigo?

Cuando Harry leyó eso, se desmayó. Sus rodillas estaban débiles y estaba agradecido de estar sentado. Podía escuchar los latidos de su corazón en sus oídos y podía saborear las lágrimas antes de saber que estaba llorando.

"Sí" se atragantó "Sí, sí, sí"

Había mucha gente rodeándoles a los dos ahora, aproximadamente la mitad de las personas que estaban en las mesas y, por supuesto, Niall, Liam y Zayn. Vitorearon en voz alta, y Louis se levantó de su silla, rodeando la pequeña mesa para ir a donde Harry, que todavía estaba congelado en su silla, llorando como un bebé.

Louis le agarró y le levantó, haciéndole girar, y Harry le besó, diciéndole te quiero entre besos y risas todo el tiempo. Todos a su alrededor estaban vitoreando y silbaron cuando Harry levantó a Louis sobre sus zapatos tal como lo habían hecho esa mañana, y le besó con más fuerza y ​​pasión que nunca.

"Te quiero muchísimo, Harry" dijo Louis contra sus labios, y luego abrazó a Harry con tanta fuerza que Harry empezó a llorar de nuevo.