Y bien, no pensé que esto seria tan difícil. Tampoco creí que fuera fácil.

Había tratado toda la semana de que YoonGi y si padre se trataran bien, hablaran normalmente y convivieran como cualquier padre e hijo, pero, no sé cual de los dos es más obstinado.

Habíamos decidido terminar de una vez por todas los arreglos de la canción. Así no tendríamos que preocuparnos esta semana restante.

Ahora estaba sentada frente a YoonGi mientras escribía algo en su cuaderno.

— Ahora regreso — dije y me levanté yendo hacia la cocina. Y allí estaba el Señor Min.

— Oh Soo, ¿necesitas algo? — se mostró generoso.

— Solo vengo a por algo de agua — me acerqué y por mi mente pasó algo, no esperé y le hablé — ¿Cree que pueda hablar con usted un momento?

— Claro.

— Bueno Señor Min, sabrá que lo que tengo que decir es acerca de YoonGi — lo miré y él asintió — Yo he estado bastante tiempo junto a él y sé como es. Incluso cuando lo conocí no me cayó bien, lo odiaba, era simplemente una persona arrogante y malhumorada — reí al recordarlo — Pero después, cuando poco a poco fui conociendo al verdadero YoonGi, quedé completamente enamorada. Me di cuenta de que el ser frío era solo una máscara, la cual llevaba por todo su sufrimiento — lo miré y pude notar algo de tristeza en su rostro.

— Y es mi culpa, ¿eso es lo que quieres decir verdad?

— No, bueno sí, digo que en algo usted tuvo que ver — bajé la cabeza apenada. Porque aunque yo dijera la verdad, el era una persona mayor — Creo que haberlo dejado solo fue para él muy duro y por eso ahora no tienen una buena relación.

— Lo sé y creeme, después de todo lo que pasó me arrepiento mucho de haber actuado así. Pero al igual que él, la muerte de su madre fue muy dura para mi. Llegué a un punto en el que no sabía que hacer, me aterraba mirar la cara de mi pequeño y decir algo. Simplemente no podía, no sabía como lidiar con esa situación.

— ¿Y no cree poder arreglado? — me atreví a preguntar — Tal vez si usted le explica que fue difícil para ambos y al igual que el estabas muy afectado. Quizás el comprenda y lo perdone.

— ¿Tú crees?

— Claro que sí — sonreí — Creo que una cena en familia puede ser un primer paso, ¿qué tal? Mi mamá cocina genial.

(...)

— No sé que hago aquí — vuelve a protestar.

— Shh, ya no hables más y dejame terminar de arreglar tu corbata — lo atraje hacia mi.

— Déjala así, ni que fuera a una cena tan importante — hace una mueca de desagrado.

— ¡YoonGi! — grité — Ya basta, claro que es una cena importante. Es el día en que nuestras familias se conocerán, ¿o eso es tan poco para ti?

— No es así, sabes por qué lo digo — acaricia mi mejilla y me pega a él.

— ¿Ves? Después dices que es culpa de tu padre, pero en realidad quién pone las cosas difíciles aquí eres tú — quité su mano de mi cintura, quería parecer molesta.

— Lo siento, por favor no vayamos a pelear por eso — me mira dulcemente.

— Entonces compórtate — termino con su corbata y lo beso.

Por fin estábamos dentro, las cosas estaban muy, pero muy incómodas. Solo se escuchaba el sonido de los cubiertos sonar contra los platos, nadie se miraba, excepto yo y mi madre que no sabíamos qué hacer.

YoonGi tenía cara de velorio y su padre ya no sabía hacia donde mirar, solo para no encontrarse con el rostro de ninguno de nosotros.

— Iré a buscar el postre — habló mi madre.

— Yo te acompaño — me levanté y fui tras ella.

— ¿Qué está pasando ahí?

— Quieres decir que no está pasando, creí que se hablarían, pero ni siquiera se miran — suspiré cansada.

— No sabía que su relación era así de mala. Por Dios, parece que YoonGi quiere golpear algo — lo señaló desde la cocina.

— No te preocupes, todo está bajo control. Se controlará, creo que puede hacerlo — apreté mis labios.

— Bien, es hora de salir.

Y lo hicimos, volvimos a la mesa y nos sentamos.

— Muchas gracias Señora Park, la comida estuvo estupenda — habla el padre de YoonGi.

— Venga más seguido y le prepararé comida — sonríe mi madre.

— No se preocupe, él no vendrá más. Incluso esta cena le a costado mucho, ¿no lo ve en su cara? Nada de esto le interesa, ni siquiera se por qué vino — habló YoonGi y hizo que su padre lo mirara por primera vez en toda la noche.

— ¿Qué estás diciendo YoonGi? Deberías tener más respeto — parecía molesto al hablarle.

— Por favor — ríe — Ya te dije que el papel de buen padre no te pega, ¿por qué no terminas de una vez esta farsa y te largas de aquí?

— No voy a permitir esto Min YoonGi, una cosa es que no me hables y quieras pretender que no soy tu padre y otra es faltarme el respeto delante de tu novia y suegra.

— Creo que no tiene nada de malo que yo te niegue como padre cuando fuiste tu el primero que me negó como hijo — una lágrima salió de sus ojos y como salió al instante la limpió.

— Lo siento... — comenzó a llorar — Yo en realidad lo siento mucho y si pudiera lo cambiaría todo. Si pudiera YoonGi te juro que no te hubiera dejado solo, que estaría contigo y te daría mi hombro para que lloraras y te desahogaras. Pero como no puedo, lo único que me queda es pedirte disculpas — se acercó a él a paso lento — Por favor hijo, perdóname — cayó arrodillado ante los pies de YoonGi hecho un mar de lágrimas.

El solo se quedó estático ante lo que estaba pasando, no tengo que estar dentro de él para saber como se está sintiendo, todo estaba en sus ojos los cuales estaban llenos de lágrimas que comenzaban a caer por sus mejillas.

Se agachó y tomó a su padre para levantarlo. Esta vez, mirándolo de una manera diferente.

— Eso es lo único que necesitaba escuchar, si tan solo lo hubieras dicho antes.

Y se abrazaron, un abrazo fuerte y lleno de sentimientos. Mis ojos se cristalizaron y no pude evitar llorar también, porque soy feliz al ver que YoonGi pudo resolver sus problemas con su padre.

Bueno, bueno, las cosas están un poco tranquilas, pero no se quedarán así, esta historia está en su recta final y se vienen más problemas.

Soo con el corazón roto.

YoonGi quedará impresionado.

¿Qué creen que pasará?

Este capítulo va dedicado a Saryfan espero que te guste.