De verdad que no quería molestarlo, nunca pensé que leer la canción le haría tanto daño. Pero, ¿por qué? Se supone que estamos juntos, que puede confiar en mí.

Tal vez yo no sea tanto para él, quizás él no siente lo mismo que yo, seguramente solo siente una pequeña atracción. Si, eso debe ser, porque YoonGi nunca dijo te quiero.

Y eso hace que mi corazón duela, porque no me imaginaria si él no me quisiera de verdad, que este amor profundo solo fuera por mi parte.

Me gustaría escucharlo solo una vez aunque solo fuera una vez se sentiría bien. Pero por ahora estoy bien así, porque él no es de las personas que lo dirían, quiero pensar que es por eso, que para él es difícil mostrar sus sentimientos.

— Soo voy a ducharme — me dice Chaeyoung.

— Sí, yo iré en un momento — le respondo y comienzo a tomar mi uniforme. Ducharme en la escuela nunca me a gustado, pero hoy hicimos Educación Física y terminamos todos sudados.

— SooJin — escucho la voz de YoonGi.

— Llegaste — hablo y intento seguir caminado pero su mano me detiene.

— Espera, tengo que decirte algo.

— Ahora no puedo, tengo que ir a ducharme, ya casi es hora de la próxima clase.

— Sé todo eso, solo me tomará un segundo lo que tengo que decir — suspira — Yo siento mucho lo que te dije ayer, no me gusta que toquen mis cosas y por eso me puse así. Lo siento.

— Está bien, fue mi culpa, fui una estúpida al pensar que podía tocar tus cosas. No lo volveré a hacer, de eso puedes estar seguro. Es que a veces se me olvida como eres.

— Soo no hables así, tu puedes hacer cualquier cosa que quieras. Yo soy el que se comporta mal y lo sé pero soy así. Por esa razón no te quería cerca, ni a ti ni a nadie, porque solo hago sufrir a las personas que están a mi lado — sus ojos se cristalizan — Soy quién tiene el problema, simplemente soy yo. Hago infeliz a todas las personas que se acercan a mi.

Esas palabras resonaron en mi mente, porque yo sabía, claro que sabía. Hoseok me lo había dicho, que sería difícil y que a pesar de eso no me rindiera.

— Entonces si lo sabes, ¿por qué no lo cambias? Si sabes que con tus acciones puedes dañar a alguien piensa antes de hacerlo, si sabes que con tus palabras puedes hacer a alguien sentir mal solo piensa un poco antes de decirlas — hago una pausa y me acerco más a él — Sé que puedes hacerlo — acaricio su mejilla.

— Lo intentaré — me sonríe.

Asentí a sus palabras.

— Ahora me iré a duchar — le sonrío de vuelta, beso su mejilla y me voy.

(...)

Terminé de ducharme y me puse el uniforme, aún tenía unos minutos antes de que comenzara la siguiente clase. Me peiné y me maquillé un poco, nunca lo hago pero quería verme bonita para YoonGi.

Salí del baño y me llevé un gran susto cuando vi a alguien parado frente a la puerta. Me quedé pegada a la puerta con la mano en el pecho.

— ¿Te pasa algo Soo? — me pregunta JaeMin quién era el que estaba ahí parado.

— Sí, lo estoy. Solo que me has dado un susto de muerte — respiro aliviada.

— Solo pasaba por aquí, te vi salir y me detuve. Te estaba buscando —me sonríe.

— ¿A mí? ¿Por qué me estabas buscando? — frunso el ceño.

— La profesora nos a puesto juntos en el trabajo, ayer no vine y por eso no dijo mi nombre y hoy le pregunté y me dijo que lo hiciéramos juntos — explica.

— Vamos, tengo todas las preguntas en mi cuaderno — comenzamos a caminar hacia el salón. Llegamos y vi a YoonGi con el ceño fruncido.

— Menos mal que llegas. ¿Sabes ya quien es tu admirador secreto? — alza sus cejas.

— No, ¿por qué? — alzo también las mías.

— Porque cuando lo sepa iré a decirle que si no se a dado cuenta de que eres mi novia y preguntarle por qué carajo te sigue dejando cosas aquí — toma una caja de bombones y me la enseña.

— ¡Wao son mis preferidos! — traté de tomarlos pero él los alejó de mi.

— ¿Y los quieres tomar?

— Soo, ¿eres novia de él? — pregunta JaeMin.

— Sí, ¿por qué? — pregunta YoonGi mirándolo mal.

— Porque me parece muy mal que una chica como Soo esté a tu lado, ella es una chica muy buena — las palabras de JaeMin me dejaron boquiabierta, ¿por qué decía todo eso?

— ¿Qué has dicho? — se acercó a él peligrosamente.

— Lo que oíste, ¿acaso eres sordo? — JaeMin mira a YoonGi con rabia. No entiendo por qué se comporta así.

— JaeMin, ¿qué es lo que te pasa? No puedes hablar así — traté de alejarlo de YoonGi — Mejor te vas a tu lugar — lo miré seria también, no me había gustado nada lo que había dicho de YoonGi.

— Me parece que aquí todos quieren recibir golpes de mi — escucho la voz de YoonGi muy molesta — No sé que mierda es lo que se cree ese.

— No te preocupes, no le prestes atención. Seguro estaba molesto por otra cosa y se la agarró contigo — puse mis manos alrededor de él — Él no es un chico problemático así que debió ser eso — le di un corto beso en los labios.

— Te tengo una sorpresa — me dice después de tomar mi rostro en sus manos.

— ¿De verdad?

— Te lo enseñaré cuando llegues a mi casa más tarde — me da un beso y se sienta en su lugar dejándome con la curiosidad.

(...)

— Y bien, ¿cual es la sorpresa que tenías para mi? — le pregunto no más poner el pie en el primer escalón de la entrada de su casa.

— Espera a que lleguemos, te lo enseñaré arriba — suelta mi mano y abre la puerta.

Subí junto a él los escalones y caminamos por el pasillo hasta llegar a la puerta de su cuarto y como siempre, la oscuridad reinaba. YoonGi se acercó al piano y tomó unas hojas que habían sobre este, me las extendió y se sentó frente al piano. Yo solo me quedé en mi lugar sin comprender aun.

— No te quedes ahí como piedra ¿no la leerás? — alza ambas cejas con una sonrisa de lado — Es la canción.

Me dice y miro el papel nuevamente. Lo volteo porque estaba al revés y me quedo mirando con atención leyendo la letra. Es simplemente hermosa.

— ¿Cuándo la hiciste? — lo miré anonadada. Ayer mismo no tenía nada y hoy me enseña una hermosa canción.

— Anoche, la hice anoche mientras pensaba en ti — su mirada se vuelve cálida.

Sonrío al recordar sus palabras, la hice pensando en ti. Y ya no necesito que me diga un “me gustas” o un “te quieto”

Simplemente esto es suficiente.

— ¿Cuál es el nombre?

— Best Of Me.

— ¿Y la melodía? — me siento a su lado en el piano.

— Estaba pensando en algo, pero creo que el piano no será suficiente. Tendremos que hacerle algunos arreglos con equipos de sonidos.

— ¿Y como haremos eso? Yo ni en sueño tengo esos equipos.

— ¿Se te olvida quien soy? Soy Min YoonGi. Tengo un estudio, es mío — alza sus cejas con una sonrisa de lado.

— ¡Eres el mejor! — me giro hacia él y el doy un beso.

— Lo sé — dice riendo — Pero no creas que todo lo haré yo, tu también tendrás que hacerle arreglos a la canción hasta que quede perfecta.

— ¿Yo? Yo no se nada acerca de eso — inflo mis mejillas.

— Yo te enseño.