『 T H I R T E E N 』
—Si me hace esperar más tiempo... —Gruñó molesto, palpando con su pie el suelo repetidas veces.
Y le había dicho que fuese puntual.., más bien se lo tuvo que decir a sí mismo ese estúpido doll..
Se miró nuevamente frente al espejo, se veía perfecto, realmente se destacaba su belleza.
Hace mucho no salía.., era alguien que amaba estar en casa y más ahora que no se sentía con todos los animos de salir.
Angel no le permitía salir mucho, era costumbre crear fantasías en la cabeza de otros dolls al verlo pasar.
Apretó sus labios, que ganas de sentir esa admiración otra vez.., tal vez por eso estaba siendo tan libre de decir "sí" a donde sea que lo llevaste Nolan...
Aunque que lo vieran con un tipo como él.., ugh..
El timbre comenzó a sonar una y otra vez, fue algo demasiado repentino, pero su ceño fruncido volvió al darse cuenta de la hora.
Avanzó a paso firme y abrió la puerta encontrándose al castaño frente a él con un pequeño jadeo.
—40 minutos tarde, Hoffman.. —Alzó una ceja, ¿Era una especie de broma?
—Lo lamento, me quedé dormido. —Se recompuso, aunque si cabello se veía aún bastante desordenado.
Ladeó su cuerpo para mirar tras él, ahí estaba la moto del chico, estacionada frente a su mansión.
—Sudas como ventana empañada siendo que llegaste en moto. —Entrecerró los ojos.
—¡¿Tu crees que es fácil subir todas esas escaleras corriendo?! —Mostró tras suyo todo lo que tuvo que correr.
—Ja, touché.. —Sonrió el de hebras doradas. —Llamaré a mi chófer para que nos vayamos en seguida. —Sacó su celular avanzando sin antes dejar la mansión bajo llave.
—¿Qué? Espera, espera. —Lo siguió desconcertado. —No lavé mi moto en vano, Louis. —Lo miró marcar sin prestarle atención. —Anda es solo un viaje, ¿Sí? ¿Qué tiene de malo? Soy un gran conductor.
Sus intentos de convencerlo fueron en vano, los ojos azules dieron un pequeño vistazo a la "chatarra" en frente de él.
—No dejaré que me vean en esa cosa... Contigo para variar. —Le respondió, ahora mirándolo de pies a cabeza, no entendía cómo podía usar ese tipo de ropa tan.. clase baja.
Nolan empuñó sus manos, ahh, con que estaba en esas, ¿No?
—Hijo de.. —Murmuró con sus dientes apretados.
Contó mentalmente hasta 10, debía calmarse, todo valdría la pena, solo debía aguantar..
[...]
—¿Sabes? Cuando dijiste que si estaba libre hoy, tenía más clara la idea de que me invitarías a comer.., pero.. esto ya es ridículo. —Miró aquel establecimiento con un gran logo de helado en el cartel.
—¿Y el helado no cuenta como una comida? —Sonrió hacia él, se notaba en su cara que no le gustaba la idea de comer esa delicia.
—¿Es en serio? —Volteó a verlo lentamente con ese tono molesto con el que normalmente se dirigía hacia él. —¿Para eso me arreglé tanto? ¡¿Para que me traigas a comer grasa congelada?! —Le reclamó algo histérico, ¿Por qué lo traería a un lugar que sirven algo que no le gusta ya de por sí?
—Chi.
—¡¡Con razón estás soltero!!
Se dió la media vuelta para meterse a la limusina, pero en eso sintió como lo jalaba hacia él.
—Suéltame. —Dijo con total seriedad.
—Louis, por favor, ¿Cómo sabes que no te gusta si jamás lo haz probado? —Habló algo desesperado con el hecho de que se marchara.
—¡Esa mierda engorda! Si quieres engorda tu, yo no voy a arruinar mi cuerpo por una simple porquería de helado. —Respondió frunciendo el ceño y apartando la mirada.
Entonces lo agarró firmemente de la cadera para apegarlo a él con algo de intensidad, esto lo enrojeció hasta las orejas, mierda, ¿Qué se creía? ¿Por qué lo miraba con esos ojos tan intensos?
Un cálido susurro se hizo presente en su oído, causandole cosquillas pero mayormente estuvo muy cerca de un derrame nasal.
—Tu cuerpo es.. tan sexy, Louis..., sabes que me prende cada vez que lo hacemos.. —Su voz profunda arrazó con todo pensamiento negativo que tenía Louis hacia su Inseminador.. —¿Qué importa unas calorías de más? Tengo más por dónde agarrar.. —Acto seguido mordió ligeramente su orejita.
Arqueó la espalda al sentir esto, incluso un pequeño quejido salió de entre sus rojizos labios, dando suaves golpecitos a su pecho para que lo soltara.
—N-Nolan, ¿Qué te pasa?.. —Entonces logró apartarlo, pero no del todo.
Estuvo tan cerca de tener un pequeño accidente por ese actuar tan extraño del contrario..
Agradecía de que estuvieran en el estacionamiento, un lugar bastante apartado, no daría más de la vergüenza que lo vieran hacer esto con ese hombre de apariencia desordenada.
—¿Entonces... nos vamos? —Lo invitó nuevamente a ir junto a él.
El rubio titubeó unos segundos, pero rendido ante sus encantos asintió manteniendo la distancia.
Claro que antes le pagó unos buenos botones en efectivo al chofer quien había divisado shockeado aquella situación...
Lo que hacía para comprar el silencio por un tonto acto de el castaño..
[...]
—Tenga, ladrón. —Le entregó lo que le debía al doll de aquel taxi al bajarse finalmente en su destino.
—¿Ladrón? Ja, no es mi culpa que aún creas que eres millonario, fracasado. —Y de una aceleró su transporte dejando al contrario echando humos.
—¡Chúpamela, idiota! —Le gritó con rabia.
La vida para ese doll de aspecto algo desgastado, se había tornado completamente gris.
Ahora que no vivía con aquel irritante prototipo, tuvo que aprender a ganarse la vida, aunque era difícil luego de haber perdido tres trabajos..
—Hmph.... —Apretó los puños. —Ese maldito puto.. —Habló entre dientes.
No merecía vivir en la miseria, por favor ¡Era el Inseminador! Merecía esos malditos lujos que se le fueron arrebatados.
Le ardía el estómago el pensar que alguien más ya estaba disfrutando de esa vida.. de SU vida..
No creía que fuese capaz de coger con alguien que no fuera él.., alguien que siquiera fue creado para conectar con ese rubio oxigenado.
Maldito.., pero ya había descubierto ello.. había logrado darse cuenta que podía reemplazarlo así de fácil..
—No puedo dejar que se dé cuenta de todo lo demás.. —Murmuró para sí mismo.
Si eso llegaba a pasar, era definitiva su estadía en la clase baja..
Y pensar que antes era respetado al ser "pareja" del prototipo..
—Ya lo verá.., se arrepentirá tanto de no ponerse de rodillas para que volviera.. —Sus orbes irradiaban furia, resentimiento, un odio total que no solo se dirigía hacia el prototipo..
Si no que también a ese maldito usurpador..
[...]
—¿Será él?..
—¡No puede ser, mira!
—Shht, te va a escuchar, mierda, es más perfecto en persona.
—¿Es normal que su cabello se vea tan radiante?
—Que ganas de que me haga un hijo.
Eran solo algunos de los susurros de los de alrededor al ver a aquel prestigioso prototipo ingresar a ese lugar.
Incluso los de la fila se apartaron con tal de complacer al rey de aquella sociedad.
—¡Me miró, me miró! —Fangirleó un chico al lado de su novia, viendo atónitos al rubio avanzar para ser atendido en aquel mesón de precioso cristal.
Podía ser una heladería, pero parecía ser.. bastante prestigiosa.
—¿Es normal que se te queden mirando así? —El castaño miró alrededor, habían algunos sacando fotos y demás, él solo intentaba apartarse un poco poniéndose su capucha roja, para parecer alguien "más del montón".
—Créeme, he visto cosas peores. —Respondió el ojiazul mirando a Nolan de reojo.
Sonrió, le gustaba que se apartara, así no tenía que preocuparse que lo vieran saliendo con él.
—B-bienvenido a "Dulce nieve" la heladería más perfecta de Perfección, ¿Podría tomar su orden? —Sonrió aquella chica de coleta alta y cabello negro, se notaba que tenía frenillos. Parecía no estar emocionada por el rubio, más bien estaba tensa, incluso sus manos temblaban ligeramente sin dejar de mirar al ojiazul.
—Ehhh.. —Volteó a ver a su acompañante quien rápidamente se acercó.
—¡Oh, sí! Cómo verá, Louis Belle es la primera vez que viene a este lugar, soy su acompañante, así que según el descuento de ustedes ambos tenemos opción de tenedor libre, además del 50% de descuento de hoy. —Explicó el castaño casi al instante.
Hubo un "Click" en la cabeza del rubio, su rostro enfureció.
Con que ahí estaba la linda razón por la cual quería venir con él tan desesperadamente... Pedazo de..
—Oh, claro, serían.. —Calculó lo que costaría todo ello. —50 botones en total, por favor. —Ahora los ojos de aquella doll no paraban de mirar a ambos.. en especial a ese castaño..
Con que él era..
—Claro. —El de ojos bicolor pagó lo solicitado sin reclamo alguno, mínimo, o se llevaba una buena cachetada si llegaba a mirar a Louis con cara de "¿Lo pagas tu, por fis?"
Luego de que se le fueron entregados aquellas pulseritas para identificar que habían comprado el servicio de "tenedor libre" fueron escoltados con toda amabilidad por otra chica, apenas al entrar a aquella sección más apartada para gente que compraba ese servicio especial a Nolan le brillaron los ojitos.
—Es tan hermoso como recordaba.. —Habló con completa felicidad, habían filas y filas de helados muy variados, galletas con helado dentro, waffles y helados en una hermosa combinación con crema y chocolate encima ¿Y había que hablar de ese delfín hecho de helado de arándanos?
—Por aquí por favor. —Avanzó la mujer hasta dirigirlos a su mesa, ya ahí les entregó a cada uno el menú para que se disponieran a escoger. —Deben de saber que por cada helado que no puedan comer habrá una sanción de 10 botones, así que traten de pedir lo justo y necesario, ¿Si?
—Ohh, no se preocupe por eso. —El pecoso habló bastante emocionado mirando todas las opciones que tenía.
Louis entrecerró los ojos y miró aquel menú.., era un festival de azúcar..
[...]
—Debo admitir que este lugar es precioso.., me atrevo a decir que es prestigioso incluso. —Habló el de hebras doradas mirando su helado de vainilla frente a él, tenía una bonita presentación. —Y los sirvientes son muy atentos. —Tomó la cucharita a su lado para ver por dónde podía empezar.
—Todo mundo ya ha venido aquí, es difícil encontrar a gente que jamás a comprado algo en este lugar. —Mencionó el contrario quien no se hizo esperar, ya estaba tragándose ese helado de chocolate suizo sin importar nada. Siquiera había notado que se había manchado de más sus labios fríos de comer tanto helado.
—Y por eso estabas tan urgido de venir conmigo, ¿No? —Lo cuestionó entonces, el castaño paró de comer un rato, riendo con algo de nervios.
—Culpablee. —Dijo entonces, no lo iba a negar. —Un amigo mío me invitó a comer aquí hace ya unos años, cuando apenas fui creado. Así que me trajo aquí y comimos helado hasta que nos echaron. —Rodó los ojos con una risa que hizo que se le marcara un hoyuelo en la mejilla del pecoso. —Desde ese momento no he venido aquí otra vez, solo quería revivir el momento es todo. —Alzó sus hombros. —Y, ¿Quién sabe? Tal vez te pase lo mismo a ti y vengas con alguien nuevo para tener pase al tenedor libre. —Sonrió hacia ese perfecto chico frente a él.
Ahora que lo notaba.. se veía muy lindo, en especial con esos lentes de sol que hacían un precioso contraste con su cabello dorado bajo los mismos.
—No haz tocado tu helado.., ¿Seguro jamás haz comido? —Ladeó su cabeza incrédulo.
—Siempre he tenido una dieta estricta como te dije.. —Respondió.. decir esto le recordó al momento que tuvieron en el auto.. —¿Me trataste así solo porque me necesitabas para tener el cupo? —Habló con un sutil tono de decepción en su voz
—¿Qué?.. —Sus labios estaban fríos, pero su rostro se acaloró al recordar eso. —.. Te mentiría si dijera que no.. —Habló entonces algo arrepentido por llegar a hacer ello por algo de helado.
Louis apretó los labios, apartando la mirada.
Nolan sintió un escalofrío en su cuerpo, tensandose al ver al rubio de esa manera. Vaya.., la verdad no esperaba sentir culpa por algo así.., pero ahora que lo pensaba.
Era la primera vez en mucho tiempo que Lou era invitado a salir.. y le salía con esto.
—Pues más vale que haya valido la pena. —Entonces se dignó a comer la primera cucharada de helado en su vida.
Su sabor se adhirió a sus papilas gustativas, pasando por su paladar, saboreando ese refrescante dulzor que causó un sonrojo a sus pálidas mejillas.
Sus ojitos se abrieron entonces, mostrando un lindo brillo en esos orbes cianita.
Nolan al ver tal escena sintió un flechazo inminente que firmaría su sentencia por el resto de su vida.
Una sentencia que iniciaría con una pequeña chispa en su cálido corazón.
—Santo creador.. —Puso una mano en su mejilla, sonriendo feliz por probar algo tan exquisito.
Por primera vez Nolan podía apreciar a Lou en una nueva etapa.., era.. lindo verlo así..
—¿Cómo algo tan exquisito puede ser tan dañino? —Probó aún más de este helado, parecía un pequeño infante, experimentando los sabores de aquel mundo.
—Lo mismo digo yo.. —Respondió con una risa serena, disfrutando de la felicidad del rubio.
Debía admitir.. que verlo de este modo era mucho mejor que verlo llorar..
☽;; 𝐓𝐰𝐢𝐥𝐢𝐠𝐡𝐭 𝐓𝐡𝐞 𝐇𝐞𝐝𝐠𝐞𝐡𝐨𝐠 ;;☾
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