U N O
México, En alguna parte del norte del país
Lo único por el cual Zafiro estaba en ese tipo de cuartel bajo tierra era porque a su padre no se le podía haber ocurrido mejor lugar para tener una reunión de emergencia.
Después de la desaparición de su hermano menor hace ya 2 años su padre hacía reuniones de emergencia cada vez que encontraba alguna pista sobre el paradero de su hermano, las cuales siempre terminaban en Zafiro dando disparos al aire mientras su padre golpeaba a uno de los "informantes" que al final terminaban siendo algún espía de algún cartel o mafia enemiga o algún investigador privado que el secretario Min contrataba.
Ambos hermanos fueron secuestrados hace 2 años por un cartel del sur, en venganza hacia su padre por haber asesinado a la mano derecha del jefe, quien fue el culpable de la muerte de su madre cuando ella tenía 12 años.
A ella la dejaron abandonada a un lado del Río Bravo, el río que divide la frontera de México con Estados Unidos. Fue rescatada por uno de los oficiales de migración, fue llevada a los Estados Unidos y después de 3 días por fin pudo reencontrarse con su padre quien le informó que aún no entraban a su hermano. Desde entonces Zafiro es enviada por su padre junto con un grupo de confianza a diferentes partes del país y EE.UU para encontrar a su hermano pero nada hasta ahora.
O eso creía ella.
Entró a la cueva escoltada por algunos de sus hombres, tocó la puerta de la nueva oficina y vio a su padre abrazando al secretario Min mientras solo se escuchaba como ambos sollozaban.
— Papá, ¿Qué está pasando? ¿Estás bien? — dijo mientras su padre se alejaba del secretario Min — ¿alguna novedad del chiquillo?.
Su padre se acerca a su primogénita, coloca su mano en su cabello y la abraza — Mi niña, hemos encontrado a tu hermano — dijo su padre llorando.
—¿Qué? — dijo al borde de las lágrimas — ¿Está bien? — se separa de su padre y lo toma de las manos — ¿Está bien el chiquillo?.
Su padre se acerca con un sobre y al abrirlo estaban más de 10 fotografías de su hermano dentro de un edificio, en un apartamento, en un restaurante, en un parque y una que la hizo sollozar, abrazando a un hombre adulto sonriente tal y como lo recordaba.
— ¿Dónde está esto? - dijo secándose las lágrimas — ¿Por qué tardaron tanto en encontrarlo?
— Esos cabrones lo estuvieron cambiando de ubicación cada vez que estábamos a punto de encontrarlo — suspiro su padre — Ahora se encuentra en Corea del Sur por lo que sabemos después de que tú hermano escapara terminó cerca de un edificio, se desmayó y un hombre lo acogió, lleva con él algunos meses por lo que hemos visto está bien.
— Está en el país de Mamá — Zafiro se sentía extraña al saberlo.
— Así es mi niña, quisiera ser yo el que acabe con todo esto pero no puedo dejar el negocio solo — le entrega otro sobre — Hace unos meses murió el jefe de la mafia italiana y su hijo está creando caos entre algunos de nuestros socios en Europa.
— ¿Quieres que vaya por él? — dijo mientras miraba la fotografía de ese hombre y su hermano — Ónix regresara a casa, lo traeré sano y salvo Padre.
Zafiro suspira, pensando en lo que tenía que hacer antes de su partida a tierras sur coreanas.
— Hija mía.
— ¿Sí, padre? — Su padre quien estaba sentado en su silla con el secretario Min y uno de sus guardaespaldas cada uno a su lado, daba aquella intimidante imagen que todo el país imaginaba de él. El gran Patrón.
— Cuando encuentres a esos hijos de puta, ya sabes que hacer.
Hola! como avise antes, estaré editando la historia de poco a poco ya que hay cosas que no terminan de agradarme, así que si les llega notificación, denle un vistazo por si llego a cambiar cosas, lo que realmente no creo hacer, pero ya veremos.
Besos, laly .
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