—Entonces ¿En qué nos habíamos quedado?— les pregunté a mis amigos.

—En qué muchos comenzaron a inventar chismes sobre qué Jungkook y Ryujin eran pareja— me recordó Jeongin y le agradecí con un leve asintimiento.

—Bueno, antes de que empiece a contar el resto de la historia, mañana vienen varios de mis tíos y mi papá— comencé diciendo pero fui interrumpido por Félix.

—Y no podemos venir porque es reunión familiar, entendemos.

—De hecho no, es hora de presentarles a mi familia— le sorprendí sonriendo ampliamente, aquello me emocionaba mucho.

—Al fin, eso nos encantaría— exclamó Félix.

—Bien ahora sí, comencemos con la historia.

Estaba a minutos de acabar su concierto, y sabía que esa era la oportunidad perfecta para aclarar aquellos estúpidos rumores sobre él y una posible relación con Ryujin.

—Antes de dar por finalizado mi concierto quería compartirles algo muy importante con ayuda de una personita— comenzó diciendo cuando su concierto llegó a su fin y le hizo una seña a Ryujin para que fuera a su lado.

—Hola a todos— saludó la de cabellos azules.

—Bueno, el asunto es sencillo, escuchamos muchos rumores que afirmaban que ella y yo somos pareja y queríamos decir que eso es absolutamente falso— declaró el pelinegro.

—Él y yo solo somos muy buenos amigos que salieron a pasear aquel día— le siguió Ryujin.

—Además de eso, quiero hacerles una confesión. Estoy seguro que esa personita que mencionaré esta viendo esto porque no se pierde cada cosa que hago.

» Yo, Jeon Jungkook, estoy en una relación con Kim Taehyung, un hermoso chico de Daegu. Y por si se lo preguntan, sí, soy gay y no me importa si están en contra de aquello, eso no va a poder cambiar lo que soy, las personas que me quieran tal y como soy seguiran siendo mis fans y mis amigos, y las que no pueden irse y decir lo que quieran de mí porque ya no me importa, si tengo a Tae a mi lado seré feliz siempre»

—Lo hiciste muy bien— exclamó ryujin dándole un abrazo fuerte y escuchando un «Gracias» susurrando por el pelinegro. Cuando dieron por finalizado el abrazo salieron del escenario escuchando a algunas personas apaludirles y otras abuchearles.

Apenas regreso a bastidores se encontró con Jin rojo de ira.

—¿Qué hiciste? ¿Estás loco? ¿Quieres que la prensa nos coma vivos?— le reclamó su jefe.

—Solo intento ser sincero con mis verdaderos fans— dijo exaltado defendiéndose a sí mismo.

—Pues tu sinceridad, nos va a costar demasiado— gruñó Jin exasperado.

—No me importa— dijo el pelinegro alzándose de hombros, viendo como se iba de allí dando grandes zancadas y con las manos en forma de puño. Escucho la risa de ryujin a su lado y no pude evitar reír también.

Ahora se sentía completamente relajado porque había hecho lo que debió hacer desde un inicio.

En menos de media hora, cuando Ryujin ya se había ido y se había quedado solo quitándose el maquillaje escucho una voz que pudo reconocer al instante.

—Jungkook.

—Nam ¿Que haces aquí?— cuestionó el mencionado.

—Taehyung quiere hablar contigo— exclamó mientras le pasaba el teléfono que segundos antes lo había tenido cerca a su oído. Cuando Jungkook lo tomó sonriente lo puso de inmediato en su oído para segundos escuchar la melodiosa voz de su amado novio.

—Mi amor no tenias que hacer eso, yo jamas dudé de ti.

—Aun así, necesitaba hacerlo— le contestó.

—Si ese es el caso esta bien por mí y ¿Sabes algo?— exclamó comprensivo y pregunto lo último notablemente emocionado.

—¿Qué cosa?

—Estoy en Seúl— exclamó el castañito y Jungkook cayó en cuando en el ruido de avión de fondo y pude deducir que aún estaba en el aeropuerto.

Supuso que Tae se había enterado de lo sucedido en el concierto por las noticias en Internet que no tardaban demasiado en ser publicadas apenas se daba un hecho.

—Viniste— musitó mientras una gran sonrisa se dibujaba en su cara.

—Vine para verte, te extrañaba mucho— dijo en tono meloso y haciendo un lindo puchero con sus labios.

—Nos encontramos en mi casa aquí ¿si? Te daré la dirección— le dijo sin dejar de sonreír y le pasó la dirección del lugar donde vivía al castañito. Colgó la llamada y le devolvió el celular a Nam agradeciéndole el haber venido hasta aquí para que Tae le diera esa noticia.

Se despidió de Nam, salió del lugar donde estaba y condujo rápidamente hasta su casa. Eran las siete de la noche, así que solo esperaba que cuando llegara a su casa y su novio también se la pasarán hablando de diversos temas mientras se daban besos y mimos hasta quedarse profundamente dormidos.

Pero se dio cuenta que nada saldría como esperaba cuando al llegar a su casa y abrir la puerta de entrar e ilumar la sala de estar al prender las luces, aquella figura sombría que había notado era Jin sentado en el sofá esperando su llegada.

—Hola Jungkookie— volteo hacia el con una pequeña y falsa sonrisa. Cuando Jungkook lo vio levantarse y acercarse a él un escalofrío le recorrió la espina dorsal y comenzó a retroceder con la intención de abrir la puerta e huir lo más rápido posible.

Pero aquel intento fue en vano porque Jin fue más rápido y cerró la puerta con cerrojo para que no tuviera la oportunidad de escapar.

—¿Qué haces tú aquí?— cuestionó con la respiración entre cortada escuchando el latido erratico de su propio corazón y sintiendo unas inmensas ganas de vomitar.

—Lo que debí haber hecho hace mucho tiempo— y con esas palabras saliendo de sus labios clavó una aguja con una ligera dosis de anestesia en el hombro de Jungkook haciendo que se mantuviera dormido el tiempo suficiente antes de la llegada de su novio.

Menos de media hora y sus ojos comenzaban a abrirse lentamente y parpadeando varias veces con la intención de habituarse a la luz del lugar, pudo deducir al ver a su alrededor que aún estaba en su casa, pero cuando intentó moverse se dio cuenta que estaba atado de manos con una gruesa soga en la silla en la que estaba sentado, volteo a ver detrás suyo y se encontró con Jin riéndose de la situación.

—Ya estás despierto— exclamó su jefe.

—Sueltame idiota— protestó Jungkook intentado desatarse pero el nudo que había hecho Jin era demasiado fuerte.

—¿Por qué lo haría? Taehyung llegará pronto y quiero que escuche lo que tengo que decir— le dijo y Jungkook supo de inmediato que él Ceo había escuchado su conversación y por eso había hecho todo eso.

—Por favor, date cuenta que lo que estas haciendo no está bien— suplicó el pelinegro.

—¿Por qué no? Solo estoy tratando de ser sincero, yo te amo y nadie te va a alejar de mi lado— le respondió acariciando sus cabellos.

—Lo que sientes por mí es obsesión, no amor— le aclaró al notar que no era consciente de aquello.

—Claro que es amor— le gritó Jin dejando caer una lágrima por razones que nunca nadie supo, ni siquiera Jungkook porque no lo conocía lo suficiente, de hecho no conocía nada de su pasado.

—¿Jungkook estas ahí?— escucharon la voz de Tae detrás de la puerta después de dar unos pequeños golpecitos en esta. Jungkook estuvo a punto de pedirle que huyera pero una pistola apuntando a su cabeza lo dejó sin palabras.

—Dile que sí y dilo bien si no quieres que te mate— le susurró cerca a su oído lo suficientemente bajito como para que Tae no los oyera.

—Sí, aquí estoy— exclamó mientras dejaba que una lágrima se escapara de sus bellos ojos cristalizados.

Jin se encaminó hacia la puerta y la abrió lentamente dejando entrar a un Tae sonriente, quien frunció el ceño inmediatamente al ver como se encontraba Jungkook.

—Bienvenido— le dijo Jin en un susurro haciendo que Tae abriera la boca por la sorpresa y el miedo.

—Taehyung— gritó Jungkook desconsoladamente hasta quedarse sin voz al ver que Jin le había disparado a su novio. Inmediatamente las lágrimas se esparcieron en su rostro mientras negaba con la cabeza pensando.

«Esto no puede estar pasando»

°•°

Perdón por la demora
He estado algo ocupada
:c

Y tranquis es el final, pero
falta el epílogo uwu