—Unni, ¿Dónde está Faratma?— Tahalafa se encontraba en sus clases de defensa personal impartidas por Nabi, aunque esté en silla de ruedas la mayor no ha dejado de enseñarle a la rubia sus tácticas secretas para pelear

Nabi debe de buscar cómo desviar el tema porque no hay manera de que le cuente sus sospechas a la dubaití pero la conoce muy bien y también sabe lo sagaz que es su mente. 

—Está en un viaje pequeña Taha-ah, no debes preocuparte por ella— La menor mira a Nabi con intriga y desconfianza. Nabi siente que camina sobre un campo minado

—Ya veo, ¿sospechas de Taeyeon y la mandaste seguir por Faratma no?—

¿Cómo lo supo?

—¿De qué hablas pequeña?— 

La rubia se puso seria frunciendo el ceño

—¿Sabes? Puedo parecer frágil pero no lo soy, ingenua menos, así que lo que estés planeando, estoy dentro— 

—Es arriesgado Tahalafa-ah— 

—Uy si, no me vaya a quedar en silla de ruedas o me mande alguien al hospital, por si no sabes la estoy pasando fatal y no soy débil, soy una vikinga—La rubia torció el gesto —Bueno una de bolsillo pero vikinga a fin de cuentas, así es que me cuentas todo o lo terminaré investigando igual— 

Ay no, atrapada 

Jungkook entró como un huracán a la habitación de Yoongi, tenía la cabeza revuelta y está en busca de un consejo, pero no contó con que encontraría a todos sus amigos en un amasijo de extremidades compartiendo fluidos, Namjoon folla a su novio, Yoongi a Hobi y Tae a Jimin.

Pero a él no le importa por lo que habla a pesar de los gemidos, gruñidos y nalgadas

—¿Creen que me equivoqué al terminar a mi osa?— 

Jin quien estaba sobre sus codos y rodilla recibiendo la polla de su novio sonrió a pesar del calor del momento

—Le dice todavía mi osa y todavía pregunta si se equivocó el muy tarado— Jungkook está sentado de espaldas a Jin por lo que el mayor se apoya en los hombros del tatuado para ser mejor follado por Namjoon

—Tal vez me apresuré—Kook mira como Yoongi se traga la polla de Hoseok hasta el fondo de su garganta, está tan aturdido que ni siquiera ver esa escena tan caliente lo saca de su confusión

—Te lo digo porque eres mi hermano y porque te amo— Yoongi lame los testículos de su novio mientras mira al menor —Eres un completo idiota Kookie 

El menor jadea ofendido por lo que espera a que Yoongi vuelva a chupar la polla de Hobi para empujar la cabeza del mayor y ahogarlo 

—No vine a que me insulten. ¡Dejen de follar y escúchenme! No se que hacer, extrañarla me duele pero verla sufriendo también me duele— El menor de todos hace un enorme puchero por lo que Jimin lo besa 

—Todo esto se lo tienes que decir a ella Kook, después de todo nadie te ha hecho entrar en razón cuando estás fuera de ti, sólo ella—Tae también lo besa para calmarlo un poco

—Es verdad, hablen, aclaren su mente y tomen la mejor decisión, los apoyaremos siempre hermano— Namjoon habló sofocado por lo acelerado que está. 

Jungkook sabe que fue una buena idea acudir con sus hermanos para aclarar su mente 

Su corazón está claro, ama a su osa y siempre será así hasta la última de sus vidas, se alejó porque pensó que sería menos cobarde al dar un paso atrás a permanecer y ser un novio mediocre que sufre en silencio, se arrepintió de dejar a Tahalafa desde el primer instante pero tenía la cabeza tan revuelta que le fue imposible tomar una decisión aunque el inmenso amor que siente por su osa no le cabe en el cuerpo

De pronto le llega la inspiración por lo que decide ir directo a su casa a llevar a cabo su estelar idea. 

El gran doctor Kwon viajaba con su hijo discretamente en una camioneta blindada, el padre de Jinyoung tenía los ojos vendados, su móvil fue decomisado y apagado para mayor seguridad, su hijo lo está llevando para reencontrarse con su hija menor quien desde hace años se encuentra en coma, él como un padre amoroso tiene la férrea esperanza de que tal vez su pequeña Dan-i pueda despertar, necesita evaluarla y mantener la esperanza en el fondo de su corazón para no darle más armas a Jinyoung para mantenerlo cautivo en cielo abierto. 

Cuando pro fin la camioneta se detiene, lo bajan con cuidado y lo primero que escucha es la gravilla de un camino de entrada a algún gran sitio, la brisa es fresca y huele a bosque, tal vez están en las afuera de la ciudad o tal vez en un gran jardín ¿Tal vez un bosque? No está seguro pero la expectación crece en cada momento, con cada paso guiado hacia la entrada del lugar. 

—¿Recuerdas el trágico día? Dan-i era tan feliz y llena de vida, fue una pena que te encontrara en casa con la sirvienta y que cuando amenazó con contarle a los abuelos lo que estabas haciendo resbalara por las escaleras ¿No? Una cláusula del testamento de mamá era que no podías tener una relación frente a nosotros, debías cuidar el apellido y el prestigio de la familia pero como le fuiste infiel toda tu vida, lo primero que hiciste fue inaugurar la cama de la nueva casa con tu amante de toda la vida— Jinyoung rió con ganas mientras avanzaban por los estériles pasillos del hospital que él mismo creó para mantener a su hermana, a su abuela y próximamente llevará a Tahalafa para experimentar con ella, de sólo imaginarlo sus manos picaban de emoción, falta poco para eso.

—Debes entender papá, que yo cubrí todos tus pasos, lo he hecho por el bien de Dan-i y también por el prestigio y el poder que son más importantes que el dinero ya que no se pueden comprar. Más te vale que hagas todo lo que te digo porque sería una pena que le pasara algo a mi hermana, tu sabes, su salud es tan frágil que hasta un tronar de mis dedos la puede matar— Su padre se estremeció pero asintió levemente, suficiente para él. 

—Por ahora— Entraron a una habitación de cuidados intensivos para luego retirar la venda de los ojos de su padre —Es hora de un reencuentro familiar— 

Taha se sentía molida, le duelen lugares que no sabía que podían doler, la terapia de rehabilitación era cruel para una rubia frágil de metro y medio, el dia de hoy su vikinga no asistió por lo que está sufriendo las consecuencias de ser una simple mortal sin la fuerza de las valkirias. Ha tenido avances eso sí, puede caminar más, puede levantarse por más tiempo y está más fuerte, está un poco orgullosa de ello aunque todavía el camino es largo. Con el pasar de las semanas ha podido recuperar fuerza mental y física, sus hermanos, familia y amigos han sido fundamentales en su recuperación. 

Mañana se graduará de la preparatoria, no le hace nada de ilusión eso porque tiene su mente enfocada en seguir con la carrera de medicina para luego volverse una gran psiquiatra como su padre Kehvandra. Su cerebro está hecho puré por todo el conocimiento almacenado pero también está satisfecha con sus logros. También no le toma la importancia debida porque hoy sería el cumpleaños de su padre Kehjjmet, lo extraña tanto que no puede con el peso en su corazón, intenta ser fuerte para que sus padres se sientan orgullosos, si bien no lo ha logrado, los intentos no han cesado.

Es por eso que no ha tenido tiempo de extrañar a su conejito, tiene el día repleto de actividades por lo que apenas toca su cama, cae como un tronco. Cuando entra caminando a su habitación, en la almohada encuentra un sobre blanco con dos palabras que le estremecen el alma

"Kehjjmet y Amanda"

Al abrir el sobre encuentra las instrucciones de buscar unas coordenadas en una página web y una tarjeta con una serie de números, al ingresar le piden una clave misma que está impresa en la tarjeta, al ingresar el código numérico se despliega un mapa del cielo con una animación señalando una estrella. Al dar click con el cursor del mouse aparece un breve texto que la hace llorar mares.

"Hoy es un día difícil pero esto es un pequeño recuerdo de que ellos te miran desde el cielo, tienes tres estrellas, tu padre, tu madre y mi amor por tí que es tan inmenso que no me cabe en el cuerpo por lo que lo puse en el cielo para ti, si miras hacia las estrellas será un recordatorio perpetuo de que el conejo le pertenecerá a la osa hasta la última de sus vidas"

Las letras son borrosas ahora pero el último renglón de la tarjeta contenía otra serie de números que tuvo que ingresar a pesar de las lágrimas. Su sorpresa al descubrir el nombre de la tercera estrella la hizo sollozar

"TahaKook"

Buscó por la habitación pero él no está, en cambio hay un telescopio adornado con un lazo rojo en el balcón de su habitación, al mirar por el telescopio acomoda los números para estar en el rango correcto y poder mirar sus estrellas. 

—Me aseguraré de curarme rápido, de ser mejor, de estudiar mucho para titularme pronto, seguiré con las terapias para que mires mi mejor versión y no te arrepientas de nombrar nuestra estrella, prometo esperarte el tiempo que sea, prometo intentarlo una y mil veces para que tú también estés orgulloso de mí Kookito—

Miró hacia el cielo pidiendo a sus estrellas un poco de tiempo, un poco de fuerza para culminar con el plan para que así pueda enfocarse en cumplir las promesas que acaba de hacer. 

—Falta menos para el final—