El grupo de estudiantes de la American School Foundation provenientes de Corea del Sur, estaban reunidos en el edificio de residencias propiedad de la preparatoria, vivían en parejas, eran departamentos cómodos y amplios, con servicio de limpieza y lavandería, áreas verdes, gimnasio, y todo lo necesario para que sus estudiantes tuvieran todas las comodidades y herramientas para sobresalir en un país tan lejano como lo era México, pero en esa noche en particular, Jisoo, Jimin, Taehyung, Yoongi, Namjoon, Seokjin, Hoseok y Jungkook conversaban sobre la vida que estaban llevando en compañía de una linda y dulce mexicana y una tierna y malvada árabe, se acercaba el cumpleaños de la más baja de todo el grupo y querían organizar algo en grande, ya que querían agradecer que esa miniatura rubia sin pensarlo y sin consideración alguna, les abriera las puertas de su vida y su casa, que sus padres prácticamente los adoptaran y encima de proporcionarles comida y un segundo hogar, les contrataran profesores para reforzar los conocimientos, así como asesorías psiquiátricas que el padre alfa de la rubia, Kehvandra Farouq les ofrecía de manera gratuita.

El paidopsiquiatra era dedicado, amable y acertado, les daba consejos, le confesaban sus dudas, miedos y las contrariedades que vivir en un país tan lejano implicaban, él les ofrecía palabras certeras, pero sin interferir en las resoluciones que los adolescentes tomaban, agradecían en demasía la amabilidad que el dubaití tenía con ellos. Era el mejor consejero y el mejor cocinero también, además de que si el veía que sus bebés adoptivos necesitaban maestros o clases extras, él se aseguraba de contratar a los mejores para garantizar el progreso de todos sus hijos.

Kehjjmet por su parte era como un adolescente más en esa casa, era ruidoso, alegre, bromista e incluso algo infantil, pero les proporcionaba tantas palabras de aliento, jugaba con todos ellos, juegos de mesa, cartas, incluso con globos de agua uno que otro domingo, se daba el tiempo para preocuparse por cada uno, les festejaba sus victorias y les daba ánimos cuando fracasaban en algo. Era admirable que una persona con un cargo diplomático tan importante, fueran tan humilde y dedicado para todos, ellos sólo necesitaba pedirle ayuda con algo y enseguida ordenaba su agenda para apoyarlos.

Llevaban una vida de ensueño, de libertad y de esfuerzo sí, pero el grupo estaba viviendo una vida diametralmente distinta a la que llevaban en Seúl, que era estricta, frívola, reglamentaria y superficial, no los malentiendan, estaban conscientes de que pertenecía al porcentaje de la población con más privilegios, pero ahora reevaluaban su realidad.

-¿Qué le podemos regalar a alguien que lo tiene todo?-

-No lo sé Yoongi, será complicado, ¿Tú qué opinas Hobi?-

-Nam, yo sigo firme en que le compremos una dulcería, eso la haría feliz, aunque será terrible lo hiperactiva que se volverá con tanta azúcar en su sistema-

-Hoba definitivamente eso no, la última vez que le regalé chocolates y me quedé dormido, desperté con bigotes pintados y las uñas con esmalte rosa-

Hoseok de solo recordarlo volvió a estallar en risas.

-Dios y yo cuando le compré un helado extra grande la vi patinando una hora por toda la casa hasta que se golpeó con una pared-

-Tienen razón, una dulcería definitivamente no, nuestras vidas correrían peligro-

-Jisoo tú la conoces mejor, ¿Sabes de algo que quiera?-

-Hace un par de días me contó que su mamá está sepultada en Dubái, le gustaría verla pero sabe que es imposible porque si regresa, los cuestionamientos acerca de sus padres serían horribles-

-Joder es verdad, ¿Pero entonces qué?-

-Bueno, también extraña su amiga Dakia, en la mañana le mostró la escuela por video llamada y Dakia le dijo que ojalá pudiera venir-

-¿La traemos?-

-No quiero parecer celosa ni envidiosa pero, no creo que sea buena idea, sabes las ideas que tienen en ese país y no sabemos si ella es así, podríamos meter en problemas a los padres de Lafa, además yo cuando pude hablar con Dakia no me dió una buena corazonada, se ve frívola y parece que el cariño que dice sentir por Lafa es falso ¿Nam tú que piensas?-

-Creo que debemos preguntarle a sus padres antes de pensar en algo más, y creo en lo que dices Jisoo, por eso solo debemos asegurarnos que estamos haciendo lo correcto antes de tomas cualquier decisión-

-Yo le pedí a mi hermana que me mandara algunos hanboks y un montón de adornos coreanos para el pelo-

-Hobi esa es una gran idea, seguro le encantarán-

La reunión continuó, cada uno dió ideas sobre que regalarle pero Jungkook estaba inmerso en sus pensamientos, después de la noche de la fiesta, no habían pasado un rato a solas, entre las tareas y las tutorías poco tiempo les quedaba para dedicarlo a ellos y los descansos las pasaban en compañía de los demás.

Entre el grupo tenían un reglamento implícito, es decir, los que tenían parejas podían jugar entre ellos, en parejas o no, era igual, entre ellos había la suficiente confianza como para pasar el rato jugando con los demás, podían hacer casi de todo excepto follar y la misma regla se aplicaba para Kook y Lafa, ellos no tenían pareja por lo que pasaban los descansos y las tardes libres jugando con los demás, pero el acto de follar, era un límite que no se podía pasar.

Era por eso que se llevaban tan bien y era por eso que la confianza y las cero disputas entre los amigos era normal, había límites establecidos además de que ya habían pasado la barrera del miedo de sentirse contrariados con referencia a sus preferencias sexuales, todos eran gays, solo se divertían y experimentaban como los adolescentes que eran.

Sin embargo, el tatuado pelinegro cada vez estaba más convencido de que ya no solo quería experimentar con Lafa, quería hacer de todo con ella, hasta lo que aún no se le había ocurrido pero el solo pensar que por culpa de las hormonas podría perder la amistad y el cariño que se estaba formando entre ellos dos, le encogía el corazón y las bolas, por eso no se había atrevido a proponerle nada a la rubia.

Ya la cuestión de la orientación sexual la tenía clara: era gay y Tahalafasexual, punto.

Decidió dejar la plática con sus amigos de lado, se despidió de ellos para ir a su habitación, decidido en hablar con la razón de sus desvelos mediante una video llamada, estaba nervioso, no sabía que debía decir pero hey, a los miedos se les planta cara sólo que al ver la cara de Lafa con ese cabello desordenado, únicamente pudo sonreír tan ampliamente que las mejillas le dolieron.

*Hola bebé osa

~Hola conejito

*¿Qué hacías?

~Revisaba la guía de estudio de física pero lo dejé por la paz conejito, mi alma murió un poco cuando termine de leer todo eso

Tahalafa hizo un puchero triste que hizo sonreír a Jungkook

*Bebé osa hay tiempo para eso, no son horas de leer la guía, ninguna hora es buena para eso

~Ya seeeeeeeee pero quería saber si los temas ya los había visto para así poder ayudar a María con los ejercicios porque es a la que más se le complica resolverlos Kookito

*Haces mucho por todos nosotros pequeña osa

~Naaaaa, María haría lo mismo por mi

*Bebé ¿Sigues hablando con tus amigos de Dubái?

~Uh, algo así conejito, solo con Dakia, no tenía muchos amigos allá

Lafa se acomodó en la cama con la laptop cerca de ella

~¿Por qué preguntas?

*Porque quería saber si eras igual de buena con tus amigos de allá que con nosotros

Lafa sonrió ampliamente

~Pues no conejito, solo con ustedes, es decir que si me pedían ayuda y lo podía hacer, ayudaba a mis compañeros y a Dakia pero tener un grupo de amigos como ustedes nop, nop, ustedes son únicos.

Jungkook sonrió mostrando sus dientes de conejo, estaba acostado de lado en su cama con su laptop cerca de su cara.

*¿Quieres pasar los descansos de mañana conmigo pequeña bebé osa? No hemos pasado tiempo a solas dese esa vez y quiero que eso cambie, ¿Quieres que sea así?

~Solo contigo suena bien Kookito

*Entonces te veré en unas horas pequeña, iré a cenar porque muero de hambre

~Ah, eso no está bien, buen provecho conejito

La rubia le lanzó besos y formó un corazón con sus dedos antes de terminar la video llamada

Jungkook sonreía como un idiota al cerrar la laptop, tan encantado y emocionado se sentía que no se dió cuenta de que dos figuras estaban parados en el marco de la puerta de su habitación ¿En qué momento la abrieron?

-Joder ¿Por qué mierda abren la puerta sin tocar antes? ¿Qué quieren hyungs?-

-Con quién hablabas Kookie?-

-No es de tu interés Suga hyung, ni tuya tampoco Jimin-

-Claro claro, como digas Kookie, vámonos hyung debemos cocinar-

-Tienes razón Jimin, debemos alimentar bien a nuestro Kookie para su cita de mañana, te avisaremos cuanto todo esté listo mientras tanto piensa en bebé osa pequeño conejito-

Ambos salieron corriendo directo a donde estaban los demás, seguramente para llevarles las noticias, todos tenían sospechas de que la árabe y Kook tenían algo, pero no decían nada para no incomodar. A esta edad todo mundo tiene dudas respecto a su identidad en algún aspecto y nadie debe entrometerse en las vidas ajenas sin autorización ni hacer juicios de valor. Eso lo aprendieron del padre alfa de la más baja del grupo.

Se escucharon sonidos de sorpresa, la escandalosa risa de Hobi, los chillidos de Jisoo y algunas palabras que Jungkook no pudo entender, la hora de la cena sería un sufrimiento, pero a los problemas hay que hacerles frente, por lo que como todo un adolescente valiente salió a la cocina para ayudar ya que esa era su tarea de ese día.

Mientras tanto los tres dubaitíes cenaban en la cocina, al no estar toda su familia reunida no usaban en comedor, el personal de servicio procedía a llenar los platos de los adultos mientras la adolescente decidió por cenar cereal.

-Lafa si cenas eso no vas a dormir-

-Bueno si eso pasa resolveré la guía de física hasta que me dé sueño papá omega-

-Te esfuerzas mucho bebé, estamos orgullosos de ti-

-Gracias papá alfa, mi meta es esa, esforzarme para que estén orgullosos de mi-

-Bebé nosotros ya estamos orgullosos solo porque existas pero nos hace felices que aprecies todo lo que tienes y te esfuerces en la escuela para que seas una persona responsable y productiva para la sociedad, con buenas calificaciones podrás estudiar la licenciatura en la universidad que quieras-

-Lo sé papá y agradezco todo lo que me dan, todo lo que me ayudan y como ayudan a mis amigos, soy feliz de que los dos sean mis papás... Pero yo uh...Necesito preguntarles algo-

Kehvandra les dió la señal al personal de la casa para que salieran de la cocina.

-Sabes que puedes confiar en nosotros bebé ¿Qué es lo que pasa?-

-Ya no estoy tan segura de ser gay-

El silencio que se hizo en la cocina era tan denso que podía cortarse con cuchillo, Lafa miraba a los dos adultos quienes tenían los ojos muy abiertos y la miraban como si tuviera 3 ojos.

-Espera ¿Qué?-

-Eso papá omega, creo que me empieza a gustar un chico y yo estoy muy confundida, pero no estoy asustada ¿O debería estarlo?-

-No pequeña, en tu vida vas a enfrentar y experimentar muchos cambios en todos los ámbitos, el espectro de la sexualidad no se reduce a sólo ser hetero u homosexual, recuerda lo que te dije , si decides mantener una relación sexual, siempre debe de ser consensuado y consciente, de lo contrario no te arriesgues. Puedes dudar las veces que sea necesario hasta que encuentres tu identidad integral, hay gente que nos descubrimos tarde, hay quienes nunca encuentran su identidad por aferrarse a conceptos y preceptos, todo está bien mientras tú te sientas en confianza con la otra persona para saber lo que te gusta, tienes toda la vida para investigar quién eres y tienes todo el tiempo del mundo para definirte, aunque realmente bebé, ya estamos definidos: somos personas, nuestras preferencias son individuales, la sociedad te pide que te categorices para poder entenderte y eso no debe ser, todos estamos en la misma categoría de seres humanos, no eres más que nadie y nadie es más que tú, todos estamos en el mismo nivel o al menos así debería de ser-

-Kehvandra tiene razón mi amor, además, lo único que queremos tu papá y yo es que seas feliz, desarrolles todo tu potencial y te sientas siempre con la certeza de que tus papás te amamos y jamás te vamos a juzgar, no me importan tus preferencias ni el tiempo que pase, siempre serás mi pequeña bebé y papá te va a cuidar siempre-

-Oye, yo también te voy a cuidar siempre y no importa el tiempo que pase también, te vamos a cargar porque serás nuestra bebé eterna-

-Ay, tengo los mejores papás de todas las galaxias-

Lafa se lanzó a los brazos de sus padres, como era muy sensible estaba llorando a mares por las lindas palabras de las personas que más ama en el mundo, se sentía reconfortada, amada y segura entre sus brazos, las dudas continuarán durante toda su vida, pero afortunadamente tenía a esas dos personas que eran la única familia que tenía.

¿Pero quién necesita más familiares cuando se tiene a las mejores personas existentes como tus padres?

EL grupo se reunió muy temprano en la entrada de la escuela, entraron juntos al infierno de la preparatoria caminando muy juntos por los pasillo repletos de estudiantes y casilleros, a lo lejos pudieron ver al grupo de arpías quien es caminaban hacia ellos, pero dada la restricción establecida, cambiaron de dirección hacia el gimnasio, iban caminando con otras personas.

Esperen

¿Anderson está con las arpías?

Si, definitivamente Anderson iba conversando alegremente con la líder de las arpías pero al ver a Jungkook se despidió de ellas demasiado tarde, un irritado Kook ya lo había visto.

En fin

La hipotenusa

Mientras avanzaban por los pasillos hasta el temible salón de Biología, eran saludados por alumnos de todos los grados, sonrisas sinceras, algunas falsas, algunas con segundas intenciones, pero incluso algunos profesores saludaban al grupo, le preguntaban a Lafa cuando sería la próxima fiesta, ella les dijo que pronto.

Los saludaron los alumnos del equipo de futbol, de básquet amigos de Yoongi, las porristas, intercambiaban algunos saludos de manos y otros solo un choque de puños. De manera individual, cada uno de los coreanos, la mexicana y la dubaití tenían amigos propios pero en sí el grupo era inseparable.

Las clases comenzaron tortuosamente lentas, con toneladas de tareas y proyectos para entregar al final de la semana, mientras anotaban todo lo que debían hacer, un coreano tatuado se preparaba mentalmente para pasar el primer descanso con la pequeña rubia, no sería como las otras veces donde había roces y besos y caricias entre varios amigos, esta vez solo estarían ellos dos solos y estaba un poco nervioso, quería preguntarle tantas cosas a la rubia, obtener información sobre que le gustaría para su cumpleaños y también quería besarla, contarle cosas de cuando vivía en Seúl y también quería seguir experimentando con ella, eran demasiadas cosas para hacer en tan solo 15 minutos.

Bueno eran dos períodos de 15 minutos libres más la hora del almuerzo.

Jungkook y Tahalafa hablaban sin parar bajo el árbol que antes usaban Jimin y ella para esperar a Jisoo y María, Kook le contaba sobre sus anécdotas familiares y escolares en Seúl y Tahalafa le contaba sobre las costumbres y tradiciones dubaitíes, no se percataban de que tan cerca estaban ni de las miradas curiosas sobre ellos, el coreano estaba consciente de que el tiempo se estaba acabando así que se decidió a preguntar.

-Bebé ¿Te gustaría que tu amiga de Dubái viniera a visitarte?-

Tahalafa parpadeó un par de veces, meditó su respuesta.

-Me gustaría verla si pero, uh, es complicado conejito, ella no sabe sobre mis padres, eso es algo que no compartimos con nadie, así que sería muy complicado de que viniera, ella quiere visitarme pero me hago tonta porque uno como dubaití está obligado a avisar cuando un comportamiento inapropiado esté sucediendo, y bueno, si ella se entera de la relación de mis padres...no quiero pensar en eso conejito, nos llevarían a Dubái y nos matarían a los tres, me vió besando a una compañera en la escuela una vez en la secundaria y se puso como loca, mejor que se quede dónde está-

-Estas bromeando ¿Cierto bebé?-

-No Kookito, estoy hablando muy en serio, el castigo es morir públicamente apedreados, o ahorcados o latigueados, así que, bueno que Dakia me visite no está en mis planes-

-Mierda no sabía y yo que creía que la sociedad coreana era cerrada-

-No Kookito, en Dubái no podría hablar contigo sin mis padres presentes, bueno sólo mi papá omega porque allá mi papá alfa vivía en su propia casa, que más, ah si, no podría salir a la calle sola ni podría bailar ni beber alcohol ni nada divertido porque el islam no lo permite y tampoco podría decir que no soy musulmana ¿Sabes? porque eso sería pena de muerte, las mujeres somos tomadas como seres que no tenemos criterio propio y todo está sujeto a la aprobación de los hombres, en mi caso fui afortunada, mi mamá no dejaba que decidieran por mí o ya estuviera casada y con mínimo 5 hijos ¿Lo puedes creer? pero ella siempre peleaba y mi papá afuera era un diplomático de alto rango amigo de los Jeques y demás pero en casa mi mamá mandaba y mi papá tenía la última palabra que era "lo que tu digas amor"-

-¿La extrañas bebé-

-Cada día conejito, me hace mucha falta, quisiera visitar su tumba pero es imposible también, le pedí de favor a Dakia que la visitara y le llevara su flor favorita pero hasta el día de hoy no ha tenido tiempo-

-Lo siento bebé osa-

-Yo también Kookito-

Para ese momento los ojos de la árabe brillaban como el oro líquido, eran de un dorado con vetas verdes, era un color extraño y único, Kook jamás había visto un color de ojos tan particular pero en esos momentos su brillo se debía a la tristeza así que sin pensarlo apretó a Tahalafa en un abrazo muy fuerte, sin espacio entre los cuerpos, la árabe primero se sorprendió pero de inmediato correspondió también abrazando a Kook por su fuerte cintura con todas sus fuerzas.

-Como se acerca tu cumpleaños, te daré un presente pequeño hasta que sea el gran día así que espero te gusten bebé osa-

La árabe alzó la cabeza para poder admirar al coreano, se tragó el nudo que tenía en la garganta para poder hablar

-No tienes que darme nada conejito, yo soy feliz estando contigo y con los demás-

-Bueno ya los compré así que no puedes hacer nada al respecto-

De la bolsa trasera del pantalón sacó un pequeño sobre de papel rosa claro con un moño muy pequeño en rosa más fuerte, al abrirlo la árabe se quedó muda, era una correa para los lentes de metal, con piedras muy pequeñas de colores y con diferentes caras de osos pandas, koalas, polares y Grizzlies, además tenía huellas de osos.

-Eres muy distraída bebé y pierdes seguido los lentes, una vez me senté en uno de ellos lo siento, así ya no los perderás-

-Oh por dios es demasiado Jungkook yo, yo...uh...dios gracias-

Había un paso de distancia entre ellos, que fue la distancia que puso la más bajita para poder admirar su regalo pero de inmediato se lanzó a los brazos del coreano porque tuvo un ataque fulminante de ternura

-Dios conejito, te prometo que lo usaré siempre siempre, es lo más perfecto que me han dado muchas gracias-

Jungkook sonrió conmovido, le ofreció a la árabe una sonrisa amplia desde el alma, mostrando sus dientes, estaban en público, no podían besarse aunque estaban a punto, en su lugar se abrazaron aún más fuerte, suspirando al mismo tiempo lo que los hizo reír, estaban siendo un poco ridículos pero felices, así que no importaba tanto.

Jungkook peinó con los dedos el pelo rubio de la árabe, raramente estaba en su lugar pero era un gesto que quería hacer, la árabe hizo boca de pez mientras el seguí alisando su pelo con los dedos, sonrieron como un par de niños pero todo lo lindo termina, el timbre rompió su burbuja, sin embargo caminaron muy juntos, sonriendo a todo el que los saludara, cuando entraron al salón Lafa sacó sus lentes del estuche y le enseñó a Kook como se veían con la correa.

-Amo mi regalo conejito mil gracias-

-Bueno espera al de mañana bebé osa-

Para el segundo descanso las cosas fueron muy diferentes.

Se encontraban en el estrecho cuarto de limpieza del primer piso, explorando el cuerpo del otro con ahínco y devoción además de lujuria pura, ambos se encontraban jadeando y reprimiendo gemidos, los uniformes estaban torcidos, la erección de Jungkook chocaba con el trasero de Tahalafa sobre cuatro capas de ropa, no era suficiente para que se corrieran pero era sumamente placentero frotarse de esa manera simulando follar.

-Conejito pasa la noche conmigo-

Los movimientos se hicieron más obscenos a cada minuto, ya no había pudor ni consideraciones, era calor y fricción en su estado más animal por lo que Kook acomodaba las piernas de la árabe para encontrar el ángulo perfecto y la rubia cooperaba dejándose hacer además de que también movía sus caderas disfrutando el momento.

-Mierda bebé osa, si eso quiero necesito correrme contigo-

Pero ese encuentro no estaba en sus planes...

Todo comenzó a la hora del almuerzo, cuando se encontraban en las mesas exteriores repartiendo la comida que cada amigo había traído , jugos orgánicos, proteína líquida de almendra con diferentes sabores, fruta picada, ensaladas y dos tipos de postres eran lo que compartían, se organizaban para realizar las tareas que debían entregar al otro día, se estaban riendo como focas por la manera en la que Yoongi golpeó "accidentalmente" a Anderson con un balón de fútbol, en la hora del primer descanso Hoseok y él se reunieron con los de último año para conversar un poco, uno de ellos comenzó a lanzar pases en lo que hablaban, Anderson apareció de repente y al ver a los coreanos les lanzó una mirada llena de veneno, Yoongi calculó la distancia y el tiempo que tardaría en que uno de sus amigos le lanzaría el pase, así que el amigo elevó el balón para que Yoongi lo pateara pero mágicamente no miró a Anderson y el balón se clavó justo en su espalda. Para salvar a Yoongi el capitán del equipo de fútbol se echó la culpa, ya que él fue quien lanzó el pase. Todos apoyaron al capitán por lo que el rubio solo pudo tragarse su coraje.

-Oppa no lo hubieras hecho, el balón no tiene la culpa-

-Jisoo tiene razón Yoongito, ese balón necesita un exorcismo después de tocar a Anderson-

-Entonces también tenemos que hacerle un exorcismo a Jungkook porque...-

-Ya entendimos Tae, no hay necesidad de ser tan explícitos-

La rubia dejó de sonreír, era palpable la tristeza que comenzaba a filtrarse por su pequeño ser, los demás se preocuparon pero no sabían que decirle y la preocupación llegó a niveles extremos cuando, por increíble que esto suene, la rubia dejó de comer, se excusó de que debía ir al baño pero nadie le creyó, María y Jisoo se ofrecieron a acompañarla, incluso Jimin pero rechazó toda compañía.

Caminó y caminó recorriendo la escuela, solo hacía tiempo en lo que sonaba el timbre, quería evaluar las razones por las que se encontraba tan sensible, probablemente era porque su período se acercaba, recorría con cautela los pasillos mientras pensaba, siempre el caminar le despejaba la mente, en otro momento las palabras de Tae no le afectarían tanto, quería golpearse contra la esquina de alguna pared ya que ni ella misma se soportaba, seguramente iba haciendo pucheros.

Y todo fue a peor cuando Candela apareció frente a ella.

-Fui a averiguar si estabas con tus amigos pero no estabas, llevo casi toda la hora buscándote -

-Bueno necesitaba ir al baño y aquí estoy-

-¿Estás bien? Te ves triste-

-Nah, estoy bien Candela no te preocupes-

Intentó darle una sonrisa a la morena pero Candela no le creyó en lo absoluto.

-¿Quieres ir con tus amigos? te puedo acompañar, o también podemos ir a los baños-

Era hora de enfrentar a esta insistente adolescente.

-Lo siento Candela, creo que no te he puesto un límite y debí hacerlo desde antes, no pasará nada de lo que tienes en mente, solo que no he sido lo suficientemente clara porque tampoco pretendo ser grosera contigo, pareces buena persona y por eso solo te pido de la manera más amable que por favor no insistas más ¿De acuerdo?-

-¿He sido molesta no? Lo lamento Taha, solo me gustas mucho y cuando alguien me gusta suelo ser pesada perdón-

-No pasa nada, me alegra que aclaremos las cosas-

-¿Podemos ser amigas?-

-¡Claro! siempre y cuando recuerdes que no pasará más que de una amistad-

-De acuerdo pequeña, ahora el timbre está por sonar, entonces ¿Puedo acompañarte en plan de amigas? Me preocupa que alguien te aviente-

-No te preocupes Candela, tendré cuidado-

-Está bien está bien no insistiré más, te veo luego pequeña, no estés triste, es muy extraño verte así, regularmente estás alegre hablando sin parar y brincoteando por la escuela, que nada te apague-

-Gracias Candela por tus palabras, lo intentaré-

Se despidieron con un apretón de manos, parecía que la árabe acaba de hacer otra amiga.

Antes de que terminara la clase que predecía al segundo descanso, la maestra de Metodología de Investigación le pidió a la rubia que fuera a la oficina de insumos a pedir las fotocopias de las guías de estudio que necesitaba entregarles al alumnado, así que el segundo descanso con Jungkook estaba descartado, lo cual estaba bien ya que ella no estaba con ánimos de que fuera así. Había estado callada durante las clases restantes y los más preocupante, Jin le compró gusanos de gomitas y nos las probó, eso era un 3312 en la escala de alarmas.

Así que ahí estaba la árabe, diciéndole a sus amigos que no la acompañaran, que aprovecharan su descanso y se verían en el salón. Ella salió disparada hacia el lugar destinado, pidió las fotocopias pero aún no estaban listas, ellos se encargarían de decirle a la maestra entonces todo estaba bien, su trabajo estaba hecho, así que bien podía ir a buscar a algunos de sus amigos o podía ir a su salón y comer esas gomitas, optó por la segunda, dobló a la esquina, le faltaba muy poco para llegar cuando un fuerte brazo la tiró hacia atrás y la metió al cuarto de limpieza.

Lafa iba a gritar pero la mano de Jungkook evitó que el sonido saliera.

-Por favor no vuelvas a hacer eso, morí un poco gracias al susto-

-Lo siento pero saliste corriendo y quería pasar este tiempo contigo-

-Perdón por mi actitud, no sé, esto es nuevo para mí y no sé cómo reaccionar, pero debo mejorar porque si tenemos problemas de comunicación tendremos estos conflictos y y y lo siento conejito-

Kook la alzó, las piernas de la árabe de inmediato se enroscaron en su cintura como un koala, las manos del coreano estaban bien plantadas en el trasero de la rubia.

-Lo que pasó entre él y yo fue sólo de una vez, después de eso sí estuvo a punto de pasar una segunda vez el día de la fiesta pero desde ahí ya me tenías en tus manos-

-Lo que haya pasado Kookito no es de mi incumbencia -

-¿Sabes por qué fue él?-

-No me tien...-

-Por qué era rubio como tú, fue una manera muy estúpida de reemplazarte en ese momento porque desde ahí ya me tenías jodida la mente y eso que solo nos habíamos conocido horas antes-

Lafa no estaba respirando, nada la habría preparado para escuchar esa confesión.

A la mierda las inseguridades.

Sostuvo la cara del coreano entre sus manos, se miraron un instante más breve que el latido de un corazón, la árabe lo besó tan profundo, tan lento y posesivo, se adueñaban poco a poco de la voluntad del otro y no podría ser mejor, hundían las lenguas en la boca contraria, succionaban los labios ajenos, mordían, tiraban de los belfos del contrario, Jungkook apretó el trasero de la rubia con todas sus fuerzas pero ella no se quejó, era de admirarse que alguien tan pequeño soportara la fuerza del coreano, fueron más allá, Jungkook estampó la espalda de la árabe en la pared del minúsculo cuarto, presionando su pecho contra los grandes senos de la árabe.

Y ahí es donde empezó todo.

-Mierda bebé osa, si eso quiero necesito correrme contigo-

Tahalafa estaba de espaldas a Jungkook, apoyó sus manos en la pared para poder frotarse con lascivia sobre la bragueta del coreano, Kook gruñó fuerte, estaba con las hormonas a 100, Lafa se movía con ganas repegando más y más su trasero, más rápido, más fuerte, más caliente, más vulgar, todo eso estaba volviendo loco al coreano así que no pudo resistirlo, tomó el rubio pelo de la árabe y tiró con fuerza, ella solo pudo gemir.

Jungkook con la mano que no sostenía el pelo de la árabe acarició los muslos de Tahalafa, ella siempre usaba unas medias largas que le llegaban casi al inicio de sus muslos, Jungkook descubrió que eso le encantaba, palmeó con fuerza los muslos firmes de Lafa.

-Kooko...dios Kooko debemos parar el timbre va a sonar-

-Lo sé, mierda lo sé-

Antes de detener todo, Kook le propinó cuatro nalgadas con toda su fuerza a la árabe, quien sólo podía morder su labio, las piernas le temblaban.

-Más tarde daddy, falta menos-

-Joder bebé-

Lafa salió primero para llegar directo al salón, dejó que Jungkook arreglara su uniforme pero por dentro seguía hirviendo.

Cuando llegaron a la casa de los dubaitíes, organizaban las tareas que debían entregar mientras comían, los padres de Lafa estaban retrasados lo cual era raro, a la hora de la salida de los niños mandaron al chofer por el grupo, cuando por fin aparecieron saludaron a sus hijos adoptivos y a su pequeña hija.

-Mi amor debemos hablar sobre algo importante-

Lafa tenía la boca colmada de ensalada, se veían cansados y contrariados.

-¿Qué pasa papá?-

-Bebé recibí noticias de mi amigo de Dubái, al parecer quieren denunciarnos Lafa, no sabemos quién porque mi amigo está averiguando y además está haciendo todo lo posible para detener la denuncia pero el tiempo apremia. Pequeña deberemos renunciar a la ciudadanía dubaití, corremos un peligro enorme así que lo mejor será que te vuelvas mexicana, ya metí la documentación y tú y Kehjjmet tienen el trámite sencillo, ya que tu mamá que en paz descanse era mexicana y eso simplifica un montón el trámite, yo solicitaré la naturalización con un examen-

-Ya te dije que no sama', aquí el matrimonio gay es legal, nos casaremos una vez que yo sea mexicano y entonces serás mexicano también después del matrimonio-

-Señor Kehvandra ¿De verdad pueden matarlos?-

-No se preocupen por ello por favor Tae, hablamos de este tema frente a ustedes porque los consideramos familia, el peligro es real así que no podemos correr riesgos-

-¿Qué podemos hacer para ayudar?-

-Nam ustedes sólo deben seguir con su rutina normal, Kehjjmet y yo resolveremos todo, el primer paso es que sama' y yo pasemos todo nuestro dinero a bancos mexicanos, después abriremos negocios aquí al tiempo de que comenzaremos el trámite de Lafa para nacionalizarse. Los siguientes pasos los daremos cuando estemos seguros de que todo irá bien-

-Podemos hacer el examen los tres papás-

-Eso llevaría demasiado tiempo mi amor, será como ya lo decidimos mientras tú solo concéntrate en estudiar-

-Pequeños debemos volver a la embajada, Kehvandra debe ayudarme con la tramitación en lo que yo cumplo funciones diplomáticas-

-Pórtense bien por favor, Nam estás a cargo de la casa-

Namjoon estaba confundido pero al ver a la rubia quien lloraba en silencio decidió ser valiente.

-Tengan cuidado, yo me aseguraré de que Lafa esté bien-

-No sólo ella Nam, nos preocupamos por todos, si quieren cenar hay dinero en el cajón de la cocina o usen las tarjetas de mi pulga, no estamos seguros de la hora en que regresaremos así que pórtense bien, los queremos-

Ambos padres abrazaron con fuerza a su hija, ella en ese momento se quebró, sollozó con todo el dolor y el miedo filtrados en su llanto, sus padres le murmuraron palabras en árabe que nadie pudo entender, Lafa se aferró a los dos hombres, besaron la cima de su cabeza antes de salir de nuevo a enfrentar la realidad.

-Sama' no dejaré que nada les pase ni a ti ni a la niña-

-Tú no entiendes Kehvandra, estamos juntos en esto, por eso ya pasé todo mi dinero a Lafa, si algo pasa ella no se quedará desamparada-

-Yo hice lo mismo amor, todo lo que tengo ahora es de mi bebé-

-Entonces está hecho, ahora tenemos que averiguar quién quiere vernos muertos-

El problema...

Es que eran demasiados nombres...