No soy de las que se mezclan en las fiestas. Especialmente en las que tienen más gente desconocida que familiares, y en una ciudad que es nueva para mí por todos lados. Es por eso que no tengo ningún problema en sostener mi taza de ponche de cereza entre mis dedos en los bordes exteriores de la arena social.

De cualquier manera, permanecer distante para observar y analizar a las personas de este período de tiempo siempre ha sido algo que disfruto hacer. Capturando cada momento, supongo, que aunque tengo recuerdos más que suficientes para algunas vidas. No merezco un regalo tan eterno, pero nunca tuve elección al respecto.

Alaric se posiciona en silencio a mi lado. Definitivamente ha cumplido su promesa a Damon al no perderme de vista. La solicitud por sí sola es estúpida porque soy totalmente capaz de cuidarme sola. Damon lo sabe, aunque puede ser la razón por la que siempre se opone a que no dé por sentada mi vida inmortal. Supongo que ya no me importa después de todo.

A pesar de ser niñera, Alaric ha demostrado ser una buena compañía. Dudó un rato a mi alrededor, incluso después de que le aseguré que no sería un peligro para su improvisada familia. Quiero decir, ¿quién puede culparlo? Por las historias que me contó sobre su tiempo en Mystic Falls, este pobre hombre probablemente siempre esta siempre alerta ante nuevos peligros.

Vi la llegada de Elena hace unos minutos. Que tan pronto como entró en el espacio, sus ojos comenzaron a buscar a alguien que probablemente no conocería. Tengo que recordarme a mí misma lo importante que es para Damon cada vez que estoy cerca de ella porque me irrita de una manera que no puedo describir. Parece que todavía no soy la mayor fan de Elena.

Siento a Alaric tensarse a mi lado. Me mira rápidamente, luego se excusa de mi lado después de un segundo de pensamiento. Intento seguir su camino con mis ojos cuando se aleja, pero rápidamente lo pierdo en la creciente multitud.

Aliso el vestido violeta demasiado corto que Elena me a prestado para el evento. Estaba contenta respecto a quedarme en su casa y no venir a esta celebración, pero Damon insistió en que preferiría que estuviera cerca por si llegara a suceder algo esta noche.

Creo que está luchando al no tener a Stefan cerca para proteger a Elena, por lo que discretamente me pidió que me quedara cuando Alaric y Elena estaban demasiado ocupados para darse cuenta. No necesito mucho para persuadirme y quedarme, ya que este es el único lugar que Klaus y Stefan evitarán, pero puedo lamentar haber dicho que sí estas fiestas continúan existiendo.

La sensación de ser un pez fuera del agua me rodea, ya que no tengo la familiaridad que Alaric me deja aferrarme. Casi estoy agradecida cuando Elena viene a mi encuentro.

―Necesito tu ayuda― Ella dice de inmediato.

Me muerdo la lengua para evitar interrogarla con mi habitual sarcasmo. La expresión de su rostro muestra urgencia y un poco de miedo, así que la sigo en silencio hasta donde sea que esté su nuevo desastre.

Terminamos en el lado opuesto de la fiesta. El hermoso paisaje nos lleva a un área privada con su propio asiento y a distancia de miradas ajenas. El ruido de la multitud es ahogado por una elegante fuente de piedra en la esquina y no podría estar más agradecida

Hay dos niñas de la edad de Elena sentadas una frente a la otra en los bancos provistos. Se acerca a ellos fácilmente, pero dudo ante su aura sobrenatural.

―La compañía que sigues es cada vez más sorprendente, Elena― Digo, mirando a los dos. ―Una bruja de Bennett y otra inmortal.

La bruja gira en mi dirección con el sonido de su nombre. Ella entrecierra ligeramente las cejas, pero no dice nada sobre mi clasificación.

―El collar― comienza Elena, interrumpiendo nuestra interacción silenciosa, ―Me ... me quemó, tal como lo haría si Damon lo tocara.

Meneando la cabeza, tomo el collar que ahora me tiende. Una sonrisa triste juega en mis labios mientras la examino para asegurarme de que es la que reconocí. No es que dudara de mi magia, pero ahora sé de cerca que esta es la misma por mi visión.

―Traté de hacerle un hechizo de identificación, pero creo que tiene su propia magia― La bruja Bennett interviene, su tono es serio.

Podía sentir la magia irradiando tan pronto como Elena me lo entregó. Ella todavía debe ser una nueva bruja ya que necesitaba hacer un hechizo, prácticamente está revelando la respuesta por sí sola.

La otra chica y Elena nos miran simultáneamente entre las dos. Quieren que les cuente una parte de mi vida que pensé que nunca necesitaría volver a revivir. Es una solicitud difícil, considerando que contaré la historia de otra persona además de la mía, pero creo que necesito un repaso si voy a quedarme en Mystic Falls por más tiempo.

―Este collar perteneció a un miembro de la familia Original― Empiezo.

―De la familia de Klaus, ¿verdad?― Pregunta la chica rubia.

Asiento con la cabeza, ―Alguien probablemente le puso algún tipo de magia antes de dárselo a la hermana Original, Rebekah, quien lo tuvo durante muchos años antes de que entrara en tu poder― La bruja asiente con comprensión, agarrando el objeto de mi mano que se lo ofrece. ―Nunca he necesitado entender para qué estaba destinado el collar, así que, sinceramente, no lo sé. Si te quemó, Elena, podría ser porque está conectado con alguien o con algo más. Comenzaría la investigación allí. Ojalá pudiera ser de más ayuda.

Ella me da una sonrisa educada, que interpreto como un agradecimiento por ayudar. Elena y la otra chica asienten también antes de comenzar una nueva conversación. Me disculpo, de repente incomodada por el grupo de chicas tan unido, y me dirijo a buscar a Alaric.

Alaric es difícil de encontrar, probablemente porque me está buscando al mismo tiempo. Eventualmente me topé con él accidentalmente cuando estaba a punto de cambiar de dirección.

―Oh, oye― saludo avergonzada.

Había entrado en la mansión del anfitrión durante mi búsqueda después de que no le encontrara por ningún lado afuera. Ahora nos reunimos en el gran salón, rodeados de invitados adicionales.

Me mira de arriba abajo, ―¿Dónde has estado?

―Con Elena― Respondo, casualmente.

Él asiente, de repente ya no luce preocupado.

Como si fuera una señal, las puertas francesas que conducen a una habitación separada se abren y un grupo de adultos sale paseando. Por la mirada de sus rostros fríos como la piedra, supongo que estos son los miembros del consejo secreto sobre los que Damon me advirtió. Deben haber terminado su reunión.

Unos segundos más tarde, Elena aparece al otro lado de Alaric, ―Lo siento, el papá de Caroline está aquí, así que necesitaba asegurarme de que ella está bien. ¿Listo para irnos?

Alaric frunce las cejas, pero luego se relaja como de costumbre, "Sí".

Todos comenzamos hacia la salida. El cielo se ha vuelto de un hermoso atardecer azul y los vientos se han levantado en respuesta. Me arrastro junto a ellos con la emoción de finalmente dejar esta aburrida fiesta.

―Espera, espera, Houston, tenemos un problema.

―¿Dónde te haz metido?― Le pregunto a Damon mientras se acerca a nosotros.

Damon me lanza una mirada desagradable, como si hubiera pasado por un infierno, así que me dice ―Manejando a Bill Forbes. Aparentemente, es impermeable a la compulsión.

―¿Cómo?― Alaric pregunta.

―No tengo idea. Pero él me amenazó con sacarme. No me hagas empezar con la ironía de eso.

Soy la única que ríe.

Elena simplemente rueda los ojos, volviéndose hacia el Salvatore, ―¿Qué le hiciste? ¿Cómo sabes que la compulsión no funciona?

―Esa no es la información más importante que mencioné, Elena― Damon toma represalias.

Nuestros pasos son de repente mucho más rápidos de lo que esperaba. Me apresuro a seguirles el paso con un par de tacones con los que no estoy nada familiarizada. Damon se da cuenta lo suficiente rápido como para poner un brazo alrededor de mi hombro para mantenerme en línea.

Alaric interrumpe rápidamente, ―¿Qué es lo que quiere?

―Quiere controlar el consejo. Dice que ha sido comprometido.

―¡Eso es cierto!― Alaric sisea.

―Quiere poner verbena en el suministro de agua del pueblo.

Elena empuja su voz por encima de los dos para llamar su atención, ―Tal vez no sea una mala idea. Quiero decir, te ayudará a mantenerte el control ahora que Stefan no está aquí para...

Maldita sea.

―¿Para qué? ¿Para mantenerme bajo control? ¿Hacer que me comporte? Debí haberlo matado esta mañana.

Damon se da la vuelta, listo para volver adentro y hacer lo que dijo. Mi cabeza da vueltas, probablemente debido al hecho de que todo lo que está sucediendo no tiene nada que ver conmigo. No tengo un papel en nada de esto, pero todavía siento que necesito detener a Damon de lo que sea que esté a punto de hacer.

Elena detiene al vampiro agarrándolo del brazo, ―Es el padre de Caroline, Damon.

Damon apenas se estremece, ―Sí, y cuando lo mate, ella tendrá un padre más que nosotros.

―¡Oh, vamos, Damon!― Alaric empuja a Elena detrás de él hacia donde yo estoy mirando.

Su expresión exasperada muestra que esto está emocionalmente agotado para ella, pero no sabe qué más hacer. No puedo culparla, pero una parte de mí lo hace de todos modos. ¿Por qué se involucraría con vampiros en primer lugar? Ella es humana; ella no tiene lugar entre ellos.

―Hoy me estás matando repetidamente, Ric. Hazte a un lado.

Alaric se mantiene firme contra el mayor de los Salvatore, "Sí, eso no va a suceder".

Hay un latido. En ese momento, veo los ojos de Damon mirando el anillo en el dedo de Alaric. No estoy seguro de qué es o cómo funciona, pero tengo la sensación de que tiene algún tipo de significado para él.

―Tu funeral temporal― Dice Damon antes de romper el cuello de Alaric, lo que lo envía de rodillas, sin vida.

Cuando el cuerpo de Alaric golpea el suelo, Elena grita blasfemias a Damon, que ignoro mientras me apresuro hacia el cadáver de Alaric.

Quiero unirme a ella para gritar, pero sé que no hará nada contra Damon cuando esté así. Actúa movido por la emoción, que es algo que yo misma hago con bastante frecuencia, pero nunca tan descuidadamente y nunca a expensas de la vida humana.

Puedo sentir mi corazón latir esporádicamente. Alaric yace muerto ante mí y Damon se va tranquilamente sin preocuparse. No conozco bien a este hombre, pero sé con certeza que no merece morir a manos de la ira de Damon.

Elena cae al suelo a mi lado. Sus palabras son apresuradas y frustradas, ―El anillo está hechizado para traerlo de vuelta. Deberíamos sacarlo de aquí.

Una ola de alivio me invade. Eso tiene sentido sobre el por qué Damon estaba tan decidido a asegurarse de que el anillo estuviera en su lugar. Aún así, el eco de su cuello al romperse me perseguirá hasta que despierte de nuevo.

―Está bien― finalmente respiro, ―Tienes que detener a Damon, Elena. Tú eres la única a la que escuchará. Voy a llevar a Alaric de regreso a tu casa.

Puedo ver una mirada insegura detrás de sus ojos. Está bien si todavía no confía en mí, pero Alaric se ha convertido en amigo mío en las últimas horas.

Finalmente, asiente, vuelve a subir los escalones de la mansión y se pierde de mi vista.

▰▱

Tomó más tiempo de lo esperado encontrar las llaves del auto de Alaric dentro de su bolsillo, encontrar el auto, llevar su cuerpo hasta allá y recordar cómo regresar de la casa de Elena. En general, tarde aproximadamente una hora en lograrlo, pero Alaric permaneció muerto durante todo el proceso.

Ahora, estoy en la cocina, esperando que el cuerpo que yace ordenadamente sobre el sofá se despierte.

Miro a mi alrededor los cuadros que decoran la casa. La mayoría son de Elena y un niño menor, presumiblemente su hermano. Me pregunto si él también sabe sobre los seres sobrenaturales que lo rodean y sido a invitado a uno a su casa. Ambos se ven tan despreocupados en las imágenes, como si nada en el mundo pudiera quitarles la felicidad del momento, pero cualquier sobrenatural con un problema de ira podría destruir su alegría con solo un chasquido de cuello. Damon lo demostró hoy.

Hablando de cuellos chasqueantes, Alaric de repente se sienta derecho, jadeando pesadamente y frotándose el cuello. Me aparto de las imágenes y me encuentro con su mirada con la mía tranquila en un intento de mostrar que ya no está en peligro.

―El me mató― Es lo primero que dice, ―¡Damon realmente me mató!

Su respiración es hostil y desigual. Balancea las piernas para intentar sentarse derecho, pero puedo decir que le cuesta mucho hacerlo.

―Whoa― puse mis manos sobre sus hombros, empujándolo contra el sofá, ―solo necesitas calmarte por un segundo.

No pierde el tiempo, se pone cómodo en su posición sentada y se frota el cuello un poco más, ―¿Cuánto tiempo estuve muerto?

―Aproximadamente tres horas― Suspiro, agradecida de que se lo esté tomando con calma.

Los ojos de Alaric se abren enormemente, ―Esas son dos horas y media más.

―Bien, bien― Se pone de pie, dejándome indefensa para hacer cualquier cosa físicamente para evitar su movimiento.

―Necesito encontrar a Elena― Él dice, ―Ella no debería estar con Damon en este momento.

En un intento por detenerlo, me interpongo en su camino, ―Alaric, relájate. Acabo de recibir un mensaje de Elena diciendo que estará en casa en cualquier momento. Damon no mató a nadie.

―Excepto a mi― responde.

Pongo los ojos en blanco. Esto no ayuda. ¿Cuántas veces Damon lo ha matado de todos modos?

Agarro la muñeca de Alaric, señalando sus dedos, ―Vio el anillo, Alaric. Sabía que volverías.

Golpeo el anillo con la uña, pero me alejo cuando una descarga recorre mi dedo y sube por mi cuerpo.

Maldigo.

Sostengo mi dedo con fuerza, pero la conmoción dejó un rastro de dolor en todo mi cuerpo. Mi magia se siente detenida por el momento, como si alguien acabara de lanzar un hechizo para limitarme. Sin embargo, es una sensación extraña, no una con la que no esté familiarizado en lo más mínimo.

―¿Qué acaba de suceder?― Alaric pregunta lentamente, finalmente mostrando un progreso de calmarse ante su alboroto con Damon.

―No tengo idea.

▰▱▰▱▰▱▰▱▰

No se olviden de votar y comentar (es gratis)

DI NO A LOS LECTORES FANTASMA.

Todos los derechos y créditos reservados a la autora original: catching_raindrops

+5 comentarios para actualizar.