El día pasa volando más rápido de lo que me hubiese gustado. La paz y la tranquilidad de mi casa personal posiblemente podrían ser el sonido más hermoso del mundo para mí. Sin embargo, termino muy pronto, ya que Damon vuelve a llamar a mi teléfono.

Cuando me lo solicitan, le doy a Damon mi nueva dirección después de que me dice que es seguro para la tripulación reunirse ahora, aunque no le gustó escuchar que el apartamento en sí vino de Klaus de todas las personas. Sus quejas no son nada para mí en este momento ya que todavía estoy enojada con él por actuar precipitadamente la otra noche.

―Tienes que superarte. ¡Alaric está totalmente bien ahora! No le ha hecho ningún daño― Damon dice cuando finalmente se da cuenta de que le estoy dando el trato silencioso de camino a la escuela.

Ruedo los ojos, ―¿Y esas son las palabras de Ric? ¿O las tuyas?

Evito su ojo vigilante y miro por la ventana. Esa noche, cuando Alaric yacía allí muerto, me sentí completamente responsable de su muerte. Entonces, se volvió aún más frustrante tener que explicarle todo a Elena, desdeccómo se deletrea el anillo de Alaric para traerlo de vuelta de entre los muertos.

―Ric sabe en lo que se ha metido, Clara― Hace una pausa, ―¿Qué es eso?

Antes de darme la vuelta para mirarlo, sus dedos recorren el costado de mi cuello donde Rebekah me había mordido. Muevo el parasol del pasajero hacia abajo para revelar su espejo oculto y lo inclino para poder inspeccionar el área. El lugar exacto en el que me mordió, las heridas punzantes y todo, está delineado en forma de una cicatriz.

―Maldita sea ... ¿Quién te clavó los dientes?― Pregunta, sin molestarse en mirar la carretera.

Toco cada círculo con cuidado. Todo parece completamente curado, como debería ser. No debí haber notado la marca anoche cuando la sangre seca cubría el área. Incluso después de ducharme, no recuerdo haber visto nada fuera de lo común.

Entonces, recuerdo las palabras que me dijeron cuando sucedió. Mi magia me llamó patética por no poder luchar contra Rebekah o porque realmente no quería. Fue el castigo que Rebekah eligió para mí después de lo que le hice a los Mikaelson. Parece que mi magia esta de acuerdo con ella aunque sea por razones diferentes.

―Mi magia me está castigando― suspiro, ―por no luchar contra Rebekah cuando me atacó.

―¿Te mordió la diabla?― Él sonríe, riéndose para sí mismo. ―Es casi tan patético como tener un chupetón de Klaus.

Le doy un puñetazo en el brazo de forma más juguetona de lo que me gustaría admitir. Extraño su presencia y sus constantes bromas. Tal vez podría darle un poco de holgura, al menos sabía que Alaric en realidad no moriría.

Ojalá nuestra reunión pudiera ser en cualquier otro lugar que no sea la escuela. Después de anoche, no puedo evitar preocuparme de que cada esquina que damos nos pueda llevar a una de las trampas de Klaus. Es casi como si este lugar fuera un punto de peligro y no quiero formar parte de él.

Afortunadamente, el salón de clases de Alaric en realidad tiene un ambiente tranquilo. Supongo que no es una sorpresa para mí, ya que su personalidad ha demostrado estar más allá de la bienvenida y la comprensión en todos los sentidos. Puedo decir que tendremos una forma de conexión muy fuerte entre nosotros si decido quedarme en Mystic Falls.

Todo el que entra en la habitación es alguien a quien reconozco ahora. Estoy seguro de que todavía no saben mucho sobre mí, así que trato de estar lo más cerca posible de Damon o Alaric.

Cuando suena su teléfono, Damon nos dice que Elena y Caroline llegarán tarde. Alaric aprovecha esta oportunidad para intentar ponerme al día con lo que me he perdido durante el transcurso del día.

―Parece que Klaus le ha ordenado a Stefan que se quede atrás y proteja a Elena mientras él no esté en Mystic Falls. Es su sangre la clave para hacer más híbridos, pero su hermana no ha mostrado mucho interés en ella. ni siquiera estoy seguro de por qué todavía está aquí.

―Oh, en realidad, yo conozco el motivo... Rebekah vino a verme porque Klaus la dejó atrás para hacer más híbridos con la sangre que ya le robó a Elena. Puede que la haya invitado o no a quedarse conmigo en mi apartamento― Añado con un encogimiento de hombros culpable en dirección a Damon.

Entierra los ojos, enojado. Probablemente debería haberlo mencionado en privado.

―No tengo ningún problema en vigilarla― Agrego rápidamente, ―Todo lo que pueda hacer para ayudar.

Alaric ignora por completo la parte de Rebekah de mi historia, por lo que estoy agradecida, ―¿Tienes un apartamento en la ciudad? ¿Eso significa que has decidido quedarte en Mystic Falls?

Su tono es tranquilo y sereno, pero puedo ver la esperanza en sus ojos. La idea de que él estaría emocionado de que yo me quedara me hace sonreír un poco más de lo que hubiera esperado.

―Sí, planeo quedarme.

Choca su hombro con el mío, un gesto juguetón acompañado de una sonrisa, ―Finalmente, alguien que no sea Damon con quien pasar el rato. Todos los demás que conozco todavía están en la preparatoria.

Damon finge toser ante nuestra interacción; sus ojos demasiado juguetones para mi gusto. Intento ignorarlo y devolver mi atención al caballero que tengo delante.

La llegada de Caroline y Elena nos devuelve a la tarea que tenemos entre manos. Damon se mueve para pararse a mi lado ahora, colocándome entre él y Alaric.

―¿Estamos listos para terminar con esto?― Damon pregunta después de que todos se hayan acomodado.

―Eso creo― dice Elena. ―Atraeré a Stefan lejos de la hoguera. Entonces, cuando esté distraído...

Alaric se da cuenta, ―Le dispararé.

―¿No puede Clara simplemente juju con él o algo así?― Damon ofrece, rápidamente.

Mis ojos parpadean hacia el moreno Salvatore a mi lado. Juego a través de la situación en mi cabeza y obtengo malos resultados. ―Él sospechará de mí en el segundo que me mire. Estoy segura de que lo verá venir desde una milla de distancia.

Elena asiente con la cabeza, ―Entonces probablemente deberías estar en el deber de Rebekah con Damon. Ustedes necesitan distraerla o de lo contrario esto nunca funcionará.

Pienso en la mañana del día de hoy cuando ella apareció en mi puerta. No había estado allí porque me perdonara, estaba allí porque no tenía a dónde ir. La dejé entrar porque quiero arreglar lo que había roto. Rebekah fue una vez mi mejor amiga en todo el mundo; yo conocía cada secreto de ella como ella conocía el mío. Cuando rompí ese vínculo, le quitó cosas que nunca podré devolver. Al menos eso creo.

Antes de ayer, nunca hubiera aceptado el plan de ayudar a distraer a Rebekah. Probablemente me hubiera mantenido alejado de ella a toda costa, pero ahora me siento diferente. Ella dejó en claro que nuestro arreglo actual es puramente situacional, y se irá tan pronto como Klaus diga que es seguro. Necesito aprender a aceptar que nuestra amistad ha terminado.

―¿Cómo esperas que la distraigamos? Ella es una original. La última vez que lo comprobé, no tenemos dagas.

Niego con la cabeza. ―No vamos a apuñalarla. Vamos, Damon, ten algo de imaginación.

Nadie comenta mi rápida objeción a detenerla, pero me gano algunas miradas escépticas. Estoy segura de que todos en esta sala ya saben sobre mi pasado con los Mikaelson, así que probablemente debería ser más cuidadosa al asegurarme de que sepan que no soy una amenaza para ninguno de ellos.

Afortunadamente, el incómodo silencio se calma con Tyler entrando apresuradamente en la habitación, ―Lo siento, llegué tarde. ¿Qué está pasando?

Elena aprovecha la oportunidad para volver al camino, ―Necesitamos que asaltes el suministro de verbena de tu madre. Lo suficiente para mantener a Stefan débil por un tiempo.

Tyler frunce el ceño en confusión, ―No puedes hacerle eso a Stefan.

―¿Por qué no? Créame, Tyler, es lo mejor para él.

―Sí, pero no está con Klaus.

Damon y yo intercambiamos una mirada. Por la expresión de su rostro, debe tener la misma sospecha que yo sobre lo que está sucediendo ante nosotros.

―Pero Klaus es el malo, Tyler― Caroline continúa explicando, ―¿por qué estás actuando como un súbdito esclavo extraño, híbrido?

―Uh–oh― Damon dice.

―¿Qué?― Alaric pregunta, pero Tyler rápidamente interrumpe mi oportunidad de responder.

―Klaus me hizo quien soy, Caroline. Le debo todo― Tyler mira a su alrededor a cada rostro desconcertado antes de que sus ojos se posen en mí, ―Eres la chica de Klaus, ¿verdad? Continúa, diles que tengo razón.

Siento que ambos hombres se ponen rígidos a cada lado de mí ante sus palabras. Tyler da un paso inconsciente hacia adelante, pero Damon lo empuja hacia atrás con un brazo. El híbrido apenas se mueve.

Los ignoro a ambos, ―Es la segunda vez que me llaman así esta semana. He de aclarar que ya no soy nada de Klaus.

Mi respuesta parece ser suficiente para todos excepto para Tyler. Su rostro pasa de confundido a exasperado. Me mira con los ojos entrecerrados y comienza a respirar un poco más pesado.

―A Klaus no le gustara nada de esto― Él resopla, obviamente molesto.

―Bien bien― Damon se interpone entre nosotros, ―Esto va a ser un problema. ¿Ric?

―Está bien, ¿podemos relajarnos con los comentarios por favor?― Caroline anuncia, molesta.

Elena mira en nuestra dirección, ―¿Qué está pasando?

Observo como Alaric le entrega discretamente a Damon un dardo de verbena que debe haber estado en el escritorio detrás de mí. Damon lo toma sin mostrar ninguna reacción externa al recibir el arma.

Tyler echa otro vistazo a sus amigos, ―Me voy a ir.

Tyler se da la vuelta y comienza a caminar hacia la puerta. En ese instante, Damon se precipita desde atrás e inyecta el dardo de verbena en su cuello. Tyler cae al suelo con un gruñido, noqueado.

Caroline se apresura hacia el novio inconsciente, ―¿Qué estás haciendo?

Damon arregla su postura antes de responder, ―Ha sido engendrado.

―¿Qué?

―Engendrado― Intervine, esperando aclarar lo mejor posible, ―Se siente leal a Klaus porque la sangre de Klaus lo creó.

―¿Leal cómo?― Pregunta Elena.

―Buscará la aceptación de su maestro. Eso es muy raro.

―pero quizás no tanto en los híbridos― Damon interrumpe. Sus ojos nunca dejan al adolescente desparramado en el suelo.

Sé que esto debe ser difícil para él. Me contó la historia de su propio engendro, Charlotte, a quien dejó contando ladrillos en la esquina de una calle. No puede ser fácil ver la misma maldición irresoluble caer sobre alguien aquí esta noche.

Caroline nos mira a los dos, ―Entonces, ¿cómo puedo arreglarlo?

Damon responde más rápido que yo, ―Consíguete un nuevo novio.

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DI NO A LOS LECTORES FANTASMA.

Todos los derechos y créditos reservados a la autora original: catching_raindrops

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