Habían pasado 13 días desde que Jisung
había ingresado en Desired Orphanage. Jisung ya se había acostumbrado a su vida, sin sus padres, con amigos de ahí y levantándose a las tres de la mañana solamente para tocar el piano al no poder dormir.

Le alegraba mucho saber que había una sala llena de instrumentos para enseñanza de aquel orfanato, las voces de los niños aturdian al pobre Jisung. Por lo que aprovechaba que se despertaba a las tres de la madrugada y iba a tocar el piano.

Era una mañana muy fría algo que emocionaba mucho al pequeño ya que podría estar adentro y leyendo toda tarde sin molestias de los demás.

El pequeño Jisung se levantaba con esfuerzo algo que decidió tirarse de nuevo a su cama y algo de frío en su piel descubierta.

-Buenos días. - un chico con un rostro sereno y gafas redondas decorando su rostro miraba atento a los movimientos de Jisung.

-..Buenos días Hyunjin ¿Cómo amanecistes? -Jisung por fin se había levantado y se proponía a ponerse sus zapatos.

-Bien, supongo..¿y tú? Dormistes tarde por leer.

-bueno, es inevitable hacerlo cuando justo llegas a una parte interesante. Deberías leer más y estudiar menos ¿No te cansas?

Aunque Jisung amaba leer no le gustaba estudiar y menos las matemáticas ¿Para que precisa aprender las tablas si ahora hay tecnología para eso? Jisung no entendía esas cuestiones que se hace. Aunque tenía 11 era un buen estudiante, aunque en el orfanato siempre enseñaban lo mismo en todo el año.

-Para nada, ya quiero largarme de aquí y vivir mi vida. Lastimosamente tendré que esperar hasta los 18. Si no estudias en el futuro serás un pedazo de papel, va y viene buscando trabajos y una vida que le durará demasiado poco.

Jisung asiente escuchándolo atentamente, era raro que el hablara con alguien pero con Jisung todo se puede esperar de el, aunque Hyunjin tenía 14 y Jisung 11 ellos se entendían cada palabra.

Hyunjin era un chico callado, inteligente y ingenioso. De cabello rubio, lentes redondos, ojos cafés y medía 1,70.

A comparación de Jisung era Inteligente, inocente, el era un poco más bajito (1,68) algo que para alguien de 11 años se consideraba alto. Tenia el cabello marrón al igual que sus ojos y usaba lentes pero exclusivamente para leer.

Ambos eran igual pero a la vez diferentes, algo que si acercaban era el mes de cumpleaños, Pues Hyunjin cumple el 26 de julio y Jisung el 18 de julio.

Jisung se levanta de su cama con intención de lavarse su cara y sus dientes. Dormía en un cuarto donde había cuatro camas si, debía compartirla con 3 niños más y de diferente edad. Aún así eran los únicos con lo que hablaba, Jackson de 13 años, jeongin de 9 y claro, hyunjin de 14 el más grande y por así decirlo el líder del cuarto.

-hola sung..

Jeongin entraba junto a el a los baños agarrando con ambas manos el agua que salía de la canilla.

-hola pequeñín.

Jisung le tenía un gran cariño a ese niño, era incluso más inocente que él. Por suerte el había venido con una perdida de memoria por lo que no se acuerda de su cruda infancia.

Había dado inicio del fin de semana, Jisung amaba los sábados. Mientras el caminaba para el gran comedor varios niños pasaban hablando de algo muy interesante.

-asique vendrá un chico nuevo. -le dice Jisung a Hyunjin que caminaba junto a el sin mirar a alguien.

-si, bueno...dicen que es rarito. -¿Rarito? Jisung nunca había oído a Hyunjin hablar así de otra persona. -es un caso perdido, un asesino ¿Ahora lo entiendes mejor?

-¿Cómo puede ser un asesino? ¿Cuantos años tiene?

Jisung estaba perplejo ¿Podría llegar a ser un asesino un niño? Si así lo era, tendría que mantenerse lejos..

- Tiene 10, pero te digo que puede ser peor que vos. A ese niño..se dice que a matado a sus padres.

Una señora había salido caminando por los pasillos y diciendo a cada rato que debían ir al comedor.

Y ahí es donde Jisung y Hyunjin se distanciaron, ya que habían dos comedores los que tenían de 13 para abajo tenían un comedor y de 14 a 18 otro. Dejándole todas las preguntas sin responder al pobre Jisung.

-bueno... él vendrá mañana, tocará esperar - pensó y se dirigió a su comedor..

Y sin esperarse lo que se vendría en su vida, no solo va a ser un papel volando...
Si no un papel firmado.

- ¿No sabes dónde está?

-¿Le gusta la tierra?

-¿Que?..

-Porque el está ahí...en el fondo.